Después de la charla de anoche, no paro de darle vueltas a lo de Sirius. No tenía sentido. O de repente se había vuelto bipolar, o no era el. Obviamente, a mi parecer, no era el.

-Reeeemus. Cuéntame algo mas de papa y vosotros tres o de mama o de algo. Por favoor.-Digo mirándole con cara de angelito. El suspira y sonríe.

-¿Algo que quieras saber en especial?

-Los merodeadores.-Digo sin vacilar.-Ya sabes, cultura y historia de las bromas.

El suelta una carcajada.

-Sí, muy cultural.-Dice el sentándose. Yo me tumbo en el sofá.-Pues bueno, ya sabes quienes somos, aunque te lo vuelvo a decir: Cornamenta (James Potter), Canuto (Sirius Black), Lunático (Remus Lupin) y Colagusano (Peter Pettigrew). Bueno, pues en primer año, los cuatro quedamos en Gryffindor, y nos hicimos amigos por un gusto muy común: Las bromas.

-No me digas, pensaba que os unió el amor por las flores y Filch.-Digo con tono divertido.

-Sobretodo por Filch-Dice riendo-Y eso, nos volvimos muy buenos amigos; No había día en el que no hiciésemos una broma o la planeásemos. En segundo año, ellos descubrieron el pequeño problema peludo, pero igual no me abandonaron como lo hubiesen hecho muchos otros; si no que idearon un plan para estar conmigo en mis transformaciones.

-¿Que?-Pregunto con la boca abierta.

-Pues lo que oyes. Pensaron hacerse animagos ilegalmente; y en quinto lo consiguieron.

-¿Que era cada uno? Apuesto una caja de chocolates a que tienen que ver algo con los nombres.-Digo chasqueando la lengua.

-Pues efectivamente. Sirius se convertía en un perro, de ahí viene Canuto. Tu padre se convertía en un ciervo; ahí tienes el origen de Cornamenta.

-Tal vez sea yo, pero me lo imagino como Bambi de pequeño.-Digo riendo un poco. Nah, riéndome como foca retrasada. Remus también se ríe- Sigue sigue.

-Bueno, y Peter se convertía en una rata.

-Wow, que agradable.

-Sí, ya lo se. El tema es que se nos ocurrió otra gran idea: ¿Por qué no tener vigilado el colegio, para que podamos escapar después de una broma? Y ahí lo decidimos; decidimos crear el mapa del merodeador.

-Me siento como fangirl apunto de gritar.-Digo con una sonrisa inocente.

-Eh... ya...-Dice Remus mirándome como si fuese un extraterrestre.

-Vale, esa cara vale millones.-Digo empezando a reír de nuevo. Me seco unas lágrimas imaginarias y entonces me resbalo del sofá pero me agarro como un Koala al tronco.

-¿Posición Koala?-Dice el divertido.

-Ja ja ja. Que gracioso.-Digo mientras me pongo bien de nuevo.-Sigue.

-Y también conseguimos eso en quinto. Con ayuda de las escapadas nocturnas y la gran cantidad de pasadizos que íbamos encontrando.

-Y... ¿De donde salio la contraseña?¿Como perdisteis el mapa?¿Lo dejasteis aposta?¿De donde salio la contraseña? Espera ¿Eso ya lo he preguntado, no?

-Sí, ya lo has preguntado. Lo cierto es que no se como salio la contraseña; tu padre vino gritando desde las mazmorras diciendo que ya teníamos contraseña.-Yo no evito soltar una carcajada-Y Sirius y James perdieron el mapa una noche en un descuido. Íbamos a recuperarlo, pero yo pensé que era mejor que estuviese aquí para los sucesores. Y tachan.

-Ps, si no fuese por mi...-Digo riendo.

-¿Tu cogiste el mapa?

-No, pero insistí yo en que lo cogieran; se me hacia familiar.-Al terminar de hablar, mis tripas hacen un sonido raro- Tengo haambreeeeeeeee.

-Sí, se ha oído un poco...-Dice Remus riendo.

-Vale, basta de hacer Bulling a Annie, tengo suficiente con los Slyhterin.-Digo dramatizando. Un poco.- ¡Una nueva campaña para parar los comentarios burlones a Annie! ¡UNETE!

-Ehhhh.... Yo voy a hacer la comida.-Dice Remus levantándose para irse a la cocina.

-¡MALDITOS! ¡UNIOS A LA ONG!

-Annie, vale ya.-Dice Remus aun riendo.

-¡PARARE! ¡SOLO HAS GANADO UNA BATALLA, NO LA GUERRA!-Digo mientras me caigo por las escaleras.

-¡Annie! ¿Estas bien?-Pregunta Remus al verme en el suelo.

-Gajes del oficio.

-¿Que oficio?

-El de Drama Queen.

-Anda, haz algo que no sea peligroso, por favor...-Dice Remus ayudándome a levantarme.

-¿Leer vale?

-No te cortes con el papel.

