Anika

Llegó a casa y como era de esperar la casa está llena de agentes y policías, me preguntan a detalle el día. Intento ser lo más genérica en referencia a mi escena con el Ruso, mientras Marcus me tiene sentada en sus piernas y entre sus brazos. Cada vez que me preguntan detalles de la escena, logró sentir como Marcus me apresa cada vez más en sus brazos, al punto que se me comienzan a dormir las extremidades. Digo con detalle lo que escuche del embarque, en lo que finalicé, todos se retiraron. Excepto Belinda, Eduardo y Marcus. Se hizo un silencio sepulcral, intente reacomodarme en sus brazos. No quería levantarme y alejarme de él. Necesitaba su fuerza y el apoyo de su presencia; pero podía sentir su molestia. Quizás después de todo nuestro amor no es tan fuerte, ni confía en mí. Comienzo a pensar que tal vez lo mejor sea obedecer a mi amo y dejar lo de un lado no merece sufrir, es un buen hombre, merecen una chica limpia y pura. No a mí.

-¿Estas bien? -Levanto mi vista hacia mi interlocutor, su mirada de preocupación me asombran. ¿Cómo en tan poco tiempo, me quiere?

-si... es sólo que no deseo que nadie salga herido, por mí -en lo que finalizó mis palabras, no logró controlar mi llanto, no soporto la idea de perder aquellos que en poco tiempo he comenzado amar y ellos a mí.

- Anika- Belinda toma mi rostro en sus manos- mi niña, lo vales. Tú mereces ser libre y tener control sobre tu vida. Eres como una hermana para mí. Lucharé para protegerte con mi vida si es necesario- dice y mis lágrimas brotan con mayor fuerza, sólo deseo que esto finalice. Sólo quiero poder pertenecer algún lugar, tener familia. Sentir que alguien me ama. La vida sin amor no tiene sentido.

De repente siento como soy levantada, así que sólo me oculto en su pecho, sólo quiero olvidar todo y comenzar de cero. Me lleva a mi habitación, directo al baño donde la bañera ya está preparada. Me deja sobre el lavabo, dónde comienza a desvestirme con delicadeza. Luego me introduce en el agua tibia, suspiro de placer. En silencio me baña con cuidado, sin palabras sus acciones hablan de su amor por mí. Mi corazón pelea por salir de mi pecho. Me saca de la bañera, seca y viste. Me lleva nuevamente en brazos a la cama, yo agradezco no tener que moverme, no tengo fuerzas, hoy ha sido muy intenso. Sólo deseo dormir. Al lado de la cama veo una bandeja de comida. Me acomoda como una muñeca, y se dedica a darme de comer, cuál niño pequeño. Yo me siento agradecida y avergonzada por tanto amor, jamás creí encontrar algo así.

Después de finalizar de comer, me mira y sus nudillos recorren mis mejillas, aun cuando estoy agotada eso logra encenderme. Me besa en la frente, me acuesta. Logró sentir el peso del día en mis párpados.

-Descansa, mi niña- dice con amor.

-Quédate conmigo -digo con temor de que no vuelva más, luego de ver el rastro del Ruso en mi piel, temo que se lo haya pensado mejor y no quiera seguir a mi lado.

-No pensaba irme nena, sólo descansa. Voy hablar con Eduardo y enseguida regreso. ¿De acuerdo? -asiento más aterrada aún que antes, no deseo obligarle a nada. Si no desea estar a mi lado, ¿quién soy yo para hacerlo?

Me acuesto y aunque estoy agotada, el dolor ha hecho mella en mí. Así que sólo lloró desconsolada. ¿Porque querría quererme? después de todo soy el juguete de otro hombre. El cansancio al fin me vence y me quedo dormida.

Me despierta la luz de sol, que entra por la ventana, mi cuerpo duele cada vez que respiro. Mi mano busca a Marcus, no lo sentí entrar a la cama en la noche. Por el contrario me encuentro una nota.

"Tuve que marcharme temprano. Te Amo, mi niña"

La nota sólo trae más dolor a mi pecho, no creo su excusa. No quiere hablar de lo de ayer. Bueno debo empezar aceptarlo, al final de esta misión no quedará nada de este amor. Me levanto con un gran esfuerzo, decido olvidar a Marcus por los momentos. Debo centrarme en mi misión. Mañana debo estar perfecta para él. Así que decido irme a un spa, prepararme toda y además un masaje luego de ayer no estaría de más.

