¿Saben por que los ángeles llevan alas con plumas blancas en su espalda? Para diferenciarlos de los ángeles caídos... esos que llevan una espada, veneno en sus bocas y belleza matadora.

Así hablaban los Quincys, así contaban la historia de Karin Shiba, que descendía de un ángel pero que su destino era ser Demonio.

Los Quincys eran bastante prejuiciosos tanto como lo eran los clanes nobles de los Shinigamis.

Las ultimas familias de sangre 100% puras, eran la 《Kurosaki》y 《Ishida》 así que veían a los herederos de aquellas familias, como santos, como ángeles. Pero claramente ellos, ni antes de los hijos que poseen ahora ni después les ha interesado seguir reglas o absurdos regímenes para preservar la pureza de su sangre, ahora menos que nunca. 

Masaki junto a Ryuken siguen asistiendo a reuniones organizadas por los pocos quincys existentes, los que asisten a aquellas reuniones la mayoría quieren mantener una vida pacifica, sin tener que seguir antiguas normas o leyes, poder tener igualdad con aquellos que tenían mas pureza de sangre que otros, por que como toda comunidad, hay quienes se creen superiores a otros por distintas razones y en esta pequeña comunidad quincy no faltarían aquellos.

Un líder de una pequeña familia en la que todos poseían un 78% de pureza en sus sangres, eran casi los únicos que aun querían mantener las reglas de la antigüedad; habían otras familias que les apoyaban por conveniencia o simple temor. Por obvia supremacía, y su pureza de sangre, los que tenían ultima palabra en ello, eran Masaki Kurosaki y Ryuken Ishida.

Hoy se convocaba una reunión en aquella comunidad quincy, en la que se decidiría aquel problema. Por primera vez, Yuzu y Uryu asistirían.

**)HUECO MUNDO(**

En las profundidades de esa tierra, la convocatoria que hubo en el día anterior termino en varios desacuerdos, muchas opiniones distintas, varias egoístas e orgullosas, tanta palabrería que hubo esa noche, harto a la princesa Benihime y se retiro del lugar, eso solo daba una señal: que la reunión había concluido. 

Todos después de eso, fueron retirándose, algunos callados y otros reclamando hasta por los huecos de sus cuerpos. El chico rubio que había aparecido junto a la princesa les decía amablemente que les avisaría cuando se formara la otra reunión.

Ese chico era bastante carismático, muy social y simpático, eso pensaban la mayoría de los arrancars, por lo menos los que tienen razonamiento, para los que no la tenían ni siquiera osaban a acercarse, huían despavoridos, pero era distinto cuando estaba la princesa, esos seres sin razonamiento, adoraban estar en presencia de aquella princesa, la admiraban...

Pero ahora solo estaban la princesa y aquel chico rubio, que mantenia su rostro cubierto gracias a su sombrero.

--¡Que agotador! ¿No lo crees Benihime? --la princesa asintió sin mostrar mayor expresión de la que tiene una estatua tallada con seriedad-- Esos seres simplemente no saben que deben obedecer y ya, esto les conviene, no tanto pero les conviene.

El hombre de sobrero a rayas seguia parloteando, ya despues de eso no dijo nada realmente. Murmuro a muy bajo volumen que ya se acercaba la hora, e inmediatamente volvio a parlotear, como por ejemplo que tenia ganas de experimentar nuevos sabores.

La princesa Benihime se retiro a una gran silla blanca, reposo su glamuroso cuerpo sobre aquella silla y dejo caer hacia un lado su delicada cabeza e cabellera. El rubio le miro de reojo un poco serio, se acerco a una puerta de igual color que la silla, solo que para abrirla lamio el costado derecho del umbral e instantaneamente abrio y dejo ver unas escaleras que parecian no tener final.

Cuando termino de bajar aquellas escaleras, encendio un extraño interruptor dejando ver un gran laboratorio, bastante vanguardista y pulcro. Al fondo de la habitacion tenia unos tubos de ensayo en refrigeracion constante, camino hasta alla y tomo uno, usanso sonido aparecio frente a la princesa benihime y le hizo beber aquel bizcoso e extraño liquido del interior.

