—¡Venga ya, Meghan! ¡Tiene pinta de ser un padrazo! —Alexis estaba sentada en un sillón de uno los muchos salones de Bruce.

—¡Está compitiendo con nuestro hijo para ver quién me destroza antes la cocina! —rio Meghan al otro lado del teléfono.

—Hace mucho que no voy por allí, creo que iré pronto a ver a tus dos niños pequeños—contestó Alexis con una sonrisa que no se correspondía con su estado. Otra vez se estaba destrozando las uñas.

—No me importaría eso si no fuera porque uno de esos con mentalidad infantil es el padre de mi hijo.

—Sois los dos padres primerizos, es normal que sea así. Aunque, si te soy sincera, si que tenía cierta actitud infantil cuando visitabais hospitales. Tendrías que haber escapado ahí y no después.

—Calla, me da un dolor de cabeza eso. ¿De verdad esperaban que siguiera bajo sus faldas toda la vida?

—Son una familia muy... especial, ya sabes.

—No ya, si especiales son un rato. Bueno, te dejo y voy a ver qué queda de mi cocina.

Alexis se despidió de su amiga. Se miró para las manos resignada. Otra vez tendría que ponerse postizas. Siempre se decía a sí misma que iba a dejar ese hábito, pero nunca era capaz. Desde la ventana vio a Bruce saliendo con una ramo de flores hacia el interior de la finca. "Siempre hay alguien peor".

—Oh, estás aquí. —Arthur entró en el salón—. Las cosas están un poco aburridas últimamente y te estaba buscando para discutir un rato. —Se sentó en otro de los sillones—. ¿Qué hace Wayne?

—Es miércoles.—Al ver la cara de extrañeza de Arthur recordó que no lo sabía—. Siempre les lleva flores a sus padres los miércoles porque fue el día en el que los...—Alexis explicó sin apartar la vista de Bruce, que cada vez se alejaba más. Las palabras se le quedaron en la garganta, incapaces de salir.

Arthur asintió sin decir nada. Alexis de levantó y se fue, dejando a Arthur sin su esperada discusión.

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—¡Hermano ayúdame antes de que ella...! —June Moone, o mejor dicho Enchantress, corría hacia Steppenwolf con una mano en el pecho y la otra levantada en señal de auxilio.

Steppenwolf se giró, sorprendido ante su inesperada llegada, para ver a la que consideraba su hermana retorciéndose de dolor. Rápidamente dejó de atender a los patéticos humanos para ayudarla. Donde debería estar el corazón de Enchantress había una oquedad de la que salían destellos verdes en lugar de sangre. Le concedió un poco de su energía, creando un sustituto temporal para su corazón.

—¿Dónde está tu corazón?

—Me lo robaron, hasta que lo recupere necesito parte de tu poder—dijo Enchantress mientras comenzaba a recuperar parte de su antigua gloria. En su interior, la conciencia de June Moone luchaba por salir, por tomar ella en control, pero enseguida era devuelta a las sombras de por la fuerte voluntad de Enchantress.

Steppenwolf sintió rabia por la situación de Enchantress y por la falta de actuación de su sobrino.

—¿Y bien? ¿Sigues resignado a ser el perro de Uxas?—preguntó Enchantress.

—Hace mucho tú también le eras leal, Enchantrax. Soy viejo, pero recuerdo tu lealtad a las Furias y por extensión a nuestro dios Darkseid.

—¡No me llames así! Sí, fui una Furia después de que Abuela Bondad me encontrara y fui leal a ese sobrino tuyo que se hace llamar "dios".— Enchantress lo miró decidida. Steppenwolf no supo si se arrepentía de su pasado o lo echaba de menos-. Me desterró aquí, en medio de la nada. ¿Y todo por qué? ¿Por qué me opuse a sus caprichos? Él ya tenía a Tigra.

—Es nuestro amo y señor, él es la solución para Apokolips. Él te deseaba pero manchaste tu lealtad al unirte a Orión, sabiendo cuánto lo odiaba.

