-¡Kookie es hora de despertar! - Llamó Jimin desde las escaleras pero no recibió respuesta.

El rubio sonrió negando con la cabeza y mejor decidió subir -¡Jungkookie cariño levántate, tienes que desayunar o vamos a llegar tarde! -

-¡Ya desperté y también estoy listo papi! - Su pequeño hijo abrió la puerta de su habitación vistiendo su uniforme escolar y una adorable sonrisa de conejo adornando su rostro.

-¡Vaya mi pequeño hombrecito se despertó temprano hoy - Dijo Jimin orgulloso y se agachó para arreglar el enredo que el pequeño Jungkook hizo en su corbata -Aunque hay un desastre aquí-

Kookie hizo un puchero -Es que atarla es muy difícil papi - se quejó.

-Tu papá Jungkook tampoco sabía como atar sus corbatas, tenía que hacerlo por el todo el tiempo -Le contó Jimin recordando.

-Yo me parezco mucho a mi papá Jungkook, ¿Verdad papi? -Le pregunto el péqueño Kookie.

Jimin asintió ajustando la corbata -Eres exactamente igual a él, Listo bebé-

El pequeño Jungkook sonrió sintiéndose orgulloso de escucharlo-Gracias papi, y papá Jungkook y yo te amamos mucho muchote -

Jimin acarició el cabello aún desordenado de su hijo con una sonrisa melancólica -Yo también los amo mucho muchote cariño-

Kookie suspiró con sus lindos ojitos fijos en el rostro de su padre-¿Extrañas a papá? -

-Lo extraño mucho hijo, todos los días - Respondió con voz melancólica.

El niño puso sus bracitos alrededor del cuello de su padre -Yo estoy contigo y papá Jungkook siempre está con nosotros papi es nuestro ángel guardián -

Jimin rodó el péqueño cuerpo de su hijo en un abrazo -Lo sé bebé, tu padre siempre nos acompaña y nos protege -

-No estés triste papi a papá Jungkook no le gustaría verte triste - Dijo el pequeño poniendo sus manitos en las mejillas de Jimin.

-No estoy triste cariño, tengo al mejor hijo del mundo ¿cómo podría estarlo? - Le preguntó Jimin intentando mantener una sonrisa.

-¡Y yo tengo al papá más hermoso del mundo! - Cantó Kookie.

-¿El más hermoso? Pero si ya tengo arrugas -Jimin hizo un puchero.

-Eso no importa, todos los días te ves mas hermoso que el anterior - Aseguró el pequeño.

-Si definitivamente eres igual a tu padre - Jimin sonrió -Vamos para que tomes tu desayuno hoy tenemos que llegar temprano a la escuela -

-Lo sé papá, es el dia de la familia ya tengo todo preparado- Le Informó su hijo caminando a su lado.

-¿Puedo verlo? - Quizo saber Jimin.

-Nopi, es sorpresa - Cantó el péqueño.

Jimin lo tomó de la manito mientras bajaban las escaleras, Kookie había estado trabajando por semanas en la presentación para el día de la familia, y se opuso rotundamente a que Jimin le ayudará, de hecho le pidió ayuda a TaeHyung en su lugar por lo que Jimin no tenía idea de que mostraría su hijo hoy y eso lo tenía un poco nervioso.

Habían pasado ya 9 años desde ese terrible día donde Jimin perdió a su esposo y con el se fue una parte de Jimin que nunca pudo recuperar.

Cuando Jimin perdió a Jungkook sintió que el mismo estaba muerto en vida, casi se volvió loco de dolor, lo extrañaba todos los días, veía a su esposo en todos lados estuvo a punto de perder su cordura antes de entrar en depresión.

Siempre se hizo la misma pregunta, ¿Por qué? ¿Por qué tuvo que pasarle a el? ¿Por qué tuvo que morir su esposo, el amor de su vida?
Habían tantas personas malas en el mundo que le hacen daño a otras y justamente tuvo que morir Jungkook ese día, dejando a Jimin sólo y sin consuelo.

Todos le decían que con el tiempo lo superaría, que debía seguir con su vida, ¡Pero nadie entendía que Jeon Jungkook era su vida! Y sin importar cuanto pasará esa herida seguiriá abierta en su corazón.

La vida es demasiado frágil, sólo necesitas un segundo para perder a la persona que más te importa.

¿Quién diría que ese día iba a ser el último que despertarían juntos? ¿O que esos panes con mantequilla sería la última comida que compartirían?

Sus planes, cada sueño se derrumbó ante sus ojos y dejó a Jimin con el corazón hecho pedazos y su alma completamente devastada.

Si el rubio decía que no pensó muchas veces en quitarse la vida también para poder acabar con ese agonizante dolor que sentía en su interior estaría mintiendo, deseo estar muerto una mil veces.