--¿Como te sientes Benihime? --pregunto amablemente el chico rubio. La princesa sonrió levemente, dándole a entender que estaba perfecta.-- Yo se que esto te quita energia, pero ya queda poco... y trabajo en un mejor suero para ti, tengo varios prototipos pero no sujetos en que aplicarlos, no vot a correr riesgos contigo.

Termino aquellas palabras acariciando delicadamente parte del rostro pálido de su princesa.

Volvió al laboratorio para seguir trabajando en mas prototipos que le dieran energía a Benihime que sabrá dios por que los necesitaria, para luego salir a buscar esos sujetos de prueba.

Urahara Kisuke era un arrancars muy poderoso, tenia una mente brillante, muy audaz, astuto y engañoso, tenia el don de la palabra e convencimiento, pero eso no quitaba que fuera un científico muy inteligente y un poco ortodoxo.

Ademas de trabajar en el suero estaba trabajando en otra cosa, un proyecto un poco mas grande que un suero pero no mas importante. Al otro extremo de donde estaban esos sueros refrigerados habían grandes cápsulas, habían 4 en total, todas llenas de un liquido azul cristalino, pero ademas de tener aquello tenían cuerpos, 3 parecían humanos pero 1 podríamos estar seguro que era un hollow, por un hueco en su cuerpo.

Se acerco a esas grandes cápsulas , ganándose frente a ellas mientras ponía sus manos atrás de la espalda... las miraba con determinación y concentración. 

--Oh! Kisuke has vuelto sabandija. --El hombre de sombrero a rayas dio un salto del susto, para luego con rapidez agarrar su sombrero que producto del salto se había desprendido de su cabeza. Miro de reojo a la figura que pronuncio aquellas palabras mirándolo con cierto odio y un poco con ganas de matar debido al susto que le dio.-- Pensé que jamás volverías a bajar, tengo informes nuevos que darte

-Para la próxima no podrías anunciarte en vez de llegar como un depredador en caza? --Le pregunto con voz hostil el rubio.

--Relajate y escucha lo que te diré --Aquella persona sonrió ampliamente y le dijo-- Dos de mis experimentos funcionan a la perfección, su estado cumplen con mis estadísticas.

-- Querrás decir nuestros experimentos... -contesto con ceja alzada, relajo su rostro y sonrio- Aun que son buenas noticias, ¿Que pasan con los otros dos?

--Podrían fallar, morir, al menos el N° 1... el 4 seria mucho mas probable que desborde estadísticas y se vuelva incontrolable, catastrófico! -sonreia con emoción brillaban sus ojos- Hasta para nosotros, nos costaria detenerlo, mataría varios hollow y un par de espadas.

--No me puedo arriesgar a eso, así que cuando este mas inestable abriremos una garganta y lo lanzaremos al mundo humano. --le dijo tranquilamente mientras veía ciertos papeles de investigación.-- Dijiste que seria catastrófico ¿no? Que se encarguen los Shinigamis, asi nos libramos de unos cuantos

-- Si mandan capitanes novatos perfectamente podría matar a dos u tres sin mayor problema.

--Bien, perfecto...--sonrió malignamente.

Ellos seguirían ahí abajo, trabajando en sus proyectos y experimentos, mientras la princesa Benihime descansaba en el piso superior. En otra parte de la vasto mundo de los huecos, habían dos arrancars nivel de espadas descansando, al rededor de varios lobos, uno de ellos parecía un hombre adulto, alto, delgado con su tes clara y su cabello castaño, su cara reflejaba mucha seriedad igual que la de su acompañante, pero esta no tenía aspecto adulto, era más bien algo adolescente, cabellos largos de un color verduzco, su mascara de hollow le cubría un ojo pero el otro era de un hermoso color rosa pálido, la chica apenas mostraba expresión mientras acariciaba a los lobos que lanrodeaban pero sus ojos reflejaban compasión y hasta afecto.

— ¿Que te preocupa Lilynette? –hablo el hombre antes descrito. La chica lo miro y no respondió nada, siguió acariciando a sus caninos. — ¿¡Quieres responder a la maldita pregunta!?

—Dejame en paz. No ves que estoy ocupada? —respondio a secas, siguiendo en lo suyo.

—Se que algo te preocupa, puedo sentir tu preocupación pero no lo que piensas, al menos que seamos uno nuevamente.

—Eso jamas.

—Entonces responde...

