Capítulo 2


Chris buscaba como loco a su hermana quien ya había aparecido en el salón, sin que ella lo supiera su entrada había sido como toda una estrella de Hollywood junto a Diego, ambos se veían esplendidos en la noche. Diego con un traje azul pastel con camisa blanca y un lazo negro, mientras que, Allison vestía un vestido rojo muy elegante, con su maquillaje resaltando sus ojos con matices oscuros y sus labios rojo sangre.

Aunque Allison aun le quedaba un año más en el colegio Diego hizo lo imposible para que ella pudiera asistir al baile de su graduación. Ella todavía no se había enterado lo que Diego y Adams eran. Y aunque Chris quería decirle sabía que él no era quien para decírselo, debía ser Diego quien lo hiciera.

La vida con Adams era fenomenal para Chris, el estar a cargo junto con él sobre la manada, le hacía sentir muy bien, aunque sus padres habían negado su existencia pues no se habían comunicado desde muchos meses atrás, Chris había asumido eso, Allison era quien decía que no se veían tan bien y que se habían vuelto muchos más sobreprotectores con ella. Lo cual le frustraba, pues sabía que todo aquello había ocurrido desde que Chris había salido de la casa.

Chris nuevamente se había perdido de Adams, sin querer, intentando buscar a Allison quien se le desaparecía precisamente cuando necesitaba hablar con Diego, él tenía que preguntarle sobre cómo funciona el emparejamiento en los vampiros, él suponía que no debía ser igual que con los hombres lobos.

Salió por el pasillo, sabía que por haber salido de la vista de Adams este iba a darles represalias, era increíble ver todo el esfuerzo que hacía Adams por controlarse ante la idea de nalguearle cuando hacía algo que no le gustaba, y entre ellas era alejarse demasiado de él. Pasaba a través de los casilleros, todo estaba muy solo al final del pasillo, pero logró ver una sombra.

―¿Allison? Deja de esconderte ando buscándote desde hace mucho rato, necesito hablar con Diego sé que quizás quieran tener privacidad pero es urgente.

Chris dobló a su derecha y el pasillo estaba completamente oscuro, un aire frío sintió en todo su cuerpo erizando los vellos de su piel, ante aquello no dudo en volverse para regresar, pero al hacerlo unos ojos amarillos penetraron su mente, seguido de ello solo apreció un fuerte dolor sobre su rostro lo que le hizo gritar de miedo. Llevó sus manos hacia el rostro ardiente y punzante donde sintió un líquido viscoso que salía sobre su cara inundándole, solo veía rojo. Fue entonces cuando aquel liquido cayó en su boca que sintió el sabor a oxido ¡Sangre! Seguido de ello un fuerte golpe sobre su garganta le hizo caer de inmediato al suelo llevo sus manos sobre su cuello no podía pronunciar ninguna palabra, ahora la cantidad de sangre que salía de su cuello era muy brusco, pudo sentir como su cuerpo comenzaba a perder fuerza para llenar de oscuridad sus ojos mientras escuchaba:

―¡Chris! Cielo.

*

Adams comenzaba a desesperarse mientras buscaba a Chris por todo el salón, la cantidad de personas dificultaba su sentido del olfato no entendía como este podía escapar de todos sus sentidos, comenzaba a odiar a Allison por desaparecerse cada segundo. Adams sabía que ella buscaba algo de privacidad olía a excitación desde que entró como una súper estrella en el salón.

Ver a Kai había puesto en alerta a Adams aunque él sabía que ahora Chris le pertenecía no le gustaba recordar lo que ese sujeto había tenido, primero que él y aunque era algo tan insignificante como dormir sin sexo, la sola idea de que hubo tal intimidad, como para estar abrazado junto a él durante toda la noche, le hacía perder la cordura. Adams sin embargo notaba cierto interés en Sam al parecer era real la forma en como ellos hablaban en ese rincón le hacía pensar que todo era real.

Adams caminaba cerca de los baños cuando reconoce un olor, era el de Allison, le siguió hasta conducirlo a los lockers de los chicos. Retrocedió al ver la imagen formada en la oscuridad mientras un rugido escuchó.

―¡Rayos! Adams no sabes lo que es tener privacidad ―Diego murmuro con amargura.

Allison suspiro un poco enfadada y avergonzada.

―Lo siento chicos, no quise... solo busco a Chris, él estaba buscándole y quise entrar aquí a ver si estaba.

―¡Como vez no está aquí! ―respondió aún obstinado Diego.

―Sí, lo siento.

―¿Cuánto tiempo tiene que le perdiste? ―preguntó Allison ya un poco más relajada.

―Quizás unos quince minutos, pero no se preocupen yo le buscare y le diré que no le moleste.

―Tranquilo Adams no es tu culpa, tú solo buscabas a mi hermano, esto solo nos enseña a buscar sitios adecuados para nuestras necesidades ¿Verdad Diego?.

Diego no respondió, algo que causó un poco de gracia a Adams, sabía que estaba furioso.

Un fuerte olor a sangre comenzó a inundar el aire.

―¿Qué es eso? ―preguntó Diego inhalando fuertemente, intentando controlar su deseo.

Adams se inquietó. Ese olor era de Chris ¡Lo sabía! Horror había en su rostro, comenzó a temblar y Diego corrió hasta él.

―Oye tranquilo vale, solo vayamos a ver qué es.

Adams se sentía aturdido ante aquello.