—Mi lealtad nunca ha muerto, hermano, solo tuvo momentos de debilidad. Eso lo aprendí de ti, ¿recuerdas? Eras el único que se preocupó por mí, como un verdadero hermano de sangre. Ya no me llamó Enchantrax, perdí ese nombre cuando me dio a elegir: o ser suya o escapar temiendo por mi vida. Y ya estoy cansada. Quiero volver a casa. Este sitio no es mi hogar.

—¿Y piensas que Darkseid te acogerá con los brazos abiertos tan alegremente? Y tampoco Las cosas han empeorado, Enchantrax. Darkseid está dispuesto a todo por tener lo que quiere y ni siquiera Orión se librará aunque sea su hijo.

—Solo quiero volver a casa. Aquí he tenido muchos nombres, siendo Enchantress el último, pero nunca una familia como la que tenía. Estoy dispuesta a demostrar mi lealtad a nuestro señor con una condición.

—¿Cuál?—preguntó Steppenwolf dubitativo.

—No me pongas esa cara, hermano. Después de todo, ha sido gracias a mi que estás aquí. Yo rompí la barrera que te impedía llegar.

—Algo sorprendente, si juzgamos tu estado actual.

—He tenido ayuda de un humano lo suficiente listo, o loco. Él solo pide sobrevivir a los planos de tu sobrino con aquellos que él elija. Yo quiero volver a casa y tener el control de mi cuerpo. No pido tanto. ¿Qué es un planeta entero comparado con que una apokoliptana sea libre?

Steppenwolf habría sonreído al ver que su hermana seguía siendo la misma.

—¿Qué necesitas? Si tienes éxito yo mismo intercederé por ti ante mi sobrino.

—Ayúdame a construir mi arma y trae a algunos miembros de tus legiones.— Levantó las manos convocando su magia, ahora ayudada por la energía que su hermano le prestaba—. Es hora de eliminarlos.

Un torrente de energía se elevó a los cielos justo delante de ella. Enchantress suspiró entre satisfacción y agotamiento. Había vuelto.

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—¡Bruce! ¡He vendido en cuanto me he enterado! —Gritó Alexis entrando en la sala dónde estaba su amigo.

Estaba en pleno juicio cuando se empezó a sentir inquietud fuera de la sala. Uno de los guardias sñde seguridad entró apurado y le dijo al juez qué pasaba. Entonces, decidió aplazar la sesión. Alexis, muy extrañada se enteró de la noticia al salir y se fue todo lo deprisa que pudo junto a Bruce.

—Amanda nos ha pedido apoyo. Vais a ir tú y Arthur.

—¿Con él? Eso sí que no. Bruce, no hacemos buen equipo.

—Veamos... Diana no ha vuelto, necesito a Cyborg para detectar la Caja y yo he metido entre rejas a la mitad de ellos. Seguro que me acogen con los brazos abiertos.

—¿Y mi hermano? Si Harley Quinn me descubre querrá matarme.

— Y si tu hermano va, lo matas tú. —Sabías que Bruce no tenía la intención de herir la, él no sabía qué había pasado, pero aún así el golpe fue bastante directo—. Solo quedáis los dos. Por favor, Alexis, hazlo por tu hermano, por toda la humanidad. Hazlo para evitar más familias rotas. Hazlo por no más niños sin padres por crímenes. Hazlo por mí.

"Maldito playboy con buena retórica".

—Está bien... ¿Y piensas que vaya en chándal?

—Acompáñame. —Bruce sonrió.

Lo siguió hasta otra sala.

—Me he tomado la libertad de hacer algo, pero como tú no parecías interesada... Si no te gusta, te aguantas y para la próxima me dices qué quieres. Ahora no hay tiempo. —Bruce quitó una manta que cubría un expositor.

"Maldito playboy con buen gusto".

Bruce la había hecho un traje. El cuerpo era de color morado con una chaqueta que simulaba cuero negro. Las piernas tenían hilos de ambos colores, haciendo dibujos que simulaba rayos.