—No siento seguridad de la alianza que formamos, mis lobos no confían en Urahara —le respondió mientras se levantaba y se iba a sentar al lado de aquel hombre.— Es extraño Stark, contra la princesa no están tensos o en alerta, pero sienten la presencia de ese hombre y se erizan como si fueran gatos...

—Entonces tendremos que estar atentos, nos unimos a ellos por una razón... si vemos que tienen otras intenciones nos largamos.

La chica asintió, ya mas tranquila... se acurruco en el pecho de Stark y los lobos a los pies de ellos, era una escena hermosa, con la Blanca arena a su alrededor, era magnífico pero esa paz y tranquilidad duro poco...

Un hollow de menor rango fue a buscar a Lilynette, expresando que la princesa Benihime había convocado a una reunión de emergencia. En ese momento Stark había desaparecido y una pistola apareció en la mano de la joven.

— ¿Y ahora que? —expresó con molestia mientras se levantaba.

MUNDO HUMANO

La reunión entre la pequeña comunidad Quincy que quedaba estaba algo acalorada, debido a la decisión que las dos grandes familias de sangre pura habían decidido.

—Esto es inaudito, inaceptable! —grito un hombre con notorios aires de superioridad. —Jamas me lo espere, al menos no de la familia Ishida! Su padre y madre estarían avergonzados.

—Ellos ya no están presentes, y aun que lo estuvieran... Yo soy la cabecilla! —dijo en tono firme Ishida Uryu.

El hombre que hace un momento grito, lo miro con inferioridad, pues le habia hablado al antiguo cabecilla, al señor Ryuken, ya que no solo habían tomado una decisión importante, si no que también ascendieron a Uryu y Yuzu como los nuevos cabecillas de las familias 《Ishida 》y 《Kurosaki》

—Son solo unos niños, no tienen la edad ni la madurez para estas decisiones tan importantes que afectaran a toda nuestra raza. —hablo el mismo hombre que grito hace unos momentos.

—Lamento que este inconforme con la decisión —hablo Yuzu.— Pero usted es el único con inconvenientes, no veo a nadie más inconforme, que los quincys no tengan jerarquía por la sangre es lo mejor —Yuzu tenía una excelente elocuencia, era clara y precisa. Además que la amabilidad brotaba en sus poros— Tendremos más oportunidad de llevarnos bien, y de ser más unidos, más inclusivos.

Aquel hombre se fue molesto, azotó la puerta del lugar en el que se había convocado la reunión, Ryuken y Masaki miraban a sus hijos con inmenso orgullo, cada vez crecían mas, eran tan maduros, tenían fe que podrían ser buenos líderes de la comunidad Quincy

La reunión se dio por finalizada, pues ya no había nada más que discutir y tampoco objeciones.  Todos volvían a sus casas.

—Estoy orgullosa de ambos —menciono Masaki mientras les daba una tierna sonrisa— Los dos demostraron ser maduros para este cargo.

—Demuestren que pueden con esto como si fuera respirar —hablo Ryuken, ese hombre podia parecer que carecía de emociones, pero ese circulo que solia ser su familia lo conocia bien, y sabian que detras de esa fachada, habia un hombre lleno de sentimientos.

Pasaron a una tienda para comprar algunas cosas para la cena, al llegar a casa, entraron viendo a Karin sentada en la sala, inmediatamente la saludaron y se sentaron con ella.

—Karin hija, pensé que nos veríamos mañana...  —la miro con un poco de preocupación, conocía a su hija y sentia que algo le pasaba, que algo la estaba preocupando. — Olvide traer algo de la tienda para la cena, me acompañas Karin? 

La morena la miro con un poco de sorpresa, pero inmediatamente le asintió mientras se levantaba del sofa junto a su madre, Yuzu queria ir con ellas pero sabia que esta conversación tenia que ser solo entre ellas dos, las dejo a ambas en la puerta y se dispuso a poner la mesa.

Karin y Masaki caminaban lentamente hacia la tienda que quedaba a un par de cuadras, la peli negra jugaba discretamente en su espalda con sus manos y ropas, estaba algo nerviosa y deseaba hablar con su madre de algo que estaba inquietando su corazón, sabia que su madre podría darle algún consejo pero también sabia que podría salir mal.