―¿Qué sucede Diego? ¿Qué les pasa? Yo no logró oler nada.

―Allison solo espera aquí ―dijo Diego de forma muy calmada.

Diego impulsó a Adams, a moverse de su estado de Shock y caminaron en dirección al olor; atravesaron los pasillos y sin tiempo que perder corrieron a una velocidad sobrehumana, aprovechando que no había nadie que les observara.

Al llegar ven a un chico con capucha sobre el cuerpo de Chris. Adams perdió el control y se trasformó en un enorme lobo de pelaje oscuro e inmenso, y arremetió contra aquel sujeto, un gruñido parecido a felino hizo temblar a Diego, éste se acercó a Chris quien estaba pálido, mordió su muñeca intentado que él bebiera pero al tocarle, una punzada entró en su cuerpo, estaba frío y sin pulso, por lo que no podía beber su sangre.

―¿Qué ha sucedido?.

Diego se vuelve hacia la voz ronca. Era Kai quien le miraba confundido, observó a Chris en el suelo y sus ojos se abrieron con más fuerza, Diego sabía que Kai también podía sentir que estaba muerto.

―¿Quién lo ha hecho?.

―No lo sé, solo vimos a un sujeto sobre su cuerpo alimentándose de él, haciendo que Adams perdiera el control, se ha transformado, es mejor que vayas a detenerle antes de que alguien le vea y las cosas empeoren.

Kai asiente y con la misma velocidad sobrehumana desaparece.

Diego estaba nervioso por cada minuto que pasaba, y sin rastro de Kai o Adams, pero se levantó inmediatamente cuando sintió el olor de Allison acercarse.

―Allison no te acerques ―gritó desde el pasillo.

―¿Diego? ¿Qué ocurre? Ya han pasado más de 30 minutos desde que se fueron del salón ¿Todo está bien?.

―Cariño lo estará pero prométeme que no vas a acercarte más, solo necesito eso de ti.

Diego se estremeció y se levantó bruscamente al ver la silueta que observaba en dirección a Chris con una mano sobre su boca, una expresión de horror había en su rostro seguido de un grito:

―¡Chris! ¿Está muerto?.

Diego asintió con pesar.

Allison cayó sobre el cuerpo de Chris desesperada con lágrimas en los ojos ―¿Qué ha ocurrido? ¿Quién ha hecho esto?.

―No lo sé, vimos a un sujeto sobre él y Adams le ha perseguido.

―¿Adams? ¡Está loco! Puede estar en peligro...

―Él escapó... ―dijo casi sin fuerzas Adams, quien caminaba con pisadas lentas y arrastradas hacia ellos. Se encontraba desnudo, pero al parecer a Allison no le preocupó pues no mencionó nada.

Diego se levantó sin mencionar nada, quería decirle que lo lamentaba pero sentía que aquello iba hacer peor, sabía que debía buscarle ropa, apareció Kai y le dijo:

―Cuida de ellos, debo buscarle ropa al chico antes que lleguen las ambulancias, lo siento mucho.

Kai asintió, su rostro había envejecido un poco por la pena.

Adams cayó junto a Chris, un sonido de un gemido de dolor no humano salió de su garganta sin poder evitarlo, Allison solo le miraba un poco confundida. Adams tomó el cuerpo de Chris frío y lo coloco sobre su pecho mientras lloraba, un aullido salió sin contención y Kai se sobresaltó, si no hacía algo iban a descubrir lo que pasó, Adams estaba haciendo que esto fuera más fácil.

Allison retrocedió ante aquellos sonidos de un tipo de animal y Kai le dijo:

―Luego se te explicara, ahora necesito que mantengas la calma.

―¿Él como hizo eso? Y mi hermano está muerto, está muy frio... yo...

En segundos Kai sujetó a Allison, quien se desplomaba al suelo, se había desmayado. Diego llegó, al ver a Allison sobre los brazos de Kai corrió hasta ella.

―¿Qué sucedió?.

―Se ha desmayado, esto es mucho para ella, creo que vas a tener que explicarle ciertas cosas que acaba de ver y escuchar, Adams esta inconsolable.

Diego asintió, arrojó la ropa hacia Adams quien ignoro por completo y tomó en sus brazo a Allison para sacarla del lugar.

Adams acariciaba el rostro del cuerpo inerte de su amante, besaba su rostro mientras sus lágrimas caían sobre Chris. ―Perdóname por no protegerte, es mi culpa bebé, prometo no dejarte de nuevo solo no me dejes, regresa Chris.

―Adams... Creo que él...

―No se te ocurra decirme que está muerto, porque no lo está ―agregó Adams con un rugido suave y amenazante haciendo callar a Kai.

Kai y Adams callaron por completo al sentir una pulsación suave, luego otra, para convertirse en un ritmo débil y constante que buscaba fuerza para continuar. Adams mordió su muñeca y la colocó en los labios de Chris, este por instinto comenzó a succionar tomando color su rostro y fuerza su corazón.

―¿Cómo ha sido posible? Al menos que...

Adams observó a Kai y preguntó:

―¿A qué te refieres Kai? Habla de una vez.

―¿Qué fue lo que le atacó?.

―No lo sé, pero era un felino, sus gruñidos lo delataban, haré pagar a ese mal nacido, así sea lo último que haga, no solo por invadir nuestras tierras, sino por atacar a mi pareja ¡Un humano!.

―Creo que deberás evaluar ahora esa definición, creo que Chris ya no es humano, Adams...

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