Holis a todos mis amores lindos, como estan?

Espero que bien y con ganas de leer esto que les traigo!

Ya saben que Yugioh no es mio, asi que ha leer!

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Capitulo 8

Yugi, yo ya vuelvo - chirrio un peliblanco increiblemente feliz y sin soltar de la mano al moreno a su lado.

Quieres que vaya contigo? De verdad no quiero perderte de nuevo - pregunto el tricolor mientras secaba las pocas partes de humedad que quedaban en su rostro, ver a Atem despues de que se habia hecho a la idea de que jamas lo veria habia sido un shock para el - ehh... Porque no vienes conmigo, conoces a los que viven alli y luego voy contigo

Prefiero ir solo, despues ire contigo - Ryou de verdad necesitaba irse a solas, Yugi le agradaba y todo pero... Sus sombras ya estaban molestas, su amigo era demasiada luz para ellas - o tu puedes arreglar las cosas con tu otra mitad mientras yo ayudo a Kefia

El tricolor parecia que queria decir algo mas para convencerlo pero al final asintio, el peliblanco sonrio feliz para correr a abrazarle - en un rato nos veremos, solo dejame estar un rato a solas con Kefi

Esta bien... Supongo que yo hare lo mismo - y si bien Yugi no queria dejar solo a "Zork", tampoco queria que se molestara... Todos los seres se merecian ser libres verdad? Y este no era el ser malvado que habia ocasionado todo esto.

Todos miraron como de pronto la oscuridad comenzo a rodear a los dos peliblancos y con una pequeña explosion de sombras ambos desaparecieron a quien sabe donde, el tricolor solo podia esperar a que las cosas se mantuvieran asi y que su amigo nunca se volviera un ser lleno de maldad como lo habia sido el anterior Zork... La anterior diosa de la luz habia dicho que eso habia sido su culpa, nunca habia dicho el porque se echaba la culpa pero algo habia hecho... Algo que Yugi no haria por nada del mundo.

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Algo corria a traves del espacio bizarro, levantando la tierra que levitaba de forma leve antes de caer, era negro... Parecia ser una sombra, una sombra con forma de algun tipo de canino... Dio un salto y entro en sombra leve de un arbol, casi como si fuera esta agua en la cual podia desvanecerse.

Salio de un salto de otra sombra a kilometros de alli y olisqueo el aire en cuanto sus patas tocaron el suelo, dos criaturas mas iguales a el salieron de entre la vegetacion y siguieron su camino. De vez en cuando olisqueaban el aire y buscando el rastro que querian, sus orejas pronto se animaron y aullaron cuando lo encontraron.

Lejos de alli, dos peliblancos con las manos entrelazadas abrian los ojos. Uno de ellos con los ojos bicolores y apariencia androgina, otro mas grande y con cuerpo mas formado, ojos inhumanos de color dorado y unas orejas de chacal que sobresalian de entre sus cabellos - Ry, creo que lo encontramos

Si, ya le aviso a Yugi - Murmuro el menor con una mirada concentrada.

Cerro los ojos un minuto y otra de esas criaturas salio de entre las sombras que siempre rodeaban a su persona, abrio los ojos de nuevo y miro al que estaba detras de el con una sonrisa... Lo sabia, sabia que darle el don de la muerte era una buena idea, hacerlo Anubis era la opcion indicada y para colmo ya habia tenido el don del dios en sus manos.

El que no habia sido, y no estaba tan feliz con la situacion que habia sucedido habia sido Ra... O Marik mejor dicho, se habian enterado de su nombre en cuanto Yugi habia ido a visitarle y le habia visto. Si era sincero a Marik no le habia gustado nada de nada lo que ultimamente estaba pasando, eso fue obvio desde el primer dia que piso su hogar.

Y los que vivian con Yugi tampoco habian sido felices al ver al rubio, hizo una mueca... Ese encuentro habia sido tan incomodo, habian habido tantos sentimientos negativos... Una parte de el lo odio, odio ese rechazo que habia entre el pequeño grupo que se estaba formando poco a poco, pero habia otra parte de el... La parte que estaba mas en sintonia con la oscuridad y negatividad que representaba a Zork que le gusto, que queria que todos se odiaran para alimentar aun mas su gusto por la discordia.

