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Se escucharon fuegos artificiales reventar en el cielo. Las risas de los transeúntes, el grito de las alertas de los puestos. Los músicos empezaron a llenar de melodías y música el centro, donde se podía ver las hermosas decoraciones hechas por la gente de Yummeng, personas de todas partes venían a ver aquel espectáculo que se da cada año. Los bailarines mostraban sus danzas al ritmo que los músicos tocaban sus instrumentos, contagiando la alegría y la emoción del momento.
Se encontraba comiendo semillas de Loto en un restaurante mientras veía como se desarrollaba el festival. Las semillas de Loto eran muy dulces y deliciosas, perfectas para darse un simple gusto mientras esperaba. Había mucha gente, cada año suele haber más gente que el anterior. Ha pesar de que el festival pudo haberse cancelado luego de dos días de lluvias intensas, pero hoy durante la madrugada dejo de llover. No hubo desbordes, ni daños mayores, la gente del pueblo limpio las calles tanto como pudieron, aún así hay algunas calles que están en malas condiciones por las lluvias, tuvo que mandar algunos discípulos para ayudar.
Llego un mesero quien le entrego la bebida que había pedido, por más que quisiera beber algo de alcohol, no podía. Esa era una de las desventajas de estar embarazado, pero si eso significaba que nacerían sanos estaba bien. Aunque estaba preocupado también, durante esos meses que no sabía de su estado había estado bebiendo alcohol y no se ha estado cuidando. Durmiendo pocas horas, a veces ni comía, y otras veces se había puesto en peligro varias veces.
- Veo que en ninguno de mis embarazos he respetado aquellas indicaciones - Soltó un bufido divertido, cuando esperaba a Jiang Yi Hua había un guerra, y el era un joven heredero que recientemente había perdido a su secta y su familia. También tenía que ayudar y guiar tropas para atacar a las oficinas de los Wens, reconstruir su secta. No había tiempo de descansos.
A pesar de que Lan Huan estuvo con el todo el tiempo, lo ayudo y apoyo. Fue su único Pilar en esos momentos tan difíciles. Así que no era una buena época para tener un hijo, menos cuando su estado mental estaba tan hecho mierda como lo estaba aquel entonces pero...
Sus ojos fueron cubiertos por un par de manos que llevaba vendajes puestos - ¿Quien soy, A-Cheng? - el mencionado soltó un bufido terminando de comer la semilla de loto que estaba en su mano.
- Eres el único idiota que me llama de esa manera, Lan Huan - las manos destaparon sus ojos.
- ¡Adivinaste! - exclamo el Lan sentándose al otro extremo de la mesa, con aquella sonrisa que llegaba hasta sus ojos - Te extrañe, A-Cheng -
- Me mandas una carta cinco veces a la semana - Contestó - Ambos hemos estado muy ocupados con nuestro respectivo trabajo, así que no te quejes -
- Pero A-Cheng- No pudo decir nada más cuando fue callado con una semilla de Loto que su esposo le metió a la boca - ¡Mm! Está rico - cojio otra semilla de su tazón para metérselo a la boca - Está bien, está bien - Se calló para luego mirar a su alrededor - ¿Y A-Hua? ¿No está contigo? Quería verlo -
- No - respondió sacando un pedazo de plata para dejarla en la mesa, Lan Xichen tomo un puñado de semillas para luego seguir a su esposo. Ambos líderes salieron del restaurante y caminaron por las calles de Yummeng - Está cumpliendo con su castigo -
- ¿Castigo? Ha cierto me contaste, pero pensé que harías una excepción para hoy, sabes lo mucho que le gustan los festivales a esos tres - ante su comentario, Jiang Cheng lo miro mal y se cruzó de brazos.
- Pues si realmente quiere venir debe cumplir con el castigo de hoy, ¿Como piensan ser cultivadores si comenten errores tan simples como el olvidarse unas insignificantes señales? - chasqueo la lengua en tan solo pensar que hubiera pasado si hubiera llegado unos minutos tarde. Lan Xichen mantuvo su sonrisa mientras observaba la preocupación de su esposo, no ha cambiado nada, a pesar de que sus palabras suenen algo bruscas siempre se ha preocupado por sus seres queridos.