—No conduce la electricidad ni es inflamable, así no te harás daño a ti misma—explicó Bruce intentando no burlarse de la cara de sorpresa de Alexis dada la seriedad del momento—. En el cuello hay un dispositivo que te alterará la voz.

—¿Funcionará? —preguntó Alexis insegura.

—¿Te diste cuenta de que yo era Batman?

Alexis examinó el traje.

—He pensado que puedes usar tus poderes eléctricos para modificar tu peinado. Y no sé si te has dado cuenta, pero a veces resaltas más tus venas involuntariamente. Podrías volver a hacerlo para crear un falso antifaz.

—Puedo intentarlo.

—Bien, solo queda algo más. ¿Cómo te vas a llamar?

"Ella me contaba cuentos sobre aquel ser..."

—Andeväsen—contestó Alexis sin dudar—. Soy Andeväsen.

┈┈┈☾┈┈┈

—¿Han llegado ya esos gilipollas?—preguntó el Coronel Flag—. ¡Equipos Alpha y Bravo conmigo!

La verdad, nadie diría que aquellos que estaban atados y vigilados eran peligrosos criminales. Alexis y Arthur los miraban desde una distancia prudencial, conscientes de que sería difícil controlarlos.

—¿Eh? ¿Qué dices? ¿Qué debería matarlos a todos y escapar? —Oyeron que decía Harley Quinn—. Lo siento, las voces.- Harley rio al ver la cara del resto—.¡Que estoy de broma, joder! No me han dicho eso.

Alexis juraría que después de eso, Harley Quinn se le quedó mirando, pero no estaba del todo segura. Ahora estaba apenas irreconocible, con el pelo rizado y las venas de alrededor de sus ojos marcadas por la corriente simulaban ser un antifaz. Y según Bruce su voz sería alterada por el micro del cuello del traje.

—Encantador...—dijo Arthur al ver cómo traían a otro hombre metido dentro de un saco. Nada más salir golpeó a un soldado pensando que podría escapar. Era el Capitán Boomerang, Alexis recordaba haberlo visto en la carpeta de Waller. Barry lo había detenido...

—Escuchadme—empezó Flag—, la inyección que os han puesto en el cuello es un nanobot explosivo. Tiene el tamaño de un grano de arroz, pero es tan potente como una granada de mano. Si me desobedecéis, morís.Si intentáis escapar, morís.

Harley Quinn la estaba mirando con los ojos entrecerrados, ya no tenía duda Alexis. Su mirada fija y pensativa le dio ganas de echarse a llorar y de marcharse inmediatamente de allí. "Por favor, Alexis, hazlo por tu hermano, por toda la humanidad. Hazlo para evitar más familias rotas. Hazlo por no más niños sin padres por crímenes. Hazlo por mí", las palabras de Bruce le vinieron a la mente, como un recordatorio. Ella podía ayudar a sanar en cierta manera el mundo.

—Si me mosqueáis o irritáis, adivinad—continuó Flag—. Oh, sí, morís.

—No sé quién me parece peor: si ellos o el chulito soldadito—comentó Arthur a Alexis.

—El coronel Flag es un militar laureado que ha demostrado con creces su dedicación a nuestro país.

—Me da igual cuántas medallitas haya ganado haciendo la pelota—replicó Arthur. A diferencia de Alexis, con su traje de superhéroe no ocultaba su identidad. "Claro que él es un farero y yo soy la fiscal de una de las ciudades más peligrosas del mundo", pensó Alexis—. Necesito saber que cuando me ataquen por la espalda tengo a un compañero detrás.

—Este es el plan—Flag continuaba ajeno a la charla que mantenían sus compañeros—: vais a hacer algo que seguramente os cueste la vida. Pero hasta entonces sois nuestro problema.

—Un momento, un momento...¿"Nuestro problema"?—preguntó esta vez Deadshot

—Por cortesía de Waller, tenemos compis de juegos.—Flag hizo una señal para que se acercaran Arthur y Alexis—. Aquaman y Andeväsen, ellos serán el factor meta de esta operación. Ahora preparaos, salimos en 10 minutos.

