Capítulo 4: El enemigo en las sombras
Narrador Padmé:
Estaba en el centro médico de los gangan, esperando a que terminaran de curar al rey. Pero estaba muy angustiada, porque no tenía noticias de Anakin, hacía horas que se había ido a capturar al traidor que estaba provocando la guerra en Naboo y no ha regresado.
Jar Jar: - ¿Dóinde estáir Ani? ¿Por qué noi hai llegado? - me preguntó Jar Jar, pero yo tampoco sabía que responderle.
Padmé: - No lo sé, Jar Jar - y en eso comenzó a sonar mi comunicador y sentí un alivio al pensar que se trataba de Anakin - Anakin, pero luego, apareció la figura del hombre que más repudio en la galaxia.
Conde Dooku: - Saludos, senadora Amidala - todos los que estábamos aquí, nos quedamos impactados de verlo - me da gusto informarle que tengo capturado al joven Skywalker - me dijo señalando una celda donde estaba mi esposo.
Padmé: - ¿Qué le hiciste a Anakin, Dooku? - dije realmente molesta.
Conde Dooku: - Ay, senadora, no hay que ponerse sentimentales - rió irónicamente.
Padmé: - ¿¡Qué es lo que quieres, Dooku!? - dije impaciente y molesta.
Conde Dooku: - Me alegra que pregunte, porque estoy dispuesto a negociar el regreso de Skywalker, por...el general Grievous - ¿¡qué!? Genial, lo que faltaba ahora tengo que escoger entre la vida de mi esposo o mantener como prisionero a Grievous.
Padmé: - Eh...no...puedo hacer eso, lo siento - dije sin poder hacer nada más, pero la cara de Dooku pareció más complacida.
Conde Dooku: - Espero que cambie de opinión, senadora - y con la mano que tenía libre, le ordenó algo a sus droides y en menos de lo que yo pensaba, los magnaguardias estaban torturando a Anakin.
Anakin: - ¡¡Aaaah!! ¡¡Auuu!! - fue tal el sufrimiento de Anakin, que no pude evitar sentir miedo de perderlo.
Padmé: - ¡No! - cuide que no se me salieran las palabras - n-no pueden torturar a un prisionero de esa forma - los droides se detuvieron.
Conde Dooku: - ¿Torturar? No sé de dónde saca eso....le doy una hora, my lady; estoy seguro de que tomará la decisión correcta - se acabó la llamada.
Jar Jar: - Tienes quei neigoiciar con él, Padmé - dijo alarmado.
Padmé: - No puedo Jar Jar, con Grievous aquí, la guerra podría terminar - dije triste, pero tampoco quiero que terminen de lastimar a mi Ani.
Jar Jar: - Pero Padmé, Ani es nuestroi amigo - suspiré trsite.
Padmé: - Lo sé, Jar Jar, lo sé - sobre todo que él es mi vida, más que un amigo, pero fui fuerte para no sacar lágrimas.
Rey Olis: - Binx, tiene razón, senadora, debería hacerle caso - me la pasé pensando y terminé por aceptar el trato, pero antes de llamar a Dooku, le avisé a la Reina para informarles la situación y por fortuna, lo tomó bien. Después de una hora, como lo prometido, estábamos esperando la llegada de Dooku para hacer el intercambio; yo estaba que jugaba con mis manos por los nervios, por poder recuperar a mi esposo sano y salvo. En ese momento, llegó una nave separatista y sentía como se aceleraba mi pulso, cuando vi a los droides que arrastraban el cuerpo inconsciente de mi esposo, al menos yo eso esperaba.
Droide de mando: - Entreguen al general - y la reina, dio la orden de soltar a Grievous, tardó como cinco minutos en llegar a su nave y de inmediato lanzaron al suelo a Anakin, yo sin dudar, me agaché para ver si estaba bien y por fortuna seguía con vida, el droide nos lanzó su sable de luz y se terminaron de marchar y Anakin, alcanzó a despertar.
Anakin: - Padmé...lo...siento - dijo cerrando los ojos con Fuerza.
Padmé: - Shh....todo está bien, Ani - dije tranquila, no importa que hallamos perdido a Grievous está ocasión, mientras tenga a Anakin a mi lado, todo está bien. Logramos caminar por unos metros, pero luego de unos momentos Ani se desmayo y me asusté mucho - Anakin, ¿qué pasa? - llegó corriendo el capitán Typho.
Capitán Typho: - Descuide senadora, sólo se desmayó - luego, llamó a una camilla y lo pusieron sobre ella - lo llevaremos al hospital, descuide senadora, lo atenderán bien - y se lo llevaron corriendo al hospital de Naboo, tuve que contenerme para no seguirlos y no sacar lágrimas por ver a mi esposo sufriendo. En eso le llamé a Fernanda, para avisarle sobre lo que pasó.
Fernanda: - Diga - contestó tranquila.
Padmé: - Fer soy yo, Padmé - no podía aguantar mis nervios.
Fernanda: - Padmé, ¿te sientes bien? Te oigo agitada - y con la voz temblorosa, le conté lo que había ocurrido.
