Capítulo 5.
Akutagawa se acomodó en su despacho, estaba pensando en lograr averiguar cómo mejorar el estado de Atsushi, así que busco en internet. Incluso, hizo preguntas en línea sobre como ser romántico con su esposo. Tuvo varias respuestas en media hora, entre ellas, flores, joyas, comida cara y rica, y sexo; casi todas de sexo.
Akutagawa se cruzó de brazos, pensaba en ello una y otra vez, nunca había tocado a Atsushi, incluso esa misma mañana lo vio desnudo, pero ninguno de los dos estaba interesado, o eso creía. – Cuando toque su cabello se puso feliz. – cierto, era totalmente verdad entonces, quizá un poco de contacto físico – incluso, Naomi sugirió los besos y tomar su mano – volvió a recordar.
Tomo un post it de su oficina, y con caligrafía perfecta escribió "para mi Atsushi". entonces, Akutagawa fue a la recamara, tomo los chocolates que había comprado y le puso el post it. Se sentó en la cama moviendo al menor – Atsushi
- ¿Qué? – su voz era ronca.
- Mira
Atsushi movió su cabeza viendo el chocolate y el post it, se sonrojo de ello. Se sentó tomándolo y lo abrió - ¿comerás en la cama?
- Si, déjame
Akutagawa estaba sorprendido por esa respuesta, y mucho más por la actitud. - ¿Qué tienes? Estas preocupándome.
Atsushi metió un chocolate a su boca y lo miro – estoy molesto contigo
- ¿conmigo? ¿Por qué?
- Eres muy torpe en estas cosas – se quejó y suspiro - ¿Qué quieres de mi Akutagawa?
- Somos... Esposos, y estos días me he dado cuenta de que los casados están enamorados y felices, en el altar, prometí cuidarte y hacerte feliz pero no estoy seguro de que haga ninguna de las dos.
- Ya me acostumbré, eres buen esposo, ausente pero bueno.
- No deberías acostumbrarte a una ausencia, aunque hagas todo por ti mismo, estamos unidos.
- Lo sé, no es como que planee separarme de ti, solo... - comió otro chocolate
- ¿solo?
- Bueno... - hablo con la boca llena – admito que a veces pienso en el futuro, ¿Qué pasará en otros 14 años cuando los niños se vayan? Me quedare solo en esta enorme casa, viejo
- Tendrás 40
- Vieeeejo
Akutagawa no pudo evitar reír, - ¿de dónde sacas que serás viejo a los 40?
- Pues sí, ¿de dónde sacas que no? Tu tendrás 42 – se quejó acercándole un chocolate
- ¿eh?
- Abre la boca, ¿no quieres probarlo?
Akutagawa abrió su boca y Atsushi lo puso en su boca, un pequeño rose de labios con sus dedos se hizo presente sonrojando a ambos. Siguieron serios y hablando. – Entonces... ¿el significado de tus detalles?
- Quiero que nos enamoremos
- ¿en verdad?
- Quiero que tengamos un matrimonio feliz, que ambos la pasemos bien. Admito que se siente un vacío de tu ausencia
- Pero siempre estoy
- Para los niños, ahora que te vi, prestas toda tu atención y energía a ellos, a mi incluso me ignoraste en varias ocasiones
- Pero siempre hablo bien de ti y en público te trato bien
- Si, pero yo quiero que arregles mi corbata también antes de salir – se quejo
- ¿eso fueron celos de tus hijos?
- Quizá, no lo sé. Es en verdad cuando digo que se siente vacío, es como si no existiera en el mundo de mis hijos, en tu mundo, uno que debería ser nuestro mundo.
- Comprendo, pero Akutagawa, la verdad no sé si podré soportar de nuevo tu fría mirada
- Lo haremos juntos como matrimonio, tú te esfuerza, y yo también. Mostraré mi mejor lado, menos horas de trabajo, algunos días en casa. Y muestras de cariño
- Bien, entonces... yo arreglare tu corbata, ahora no tengo tiempo para el desayuno, pero la cena
- No, mejor, la bañera
- ¿la bañera?