Ellos tres se apartaron un poco para hablar. El coronel no había reconocido a Alexis, así que puede que Bruce no estuviera tan equivocado después de todo.

—Esto me gusta tan poco como a vosotros dos. Si alguno de ellos hace algo raro le quemais, le pinchas con ese tenedor gigante o lo que sea que hagáis—les dijo Flag, autoritario—. Pensé que esa Allen tendría más sentido que Amanda...

—Créeme, cuandoe enteré de esto yo también lo pensé—contestó Arthur—. ¿Y nuestros refuerzos?

—Llegando tarde—respondió Flag.

Volvieron con el resto.

—He aquí la voz de Dios—dijo Flag sujetando la tableta que acaba de recoger para que todos la vieran.

En el dispositivo apareció el rostro de Amanda Waller.

—Para aquellos a los que no me conozcan oficialmente, soy Amanda Waller—se presentó—. Está teniendo lugar un atentado terrorista en Midway City. Quiero que entréis en la ciudad, rescatéis al HVT1 y pongáis a todos a salvo.

—Eh, para los que no hablamos el lenguaje de los buenos, ¿qué es el HVT1? —preguntó Deadshot.

—La única persona que importa, la única persona a la que no podéis matar. —La voz de Amanda se mantenía firme, fuerte, sin dudar—. Completar la misión y vuestras condenas serán reducidas; fracasa y moriréis. Si le pasa algo al coronel Flag o a alguno de sus dos acompañantes, os mato a todos.

Ahí estaba otra vez: Harley Quinn mirándola.

—¿Motivados ahora? —preguntó Flag tras despedirse de Amanda.

—Comparado con tu discurso, ella lo ha petado—señaló Deadshot.

Se pusieron en marcha al helicóptero. Cuando estaban a punto de despegar se les unió su último refuerzo: Katana.

—¡Qué luces tan bonitas! —señaló Harley Quinn al ver el centro de poder de Enchantress.

—¿Qué ha pasado?

—Un ataque terrorista—contestó Flag aburrido—0 Lo de siempre: malos por aquí y por allá detonando cosas.

Todo transcurrió con normalidad hasta que...

—¡Intentan escapar!

El Capitán Boomerang y su compañero comenzaron a agredir a los soldados. Alexis utilizó toda su concentración para formar una bola de fuego con la que intento cortar la cuerda con la que uno huía. El fugitivo se movía tan rápido que erró, pero un pequeña detonación lo hizo quedar sin cabeza. Mientras tanto, Arthur y Katana habían conseguido reducir al Capitán Boomerang.

—Tú y tu tridente me dais igual, pero tú tienes novio—le preguntó a Katana. Arthur tenía su tridente en su garganta y tuvo que hacer un pequeño esfuerzo por aguantar su burla.

—A menos que queráis competir para ver quién muere antes, continuemos—gritó el coronel Flag.

—¿Tú también tienes piroquinesis? —Diablo se acercó a Alexis,sorprendido por su habilidad—. Supongo que te puedo tener un poco de respeto.

"Pero tampoco puedo controlarme", pensó ella. "¿Tú también tienes miedo de ti mismo?"

—Voy a matarlos a todos, al coronel y a sus metahumanos—susurró Deadshot a Harley Quinn—. Por lo que he visto, tu amiguito va a ayudarnos. ¿Puedo contar contigo?

—Tú también eres mi amigo—contestó Harley Quinn—. Pero el de las mechitas mal puestas es mío y también la otra. Yo mataré a Andeväsen.

Hola, soy Minerva. Vengo a deciros que si queréis ver a Alexis siendo Andeväsen no os quedéis con las ganas. En su apartado de Dinasty, nuestro Meet our Oc's, podéis verla con su nuevo traje.

¡Gracias por leer!

Las dos integrantes de MIalcuadrado