Padmé: - Ahora ya estoy llegando al hospital para ver que me dicen - dije antes de preguntar por Anakin - disculpe, ¿en qué habitación se encuentra el general Skywalker? Soy la senadora Amidala - la enfermera buscó en su computadora y luego me dijo:
Enfermera: - Se encuentra en el cuarto 154 - dijo segura y le agradecí.
Padmé: - Fer, voy a tener que colgar lamento las molestias - dije tomando asiento.
Fernanda: - Descuida Padmé, yo le aviso a Obi-Wan, sobre lo que pasó con Anakin, mientras disfruta del tiempo que necesite para que termine de reponerse y de parte de mi prima yo les concedo dos días más por allá - dijo sonriendo, yo le agradecí y colgamos. Pasaron más de dos horas y todavía no recibía noticias de Anakin, sentí como me ganaban los nervios, porque estaba jugando con mis manos, lo que no es común en mí, porque siempre lograba controlarlos como senadora; pero ahora al tratarse de mi esposo, no puedo evitar sentirme así, porque no puedo tan siquiera imaginarme que ésto le pase seguido en la guerra y eso que se cuida bastante. Luego, de unos minutos sale un doctor canoso que estaba atendiendo a Anakin.
Doctor: - ¿Señora Skywalker? - me preguntó volteando a ver a ambos lados.
Padmé: - ¿Sí?
Doctor: - Su esposo está estable, lo que le provocó el desmayo fue una carga de estrés, que acumulada con las descargas eléctricas provocaron que el cuerpo de su esposo se debilitaran - dijo en voz baja, al principio, me sentí aliviada de que no fuera nada grave; pero luego, analicé las palabras "Sra. Skywalker" y "esposo" que me entró un ligero pánico.
Padmé: - Doctor...- dije volteando a todas partes - ¿cómo es que usted sabe que...? - me interrumpió.
Doctor: - Él me lo dijo y no tiene nada de que preocuparse, señora, admiro el valor que tienen al enfrentarse a las circunstancias - hizo una breve pausa - y descuide no diré nada sobre su secreto - sonreí complacida y relajada - sólo le voy a recomendar unas medicinas que la enfermera les va a entregar, que no haga viajes largos ni cansados, aunque no sea él quien conduzca y que guarde mucho reposo; porque si hace mucho esfuerzo, durante el proceso de recuperación, el periodo de desmayo comienza de nuevo y luego se tardará más en recuperarse - yo asentí agradecida.
Padmé: - No se preocupe, doctor, yo me aseguro de que siga sus instrucciones - él me agradeció y me prometió que nuestro secreto estaba a salvo y luego, se retiró y de inmediato, yo entré a la habitación de Anakin y vi que estaba acostado, yo volteé a ver su aparato medidor del pulso y aprecié, que comenzaba a acelerar su palpitar - bueno, así no tengo que ser jedi para saber cómo estás - reí un poco al acercarme a él.
Anakin: - Bueno...siempre me da gusto poder ver a mi ángel - me sonrojé un poco, pero quería divertirme un poco.
Padmé: - ¿En serio? Y eso que no soy la que está acostada en una cama dentro de un hospital - ambos reímos - me alegra que estés bien - le acaricié la mejilla con mi mano, al sentarme a un lado de su cama.
Anakin: - El verte, siempre me hace sentir mejor - sonrió ligeramente e intentó levantarse, pero yo lo detuve.
Padmé: - No, no hagas eso... - dije colocándolo de nuevo en la cama - mejor, así... - yo me acerqué, suavemente y le di un beso tierno en los labios - ¿mejor?
Anakin: - Mucho mejor, jeje - me tomó de la mano - vaya jamás pensé estar tan cansado.
Padmé: - El doctor me dijo que lo que te provocó el desmayo, fue la carga de estrés que has tenido junto las descargas eléctricas - le dije acariciando su cabello color arena - me dijo que debías guardar reposo, tomarte las medicinas que el te recete y que no hagas largos viajes - él sonrió como niño travieso.
Anakin: - ¿Eso quiere decir que no podré volver a Courusant durante un largo tiempo? - yo me reí de su sarcasmo, pero asentí sonriendo.
Padmé: - Pues depende de cuántos días te tardes en recuperarte - dije sonriendo, sin dejar de perderme en su mirada - ¡ah! Además, hablé con Fernanda y le expliqué lo que te había pasado...me dijo que ella hablaría con el consejo, para disculparte y que del tiempo que te tardes en sentirte mejor, su prima nos concede dos días más para estar juntos - él abrió los ojos sorprendido, sin poder creer lo que le acababa de decir y me incline a besarlo, el beso fue un poco más largo, pero ambos lo disfrutamos.
Anakin: - O sea si yo decido que me voy a recuperar en dos semanas, tengo dos días más libre para terminar de convivir contigo - yo sonreí ante su comentario.
Padmé: - Es posible, pero una condición - él levantó una ceja - que me dejes ser tu enfermera - dije ensanchando mi sonrisa.