- Me gustaba cuando llegaba del trabajo y tenías el baño con olor a canela
- Bien, bien, veamos... ¿Qué más?
En algún punto de la conversación Atsushi se acostó para escucharlo y Akutagawa lo siguió minutos después. Naomi había ido a buscarlos para ir por los niños, pero se encontró con sus jefes durmiendo, sonrió de ello. Fue devuelta a la cocina – Jun ¿puedes ir por los niños y llevarlos a sus actividades?
- Claro, será un placer.
Jun salió alegre a buscar a los hijos de sus jefes, claro, el saber que habían estado juntos alegraba a la casa, ellos los apreciaban en grande.
Despertaron al atardecer, Atsushi se estiro y miro al azabache a su lado, volvió a sonrojarse para sentarse, el movimiento también despertó a Akutagawa – creo que nunca había dormido así
- Si, a mi si me gustan las siestas, pero desde los niños no había tomado una así
- Fue bueno ¿no? Me siento con energía
- Si, lo fue. – Atsushi se levantó – bien, sacudiré la sabana, levántate
- Que lo haga Naomi, te invito a cenar
Atsushi volvió a sonrojarse – no es necesario, y los niños
- Jun y Naomi están para ayudarnos, déjalos trabajar un poquito y déjame conquistarte
- Akutagawa...
- Lo hablábamos, quiero hacer esto...
- De acuerdo, pero casual, semi elegante
- Perfecto, caballero ¿A dónde desea ir?
- ¿elegirías un traje para combinar conmigo?
Akutagawa se levantó de la cama – te sigo - Atsushi fue al vestidor, Akutagawa lo acompaño. El menor tomo un pantalón de vestir a la cintura color beige, un cinturón negro y una playera blanca. - ¿para ti?
- Obvio, mi cintura es buena para este estilo y creo que con una playera corta se verá muy bien mis glúteos
- Oye, vas con tu esposo
- Por eso me los pongo así – se quejó.
Fue a ver el guarda ropa del mayor, tomo un pantalón de vestir color beige también, una playera color negro, y un saco largo color negro – esto te queda perfecto. Sería y sexy
Akutagawa se sonrojo - ¿crees que soy sexy?
- Aay por supuesto, eres uno de los más guapos y sexys del condado, y eso que tengo amistades
- ¿es un cumplido?
- Además, eres mi esposo...
- Lindo
Atsushi comenzaba a cambiarse y el azabache lo miro – oye
- ¿sí? – pregunto entre saltos para colocarse el pantalón bien
- ¿Cuál es tu opinión del sexo?
Atsushi lo miro confundido – pues, tenemos 3 hijos
- Si, pero por mi rut y tu celo, tú y yo nunca nos hemos tocado
- Lo sé, pero ¿no crees que es algo pronto pensar en algo así?
- ¿te parece?
- Nunca he tenido sexo en mis cinco sentidos así que no creo que pueda hacerlo fácilmente
- Ya veo
- Apúrate a cambiarte, quiero salir
- Si, ya voy.
Le dejaron todo encargado a Naomi, subieron al auto y fueron a un restaurante. Akutagawa abrió la puerta del auto tomando la mano de Atsushi, - entonces, ¿tomados?
- Si, no aprietes
Fueron al restaurante tomados de las manos, pero al entrar, Atsushi prefirió tomar su brazo cortésmente, Akutagawa también se sintió más cómodo así. Se sentaron, pero Atsushi lo miro un momento y fue a sentarse a su lado - ¿no es mejor de frente para platicar?
- Es más romántico juntos, es más fácil que te dé en la boca o tú me des
- ¿no es vergonzoso eso en la calle?
- ¿no quieres presumirme?