Y sólo fue hasta cuando tuvo a su pequeño hijo entre sus brazos que sintió que la vida tenía un poco de sentido otra vez.

El pequeño Kookie llegó a su vida como un rayito de sol que le dio luz en la oscuridad, era tan bonito, inocente e igual a su esposo, así que decidió hacer lo que Jungkook le pidió y lo amaría por los dos.

Desde que era un bebé le hablo a su hijo sobre su papá Jungkook, la casa estaba llena de sus fotos y para el péqueño Kookie era su héroe y cuando aprendió a leer le entregó la carta que su esposo había escrito.

Jimin nunca se atrevió a leerla, sentía que no podría soportarlo si lo hacía.

Quien también la pasó muy mal fue la madre de Jungkook ella incluso había sido internada en centro psiquiátrico por un tiempo, el dolor y la culpa la atormentaban por no haber apoyado a su hijo en sus momentos más importantes.

Y el día que la señora Jeon llegó a su casa Jimin pensó que lo culparia o intentaría quitarle al bebé pero en lugar de eso ella cayó de rodillas ante el y le pidió perdón desde ese momento ella se convirtió en parte de sus vidas.

Juntos trataron de enfrentar el dolor de la pérdida y ahora era una gran abuela para su hijo.

Jimin sonrió mientras veía a Kookie sentarse en el comedor esperando el desayuno -Tienes que comerlo todo cariño, para que seas un niño fuerte -

-¡Ya soy un niño fuerte! -Aseguró el pequeño -Mira papá tengo músculos - dijo mostrando sus brazos como si fuera un super héroe.

-Pero para mantener esos músculos debes comer bien ¿Eh? -

-Si papi - El pequeño devoró la comida en cuestión de minutos y termino su vaso de leche de banana -Termine -Anunció.

Jimin le limpió el bigote que le había dejado la leche -Vuelve a lavarte los dientes mientras yo llevo todo al auto-

El niño obedeció a su padre y luego volvió con sus dientes limpios y su cabello peinado -¿Papá crees que la abuela vaya a ver la presentación? -

-Seguro que si, ella no se la perdería por nada - Contestó Jimin abrochandole el cinturón.

La escuela del pequeño Jungkook quedaba bastante cerca por lo que llegaron rápido, el lugar estaba decorado de una forma muy encantadora y hogareña, cada salón tenía una actividad y el de su hijo haría las presentaciones de su familia, como el presentar el trabajo de sus padres y luego toda la clase cantaría una canción.

-¡Papi siéntate aquí, tienes que tener el mejor lugar! - su hijo prácticamente lo arrastró hasta los primeros puestos del auditorio -Le guardas ese lugar a la abuela - Le ordenó.

-Esta bien, suerte cariño - Jimin le dio un beso en la frente.

-Espero que te guste papá - su hijo se despidió con su manito y corrió hasta donde estaban el resto de su compañeros.

-Jimin querido, pensé que no llegaría a tiempo -La Sra. Jeon se sentó a su lado.

-Aún no empieza, Kookie está muy emocionado -

-El ha trabajado muy duro para este día, y como su padre siempre logra que se propone - Dijo orgullosa.

Jimin asintió sonriendo, el acto dio inicio con las palabras de bienvenida de la maestra, luego cada niño hizo su presentación, algunos describieron a sus padres, otros fueron los adultos quienes hablaron y cuando llegó el turno de su hijo, Jimin sentía que se le saldría el corazón.

Se veía tan lindo y lleno de valentía parado en medio del escenario con su micrófono en la mano.

-Buenos días, yo soy Jeon Jungkook y hoy voy a presentarles a mi familia - Dijo directamente para tomar un suspiro y mirar hacia Jimin que le asintió con la cabeza dándole ánimos así que el pequeño siguió.

-La familia es lo más importante para todos, algunas están conformadas por un papá, una mamá y sus hijos, otras sólo por hermanos, incluso hay familias que no son parientes pero se quieren como si lo fueran -Jungkook tomo aire - Y existen algunas familias conformadas por dos mamás o dos papás, la mía es una de ellas -

-Yo tengo dos papás, aunque uno de ellos ya se fue al cielo antes de que yo naciera, pero aunque no lo conocí yo lo amo y lo extraño mucho - dijo mirando a Jimin que tenía los ojos acuosos.

-Les contaré un poco sobre mis papás -El pequeño señaló la pantalla y una foto de Jimin y Jungkook apareció - Mi papá Jimin es enfermero, ayuda a las personas en el hospital y mi papá Jungkook era un bombero el era grandioso y no le temía a nada ni siquiera al fuego -

Todos en el auditorio estaban atentos al pequeño Jungkook unos con gestos de empatía, otros llenos de curiosidad y no faltó quien parecía estar desagradado pero eso no le importó al niño, el quería presentar a las dos personas más importantes de su vida a sus padres.