- ¿Qué es tan divertido para que tengas esa estúpida sonrisa? - no iba admitir que ha pesar de conocerse y convivido años, lo sigue poniendo nervioso cuando se le queda mirando tanto tiempo de esa forma.
- Es que A-Cheng se ve realmente hermoso hoy, cada día que pasa la belleza de A-Cheng se hace incomparable -
-¿¡Ah!? ¡Imbécil! ¿Te crees muy gracioso por estar diciendo esas cosas como esa tan a ligera? - Zidian empezaba a irradiar chispas para que su amenaza fuera más eficiente. Comenzando a atacar con Zidian a su esposo mientras esté esquivaba cada uno de sus ataques, y continuaba dándole elogios, lo que provocaba que Jiang Cheng siguiera atacando. Algunos de los pobladores miraban la escena de la pareja divertidos, llegas aún punto en donde te acostumbras a ese par. Aún así es muy hermoso ver qué su querido líder se divirtiera tanto.
Ya dejando el atacar y esquivar aún lado, continuaron caminando por las calles bulliciosas - Así que, ¿así están las cosas ahora? Enserio creí que se llevarían bien - suspiro un poco decepcionado, mirando de reojo a su pareja - ¿Planeas intervenir? -
- No, esto es un asunto de esos cuatros - Respondió - Si ellos quieren solucionar las cosas por su cuenta, que lo hagan. Después de todo esto es como una prueba para ellos-
- ¿Ver si la confianza puede ser superior a unas simples palabras? No les estás poniendo fácil, A-Cheng - Xichen miro de reojo a su pareja, quien se mordía la uña. Esto también le preocupaba.
- Ellos son los que no nos los colocan fácil - suspiro cansado.
- Solamente nos queda guiarlos, A-Cheng - El mencionado chasqueo la lengua - Pero según lo que me contaste, puede que la situación termine de una manera distinta - confiaba en su intuición, y solamente le decía que es probable que las cosas no caben tan mal como lo pintan.
- Demonios, esos niños son un dolor de cabeza - se quejó, para luego suspirar - Bueno, después de todo Nuestro hijo no va a ser un mal líder. Ha ido progresando sin que nos diéramos cuenta - miro las nubes unos momentos, como suele pasar el tiempo.
- Es tu hijo después de todo, le hemos enseñado muy bien, A-Cheng. No tienes de que preocuparte - La sonrisa que le dio su esposo simplemente le hizo quedarse callado. Desviando la mirada avergonzado y sonriendo ligeramente, es momento de decirle, se motivo.
- ¡Ay! ¡Eso dolió, zizhen! - se quejó sobándose la cabeza luego del gran golpe que recibió.
- Pues entonces deja de holgazanear y ayúdanos a terminar esto de una vez, ¡Nos perderemos el festival, idiota! - volvió a golpear la cabeza de Jingyi con la escoba.
- ¡No estoy holgazaneando! ¡Y ya deja de pegarme, idiota! - agarró el trapeador y ambos chicos empezaron a bloquear los ataques del otro, empezando así una de sus tantas peleas, haciendo que uno de los espectadores empiece a perder la paciencia.
- ¡Oigan! ¡Ya dejen de pelear, par de delincuentes! - frustrado contó hasta diez, no funciono - Se supone que soy quien los vigila, ni siquiera debería estar aquí ¡Agh, demonios! Lan Sizhui, ¿Me podrías ayudar a calmar a estos dos? -
El mencionado siguió trabajando en lo suyo, ignorando el hecho que probablemente debería intervenir, antes que la pelea se intensifique y tengan mas trabajo por hacer, pero sabía perfectamente que no llegarían a nada así que mejor avanzar por su parte - ¡Lan Sizhui! -
- Deja que simplemente se maten - fue su simple respuesta - Solamente falta limpiar el campo de entrenamiento, vamos -
-¿¡Ah!? ¡¿Así nomás!? - exclamó desentendido, el pobre de Yue sentía que en cualquier momento sufriría de algún tipo de dolor de cabeza si seguía juntándose con el ese grupo de inútiles.
