Capítulo 16: frágil corazón

Narro yo

La mañana había transcurrido sin ningún problema, tranquila y amistosa con un lindo clima, perfecto para ir a la cancha y pasar horas y horas detrás de un balón, pero ese no era el pensamiento primordial de jun misugi...

Estas seguro que no quieres ir ?? Todos iremos - comentaba matsuyama en su último intento de convencerlo.

No, de verdad, estoy algo cansado, no quiero agitarme mucho, ya sabes - aclaró llevando su mano al pecho, cerca de su corazón.

Entiendo, cualquier cosa llama, no olvides tus medicinas y descansa - le dijo firme.

Si mamá - le sonrió esquivando el golpe de mano que iba hacia su cabeza.

Gracioso - matsuyama le sacó la lengua y se retiró de la habitación, misugi se quedó quieto y en silencio, cuando por fin escuchó el ruido de la puerta cerrándose y a todos retirándose del hogar, se permitió acostarse de espaldas en la cama, mirando el techo angustiado.

Parece que cada día será peor - murmuró triste mirando el lado de la cama donde dormía hyuga, casi por instinto, tomo la almohada que se encontraba ahí y la abrazó - de verdad lo siento...quiero.. quiero...- en silencio se largó a llorar, enterrando firmemente la cara en la almohada y tratando de no sollozar....

Hace algunos años, después del incidente del torneo nacional y lo ocurrido en casa de hyuga, el ánimo de misugi era el mismo, cada día se sentía más miserable, repitiendo en su mente una y otra vez las palabras de hyuga, tan duras y frías, pero eran tan ciertas que lo lastimaban, él lo había arruinado y era demasiado cobarde para poder hacer algo...

Y por qué no ? - levantó una ceja curioso y alejando la taza con té de su boca, miro incrédulo a tsubasa, que había ido a visitarlo.

Perdona ?? - preguntó de vuelta.

Dices que estas mal por un asunto personal, pero no quieres hace nada para solucionarlo, por qué no ?? Acaso es mejor estar mal de por vida que tratar de arreglar el problema ?? Yo diría que no - le sonrió ingenuo al final, misugi tosió un poco antes de hablar.

Porque no es tan fácil tsubasa es...- no deseaba decirle - complicado...

Pero sería mejor tratar no ??, incluso si no logras resolverlo, al menos podrás tratar de quitarte algo de peso de encima, eso ya es algo - bebió algo de te.

Tratar era lo mejor ??...

Ahí estaba, nuevamente en la cancha donde entrenaba el equipo de hyuga, temblando como gelatina y sin dignarse a dar un paso, por lo que alcanzó a ver, el equipo entero ya se había ido, todos, menos hyuga, que seguía practicando sin importarle lo tarde que ya era, al menos, hasta que se dio cuenta de su presencia.

Qué demonios se supone que haces aquí ?? - se acercó a él no muy feliz que digamos.

Tenemos que hablar - le dijo misugi sin moverse un centímetro.

No tenemos nada de qué hablar, ya te dije todo lo que pensaba, así que adiós - pasó por su lado y por impulso misugi se dio vuelta y lo tomó del brazo.

Tú dijiste todo, pero yo no, me niego a irme de aquí sin que me escuches - ambos se quedaron en esa posición, hyuga mirando al frente sin dignarse a voltear, mientras su brazo era fuertemente agarrado por misugi, al notar que no había resistencia, este prosiguió - de verdad estoy arrepentido de lo que hice, de lo que dije, no todo era cierto, yo....- se sonrojó al notar que hyuga lo estaba mirando - de verdad quiero estar contigo, me gustas mucho hyuga -  ahora estaban frente a frente, sin soltar de su mano - por favor yo...

No - fue la seca respuesta que recibió, junto con un tirón de manos que lo hizo tambalearse un poco - si eso era todo lo que tenías que decir, me largo - en shock, misugi vio como hyuga se iba, mientras sus ojos se llenaban de lágrimas y su cuerpo temblaba...

Dios, soy tan patético - ya en el presente, después de recordar ese miserable día, misugi se sentó en la cama tratando de calmar su llanto, con la almohada en su regazo - me lo merezco, sin tan solo no te hubiera dejado ir desde un principio - el sonido de la puerta abriéndose lo asustó y solo atino a tirar la almohada a la cama y mirar rápidamente la entrada de la habitación - hyuga ?? Qué haces aquí ??- comentó viendo a este en la entrada.

Aquí duermo - dijo mirándolo fijamente, la cara de misugi estaba roja, igual que sus ojos, rojos e hinchados de tanto llorar, junto con lágrimas que aun seguían en su cara.

