Estaba desayunando cuando Slenderman se acercó.

—¿Te sientes mejor? —Preguntó preocupado.

—Sí, por supuesto, ¿Por qué te has levantado? Apenas has dormido —Pregunté.

—Solo quería saber si estabas bien —Respondió nervioso.

Que dulce.

—Estoy bien, gracias por todo —Respondí y sonreí mientras miraba a mi plato. Se me hacía extraño una conversación así con él.

—No es nada —Respondió y se fue, creo, a su habitación.

Nunca nadie me cuidó como él hizo por la noche. Ni mi madre, ni mi padre. ¿Cómo la gente podría llamarle monstruo?

Y creo que cada vez me estaba gustando más.

¿No era él el que se tenía que enamorar?

...

Me encontraba en el salón hablando con Nina hasta que llegó Puppetear.

—Hola chicas —saludó y se sentó a mi lado.

—Hola Puppetear —Respondió Nina mientras yo me llevaba un mechón detrás de mí oreja.

Que él estuviera tan cerca de mí me ponía nerviosa.

—Nina, ven, tengo que hablar contigo —Dijo Jeff y Nina salió corriendo hacia él.

Genial.

—Vaya, parece que nos han dejado solos —Respondió Puppetear sonriendo.

Yo sonreí de vuelta.

—Sí —Respondí.

No supe que más decir.

—Oye, ¿Te vienes mañana a dar una vuelta conmigo por el bosque? Hoy no hace mucho sol así que es mejor quedarnos aquí —Propuso.

Le observé.

—Bueno, podría ser divertido —Respondí tímida.

—Kat, ¿Por qué estás tan tímida? Tu no eras así la primera vez que hablamos.

Le miré atónita

¿Tanto se notaba?

—Es que... yo...

—¿Es porque te pongo nerviosa? —Preguntó mientras se acercaba más a mí.

Cómo siga así me voy a ruborizar.

Es demasiado hermoso para tenerle tan cerca.

—N-no, en absoluto —Respondí mientras miraba hacia otra parte que no fueran sus ojos.

Puppetear comenzó a reir.

—Entonces mírame —Respondió mientras agarraba mi cara y la giraba a su dirección —Eres realmente hermosa —Respondió mientras me miraba a los ojos —¿De verdad jamás has tenido novio?

Seguro que estoy más roja que un tomate.

¿Dónde ve mi belleza? Quiero saberlo.

Poco a poco él estaba acercando su cara a la mía.

No sabía si apartarle y salir corriendo o quedarme quieta como una estatua.

Mi corazón está latiendo rápido.

¿Realmente me quiere besar?

—Buenas tardes —Saludó Slenderman sonando un poco enfadado haciendo que nos separásemos.

Observé al hombre alto que estaba mirando a nuestra dirección y después se fue.

...

—Kat, te estaba buscando —Me llamó Nina desde lejos corriendo hacia mí y cuando llegó me agarró del brazo y me llevó a su cuarto.

—¿Qué pasa? ¿Por qué tanta prisa? —Pregunté alegre.

—Jeff me ha invitado a otra cita, ¡Mañana! Y se veía muy alegre —Respondió mientras se tiraba a su cama.

—¡Eso es genial! —Respondí alegrándome por ella.

—Quiero decirle que me gusta, y no sé si hacerlo mañana.

—Yo creo que deberías esperar un poco más —Respondí.

—¿Tú crees? Bueno, en ese caso esperaré. Por cierto, ¿Que pasó hoy entre tú y Puppetear? Se veían muy unidos —Respondió mientras se sentaba a mi lado.

Yo me ruboricé.

—Nada, creo... Que intentó besarme —respondí mirando hacia abajo.

—¡Eso ví! Si no fuera por Slenderman, eso es lo que hubiese ocurrido. ¡Se veía celoso! ¡Es genial! —Respondió y se echó a reír.

—¡No es genial! No quiero que Slenderman se enfade conmigo —Respondí.