- No, creo que lo haces bien solo. Eres bastante atractivo
Atsushi se sonrojo y sonrió – sí, me gusta más así de cerca, puedo verte mejor
- Que exagerado – el menor tomo su mano – también podemos tomarnos de las manos
- Si, me gusta así, siéntate a mi lado siempre
- De acuerdo
Platicaron un poco de sus gustos y un poco más de negocios, Atsushi le hablo sobre como sus sucursales estaban creciendo y Akutagawa sobre un negocio que estaba a punto de cerrar próximamente. Llego su comida y disfrutaban de ella, cuando el mayor recordó lo que dijo Atsushi. acomodo un poco en un tenedor y se lo acerco al menor viendo su rostro ruborizarse - ¿no quieres probarlo?
Atsushi sonrió, llevo su cabello atrás de la oreja y lo provo – es delicioso – dijo alegre mientras tapaba su boca con su mano – gracias
- ¿y yo? ¿no merezco probar el de mi esposito?
El menor acomodo un poco en su tenedor y lo acerco al azabache haciéndolo probar, ambos se sonrieron, - pero que ven mis ojos, Akutagawa Ryunosuke cenando en un restaurante. – aquella voz semi altanera hizo a ambos enfocarse en el hombre blanco, alto y rubio.
- Francis, buena tarde – hablo el azabache viéndolo.
- Creí que tenías una especie de vacaciones, te comunicas por videollamada
- Mi esposo y yo planeamos pasar tiempo juntos
- Oh, Zelda es igual – se inclinó – un placer conocerte
- Nakajima – hablo Atsushi cortes, - es mutuo
- Los dejo en su tiempo juntos, me alegra saber que le dedicas tiempo a tu esposo, deberíamos un día juntarnos, que nuestros esposos platiquen, y nosotros ¿Qué tal un negocio? – pregunto extendiendo su mano
El azabache tomo su mano – hablamos después para ponernos de acuerdo
- De acuerdo.
Francis se retiró y Atsushi le sonrió – ¿ahora soy tu amuleto de la suerte?
- Atsushi, un negocio con Francis es tan difícil, es un hombre muy ambicioso. Te agradecería si pasas una tarde con su esposa
- ¿celebramos? – pregunto alegre
- ¿quieres una copa de vino?
- Si
Pidieron vino, siguieron platicando mientras bebían su vino, en cuanto terminaron, pidieron la cuenta y salieron del restaurante – Akutagawa, ¿Qué tal un postre?
- ¿Qué se te antoja?
- Quiero una rebanada de pastel de chocolate con crema y fresas
- Como comes dulce eh
- Aaay solo llévame por uno
- Claro, y además yo te lo compraré
Entraron al auto, fueron a una cafetería popular por tener libros, allí se sentaron en una mesa especial, era pequeña pero alta, Akutagawa tenía una silla alta y Atsushi se había sentado en un columpio que estaba en lugar de otra silla, Akutagawa tapaba levemente su rostro por verlo, Atsushi estaba sumamente emocionado por el columpio.
Atsushi disfrutaba de un pastel mientras Akutagawa tomaba su café americano.
Akutagawa lo miro un momento, la verdad es que Atsushi estaba disperso en su emoción así que, por algún momento, algo en su mente simplemente le dijo "hazlo". Tomo su celular poniendo la cámara y no dudo en fotografiar a su esposo. Atsushi lo notó viéndolo - ¿Qué hiciste? ¿me tomaste una foto?
- ¿Está prohibido?
- No, pero que penita – menciono divertido – déjame verla
- Aquí, ven.
Atsushi se acomodó en su hombro mirando la fotografía y se sonrojo – vaya, yo no soy fotogénico, pero me veo bonito
- Eres bonito.
Se recargo en su hombro y sonrió – esto es tan lindo, esperaba cositas así al inicio de nuestro matrimonio – menciono
- Disculpa la tardanza, pero es divertido pasar tiempo contigo
- Qué bueno que también te guste, ¿vamos a casa?
- Si, y... quiero hacer esto – menciono cambiando la página en su smartphone.
Atsushi se sonrojo y trago saliva.
Después de volver a casa, los niños estaban durmiendo, Atsushi fue al baño a darse una ducha, Akutagawa llego para sentarse - ¿en serio planeas verme en la bañera? – pregunto.
