|Mundo Humano|

La morena cumplía su labor normalmente, exterminaba a los Hollow, a las almas plus las ayudaba a llegar a la Sociedad de Almas y merodeaba los alrededores e rincones de la cuidad 316, la cuidad Karakura.

Pero pese a los años de "vida" por decirlo de alguna manera, que ella ya había visitado el mundo terrenal, nunca había tenido el tiempo necesario como para poder explorarlo debidamente, como si ella fuera un humano, debido a que sus visitas eran de un corto periodo de tiempo y para motivos esenciales. Karin nació en la sociedad de almas, así que nunca experimentó el ser una humana, siempre fue un alma y al nacer en una casa noble, tenía la obligación de estudiar todo sobre ello y los otros nobles, no tenia tiempo para otra cosa que no saliera de los labios de su institutriz.

La ciudad 316, es especial para el Clan Shiba. Debido que ahí residen el Clan de Quincy Kurosaki y Ishida. Los Quincy son humanos con habilidades sobrenaturales que les ayuda a combatir a los Hollow. ¿Por que ellos no se encargan de exterminar a los Hollow? Los Shinigamis purifican esas almas corrompidas, los Quincy los destruyen completamente y eso desequilibra a todos los mundos.

Entre esos dos clanes de Quincy, vive su hermana, su melliza y también vive su madre; hace años, vivían juntos como una familia, pero al ser un amor prohibido y mal mirado tanto por los demás Quincy de élite y los otros clanes nobles, fueron separados. 

Los padres de Karin, Yuzu y Ichigo, sentían mucha responsabilidad hacia sus propios clanes, pero no hay que negar que pensaron en escapar, cuando aún Karin y Yuzu estaban en el vientre de Masaki pensaron irse con Ichigo, ocultarse para poder vivir juntos, pero era demasiado riesgo, lo tomarían como traición por parte de la Sociedad de Almas y por parte de los Quincy Corrupción, ambas cosas significaban la muerte para ellos y su descendencia; eran muy crueles. Al final pidieron tiempo hasta que nacieran sus otras dos hijas y luego se separarían, los altos cargos de ambas razas aceptaron pero con la condición de que si una de las criaturas engendradas tuviera el poder de un Shinigami o de un Quincy debía quedarse en sus respectivos Mundos. 

Así fueron separados. Yuzu había obtenido los poderes de Quincy, ella se fue junto a su madre, la cual se casó siguiendo el compromiso al que la habían sometido cuando sus padres aún vivían, el "afortunado" era el heredero del clan Ishida, otro Clan Quincy de Pura Sangre como lo era la Kurosaki. Yuzu Kurosaki se llamó su melliza, su madre era Masaki Kurosaki mientras el marido de la mujer que le había dado la vida era Ryuken Ishida.

Él tenía un hijo fuera del matrimonio como Masaki, lo había concedido junto a una Quincy mestiza, la cual fue sacrificada debido a su "igualamiento" Aquella mujer llamada Katagiri era sirvienta de la familia Ishida; pese que él la amaba no pudo salvarla, solo pudo salvar a su hijo, usando de escusa que si no dejaban vivir a su hijo, se quitaría la vida y no habría unión entre ambos clanes de Pura sangre. Su madre indignada acepto que el niño viviera.

Katagiri y Ryuken aprovecharon sus 6 meses de tiempo que les quedaban juntos, decidiendo como se llamaría su hijo. Cuando Katagiri tuvo a su hijo inmediatamente la mataron, Ryuken no pudo despedirse. Acepto el casamiento tanto por la condición que había propuesto y para darle una figura materna a su hijo, que esa era Masaki.

Ahora ellos seguían casados, pero nunca habían tenido intimidad, no se podían ver con otros ojos cuando amaban a otras personas, Ryuken amaba a su difunta Quincy Mestiza

y Masaki amaba a su Shinigami. Les importaba bien poco como siguiera el linaje de Pura Sangre, por ellos que se destruyera.

Karin iría a visitarlos cuando fuera de noche, así tendría la oscuridad de la noche ocultándola, no era que lo necesitará por que ella era libre de visitarlos si estaba de turno, así como era con su hermano y padre. Ahora que su padre tenía por completo el estatus de cabecilla podían hacer casi todo lo que quisieran, antes en la época de que el y Masaki estaban juntos, la tenía su abuelo.