-Oh dios, que chiste. Enserio, me muero de la risa.-Dijo sin poder ocultar mi lado sarcástico. El vuelve a la cocina- Re... Lunático ¿puedo ir al parque? A leer, no ha traficar con golosinas.

-Sí, pero vuelve pronto... ¡Y COGE UN PARAGUAS POR SI ACASO!

-Ni siquiera lo he pensado, enserio.-Digo a la par que me pongo un gorro. Cojo el paraguas y salgo por la puerta diciendo un largo "Adioooos Reemusin". Me dirijo al parque, y miro el camino... todo esta lleno de nieve.- ¿Como voy a leer yo aquí?-Digo a la par que miro al parque- Ni que pudiese controlar el hiel... Espera un momento, sí que puedo.

Levanto una ceja y sonrio. Debería dejar esto de hablar sola. Miro si algún muggle anda merodeando y cuando veo que no, me concentro para quitar la nieve de un banco y dejarlo seco. Por instinto, cierro los ojos y noto una brisa y oigo un "plaf". Abro un ojo y veo que el banco esta seco y sin nieve.

-Enserio, soy cool.-Digo mientras me subo las gafas y me voy al banco a leer. Abro "la vuelta al mundo en 80 días" y empiezo a leer, al igual que me desconecto del mundo.

***

-¡Annie Lilianne Potter Evans Black!-Dijo Remus quitándose nieve de la cara.

-¿Otro apellido, Lupin?-Digo escondiéndome en el árbol intentando respirar a causa de la risa. No oigo nada por unos segundos y después noto algo frío en la cara.

-¡DIJIMOS QUE NO VALE UTILIZAR APARACIÓN!-Digo mientras me echo encima suyo. El se ríe me coge como saco de patatas.-Vale, si me llevas a casa sin que tenga que andar te lo perdono.

-Igualita a James.-Dice rodando los ojos y empezando a andar.

-Ps, obvio.-Digo sonriendo. Cuando llegamos a casa me quito las botas y las dejo en la entrada, junto al libro. Entonces noto como un fénix viene volando hacia mi.-¡HERMES! ¿Donde has estado?

El solo niega y hace algún tipo de abrazo. Yo sonrió y le dejo suelto.

-¿Tienes un fénix?-Pregunta Remus mirando a Hermes.

-Hagrid me lo regalo...-Digo levantando las manos.-Inocente.

-No lo decía por eso-Dice el negando con la cabeza-es algo curioso. ¿Sabes lo que es un patronus?

-Sí...-Digo recordando el libro de DCAO de séptimo que leí en la biblioteca- El patronus es el único hechizo capaz de espantar a los dementores. Lo leí en un libro de séptimo de la biblioteca...

-¿Por que lees libros de séptimo?-Pregunta Remus arqueando una ceja.

-Pues... es una historia curiosa, estaba buscando una poción, y me encontré con el libro, y pues me intereso y lo leí. Y ya...-Digo poniendo la cara mas inocente posible.

-¿Que poción?

-Información clasificada de la segunda generación de merodeadores...-Digo sonriendo.

-Claro, como no. Seguro que era el de tinte de pelo.

-¿Y ESO? ¿Como lo sabes?-Digo con una ceja levantada- ¡DI NO A LA LEGEREMANCIA CONTRA ANNIE!-Digo cubriéndome la cabeza. El niega con la cabeza.

-Nosotros hicimos lo mismo en primero...-Dice riendo.-Ni siquiera se utilizar legeremancia.

-Ah...-Digo quitándome las manos de la cabeza- ¿Que ibas diciendo con los patronus?

-Sí, claro... que normalmente los que tienen fenixes suelen terminar teniendo un patronus de la misma forma.

-¿De un Fenix?-Pregunto. El asiente.-Pues vamos a probarlo.

-Es un hechizo muy avanzado...

-¿No me crees capaz?-Digo sacando mi lado Evans.

-Bueno, el hechizo es Expecto Patronum. Es... algo fácil, vamos a decirlo: Piensa en el recuerdo mas feliz que tengas y di las palabras.

Yo pienso en los momentos mas felices de mi vida; recuerdos que ni yo recordaba vienen a mi y no evito notar una calidez en todo mi cuerpo; y no es la calefacción. Cierro los ojos y digo las palabras.

-Expecto Patronum.

Abro los ojos al notar luz delante mio. Una tira de luz azulada sale de mi varita formando un fénix parecido a Hermes.

-En primero, has conseguido hacer un patronus. ¿Vas enserio?-Dice Remus mientras mira el fénix.

-Cosa de genes.-Digo sonriendo. Entonces me acuerdo de algo- Oh dios, se nos a olvidado el ministerio.

-No, este no es tu domicilio; al menos no figura así en los documentos del ministerio. Por lo tanto, yo podría haber conjurado el patronus.

-Vaya, así que si lanzo un avada, no lo detectan.-Digo sonriendo.

-Tal vez eso sí.-Dice Remus-Recuerda el detector.

-Oh cierto.-Digo guardando la varita.-Pues paramos por hoy. Ah, y tengo hambre...

Y salgo corriendo hacia la cocina.