- Si, quiero hacer eso del cabello.
- Bien, bien – suspiro – pero voltéate para que entre
- Ya te he visto desnudo
- Pero ahora me vez, de ver, ver o sea consciente.
- ¿antes no era consiente de tu cuerpo?
- Yo no era consiente de tu mirada
- Ok, entiendo.
Cerro sus ojos y Atsushi entro a la bañera, tenía espuma y busco su shampoo – listo Akutagawa
- Oye, sé que cuando no hay gente me llamas por mi apellido, pero como esposos ¿no deberías usar más mi nombre?
- No estoy acostumbrado a hacer eso a solas
- Bien – se levantó de la silla y tomo el shampoo del menor – gracias
- Esto es raro – menciono
- Lo vi en las redes sociales
- ¿Qué tipo de redes miraste?
- Bueno – puso shampoo en su mano – la verdad es que hice algunas preguntas privadas sobre como ser mejor esposo
- Aay – expreso avergonzado. Akutagawa puso en shampoo en el cabello de Atsushi – suave ¿sí? Tienes que tallar mi cuero cabelludo
- De acuerdo, es suave
- Gracias, lo cuido lo suficiente para esos comentarios, Chuuya me ha dado muchos tips
- ¿en serio?
- Si, tiene un cabello super suave
- Hablando de él, ¿Cómo lo conociste?
- En el gimnasio, un día decidí entrar a aparatos y todos los omegas estaban sorprendidos, es decir, muy pocos hacen pesas porque son bonitos, pero yo sentía que podía hacer más y resulto que había más omegas como yo, y entre ellos Chuuya.
- Me gusta que te guste, creo que es emocionante
Atsushi se sonrojo. – me gusta platicar contigo, pero ¿Cómo serán los demás días?
- Disfruta el ahora que tengo las reuniones por zoom. Después pensaremos como arreglar mi horario.
- Debo seguir con los horarios de los niños así que, cenar o pasear de noche estaría bien ¿no?
- ¿Qué tal un almuerzo de vez en cuando? Pero repito, hablemos luego de eso. Mejor cierra los ojos, voy a enjuagarte
- De acuerdo.
Después del baño, Atsushi se sentó a ponerme su crema de noche, Akutagawa quiso secar su cabello – en serio, no es necesario.
- Déjame hacerlo, tu cabello me gusta
- De acuerdo, pero, no sé siento que es muy...
La puerta de su habitación se abrió, era Atsuke tallando su ojo de sueño – mami, mami - le llamo en un sollozo – mami tengo sueños feos
Atsushi se levantó y cargo a su pequeño en sus brazos – no pasa nada amor, solo son malos sueños, los buenos vendrán pronto
- Papá – le llamo al azabache - ¿me llevas por lechita?
- Claro que si – el azabache cargo al menor y miro a Atsushi
- Iré a ver a Ryunushi
- Bien
Akutagawa bajo a la cocina con Atsuke, este iba pegado a su pecho – papi
- ¿sí?
- ¿Por qué mami está tan ocupado para no ir por nosotros? ¿no nos quiere?
- No, no es nada de eso. Mami paso tiempo conmigo hoy.
- ¿con papi?
- Si
- Mmm...
Ryunosuke sirvió la leche a su pequeño y se la dio – gracias papi.
- Atsuke
- ¿sí?
- ¿te gusta que mami y papi estén juntos?
- No lo sé, nunca los veo juntos. Me gusta estar con mami, pero no conozco a papi
- Ya veo...
Atsushi llego a la cocina con Ryunushi medio dormido - ¿Qué paso?
- También tuvo pesadillas – menciono – al final del día son cuates, así que supongo que es algún tipo de conexión.
- ¿debe ser algo grave?
- No – menciono arrullando a Ryunushi, lo miro y sonrió – ya se durmió. Dijo que quería lechita.
- ¿Por qué no bajo como Atsuke?