Ahora ella merodeaba la cuidad cerca de un río, uno muy bonito y cristalino. Pero mientras pasaba, sintió una presencia conocida, se le agitó un poco el pecho. No aguanto, cuando estaba apunto de pararse a pensarlo, ella estaba en los cielos, mirando al chico peliblanco que salvo la ultima vez. Ahí estaba, su espalda estaba respaldada por el grueso tronco de un árbol, mientras tenia en sus oídos unos aparatos extraños para ella, hace mucho no venia al mundo humano, todo estaba mas moderno y no pudo tomarse el tiempo para ir al 12º escuadrón a pedir los libros actualizados del mundo humano.

Al parecer el no notaba su presencia, bueno que ella se estaba esforzando por ocultarla para así no ser detectada por Hollow, por su madre o hermana y por el, sobretodo por el... ahora recordaba que había prometido responder a sus dudas y estaba segura que no lo olvidaría por que el no es el típico humano que se olvide de todo tan fácilmente, menos con algo como esto, con algo extraño. Un balón de fútbol iba directo hacia el chico que estaba tan entretenido con aquel aparato que Karin desconocía por completo. ¡PUM!

—¡MIER..! —casi salio de su pálida boca aquella grosería. El miro hacia las obvias responsables, que eran sus lindas familiares, Momo y Rangiku— ¿Podrían tener mas cuidado?

—No fue nuestra intención darte Toshiro -respondió rangiku poniendo cara de cachorro degollado pero inmediatamente zapatio muy fuerte el piso frunciendo su ceño— ¡No digas groserías!

—Así es Pequeshiro —dijo después con extra de dulzura momo.— Lo sentimos

— ¿P-pequeshiro? -se pregunto internamente la shinigami. —Al parecer vienen juntos... ya que por eso tienen esa confianza, tal vez es su madre y su... hermana?  parecen de la misma edad... y no se parecen ni un poco... ¿sera su n-novia? —uuuf, le costo un montón decirlo, no entendía por que le supo tan mal aquellas silabas.

—Esta bien —respondió él en un suspiro— ¿a que hora volveremos a casa? Quiero ver a la abuela.

—Pronto, solo estamos esperando a que Gin venga. —contesto la mayor mientras tenia el balón en las manos— Así que paciencia... 

—Si es así, prefiero caminar —se levanto rápidamente y comenzó a caminar en dirección opuesta a la de las chicas, mientras ellas entraban en un pequeño pánico.

Karin seguía ahí, viendo como terminaría la situación, al ver como el peliblanco se marchaba ella también lo iba a hacer, estaba apunto de atardecer y quería ir a revisar unas zonas antes de ir a ver a su madre y su melliza, pero algo la detuvo, tanto por el grito que escucho y por el sentimiento en su interior que le indicaba que no se moviera hacia allá.

—¡Toshiro no, espera! —le grito la pelirubia pero fue completamente ignorada, el enano caminaba rápido para sus piernas cortas— Momo, ¿Que hacemos? a ese paso que va, llegara muy pronto a casa y descubrirá que a la abuela la esta revisando un medico.

—En algún momento debía saberlo Rangiku... —contesto crudamente, aceptando la realidad.

—Si, lo se! —la rubia se desesperó mas— Pero no de esta forma Hinamori... —la cara de momo se mostró asombrada, rangiku se dio cuenta y se auto castigo mentalmente, para luego abrazarla- Lo lamento... pero me da miedo que esta vez haga algo peor ¿recuerdas?

—Si... lo recuerdo —se apoyo en las grandes virtudes de su amiga y madre- Pero era solo un niño, no sabia lo que hacia...

—Sabes... yo le temo mas a su mente ahora... es muy decisivo, no piensa antes de actuar aun que demuestre lo contrario... —sonrió entristecida— También es muy sensible...

La morena desapareció, usando una de las técnicas de shinigamis, llamada "Shumpo". Era segunda vez que experimentaba algo así en su pecho... Sentía pavor, pero esta vez... No era por su hermano.