ℭ𝔞𝔭𝔦́𝔱𝔲𝔩𝔬 ℑℑ

No era justo. La vida no era justa y el mundo tampoco. No era su culpa lo que había pasado. Tampoco sabía qué había ocurrido. No lo sabía y no estaba segura de querer saberlo. Algo recorrió su cuerpo. Por un momento sintió que una piedra aplastaba su pecho y el aire se pegaba a ella, atraído como dos imanes formando una jaula. El tiempo se detuvo en esa jaula de aire. No entendía qué había sucedido pero había sido un accidente.

No podía parar de llorar, le faltaba el aire. Sentía que sus gritos enmudecían al resto del mundo.

—¡Mamá! —gritaba entre lágrimas.

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—¿Metahumana? —preguntó Cyborg extrañado-—. Siento mi ignorancia pero ¿alguna persona amable que me explique?

—Los metahumanos son personas nacidas con alteraciones en sus genes que les conceden habilidades diversas —explicó calmada Diana—. Hay tantos casos como seres en el mundo. Por ejemplo, algunos pueden controlar los elementos o hablar con animales.

—¿Eres una mutante? —preguntó el chico robot interesado.

—Soy una metahumana, no una mutante —contestó Alexis—. ¿ Acaso tengo pinta de haber sobrevivido a un accidente radioactivo?

No le gustaba nada ese nombre. Le parecía un insulto que la llamasen mutante. Ella solo era una chica normal que por alguna razón durante la profase I (más concretamente la subfase paquitene) de la primera división meiótica de los gametos que la habían originado, el entrecruzamiento cromosómico (o crossing-over) había dado lugar a una alteración genética peculiar. "Prestaba más atención en el instituto de lo que pensaba", pensó Alexis al recordar todo esto. La verdad era que no fue mala estudiante. Desde el accidente, todo aquello que pudiese explicar su peculiaridad le había absorbido su atención. "¡Mamá!", oía los gritos de esa niña asustada.

—Eso también podría explicar las habilidades de Barry —dijo Diana.

Sus padres no presentaban poderes (y en caso de hacerlo los habían  escondido bien), pero los dos hermanos sí. Daba igual que la probabilidad de una pareja "normal" de tener dos hijos metahumanos fuera muy remota, en su familia se había cumplido. Solo que ella no tenía la velocidad de su hermano.

—¿Habéis venido solo a revelar secretos o teneis algo más? —preguntó Alexis.

—Estamos creando un grupo tras la muerte de Superman —le explicó Bruce—, se llama la Liga de la Justicia y queremos que te unas a nosotros.

—¿Y por qué debería hacerlo? —replicó Alexis sin dejar ver su miedo. Si se unía a ellos tal vez el mundo se daría cuenta de quién era y de su "peculiaridad". No podía permitirlo—. Tiene que haber otros candidatos más favorables que yo.

—Alexis, es lo mejor que... —empezó a decir Barry.

—¡Cállate! —le interrumpió su hermana—. ¿¡ Con qué derecho les cuentas lo mío y te presentas así en mi casa!?

No podía permitir que eso ocurriera. Tanto esfuerzo para nada. Su trabajo se iría al traste y era todo por lo que había luchado.

—Buscad a otra —dijo por fin Alexis—, tengo demasiadas cosas que perder si me uno a vuestro grupo extraescolarde héroes. Podéis iros —dijo mientras abandonaba el salón.

El grupo de superhéroes se quedó en su asiento sin saber reaccionar. Todos tenían caras de preocupación menos Bruce, que comía galletas.

—¿Así que pan comido no? ¿Dónde está esa hermana tuya tan servicial?—preguntó Arthur a Barry.

—Iré a hablar con ella —suspiró Barry mientras hacía un amago de levantarse.

Bruce lo detuvo.

—Con las escenitas que has montado lo mejor será que vaya yo—zanjó mientras cogía la última galleta—. Tengo que decirle a Dinah que le pase la receta a Alfred.

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—¿Alexis, puedo pasar? —preguntaba Bruce mientras petaba en la puerta del despacho de su amiga.

Ya había estado en aquella casa en más ocasiones así que se orientaba bien.

—Solo si vas sin guardaespaldas— contestó Alexis desde el interior.

Bruce sonrió. Era su amiga y la conocía bien. Entró en la estancia y cerró la puerta para evitar espías innecesarios.

Alexis estaba sentada en su sillón mirando un marco de fotos. Cuando Bruce se acercó, suspiró y lo guardó en un cajón del escritorio. Él se sentó al otro lado de la mesa, en uno de los sillones destinados a los clientes de Alexis. No solía recibir clientes en su casa, prefería hacerlo en el edificio central, pero a veces era necesaria una mayor discreción en ciertos asuntos...

—Así que Batman, ¿eh? —preguntó Alexis intentando imitar la voz profunda que utilizaba Bruce cuando era Batman en un claro tono de burla.

—Menos mal que no estudiaste Artes escénicas —rio Bruce—. Habrías sido muy mal actriz.

—En mi trabajo a veces tengo que actuar —contestó Alexis.

-Pero en situación lo haces mejor.

—En esas situaciones me pagan.

