Completamente opuesto al desierto árabe, del otro lado del mapa, en la esquina más lejana, se encontraba una zona fría y austera. Muy similar al ártico era el lugar donde ahora Shelly y Colt acordaron de encontrarse.

La chica de morado esperaba temblorosa gracias al frío polar de aquel lugar a que su compañero llegara a su encuentro, mientras ella caminaba de un lado a otro, ansiosa y también para mantener el calor corporal.

Se abrazó a si misma, frotando fuertemente sus manos contra sus brazos, -¿D-Dónde estás, Colt...?

Y casi como si hubiese sido magia, a lo lejos Shelly pudo ver al joven comisario corriendo a su encuentro. Se le veía bastante agotado, sin embargo, corría muy veloz.

-¡Shelly!

-¿Colt?

-Lamento tanto la tardanza, pero tenía que checar que todo estuviera en orden para la fiesta-, dijo el de cabello rosa apenas llegó frente a su amiga, sin siquiera darse el tiempo de recobrar el aliento, -El lugar está listo gracias a Rosa, Bea y Sprout, además ya está decorado, y tanto con la sección de comida como la de bebestibles lista, he de decir que Piper se lució ahí. El escenario, el equipo del música, incluído el equipo de DJ y los efectos especiales ya fueron instalados gracias a Pam... Creo que estamos listos para la fiesta.

Shelly se quedó en silencio varios segundos intentando procesar toda la información que su amigo le dio tan rápido. Parpadeó un par de veces antes de sonreír entusiasta y aproximarse con un fuerte abrazo al comisario.

-¡Colt, eres genial!-, ella exclamaba abrazando a su colega, quién en respuesta solo podía reír a la vez que intentaba recuperar el aire perdido después de correr tanto, -¡Muchas gracias, de verdad! No lo hubiera logrado sin tu ayuda.

Colt una vez libre del abrazo, simplemente suspiró con una sonrisa, -No hay de qué, Shelly. Lo que sea por mí mejor amiga.

La pelimorada sonrió ante esto y antes de que pudiera decir algo más, un característico graznido le interrumpió. Ambos chicos voltearon para encontrase con un pingüino bajito y gordito, con un ceño fruncido, y vistiendo un elegante traje, con una maletín en su aleta.

-¡Mr. P! Me alegra verte, justo íbamos a ir a tu hotel a saludarte-, saludó Shelly, mientras volvía a abrazarse a si misma para así entrar en calor y se acercaba al pingüino, -Queríamos estar presentes cuando llegara tu colega.

Mr. P observó detenidamente a los humanos temblorosos frente a él con una expresión dudosa, antes de quejarse en voz alta, y con su aleta libre sujetar a Shelly de la mano y obligarla a seguirla, graznándole igualmente a Colt para que lo siguiera. El comisario tragó en seco, pero igualmente hizo caso.
El pingüino los llevó caminando a su hotel congelado, no muy lejos de allí. Parecido a un iglú gigante por fuera, el hotel por dentro era en realidad un bello espacio acogedor y refinado, adornado sofisticado con ambientación invernal de tonalidades azules, contrastando con tocados rojos de terciopelo.

Una vez allí dentro, Mr. P graznó y aplaudió con sus aletas. Acto seguido al vestíbulo entró un pequeño pingüino robot, parte de los botones del hotel. En su lomo traía una bandeja con dos tazas con chocolate caliente, las cuales eran para los invitados.

Shelly y Colt sujetaron las tazas con una sonrisa y se dispusieron a tomar algunos sorbos para entrar en calor.

-E-Emm... Muchas gracias, s-señor pingüino-, sonrió nervioso Colt una vez que se terminara el chocolate caliente. No quería admitirlo en voz alta, pero es que la verdad no sé sentía muy cómodo allí, ya que el comisario guardaba un secreto.
Desde pequeño que le teme a los pingüinos.
Y cuando Mr. P se integró a Brawl Stars, tenía que admitirlo, lo evitaba a toda costa, incluso al punto de faltar a su bienvenida excusando que se había enfermado.

Colt en ese instante estaba controlando su pavor bastante bien, pero realmente esperaba no estar mucho más tiempo allí.

-¿Y bien? ¿Cuándo llega tu colega?-, preguntó Shelly ansiosa, a lo que Mr. P sin dejar su ceño fruncido señaló con su aleta un reloj en la pared del vestíbulo con una hora marcada con un gran cartel que decía; "Bienvenido, Gale".