Llegó a casa al final de la tarde. Eduardo me informa que tienen a varios agentes que asistirán a la dichosa fiesta. Mis nervios están a flor de piel, escucho atentamente mis opciones de salida por si algo sale mal. Marcus no me ha escrito en todo el día, es claro que está molesto. Debo dejarlo en paz, así aclara sus sentimientos. Es lo menos que puedo hacer, darle tiempo y espacio. Regreso a mi habitación, decido dormir temprano, conociendo a mi amo, mañana querrá usarme con sus amigos. Lo más extraño es que antes esa idea me atormentaba y asustaba, ahora sólo siento la necesidad de hacerlo bien, cumplir con lo pedido.

Ha llegado el día de la fiesta y éste fin de semana llegará el embarque que tanto espera mi amo. Creo que mi mente ha dejado de luchar contra la idea de que hasta este momento le pertenezco. Estoy junto a él, de su brazo. Puedo verlo como nunca lo he visto orgulloso. Me va presentando entre sus amistades como suya. Está tarde después de finalizar mi arreglo entró a mi habitación, traía una cajita de terciopelo negra, venía con una cara de niño travieso. A veces me pregunto con lo hermoso que es, ¿qué necesidad tiene de obligar mujeres? estoy más que segura, que muchas mujeres se lanzarían a sus pies. En fin, me miró y pidió que le diese la espalda. Escuche como abría el estuche. Sentí el frío del metal sobre mi cuello.

-A partir de hoy, eres mía hasta que yo decida lo contrario. Este es mi collar de posesión- me emocionó aun cuando no le quiero, jamás ni con Leylan tuve un collar. En nuestro Mundo es el signo más importante, como el matrimonio. Un amo no entrega un collar a cualquiera.

-Gracias, mi señor. Me siento muy emocionada- digo sinceramente, me miró al espejo y es hermoso. Es de Platino con un corazón con espinas alrededor, en el medio tiene una cerradura. Me muestra la llave que está en una cadena con él. Sólo podría quitármelo él, con esa llave.

Los hombres en la fiesta no dejan de admirarme, como sumisa no tengo permitido hablar o mirar a nadie sin su autorización. Mi amo me lleva a una habitación, comienzo a sentir temor de lo que planea para mí. Entramos a la habitación, la que en realidad es una oficina. En ella se encuentra el hombre con quien hablo en nuestra última sesión. Con él hay otros cinco hombres que me miran como un bistec a punto de devorar. Trago fuerte, comienzo a sudar frío. Mi amo me toma por la cintura, demostrando su posesión.

Comienza una reunión, que al final me entero que es para finiquitar la entrega del fin de semana, me mantengo callada y atenta a cada detalle. Finalizada la reunión, mi amo me dice que nos vamos, tiene otra sorpresa para mí, el tono como lo dice me vuelve asustar. Vamos de camino a un lugar desconocido, mientras más recorremos mis nervios vas siendo más evidente, al punto que mi amo, me toma las manos y con una sonrisa letal me dice «Tranquila».

Llegamos a una mansión victoriana, en una Hacienda. Nos espera un hombre que nos guía a una habitación, donde mi amo me ordena que me cambie, con lo que él dispuso para mí. Se retira, me cambió. Mi Traje son puras cadenas, unas cadenas forman un triángulo, ahí va mis senos. De ahí una cadena baja y pasa por el medio de mis labios vaginales y se conecta en mi espalda. Cuando creo que estoy lista, noto que me faltan dos mariposas, las cuales van en mis senos.

Finalizado mi arreglo espero por él. A los minutos llega por mí y se deleita mirándome. Luego me guía al sótano, entramos a una mazmorra, al fondo hay otro amo, con lo que supongo es un sumiso.

- Bien- dice el ruso- aquí está tu sorpresa, gatita. Le miro a la espera de una mejor explicación. Él me guía de la mano, hacia al frente del sumiso, Quien está atado de manos y pies a un cepo. Está totalmente desnudo. Cuando llegó adelante para ver su rostro, me aterro al reconocerlo y levantó mi rostro a la cara de mi amo, quien sonríe de placer...

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Hola mis amad@s Lectores

Aqui me tienen una semana más, hace unos días les dije que deseo hacer un maratón; pero no sé ¿que opinan?

Ta ta ra tán... ¿quien será? Espero sus comentarios esta semana, no sean fantasma, sus comentarios mantienen activa mi imaginación.

Quiero agradecer a dos hermosas chicas que esta semana tuvieron que aguantar mi pesadez y tenerme paciencia. Gracias por escucharme, por intentar solventar mis problemas aunque estén en la distancia. Las amoooooo, en especial a ti Mi Sumi.

Bueno ya saben como va este juego, si quieren maraton, quiero al menos cinco comentarios con su solicitud. Feliz semana!!!