Jimin miró con melancolía la foto en la pantalla de hecho era una las primeras que se había tomado junto a su Jungkook cuando eran novios.

-Tener una familia con dos papás me ha enseñado muchas cosas y una de ellas es que el amor puede surgir en muchas maneras y la historia de mis papis es muy bonita y les contaré un poco de ella- Kookie se pasó las manitos por sus ojos para limpiarse las lágrimas.

-Mis padres se conocieron durante una emergencia, mi papá Jungkook era un bombero novato y tuvo un par de problemas así que cuando llegó el equipo médico el también debió ser atendido y fue mi papá Jimin quien lo ayudó, lo primero que mi papá pensó al verlo era que mi papi parecía un ángel vestido de blanco que venía a salvarlo y de inmediato se enamoró de el -Contó sonriendo mientras que en la pantalla surgían fotos de Jimin y Jungkook con sus respectivos uniformes.

Jimin sonrió con sus ojos acuosos, eso era verdad había tenido que ponerle oxígeno a Jungkook en el momento en que se conocieron porque ese bombero tonto no uso máscara al entrar.

-Y como mi papá Jungkook se enamoró de mi papi entonces empezó a seguirlo pero sin decirle nada, lo que parece un poco tonto, por qué si le gustaba debía decírselo pero el tenía miedo de que mi papi no sintiera lo mismo así que sólo lo observo desde lejos -Dijo el pequeño - Pero un día mi papá Jimin se dio cuenta de que alguien lo observaba y sacó gas pimienta y le echo en el rostro -

Jimin se rió con lágrimas en sus ojos era verdad así había pasado el pensó que era un acosador y sacó su gas pimienta los ojos de Jungkook se pusieron muy rojos y le ardían mucho.

-Pero luego mi papi se dio cuenta de que era el bombero a quien había ayudado, le pidió disculpas y pues le ayudó poniéndole unas gotitas en sus ojos -Dijo el pequeño - y así fue como empezaron a conocerse, luego mi papá se entero que si el mismo día de la emergencia le hubiera pedido el número a mi papi Jimin se habría librado del gas pimienta en sus ojos porque a papi también le gustó el desde que lo vio -

-Mis papás eran diferentes pero juntos eran muy felices viajaron alrededor del mundo - En la pantalla habían muchas fotos de sus viajes y de los lugares que conocieron.

Para Jimin mirar cada imagen era como revivir sus más preciados recuerdos junto al hombre que amo y amaría siempre.

-Este es un vídeo que mi papá Jungkook hizo para mi papi, a el no le gustaba viajar mucho pero quiso sorprenderle con un viaje a Japón donde grabó todo lo que hicieron y al final le pidió que se casará con a mi papi que fuera su esposo y el aceptó porque se amaban mucho -

Jimin se llevó una mano a la boca mirando el vídeo de su viaje a Tokio junto a Jungkook le había pedido matrimonio en un parque de diversiones y fue realmente hermoso.

-Su boda fue sencilla pero su amor era muuuuuy grande y llenaba todo -El pequeño levantó sus brazos al cielo

- y luego de muchos años siendo felices decidieron que sólo les faltaba algo para estar completos y decidieron tenerme, tuvieron muchos obstáculos por ser dos hombres que se amaban pero lo lograron yo venía en camino y ellos esperaban muy contentos -La voz del pequeño se quebró -Pero mi entonces mi papito Jungkook que era muy valiente salvo a muchas personas se un incendio pero... el ahora nos cuida desde el cielo es nuestro ángel guardián y todos lo recordarán como un héroe aunque para mi papi Jimin el siempre será el amor de su vida y para mi siempre será mi papá a quien me gustaría poder abrazar - Para ese momento más de una persona en el auditorio tenía lágrimas en sus ojos conmovidos por las palabras del niño.

-Yo sólo tengo 9 años no se de que se trata el amor, pero algún día me gustaría ser tan feliz como lo fueron mis padres cuando estuvieron juntos -

El pequeño Jungkook dejo el micrófono y salió corriendo a los brazos de su papá quien lo recibió en apretado abrazo.

El auditorio se puso de pie y aplaudió la valentía del pequeño.

-¿Te gustó mi presentación papi? - Preguntó entre lágrimas.

-Fue hermosa cariño - Jimin le lleno de besos el rostro.

Sus ojos no dejaban de derramar lágrimas su pequeño hijo su pequeño se paró al frente de todo un auditorio a presentar a sus padres con orgullo era tan dulce para el.

Por supuesto que la mejor presentación del día fue la de el péqueño Jungkook y se llevó el primer puesto.