Según la hora marcada, no faltaba casi nada para la llegada del nuevo brawler.

-¿Su nombre es Gale?-, preguntó Shelly a lo que el pingüino asintió con un graznido afirmativo, para luego caminar hasta su escritorio y sacar de uno de los cajones un marco bastante llamativo. La foto en el marco era la del nuevo brawler, con una placa debajo de decía "Empleado del mes".

La pelimorada sonrió ante esto, -Vaya, debió ser un grandioso empleado para este hotel.

Antes de que el pingüino pudiese responder, el reloj cucú en la pared sonó al llegar la ansiada hora marcada allí.
El nuevo brawler habría de llegar.

La puerta del hotel fue tocada con tres simples golpeteos. Mr. P se arregló su corbatín y aplaudió con sus aletas para ordenarles a sus botones robots que abrieran la puerta y recibieran al recién llegado.

Los botones así hicieron, y las puertas se abrieron. Al hotel entró un hombre mayor y encorvado. De cabellos y bigotes blancos, ojos tan cansados que se mantenían achinados. Estaba muy abrigado, con un mono azul de polar, guantes celestes en cada mano, una bufanda roja, y un gorro con orejeras abrigador. Llevaba en su espalda lo que parecía ser un soplador de nieve.

El hombre una vez adentro sonrió, -¡He-hey! ¡Mr. P! Es un gusto volver a verlo.

El pingüino en cuestión sonrió, y caminó hasta el recién llegado para darle un pequeño abrazo y un par de palmaditas en la espalda.

Shelly ante esto, se acercó al nuevo brawler sonriente, -¡Hola, Gale! ¡Bienvenido a Brawl Stars! Soy Shelly, la brawler inicial y la encargada de darte la bienvenida a este gran lugar, junto a mi compañero aquí presente.

Colt lo tomó como una señal para presentarse, -Hola, yo soy Colt, del camino de trofeos. Más conocido como el guapo comisario de este lugar-, dijo él, halagándose a si mismo.

El hombre mayor rió contento, -¡Hola muchachos, es un placer conocerlos! Yo soy el viejo Gale, a sus servicios.

La pelimorada se acercó a Gale para darle la mano entusiasmada, -¡Es un gusto tenerte aquí en Brawl Stars, Gale! ¡Ya no puedo esperar a que conozcas al resto de los brawlers! Verás, te tenemos una fiesta de bienvenida esta noche, en dos horas más de hecho-, explicó Shelly, mientras Colt asentía animado, -Es también la fiesta de aniversario de SuperCell, así que será un gran evento. Sé que debes venir agotado, pero realmente esperaba que pudieras asistir para darte la bienvenida como corresponde, ¿qué dices?

Gale sonrió y rió alegre mientras aplaudía con entusiasmo, -Suena genial, Shelly. Quizás esté viejo, pero aún tengo energía para disfrutar de una buena fiesta. Allí estaré.

La de bandana exclamó, -¡Fantástico! ¡Nos veremos entonces en la fiesta!-, dicho esto se dirigió al pingüino junto al hombre mayor, -Los espero a ambos, ¿verdad?

Mr. P asintió vivaz, para luego aplaudir a sus botones que se encargarían de mostrarle a Gale donde se quedaría desde ahora en adelante.

Colt lo tomó como señal para ya irse. Shelly le sonrió y le indicó a su compañero que era hora de irse. El sheriff suspiró un poco más tranquilo, ya podría alejarse del pingüino.

Ahora, tenían dos horas para arreglarse y asistir a la fiesta.
Cuenta regresiva entonces.

~•~

Hola people!
Lamentó mucho la tardanza en la actualización. Es que me dio tendinitis gracias a la Universidad, entonces tuve que forzar mucho la mano para mis exámenes de fines de semestre.

Así que estuve mucho tiempo sin usar la mano para muchas cosas, pero hoy ya no me duele tanto. Así que vuelvo con todo :D

Pregunta importante:
El siguiente capítulo es la tan esperada fiesta, pero digamos que será un capítulo extremadamente largo.

-Prefieren que sea un capítulo muuuuuy largo y donde no se corte la narración. (Yo prefiero esta)

-O varios capítulos más cortos dónde por capítulo veremos a brawlers distintos interactuando.

Eso pue.
Muchas gracias a la people que apoya esta historia.
Me hace mucha ilusión :')

-Natta