- Te llegas a acostumbrar, además solo sería una pérdida de tiempo. Mejor avanzar y contarle a Jiujiu a después, al final ellos son los perjudicados - Ante la mención del líder Jiang, tanto Lan como Jiang dejaron sus peleas en el olvido.
- Cierto, solo nos falta el campo de entrenamiento - afirmó Jingyi nervioso mirando hacia la ventana, como diciendo "Es un hermoso día para limpiar".
- Si, si, si. Campo de entrenamiento, vamos - concordó Zizhen y como roedores salieron corriendo a una velocidad inimaginable hacia dirección al campo de entrenamiento.
-...- soltó un suspiro pesado, negando con la cabeza, ¿Es que son imbéciles o se hacen? - Aún así, no sé a qué por qué tan apurados en ir a aquel festival, si se celebrará por otros dos días más -
Sizhui se detuvo de barrer mientras pensaba en su respuesta - Pues, normalmente los festivales suelen ser muy divertidos, los juegos, la música, la comida y las personas. Siempre hay algo nuevo que descubrir - No pudo evitar recordar cuando había sido la primera vez que estuvo en un festival, sonrió con anhelo.
Yue continuaba limpiando mientras oía atentamente las palabras del Lan, Sizhui siempre ha sido una persona amable y justa, incluso a la hora de hablar. Es casi imposible que alguien pudiera llegar a odiarlo. Suele ser demasiado solidario y distante cuando se lo necesita.
- A veces los festivales nos recuerda ciertas cosas. La primera vez que fui a uno era un cachorro muy pequeño, el festival era tan grande como los que hay en Yummeng, pero eso no significaba que fuera menos fantástico - su mirada se quedó clavada en el cielo despejado. Otras de las cosas en las que destaca es que nunca suele hablar de sus tiempos antes de formar a la secta Lan, ya muchos desconocían el hecho que aquellos gemelos antes no portaban el apellido Lan (Solo los que guardaban resentimientos, recordaban los pecados)
Pero Yue sabía, pero nunca preguntó. Nunca había sentido la necesidad de hacerlo, era el pasado después de todo. El pasado...
- Los festivales siempre me parecieron una pérdida de tiempo - llamó la atención del Lan - pero es por qué fui abandonado durante uno, no sabía el por qué, pero ahí estaba varado y solo. Hasta que mi maestro me encontró - para luego estar solo de nuevo.
Sintió una mano en su hombro y vio la sonrisa calmada de Lan Sizhui - No necesariamente los recuerdos tienen que ser felices, pero eso no significa que podamos crear nuevos recuerdos, no estás solo - Yue se quedó parado con los ojos abiertos. ¿Crear nuevos recuerdos?
- ¡Oigan! ¡Terminamos de limpiar el campo de entrenamiento vengan rápido si quieren ir al festival! - Se oyó el grito de Zizhen llamando la atención de Yue, volviendo a mirar a Sizhui por unos segundos, este asintió motivandolo a ir donde estaba el Jiang.
- Ve, los alcanzó en un rato - Sin más que decir su amigo dejo el trapo que tenía y se fue a alcanzar a Jiang Zizhen, quien lo estaba esperando.
Sizhui miro la puerta y luego el salón, ya habían terminado, finalmente. El castigo de hoy se dedicaba a limpiar todo el muelle de Loto, desde los campos de entrenamiento hasta el área médica. Sus amigos ya habían terminado su trabajo, solo faltaba el.
Soltó un suspiro mirando a su alrededor - No me gusta mentir, tendré que copiar las reglas por dos palillos de incienso - se castigo a si mismo - Bien, entonces solo faltaría en realidad el muelle, andando - se motivo asi mismo, saliendo del salón de conferencias dirigiéndose hacia el muelle mientras tarareaba una canción tranquila y relajante.
No había muchos discípulos, normalmente la mayoría prefería relajarse un rato en el festival. Pero para que el Muelle de Loto no esté desprotegido se toman turnos los discípulos mayores, así podrán disfrutar del festival, aunque sea, un rato.