-¿No estas molesto por qué tome todos tus recuerdos con papá y los presente? - Preguntó Jungkook mirando a los ojos llorosos de su padre cuando estuvieron en el auto.

-Claro que no cariño, hiciste un trabajo hermoso y tu papá estaría muy orgulloso de ti- Jimin le sonrió.

-¿Podemos ir a visitarlo con la abuela? -Preguntó el niño emocionado.

-Por supuesto bebé - Jimin encendió el auto y empezó a conducir hacia el cementerio, los primeros meses después de la partida de Jungkook había venido a diario así que se conocía el camino de memoria.

-¡Papi compremos rosas! - Chilló el péqueño Jungkook señalando un puesto de flores por la ventana -Eran las favoritas de papá-

Jimin lo hizo y juntos ingresaron al lugar su hijo casi corrió hasta la tumba con el nombre de su padre.

-¡Hola papá! -Lo saludó como si lo estuviera viendo -Hoy fue mi presentación, hice lo que te conté y gane el primer puesto -Le contó - A mi papá Jimin le gustó mucho -

-Así es amor, nuestro hijo estuvo grandioso hoy -Dijo Jimin.

-Yo siempre soy grandioso, me parezco mucho a ti papá kook, obtuve un 100 en matemáticas y entré en equipo de fútbol, pronto tendré el cinturón negro en kárate mi maestro dice que mejoré mucho esta semana y mi tío Yoongi me está enseñando a tocar el piano - Kookie no dejaba de hablar contándole todo lo que le había ocurrido desde la última vez que había venido a visitarlo.

Jimin sintió una mano sobre su hombro y miro a la Sra. Jeon a su lado -Gracias Jimin -Susurró ella.

-Por hacer tan feliz a mi hijo, por ser su apoyo incondicional cuando yo le di la espalda -Dijo con voz temblorosa -El debió odiarme por todos los malos momentos que les hice pasar -

-Jungkook nunca la odió, usted debería saberlo el no era un hombre que guardará rencores el si la extraño y amo a su madre hasta el último momento - le confesó Jimin.

Ella sorbió su nariz -Gracias también por permitirme ser parte de tu vida y de la de mi nieto -

-Es lo que Jungkook quería - Susurró Jimin.

Su hijo jugó un rato arreglando las flores antes de ponerse de pie -Abuelita tu me prometiste que me comprarías un helado después de la presentación - le recordó a la mayor.

-¡Es cierto! ¿Quieres el helado ahora cariño? -

-¡Si! - Contestó animado -¡Vamos papá! -

-Ve con tu abuela Kookie, me quedaré un rato más con papá - le pidió Jimin.

-Esta bien papi, papá Jungkook iré por un helado regresó pronto -Dijo despidiéndose con la mano.

Jimin suspiró y se arrodilló a terminar de acomodar las flores -Kookie es un gran niño y muy enérgico cada vez se parece más a ti amor, además es multitalentos no importa lo que sea siempre lo hace bien -

Por las mejillas de Jimin se deslizó una lágrima -Te extraño mucho cariño, a veces creo que siento tu mirada en mi rostro al despertar ¿De verdad sigues a mi lado cierto? - Preguntó Jimin suspirando.

En ese instante un suave viento movió las hojas de los árboles y acarició la piel de Jimin desordenando su cabello -Sabes que odio que hagas eso -Dijo con una sonrisa mientras sus ojos estaban llenos de lágrimas.

-Es difícil amor, es demasiado difícil estar sin ti -Jimin se limpió las lágrimas - Te amo, te amo tanto como si fuera el primer dia, nuestro amor será eterno como lo dijiste-

Jimin se puso de pie y metió su mano en el bolsillo de la chaqueta sintiendo un papel con sus dedos, lo tomó entre sus manos y lo abrió, Jimin supo de inmediato lo que era, tenía la letra de Jungkook y seguramente su hijo lo había puesto allí.

El contenido de esa carta era el último mensaje de Jungkook su amado esposo.

Las lágrimas inundaron su rostro cuando empezó a leer cada palabra que Jungkook dirigió  a su pequeño, era como si el hubiera sabido que algo pasaría pero a la vez estaba tan llena de esperanzas y sueños.

-Papi no llores - el péqueño Jungkook camino hacia el auto con su boquita sucia de helado y abrazo a Jimin.

Jimin sollozó -Te amo cariño-

-Yo también te amo papi y voy a cumplir la promesa que le hice a mi papá Jungkook y estaré contigo siempre - Le aseguró.

Un suave viento los envolvió a los dos y Jimin sonrió entre lágrimas.

Jungkook siempre iba a estar allí para ellos de eso estaba seguro.

Hola mis amores, pensé que podria poner todo en este capítulo pero saldría muy largo así que haré el especial con la carta de Jungkook.

Estoy muy triste, pido perdón.