Sea como sea, eso le gusto menos. Afortunadamente alli habia estado Yugi para detener a la mujer esa de hacer algo tonto contra Ra y al mismo Ra de hacer alguna tonteria, habia calmado las aguas en su hogar y menos mal que lo hizo porque el mismo no lo habria hecho. Ademas la presencia y luminosidad del tricolor ayudo a que esa parte suya se calmara y Akefia habia terminado de matar esa parte al abrazarle por detras aquella vez. 

Aunque nada de eso importaba ahora mismo, ahora mismo solo importaba buscar un titulo para Atem y su lugar en este nuevo mundo que crearian todos juntos - Anubis, Osiris.... No esta muy lejos avisale a los demas y vamos por el

No le digamos nada al enano, llama mejor al psicopata de Ra - gruño Akefia de brazos cruzados, sus nuevas caracteristicas brillando ante sus encatados ojos.

Su cuerpo como tal solo habia agarrado algo mas que musculo, su cabello se habia alborotado mas y de entre el dos orejas caninas negras, de chacal especificamente sobresalian de entre sus cabellos. Sus ojos habian cambiado a unos dorado brillantes, los ojos brillaban de forma inhumana y su pupila rasgada se le daban toda la apariencia inhumana que necesitaba... Eso mas la ligeras garras en que sus uñas se habian convertido.

Miro a su compañero soltar un destello de magia y supo que Marik ya habia sido avisado de que encontraron a su objetivo, no le avisaba a Yugi porque sabia que este no gustaba de hacerle daño a nadie. El queria arreglar este mundo, pero tan bueno siempre busco sin exito la forma de hacerlo sin que afectara a nadie. El mismo no tenia ese tipo de delicadesas,.. Sabia que deberia, pero no encontraba en el la fuerza para hacer algo al respecto. 

Miro hacia arriba y noto que Marik no se habia tardado nada en llegar, siempre feliz y dispuesto a realizar cualquier cosa que tenga que ver con cazar o castigar a alguien - Ryou, por donde? - pregunto el rubio aleteando un poco para mantenerse en el aire.

Siguenos - murmuro mientras sus propias alas le elevaban en el aire, Akefia mientras les seguia el paso sin problemas desde el suelo.

Su presa, Osiris. El dios que seria perfecto para Atem, Ryou no sabia porque pero... Ese lugar de oro donde podria reinar era el ligar perfecto para la otra mitad de su amigo.

Marik a su lado y Akefia corriendo como un animal sigiloso hicieron el truco para irrumpir en el palacio sin problemas, Ryou miro alrededor... De estaba deteriorando, signo de que el dios dueño de este lugar se estaba debilitando poco a poco, no era malo realmente lo que estaban haciendo... Esto dioses viejos debian morir para que el mundo volviera a vivir.

Caminaron un poco por los pasillo, Ryou a la cabeza mientras a sus lados Akefia y Marik le cuidaban, pronto llegaron a lo que parecia ser el salon del trono.... Anteriormente magestuoso y brillante seguramente, pero ahora se encontraba opaco y sin ningun tipo de vida aparente salvo por el viejo sentado languidamente en su trono - veo que... Ya llegaron por mi

Si, bueno viejo que puedo decirte... Ya estas viejo - bromeo Marik adelantandose un poco y colocandose a un lado del silencioso tricolor - y creo que deberias terminar de retirarte para que sangre nueva pueda gobernar sobre el mundo

Opino que tienes razon, esto se nos fue de las manos mucho antes de lo que creiamos - murmuro el dios levantandose de forma temblorosa y mirandoles a todos, Ryou fruncio el ceño porque no le gusto la forma en que le habia mirado - pero... Creo que puedo remediar las cosas ahora, si va a comenzar de nuevo el mundo entonces.... Entonces que sea sin los problemas que eran de nosotros, al menos creo que eso puedo hacer con mis ultimas fuerzas...

Ryou sintio un presentimiento extraño, las sombras le gritaron pero de verdad que no estuvo preparado para el estallido de velocidad que el anciano dios tuvo de pronto. Un segundo solamente fue suficiente para tener al anciano apretando su cuello y poniendo la mano sobre su pecho... Sobre su corazon especificamente.