Siguió caminando de manera tranquila, mientras recordaba los dos últimos días. Era inevitable que el joven maestro Jin se enterará de su presencia, habían hecho de todo el primer día, pero fue inevitable que incluso Jiujiu guardara el secreto, ya que es el menos que quería que se trataran como unos simples extraños. Esperaban una reacción violenta en aquel almuerzo, pero todo lo que recibieron fue silencio. Tanto silencio que Sizhui por una vez pidió que aquel joven maestro le gritara y lo insultara en vez de tener al asfixiante silencio.
En la cena Jin Ling pidió la cena para su habitación, y no supo que pensar sobre eso, además de aquella conversado en que fue la tercera rueda. De todos modos no importaba debía terminar su trabajo para luego ir a reunirse con los demás no quería que Jingyi viniera y se quedará con el, su hermano debía divertirse de vez en cuando.
- Finalmente te encontré - Aquella voz - Realmente eres difícil encontrar cuando se te da la gana - su mandíbula se tenso y no pudo evitar sentir su garganta secarse.
Saliendo un poco de su sorpresa hizo una reverencia al joven al frente suyo - Joven maestro Jin - te trato de parecer normal, a pesar de que el Jin siguiera usando aquellas vendas sobre sus ojos, podía sentir el ambiente tenso, muy tenso.
- Quiero hablar contigo - soltó simplemente, el Can estaba siendo de guía a su amo - No te preocupes no irrumpire en tu trabajo, yo te sigo, podemos hablar mientras cumples con tu castigo -
Dicho de manera simple, fue el guía momentánea. Guiando al joven maestro hacia el muelle de Loto, su cabeza no sabía que pensar al respecto ¿De que querrá hablar el joven maestro Jin con él? Simplemente no lo entendía.
El tintineo de los cascabeles se volvió a escuchar, había un desfile en donde las mujeres movían sus manos de tal manera como si estuvieran dibujando la tranquilidad del mar y la sinfónica del viento.
- ¡Está rico! - escucho a su pareja expresar como un cachorro alegre con su dulce, se habían detenido a comer en un puesto, trato de simular que había visto algo que le gustaba. Los antojos que tenía hasta ahora no habían variado de semillas de Loto o nísperos, pero recientemente tiene antojo de la sopa de raíz de loto de su hermana, eso le suele deprimir, la última vez que su hermana preparo aquella comida fue cuando murió su esposo, Jin Zixuan, y Wei Wuxian y su familia desaparecieron.
- ¡Wanyin! - se sobresalto en su asiento, volteó a ver a su pareja quien tenía una mirada preocupada - ¿Está todo bien? -
- S-si, solamente me perdí en mis pensamientos... - contestó desviando la mirada, aunque sabía perfectamente que Lan Huan no se tragaria eso, pero por respeto no preguntaría hasta que viera que estuviera listo. Así de respetuoso suele ser así esposo.
Pero en los momentos cuando no sabe de si hablar o no, solamente toma su mano y lo abraza, como lo hace ahora. Aspiro su aroma a incienso, es el que amaba tanto, aunque no expresará en voz alta.
Lan Xichen abrazo a su pareja, sabe que su esposo no está bien, era probable que los recuerdos lo estaban invadiendo. Lo entendía, miro el festival, tenía una idea.
- ¿Que haces? - escucho su pregunta cuando se separaron, lo tomo del brazo y se dirigieron hacia donde estaban los bailarines, la música era más fuerte, tanto bailarines como las personas bailaban al ritmo de la música.
- ¡Líder de secta! - se escuchó como la gente saludaba a su líder - Venga a bailar, Vamos -
Jiang Cheng estaba confundido, ¿Por su esposo lo llevó hasta ahí? Se volteó hacia a Lan Xichen para decirle algo, pero calló cuando esté le hizo una reverencia, invitándolo a bailar. Se sonrojo, ¿Será imbécil? Ha pasado tiempo, nisiquiera sabe si.
- A- Cheng, ¿Me concedes está pieza? - después lo mataría todo lo quería, así que mejor tomó su mano, no quería pasar más vergüenza. Pero se sorprendió más cuando las personas estallaron de alegría, Habían estado en silencio esperando que su líder aceptara.