- Dijo que tenía miedo de salir de la cama
- Ya acabé – dijo Atsuke alegre
- Bien amor, vamos a la cama de nuevo
- Si mami
Atsuke en lugar de volver con su papá, tomo a Atsushi. fueron a la recamara donde los acomodo, Akutagawa lo estaba ayudando, pero podía darse cuenta de que, si estaba o no, Atsushi podía hacerlo.
De nuevo en la recamara, Atsushi noto a su esposo un poco decaído, tomo su mano para tener su atención - ¿Qué sucede?
- Hace unos minutos, Atsuke dijo que no me conocía
- Oh...
- Mis hijos no me conocen, mi esposo me siente ausente. – suspiro sentándose en la cama, - ¿de que sirve trabajar tanto si cuando vuelvo a casa pasa esto? Que decepcionante soy.
- No pienses así las cosas Ryunosuke – pidió poniendo la mano en su hombro – ahora que te has dado cuenta, todo puede mejorar. Los cinco podemos mejorar ¿no lo crees?
- ¿seguro que se puede?
- Por supuesto, vale la pena intentarlo por tus hijos ¿no es así?
- Sinceramente empecé a darme cuenta por ti, y quiero seguir esto por todos ustedes
Atsushi se sonrojo, le sonrió tiernamente – lo lograras, nosotros también nos esforzaremos.
Esa noche, Atsushi volvió a bajar a la cocina, esta vez, fue a su escondite, saco vino, dos copas y bocadillos, algunas papas, dulces, sobre todo chocolates. Llego a la cama con una bolsa de frituras en boca. Ryunosuke quien hacia un documento se quitó sus lentes para vista cansada y dejo la Tablet en su mueble de cama. Atsushi acomodo las bolsas en medio de la cama y se sentó con piernas cruzadas – bien, vamos a planificar esto
- ¿Qué vamos a planificar? – pregunto mientras Atsushi le daba una copa – Atsushi ¿Qué haces?
- Vamos a desvelarnos, nada mejor que así
- ¿haces esto seguido?
- Si, pero en la habitación de invitados – se levantó de la cama – sirve el vino y llena la copa
- Pero las copas no se llenan con este vino
- Hazlo
Salió de la habitación y volvió unos minutos después con hojas, lápices y adornos. – diablos, no dormiré – se quejó Akutagawa. Atsushi subió todo a la cama y volvió a acomodarse alegre
- Mi vino
Akutagawa le acerco la copa y Atsushi bebió de ella – bien, mira – señalo todo con la mano abierta – haremos este plan de organización, los niños, actividades, trabajo. ¿de acuerdo?
- Ok...
- Bebe de tu vino
- Pero
- bébelo
Akutagawa bebió de su copa y suspiro, dejo la copa en su mesa y entonces Atsushi sonrió – empecemos.
Pasaron la noche en vela discutiendo horarios, autos, actividades, incluyendo a Naomi, Jun y citas para ellos, sin olvidar sus actividades de trabajo, así como el gimnasio de Atsushi y las juntas de Ryunosuke. Aunque terminaron cambiándolo pues Atsushi termino diciendo que sería bueno que hiciera algún tipo de cardio para mantenerse saludable y terminaron armando el plan de nuevo. Sin olvidar de querer dormir sus 7 a 8 horas reglamentarias, era todo un reto.
Eran las 5 de la mañana cuando la alarma sonó, Atsushi despertó saliendo de entre los papeles – uugh...
- apaga eso – se quejó el azabache
- Ryunosuke, arriba, los niños
- No quiero, que no vayan a la escuela
- No es opción
- Si lo puede ser, fijamos que están enfermos
- Ryuuu
- Ya voy
Ambos se levantaron, Atsushi fue a cepillarse los dientes y lo vio – ay por dios, tengo ojeras
- Eso pasa cuando no duermes tus ocho horas – explico Akutagawa burlón
- No empieces, necesito corrector
- Vamos Atsushi, te vez bien incluso así
Atsushi se sonrojo, volvió a sonreír – vas bien con los halagos
- Y estoy dormidito, espera a que agarre conciencia
Atsushi no pudo evitar reír.
...
¡Gracias por leer!
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