Me refería..- torpemente trato de secar sus lágrimas - pensé que estarían en la cancha, aun es temprano - no sabía cuánto rato estuvo llorando, pero si que aún no era de noche.

Con takeshi volvimos, llego el imbécil de wakabayashi y me jodio la tarde - comento sin más entrando y caminando al closet para cambiarse ropa.

Ya veo...- más calmado misugi continuó - podríamos jugar a algo los tres, ya que estamos aquí...

Suficiente tengo contigo jodiendo en la noche, como para aguantarte lo que queda de tarde - le comentó sin más terminando de cambiarse la polera y caminando a la puerta, eso hasta que misugi se interpuso entre ambos.

Basta con eso maldición - en su rostro se instaló una mueca furiosa - podré aguantar tus comentarios llenos de veneno, pero tengo un límite y no te permitiré que lo pases - se sostuvieron la mirada enojados.

Qué bueno, porque contigo no quiero cruzar ni un límite más - iba a empujarlo para pasar, pero misugi lo empujó primero.

Eso no decías cuando estabas dentro de mí hace algunos años - soltó con burla.

Y vaya que me arrepiento de esa mierda, tantos jugadores hermosos y capaces y me fui fijar en el más desabrido y ridículo de todos - okey, eso había sido cruel hasta para hyuga, ver como el rostro se misugi volvía a llenarse de lágrimas no lo sacudió tanto como verlo tambalearse hacia un lado, afirmándose fuertemente el pecho - oye que...- hasta que cayo de rodillas, con la respiración entrecortada y tenues sollozos, permitió preocuparse un poco - que rayos ?!?, oye !!!! - se puso de rodillas también, notando como poco a poco se hiperventilaba más.

En mi mochila - le dijo a duras penas - mi medicina está en mi mochila - susurró sintiendo que se iba a desmayar.

TAKESHI TRAE ALGO DE AGUA !!!- el grito de hyuga se escuchó por toda la casa, mientras takeshi llegaba a toda velocidad con lo pedido y hyuga buscaba rápidamente las malditas pastillas, mientras misugi se retorcía apegado a la pared.

Pero que pasó ?? por dios !! - con hyuga lograron sentarlo para meter las pastillas en su boca y ayudarlo a tomar agua, mientras takeshi lo acariciaba la espalda, hyuga lo sostenía por los hombros.

Estas mejor misugi-san ?? - pregunto sawada preocupado.

Si...muchas...gracias por la...ayuda - su respiración era pesada pero el ataque había pasado.

Quítate takeshi - hyuga se levantó y en brazos levantó a misugi quien se avergonzó aún más - mejor duérmete - lo dejó en la cama, alcanzando la manta y cubriéndolo - con takeshi estaremos en la habitación de al lado, cualquier cosa vendremos a ver - le dijo a jun mirandolo y caminó rápido a la puerta.

Sí..gracias - misugi oculto su cara entre las mantas, ingenuo de todo lo que acababa de pasar.

Descansa misugi-san - takeshi fue arrastrado por hyuga hasta que la habitación se encontraba vacía y misugi se permitió entrar al mundo de los sueños....

Despertó desorientado, sin saber ni qué hora eran y con un gran dolor de cabeza, así que en silencio y de manera suave se levantó dispuesto a encontrar a alguno de los chicos que le ayudara en su orientación, salió de la habitación de la mismo forma, escuchando ruidos en la habitación en la que dormía matsuyama, pero no era él, eran hyuga y takeshi, al parecer, estaban jugando cartas.

Gané - le comentó takeshi feliz mientras hyuga bufaba.

Dos de tres enano - tomó el montón y se puso a revolverlas.

Deberíamos ir a ver a misugi- san ?? - comentó sawada, mientre misugi se afirmaba de la pared para acercarse aún más.

Para que, ya debe de estar bien - comentó desinteresado hyuga.

Bien que dices eso, pero te vi bastante preocupado hace un rato, es más - lo encaró con superioridad - estoy seguro de que esas pausas para ir al baño entre el juego eran para ir a verlo y ver que estuviera bien, o me equivoco capitán ?? - Hyuga desvío la mirada y misugi se puso nervioso.

Estas muy altanero takeshi, así que cállate - empezó a repartir las cartas.

Di lo que quieres capitán, pero no borraras el hecho de que te preocupas por él, aunque hayas sido tú el que lo puso así para empezar.

Sabía que estabas escuchando todo enano del demonio - le arrojó su montón de cartas con furia.

Crea lo que quiera hyuga- san, pero sabes muy bien que los sentimientos no se borran tan fácilmente, ahora empiece la partida - misugi se alejó de la puerta y volvió a la habitación, intentado pensar en que debería hacer de ahora en adelante....

Gracias por leer 🩵⚽️

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top