Los músicos tocaron una de sus mejores canciones, la gente animada lanzaron pétalos de flores desde sus balcones provocando una hermosa vista para cualquiera. La pareja de líderes bailaba a sinfónica y elegancia, los pintores hacían su mejor esfuerzo para que su pintura transmitiera aquel amor, aunque sabían que ninguna pintura se compraría con la realidad.
Jiang Cheng miro a los ojos a su esposo, tan brillantes y profundos. Desde que descubrió que aquellos ojos podían expresar más que aquella sonrisa, pudo descubrir cientos de cosas. Cosas que hasta ahora le sorprenden.
El primer baile que tuvieron fue durante sus estudios en Gusu Lan, recién se había presentado como Omega y hacer aquello era una tradición. Pero no quería bailar con ningún Alfa, se sentía agobiado ante la existencia de los que querían invitarlo, sabía que solamente era para tener una buena alianza con su secta.
Así que se escondió, se escondió tan bien que ni su hermano lo pudo encontrar, pero Xichen lo encontró en el área que ahora era donde se encontraba el pequeño lago de loto. Nadie los vio aquella noche, había sido simple, le extendió su mano y el la acepto. No recordaba por que había aceptado, en ese entonces ambos habían coincidido en varias ocasiones al ser herederos. Pero desde un inicio confiaba en Lan Xichen, ya que nunca presentó alguna mala intención.
Escucho una tranquila risa de parte de su Alfa - ¿De nuevo perdido en tus pensamientos? - le cuestionó mientras lo alzaba en sus brazos, no se había fijado que los demás que bailaban los imitaron.
- I-idiota - soltó sorprendido y avergonzado, después de esto se aseguraría de dejarlo inconciente colgado de un árbol boca abajo.
Pero al mirar esos ojos solo pudo ver cariño. Esa mirada que siempre era para el, sonrió, por un momento ya no escuchaba nada solamente eran ellos dos. Así cuando la gente del pueblo lanzó otra lluvia de pétalos de acercó al oído de Lan Xichen y le dijo.
"Estoy embarazado"
Cuando la música se estaba por acabar pudo ver la cara del Lan iluminarse y hasta retener unas lágrimas de felicidad. Idiota, no se suponía que debías reaccionar así, una vez lo bajo lo abrasó con todas sus fuerzas susurran un...
"Gracias"
Mientras que la gente aplaudía por el evento. Entre la gente estaban el hijo de los líderes y sus dos amigos, los tres habían llegado para encontrarse con los mayores hacía poco y se quedaron esperando. Dos del grupo sacaron de sus bolsillos una piedra de oro y se lo dieron a Yue, ya que había ganado la apuesta.
- Tienes unos padres increíbles, A-Hua - comento el practicante, maravillado con la escena frente suyo - Estoy seguro que serás un buen hermano -
El Jiang le sonrió - Gracias, eso espero -
Aún lado estaba Jingyi rodando los ojos, siempre era el mal tercio cuando estaba con esos dos. Se metió otro caramelo a la boca viendo las flores caer logro atrapar una con su mano y la admiró. Si bueno, entonces el se encargará de ser el primo genial de la familia.
Se preguntaba ¿Por qué su hermano se tarda demasiado? Esperaba que llegará antes de encender las linternas, siempre lo hacían juntos. No era idiota sabía que les había mentido para que fueran a divertirse, siempre era así, pero sabía también que no ganaría nada con lo terco que suele ser A-Yuan.
Miro al cielo, tan claro y hermoso. Bueno que se puede hacer así lo quiere, el también tenía su lado terco, por algo eran hermanos. Solo esperaba que su conversación con la joven amante no esté llendo tan mal.
No sabía exactamente como sentirse ahora, hacia rato que estaban en un silencio muy, MUY, incómodo. El joven maestro Jin estaba sentado en el muelle mientras el estaba limpiando, a pesar de que su atención estaba en el lago podía sentirla sobre él.
Trato de respirar y calmarse, dijo que quería hablar pero ¿De que exactamente tenían que hablar? Por más que trataba de pensar nada se le ocurría. Mejor solamente se mantenía ahí, a pesar de que sus fans de preguntar eran muchas.
