05|Castigo.
Asami cambió su uniforme rápidamente para poder integrarse en la clase lo antes posible. Una vez de nuevo en el campo se le informó que su contrincante para esta clase sería un chico llamado Todoroki Shoto, Asami podía reconocer ese apellido, seguro que era el hijo de aquel héroe que tantos problemas había traído a la organización y sobre todo a su mejor amigo.
—Leil-chan ¿Puedo llamarte de esa manera?— una chica de cabello corto y castaño se le acercó.
Asami la observó durante algunos segundos, después decidió que debía llevarse bien con sus nuevos compañeros, aunque fuese sólo por trabajo.
—Claro, ahora ¿puedo saber tu nombre?—
—Oh disculpa, me llamo Ochaco Uraraka— se presentó con una sonrisa.
—Un placer— le devolvió la sonrisa.
El ambiente se volvió silencioso después de la presentación, Uraraka parecía querer preguntar algo, pero no se atrevía. Asami suspiró, era agotador lidiar con ella y eso que apenas la conocía.
—¿Hay algo que quieras saber?—
—Eh, bueno yo...— dudó unos segundos —¿Eres la hija del director Nezu?—
"Vaya, era sólo eso" pensó.
—No, él no es mi padre biológico si a eso te refieres— sonrió levemente— Sólo es mi tutor hasta la mayoría de edad— se encogió de hombros.
—Oh ya veo, es genial— Uraraka sonrió ampliamente.
Asami le sonrió de vuelta, era una de las pocas veces en que había visto una sonrisa genuina, le agradaba.
—Leil eres la siguiente, pasa a la arena— All Might la interrumpió.
Asami asintió y se dirigió al lugar indicado, estaba sintiéndose un poco fastidiada del trabajo justo ahora. Pelear con niños que querían ser héroes, no le pagaban lo suficiente para eso.
—¿Me pregunto que clase de quirk tendrá? En su historial no hay nada, además de ser la hija del director no sé nada más— All Might hablaba bajo, sólo para que Aizawa lo escuchara.
—Tiene un quirk visual, no es hija del director y está aquí sólo por trabajo, la próxima vez no faltes a las reuniones— el héroe bostezó.
—Supongo que necesito ponerme al día— sonrió con nerviosismo.
En la arena, Asami mantenía su vista fija en su adversario, al parecer podrían usar todo el lugar para una lucha uno a uno, se emocionaría si no fuese porque la mirada de cierta persona le quemaba la nuca. Aizawa la miraba directamente, con esa mirada que decía "no lo hagas" "ni se te ocurra" "piénsalo dos veces" era abrumador.
El encuentro comenzó, pero antes de que cualquiera pudiese moverse, Asami elevó la mano donde había envuelto la cinta de rendición que les habían proporcionado antes del combate.
—¿Te estás rindiendo?— Todoroki no podía entenderlo.
—Sí, yo— cerró los ojos por unos momentos —No puedo usar mi quirk ahora—
All Might fué el primero en entrar a la arena después de ver como la chica caía de rodillas.
—¿Qué ocurre?— el héroe preguntó enseguida.
—Me duele todo, no puedo moverme y no puedo ver muy bien— explicó aún con los ojos cerrados.
—Debiste decirlo antes, es muy peligroso entrar a una batalla en tu estado— la reprendió.
Asami frunció el ceño, era suficiente con lo mal que se sentía como para que ahora alguien la reprendiera como a una niña. Bueno, debía admitir que este regaño era mejor que el castigo que recibiría de su jefe en cuanto se enterara del alboroto que creó la noche anterior, entonces lo vió de reojo, un brillo azulino, maldijo en voz baja, su castigo había comenzado.
—Lo siento, en verdad— se disculpó.
All Might la cargó como si no fuese nada, la dejó en la enfermería y volvió a clases, no sin antes desearle a su nueva alumna que se recuperara pronto.
Asami esperó pacientemente a que la clase práctica terminara, después de todo no podía volver a recibir tratamiento de Recovery Girl, no tenía la energía suficiente. Era bastante aburrido simplemente recostarse en la camilla y esperar, pero sus opciones en ese momento eran limitadas.
Tampoco quería irse, salir de la academia implicaba ir a hablar con su jefe, aterrador.
—Buenos días— Shinso entró en la enfermería.
—Oh, eres el chico del pasillo— lo reconoció al instante —No te dí las gracias—
—No es necesario— se sentó en la camilla de al lado.
—Recovery girl volverá en unos minutos— mencionó tratando de darse la vuelta para verlo mejor, aunque sus intentos terminaron por hacer que cayera de la camilla.
Shinso dió un pequeño salto, no esperaba que la chica cayera de esa manera tan ruidosa.
— ¡Hey! ¿Estás bien? —
— Eso dolió mucho— se quejó.
Shinso ayudó a Asami a volver a la camilla.
Una vez sobre la cómoda colchoneta, Asami soltó una risa escandalosa, asustando de nuevo al chico de cabello púrpura. Joder, lo iba a matar de un susto.
— ¿Qué es tan gracioso? — Shinso entrecerró los ojos—
"Está loca" concluyó.
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