Los dos rieron. El hecho de hacerse bromas era común entre los dos.

—Ahora en serio, Bruce —dijo Alexis recobrando seriedad—. Necesito saber la historia. Quiero que me cuentes qué está pasando sin que estén presentes mi hermano, una mujer salida de una ciudad mitológica griega —dijo señalando la pantalla del ordenador de la mesa. Había buscado "Temiscira" y todos los resultados estaban relacionados con la mitología griega—, un terminator y un Ken de tres al cuarto.

Bruce se lo contó todo. La búsqueda de Steppenwolf, el conquistador planetario, de las tres Cajas Madre. Ya había robado dos de las tres: la de las amazonas (el pueblo de Diana) y la de los atlantes (el pueblo del vigilante de la playa malencarado). La única que le restaba a Steppenwolf era la de la humanidad, todavía de luto por Superman. Según lo que Diana había contado, Steppenwolf quería reunir las tres y formar "La Unidad" para destruir la ecología propia de la Tierra y transformarla en algo similar al mundo natal de este: Apokolips.

—Sabes que no estaríamos aquí sin una razón de peso —finalizó Bruce—. Alexis te necesitamos con nosotros. Ahora mismo la Tierra necesita a todos los hijos con poderes que pueda.

—Tú no tienes poderes —contestó Alexis divertida.

—No los he necesitado para defender Gotham estos años.

—No sé, Bruce... No sé si podré hacerlo. Juré que no usaría mi "peculiaridad" desde que pasó...

—-Soy tu amigo —dijo Bruce sonriendo mientras cogía la mano de Alexis que estaba apoyada en la mesa-. Eso no cambiará. Siempre estaré ahí, pase lo que pase o haya ocurrido.

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Mientras Alexis le contaba a Bruce el accidente, en el salón el extraño grupo seguía sin hablar mucho.

—¿Y...qué clase de poderes tiene doña Respondona? —preguntó Arthur rompiendo el silencio incómodo—. Solo por curiosidad.

—Bueno... —contestó Barry un poco inseguro tras la riña de su hermana— Alexis tiene la capacidad de controlar la electricidad y el fuego...

—Ah, excelente —contestó Arthur irónico—. Si su enfado llega a más, podrá electrocutarte. Por eso no hemos conectado bien desde el principio: electricidad y fuego no se llevan bien con agua.

—Tú intenta meter algún aparato eléctrico en al agua —contestó Victor Stone—, ya verás como hecha chispas.

—También tiene dotes de canto... — continuo Barry.

—¿Canta? —preguntó Arthur extrañado—¿Así paga esta mansión?

—No precisamente... Sus canciones podrían reventar algo más que tus tímpanos.

┈┈┈☾┈┈┈

—¿Eso es lo que preocupa? —preguntó Bruce a Alexis mientras ella afirmaba con la cabeza—. No te preocupes, yo me encargaré de todo. Y en cuanto a tu identidad, bueno, yo llevo años siendo Batman y creo que aún nadie lo sabe.

Alexis seguía sin estar del todo segura.

—Bruce, acepto participar de tu Liga de la Justicia a modo... No sé... ¿de becaria? Pero siempre que cumplas tu promesa y si algo no me gusta, me voy.

Bruce se levantó y Alexis lo imitó.

—Bienvenida a la Liga de la Justicia— dijo Bruce mientras le tendía la mano.

Alexis la aceptó.

"Espero no estar equivocándome".

Hola a todos. Queremos mandaros un mensaje. Sabemos que esto es algo que se está repitiendo todos los días pero por favor, si eres español sigue las recomendaciones de las autoridades y no salgas de cas, excepto en situaciones de necesidad como comprar comida, medicinas o ir al médico en algún caso grave. No sabemos cómo está la situación en el resto del mundo,pero aquí con el estado de emergencia es necesario cumplir la cuarentena que se ha decreta para toda la población. Sabemos que puede llegar a ser duro, sobre todo para aquellos no acostumbrados a quedarse en casa pero es lo que tenemos que hacer para frenar los avances del COVID-19. Para ayudaros en eso, ambas intentaremos actualizar nuestras historias para que tengáis algo con lo que pasar el tiempo. No sabemos cuantos capítulos de cada historia podremos publicar pues ahora debemos avanzar en nuestros estudios desde casa. A los estudiantes: tranquilos. Si este año tenías que presentaros al examen de acesso a la universidad estad tranquilos. Desde nuestro punto de vista, lo más sensato sería retrasar las fechas de estos exámenes (cosa que vemos más probable). No hagáis caso si dicen que se suspende o se tomará la nota media de bachiller como nota de acceso. Nada está decidido aún sobre el tema. A los lectores de otros lugares os mandamos el mismo mensaje. Puede que todavía en algunos lugares el virus no esté pegando fuerte pero lo hará. En ese caso seguid todas las recomendaciones de las autoridades respectivas.
Gracias por vuestras atención y cuidaros. Como dicen los niños italianos "esto también pasará" pero se necesita la colaboración de todos los ciudadanos.

Un saludo,
Milda y Minerva, las integrantes de MIalcuadrado

#YoMeQuedoEnCasa


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