- Si quieres preguntar, hazlo - aquello le sorprendió, detuvo sus movimientos para mirar la espalda del joven tres años menor de el ¿Por qué de pronto se le tan maduro y con experiencia?
- L-lo lamento, Joven maestro Jin. Pero no tengo ninguna pregunta hacia usted - De hecho tenía unas cuantas, pero no quería incomodar al joven Jin, sabía perfectamente lo que sentía y opinaba sobre el.
- Se que estuviste presente aquella noche - soltó de repente.
-¿Eh-h? - ¿De cual noche está hablando?
- Se que te confundí con Yi Hua y escuchaste todo aquella noche - su vista se detuvo en el piso, así que lo sabe ¿Qué Pensará? ¿Que es un chismoso?
- Lamento en meterme en cosas que no me corresponden, Joven Jin - su voz sonó avergonzada, pero su mirada estaba decaída, seguramente ahora lo odiara más de lo que hacía.
Con intenciones de irse dio un paso atrás, pero la voz del joven lo detuvo - ¿Quien te ha dicho que te puedes ir? Maldición, ¿Por qué continuas comportándote así? Eso solo provoca que te detecte aún más -
-L-lo siento—
- ¡Ya baste de "lo siento" o "Lo lamento"! ¡Ni siquiera tienes por qué disculparte! ¡Fui yo quien te confundió con otra persona! ¡Así que fue mi error! ¡¿Por qué quieres tomar una culpa innecesaria?! ¡Solo aceptala cuando tus manos se hayan manchado de sangre inocente! Tsk - se cruzó de brazos desviando la mirada, mientras Sizhui se le quedó viendo asombrado - Eres un dolor de cabeza...-
- Lo siento - ante esas palabras Sizhui levantó la mirada del piso - Lo siento, por todo, por mi culpa te hice para un mal rato -
- Joven Jin, ¡Ah! N-no es necesario sus-
- Déjame terminar, maldición- chasqueo la lengua, Sizhui calló de inmediato, no quería hacerlo enojar - Ya hablo con tu hermano, para que sepas, ese chico ¿Acaso no puede escuchar primero antes de sacar conclusiones? Me pasé casi un incienso tratando de mantener una conversación con el, si por mí fuera le rompería las piernas -
Sizhui soltó un suspiro de alivio, por poco creyó que ambos habían peleado, pero ¿Por qué Jingyi no le contó nada de esto? Normalmente suele quejarse mayormente cuando se trataba del Joven Jin.
- No pudo que me perdones me lo merezco, ahora sí me disculpas me tengo que reunir con Jiujiu - trato de salir lo más rápido posible, ya de por si pedir disculpas le resultaba imposible, tuvo que retener todo su orgullo para hablarle al Lan.
Con toda intención de irse paso por al lado del Lan y escucho lo siguiente - Lan Sizhui -
-¿E-eh? - estaba confundido ¿Por qué le dice su nombre de cortesía?
- No tuvimos la oportunidad de presentarnos correctamente antes - aquella confesión lo avergonzó un poco, era verdad y a la vez no. Ya que aún recuerda cuando lo veía de lejos durante su estadía en Yummeng.
- Y-ya veo - acepto - Jin Ling, estoy seguro que Jiang Yi Hua me menciona mucho así que no te hagas el tonto - trato de ocultar su nerviosismo - B-bueno, adiós -
Sizhui solo lo vio irse con una leve sonrisa - Si, nos vemos - Le alegraba que por lo menos pudieran arreglar las cosas aunque sea un poco.
Tiempo Después
Tiempo ha pasado, y se ha dado inicio a la Conferencia de Discusión de Lanling Jin. Hasta ahora todos los líderes de sectas importantes y pequeñas han asistido, la secta Jin como siempre demostrandoles todo el dinero que tienen o que pueden llegar a tener.
En estos momentos se hallaban hablando de cualquier cosa luego de haber tocado temas importantes sobre el mundo de la cultivación. Esta era la primera Conferencia en la que los Gemelos Lan asistían, y a pesar de que sentía las miradas sobre ellos, simplemente continuaron en calma dando imagen a su secta. Además Zizhen estuvo todo el tiempo con ellos apoyándolos y apoyándolos, debían admitir que al principio no estaban tan acostumbrados al todo el oro que la secta Jin usaban.