—Tranquila, no lo hará, si realmente le importas te seguirá hablando —Respondió.

—Yo no le importo a Slenderman, y es una verdad irrefutable —Respondí.

—Eso ya se verá con el tiempo —Respondió Nina.

—No digas tonterías —Respondí y salí de su cuarto directo a la cocina.

Estaba en mis pensamientos hasta que choqué con alguien.

—Lo siento, no estaba prestando atención —Respondí.

Me percaté que se trataba de Slenderman y eso me puso nerviosa.

—No es nada, sé que debes de tener mucho en que pensar, o mejor dicho, en quién pensar —Respondió.

Quería decirle que de qué estaba hablando pero se perdió de vista en poco tiempo.

¿Por qué intenta esquivarme?

Al rato aparece Jeff con Puppetear y al verme me saludan.

—Hola guapa —Saluda Jeff.

—Eh, la única que puede decirle guapa soy yo, ¿Vale? —Responde Puppetear mientras se pone a mi lado y me pasa su brazo por mis hombros.

¿Este chico no entiende lo que es el espacio personal? A cada segundo que está conmigo lo rompe y no me gusta porque me pone nerviosa.

—Hola —saludé de vuelta.

—Parece que estás en otro mundo ¿De qué se trata? Escuché que hablabas con Slenderman ¿Te ha dicho algo hiriente? —Preguntó Puppetear.

—No, en absoluto, solo es que... Estoy pensando demasiado, en cosas que no me deberían de importar —Respondí mientras me zafaba de aquel brazo.

—Pensar mucho es malo —Respondió Jeff.

—Por eso tú nunca piensas ¿No? —Dijo Puppetear haciendo que me riera.

—Qué gracioso —Se quejó Jeff.

...

Ya habíamos terminado todos de cenar y cada uno se fue a su habitación, antes de entrar en la que compartía con Slenderman, Puppetear me llamó.

—¡Kat!

—¿Qué ocurre? —Prgunté preocupada.

—Mañana a las cinco, es cuando saldremos ¿Vale? Que no se te olvide. —Respondió.

—Ah, si, claro —Respondí.

—Buenas noches —Se despidió.

—Buenas noches —Le despedí de vuelta y entré al cuarto.

Slenderman aún no se encontraba ahí así que aproveché para ponerme mi pijama y una vez hecho me tumbé en mi cama.

Al poco tiempo escucho a Slenderman entrar y a balbucear cosas como "vaya mierda de día, para eso ni me hubiese levantado" y más cosas por el estilo.

—¿Tuviste un mal día? —Susurré.

—Creía que estabas dormida —Me respondió mientras se tiraba en su cama, al lado de la mía.

—No puedo dormir —Respondí.

—¿Aún pensando en "cosas"? —Preguntó.

¿Pero qué le pasa?

—Sí, estaba pensando en "cosas" y esas cosas eres tú —Respondí.

Él permaneció callado, seguramente un poco sorprendido.

—¿Y qué estás pensando exactamente?

—Parecía que hoy me estabas evitando —Respondí.

—Yo no te estaba evitando —Respondió.

—Lo que tú digas.

—Son imaginaciones tuyas.

—Bueno, Supongamos que son imaginaciones mías.

—No se supone, lo es.

—Da igual, no quiero pelear tan tarde —Respondí.

—Pues duérmete ya —Respondió.

—Y tú también —Respondí ahora más cabreada.

En poco tiempo me quedé dormida.

...

A la mañana siguiente estaba desayunando junto con Nina y Ben cuando Puppetear aparece con Jeff y se pone a mi lado. Cuando todos estábamos en la mesa, se sentó Slenderman enfrente de mí y comenzó a comer.

Puppetear llamó a Slenderman y éste le observó.

—¿Puede dejarme hoy salir al bosque con Kat? —Preguntó pasando su brazo por mi hombro, otra vez.

Slenderman dejó de comer y observó a Puppetear.

...

Después de un largo tiempo aquí está el capítulo. Lamento la espera.
Actualizaré más seguido, prometido.