Escucho el grito de Akefia y Marik mientras la magia se arremolinaba alrededor de el y el anciano, habia una especie de ardor alli en su corazon y con el ceño fruncido detuvo aquello con su propa magia. Fruncio aun mas el ceño al verlo sonreir mientras caia, el pequeño ardor en su pecho no se iba por alguna razon y miro al anciano cuyos ojos comenzaban a cerarse.

Estas bien? - pregunto Akefia acercandose para mirarle de arriba hacia abajo - que te hizo ese tipo?

Nada.... Bueno, estoy bien... Me veo bien verdad? - pregunto algo confundido, todavia con aquel ardor dentro suyo - yo... Me siento raro...

Te revisare en cuanto lleguemos - murmuro el moreno mirandole preocupado, tomo con molestia la esencia que habia dejado atras el anciano antes de tomar a Ryou entre sus brazos.

El mas pequeño se dejo llevar, dejo que su otra mitad le llevara todo el camino y se relajo en los brazos ajenos. Hizo una mueca sobando su pecho y suspiro, el ardor estaba bajando de intensidad hasta hacerse casi imperceptible... Pero no se habia ido, miro hacia arriba y noto que Akefia le miraba con el ceño fruncido de preocupacion y le sonrio buscando calmarle.

No tardaron en llegar al palacio donde vivia Yugi, Ryou parpadeo pensando... Esta seria la primera vez que Marik iba a este sitio. Seria divertido, Ishizu y Odion, la primera y unica vez que fueron a su hogar demostraron un profundo y extraño odio mutuo que no sabia ni siquiera de donde salia.

Sea como sea a Ryou le divertia de una forma extraña todo el odio y miedo que generaba ese encuentro, justo como penso. El trio entro y sonrio disimuladamente mientras miraba el, concurso de miradas asesinas que se lanzaban los otros tres. Tarareo de forma suave mientras se acurrucaba aun mas contra el calor de su otra mitad, de verdad... Desde que su Akefia habia tomado el lugar de Anubis se habia hecho mas comodo y calentito.

La guerra de miradas fue interrumpida por un rubio que Ryou solo habia visto una vez y ahora que lo miraba de nuevo y sin... Ningun problema encima era que se daba cuenta del parecido ridiculo que tenia con Marik. Claro aquel rubio parecia ser algo mas pequeño, delicado y jugueton... Ademas de tener atributos felinos dignos del lugar que ocupaba, estaba seguro que Bastet no estaba disgustada con su sucesor.

Ehh... Se estan matando y no me invitan? - se quejo el rubio felino con pucheros, aunque luego miro mejor la situacion y sus ojos se prendaron del otro rubio - .... Ummm hola? Quien eres tu?

Ishizu no tardo en adelantarse - No es nadie Malik, mejor ve a....

Soy Marik, aunque mejor conocido como Ra-sama - interrumpio el rubio mas grande colocandose frente al chico y tapando toda visibilidad hacia la mujer - y tu eres lo mas hermoso que mis ojos han visto en mi....

Marik... - regaño Ryou con el ceño fruncio porque si mal no recordaba le decia a el asi hasta hace nada, que le disculpen pero era posesivo y celoso - Voy a lastimarte si...

Tu eres lo mas tierno que he visto, el es lo mas hermoso - Ryou parpadeo inclinando la cabeza hacia un lado y luego asintio, bien al parecer nadie le estaba quitando el puesto.

Odion y Yugi? - pregunto Ryou al hombre silencioso en una esquina, podria gustarle mucho el desmadre y el odio pero... La verdad sea dicha el asunto con su amigo era mas importante y el sabia definir prioridades.

Ya deberia estar por llegar, sabiamos que no tardaria en regresar a dar noticias de su mision - Ryou asintio y se revolvio para que Akefia le bajara, hizo una mueca ante la punzada repentina en su pecho... en todo esto, el ardor se habia ido, pero al parecer no se habia ido demasiado... Parecia que habia algo alli que punzaba de forma extraña.

Pero no le presto demasiada atencion a ello ya que la sensacion duro muy poco para ser una preocupacion, mas aun cuando llegaron Yugi y Atem al lugar. Seguro no era nada y tenian cosas mas importantes que hacer.

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Awww... Bueno mis amores, hasta aqui llegue!

Muchas gracias por leer! :3