- ¡Líder de la secta Jiang! - se escucho por todo el lugar el llamado del líder de la secta Yao. Jiang Wanyin soltó un suspiro y miro al líder de la secta menor - ¿Es cierto que está en cinta? ¡Felicidades! -
- Mm, gracias - entrecerró los ojos sabiendo que no solamente había ido para eso, va a cumplir cuatro meses y era sorprendente que aún no se le notará, algunos pensaban que era una ese hecho, pero con el aura hostil que el Alfa de la secta Jiang les mostraba era obvio que no querían ser suicidas.
- Pero, si es así no debería estar aquí, debe cuidar su condición en ves de venir a conferencias de discusión que solamente causan estrés - Hasta ahora las demás sectas estaban al tanto de las acciones del líder de la secta Yao, casi aguantando la respiración se encontraban.
- Agradezco su preocupación, pero por el momento debo encargarme de asuntos que corresponde como Líder de Secta, así que tomo medidas - Hasta ahora su discípulo principal se ha encargado de ayudarlo en algunas cosas, pero él como líder debe por lo menos asistir a estas reuniones mientras puede, antes que el idiota que tiene como Alfa se ponga en modo sobreprotector.
- Aún así tengo entendido que usted es un Omega defectuoso - ya valió - En si usted carece de un cuerpo fértil y que sufre de complicaciones, después de todo su lobo se presentó a último momento, pienso que debería cuidarse mejor y quedarse en casa a esperar, alejarse de todas las preocupaciones, como Omega que es -
Los gemelos Lan se miraron entre sí para luego sujetar cada uno de uno de los brazos de su líder, quien soltaba una aura muy densa que hacía que todo Omega se alejaran espantados, incluso los betas y Alfas mantenieron su distancia.
- En serio quiere morir... - murmuró Zizhen, quien estaba hablando hace unos segundo con el Maestro Nie, quien oculto la mitad de su cara con el abanico mientras asentía.
- No por quien preocuparme más, si por el líder Yao o por el suelo - comento Nie Mingjue tomando otra tasa de alcohol, y es que si de quien menos deberías preocuparte era de Lan Xichen, Jiang Wanyin había sacado a Zidian y se veía muy, pero muy molesto.
¿Y como no? Si técnicamente le están diciendo que solamente es débil por ser un Omega, y encima le estaban sacando en cara el por qué de su debilidad. Por favor, si ni su Alfa puede salvarse de Zidian ¿Por qué una simple cucaracha, podría?
Jiang Wanyin se sentó al lado de su esposo, quien tenía una sonrisa de satisfacción, casi hasta se le podía ver a su lobo moviendo su cola llena de orgullo. Ambos comenzaron a hablar de cosas triviales entre ellos ignorando las miradas asustadas y llenas de miedo de algunos líderes y cultivadores. También ignorando el hecho de que una parte del gran salón estaba destrozado y aún se veían destellos morados, junto a una persona muy, pero muy mal herida siendo llevada por los sirvientes de la secta Jin a sala médica.
Jingyi soltó un suspiro mientras miraba al su alrededor, debía admitir que si fue divertido ver a aún líder de secta doblegarse y pedir clemencia o amenazar en vano a su tío, vaya de verdad su tío era alguien de admirar. Con aquello en mente siguió comiendo sus alitas, que a decir verdad están muy ricas, hasta que sintió un olor raro en el aire.
Sizhui miro a su hermano extrañado - ¿Jingyi? ¿Sucede algo? -
- Sizhui ¿No sientes a caso un olor a Canela? - ante aquella pregunta Sizhui se puso a leer también el aire, pero negó - Ya veo, seguramente puede ser mi imaginación -
- Probablemente viste un postre que se te antojo y tu estómago pide por ello - sugirió su hermano a lo que asintió, puede que haya sido eso.
- Como sea, por ahora quiero disfrutar estas alitas de pollo - Aún habiendo dicho eso aquel olor, seguía constante en el aire
¿Enserio era el único en notarlo?
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