—¿Que pasa hija? —Masaki le pregunto primero antes de que Karin pudiera pronunciar una sílaba— Desde que llegaste hace semanas te note extraña, y pude darme cuenta que interrumpí una conversación entre tu y Yuzu.

La mujer de cabellos miel y ondulado dejo de mirar hacia el frente y miro a su pequeña, dándose cuenta que algo realmente importante le pasaba a su hija, la detuvo y se inclinó medianamente para verla más fijamente.

—Karin... puedes decirme lo que sea, yo siempre te apoyaré y estaré para darte mi amor.

La morocha tenía unas ganas inmensas de llorar, pero no podía, sabia que no debía hacerlo sin ni siquiera haber dicho media palabra, se guardo las lagrimas para después, tomo aire y se decidió a hablar.

— Mamá... me he enamorado —dijo casi en un susurro, pero audible para su progenitora— De un humano.

La noticia fue como una bomba para Masaki, sintió que el mundo se derrumbaria pero obviamente no se lo demostró a Karin, volvió a sus cabales, se tomo un tiempo para analizarlo y respondió.

—¿Donde lo conociste? —dio una media sonrisa— ¿Como se llama?

Karin estaba estupefacta, se esperaba algún regaño, algo así como había reaccionado Yuzu, no esperaba que su madre reaccionara de esa manera... menos después de lo que ya había pasado.

—Madre.. no me rega-?! — la interrumpió Masaki.

—No, no lo haré, te apoyare eso es lo que dije.... sabes el riego que hay cierto? —le pregunto con una voz impostada.

—Lo conozco...

—Bien, en casa hablaremos de lo que va a pasar y cuales son tus opciones. Ahora responde las preguntas que te hice —Volvió la madre sonriente, la abrazo y sin darse cuenta ya habían llegado a la tienda.

Entraron a la tienda, Karin tomo un pequeño cesto para poner las cosas que comprarían.

— ¿Que llevo? —pregunto Masaki, Karin la miro sin entender, su madre se dio cuenta y Masaki explicó— Veras, solo fue una excusa para estar solas, ya había venido a la tienda y compre todo lo que necesitaba

— Ohhhh entiendo... —la morena rio mientras se rascaba la cabeza, miro a los lados para ver que podrían llevar, y vio la conservadora de helados. — ¿Que tal algo para el postre?

—Excelente idea! —Masaki fue a la conservadora y veía los sabores de helados — ¿llevamos de chocolate y fresa? 

Karin asintió, pagaron y se fueron, camino a casa Masaki volvió a recordarle a su hija las preguntas que le había hecho.

—Su nombre es Toshiro Hitsugaya... es un poco más bajo que yo, —la madre de Karin se sorprendió, hablaba de él con tanta ternura, sus ojos brillaban, hasta la voz se le volvió tierna y dulce— Su poder espiritual es elevado, por eso pude conocerlo, su cabello es blanco como la nieve o las nubes, tiene unos ojos turquesas que siento que pueden ver a través de mi... —suspiro— Es jodidamente guapo...

— Vaya... —rio ligeramente Masaki— Tu si estas enamorada, para que admitieras algo así, tienes que estarlo.

—Ya, ya! No lo digas, que lo se —dijo sonrojada— No se que hizo para ponerme así, si ni siquiera lo he besado o hemos hablado de mis sentimientos

—Espera... ¡¿ Tanta preocupación y ni siquiera has dado el primer paso!? —le pregunto algo alterada.

Karin río nerviosa, vio cerca la casa y corrió, Masaki detrás de ella, llegando a casa los demás no entendían que pasaba y por que Masaki estaba regañando a Karin, la única que tenía una idea, era Yuzu, pero solo se reía.

En un árbol, había un pajaro con aspecto extraño, tenía similitudes con un cuervo, sus ojos eran rojos y su plumaje negro, alguien vigilaba la residencia Kurosaki-Ishida.

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Holaaaaaaa!
Se que me he demorado muchísimo en escribir este capitulo, y que quizás ya nadie lo este esperando, pero aun que así sea, seguiré escribiendo los capítulos, no se cuanto tarde en cada uno pero no lo dejare incompleto y lamento mucho la espera.

¡Gracias por leer y por comentar!

❤AnaisMaturana21 ❤