Anakin: - Usted señora Skywalker, siempre serás mi ángel de la guarda que me cuida - lo besé al ruborizarme - creo que voy a disfrutar estar enfermo - dijo mientras nos besábamos.
Padmé: - Ay, cierra la boca - y lo volví a besar, pero luego, él sintió la presencia de alguien que iba a entrar y yo me paré en seguida; al abrirse la puerta, vimos que era la enfermera, que nos entregó las medicinas para la rehabilitación de Anakin.
Enfermera: - El doctor me dijo que el general puede irse, pero que debe ser con cuidado y a un lugar no muy lejano para que comience la rehabilitación - ambos asentimos y lo ayudé a levantarse y después, nos dirigimos a la plataforma y tomamos una nave que nos llevaría a la casa del lago.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Narrador Fernanda:
A pesar de estar en Courusant y ellos en Naboo, alcancé a escuchar su conversación y decidí tomarle la palabra a Anakin. Les hablé al consejo sobre el caso de Anakin y lo aceptaron sin problemas, les dije que se iba a tomar dieciséis días de reposo por órdenes del doctor y me creyeron. Diez minutos después, llegué a mi cuarto y me encontré con Caspian y Peter que me estaban esperando.
Fernanda: - Listo, ahora ¿cómo va nuestra investigación? - pregunté mientras reinstalaba mi equipo de investigación de mayor tecnología.
Caspian: - Digamos que hasta ahora, el Canciller se la ha pasado en muchas sesiones diplomáticas para tratar de crear más ejércitos para la República - giré mis ojos ante el sarcasmo de la idea.
Fernanda: - Vaya ¡qué no tiene nada mejor que hacer! Pareciera que lo único que le importa es sacar más dinero - dije sentándome molesta en mi cama - sobre todo, si le agregamos el hecho, de que la razón por la cual sigue creando más clones es para tener en pie a su ejército que destruirá a los jedis.
Peter: - Sí, pero afortunadamente nos adelantamos y les extrajimos ese bendito chip a todos los clones - dijo sonriendo - y los kaminenses, están amenazados de seguir implementando esos chips.
Caspian: - Por lo pronto, hay que mantenernos así, actuando escondidos y no adelantarnos hasta que sea oportuno - dijo volteando a ver a la pantalla y los tres captamos un hecho anormal que ninguno esperaba.
Fernanda: - Chicos, ¿qué es eso? - Caspian con la mano, acercó la imagen - Parece un lugar en Geonosis - tenemos cámaras, totalmente ocultas, en todas partes de esta galaxia las cuales, nos transmiten todo lo que pasa en el momento.
Peter: - Pareciera que algo se mueve en Templo antiguo de Geonosis, no se ve muy claro, pero la figura de la entrada muestra a una de las reinas antiguas del planeta - eso me recordó a los dibujos de aquéllas criaturas, que aparecían en mis sueños cuando veía los recuerdos de Ikenewa.
Fernanda: - ¿Les parece si vemos más adentro? - les pregunté sonriendo y ambos aceptaron riendo. Apagamos el equipo y nos sentamos en círculo para meditar.
"Se escuchaban voces...voces siniestras y otras algo hipnotizadas, los tres vimos un laberinto con muchos pasajes sin fin. Al final del camino, vimos un cuarto o recámara grande donde se hallaba la gran reina de los insectos.
Reina de Geonosis: - Muy pronto, con mis nuevos engendros podré tener el control absoluto de la Galaxia - hablaba en el idioma de los geonosianos, pero lográbamos traducirlo con la ayuda de nuestro cristal - éstos gusanos, Puggle, servirán para controlar la mente de los vivos como de los muertos y así ni los separatistas ni la República podrá detenernos - vimos imágenes de geonosianos muertos, siendo resucitados por los parásitos, también aparecieron hombres y mujeres, hipnotizados por los gusanos y salimos de la visión."
Peter: - Los reyes de Geonosis, no se extinguieron del todo en tiempo de nuestros ancestros - dijo nervioso - ahora está creando un ejército, de esclavos vivos y muertos.
Caspian: - Si lograra cometer su propósito, nadie estará a salvo de su control mental.
Fernanda: - Por eso debo dirigirme a Geonosis, cuando se lleve a cabo la invasión - tomé aire - es la única forma en que lograré darle un fin seguro a éstos reyes antiguos, sobre todo así detendré la creación masiva de estos parásitos.
Caspian: - Bueno, también yo creo que hay que dejar que todos ellos vean, que los geonosianos nunca iban a ayudarlos, sino a conquistar a todos fueren del bando que fueren - concorde con él - pero bueno, Dios, nos irá dando el tiempo para descifrar eso.
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Narrador Anakin:
Pasaron dos horas para llegar a la Casa del Lago, primero cenamos y tomé mis medicamentos para que no me afectara al momento de dormir y ambos nos cambiamos y nos acostamos en nuestro cuarto. Al día siguiente, desperté antes que ella y yo me atreví a acariciarle su rostro mientras el Sol salía, ella comenzó a despertarse al sentir mi mano.
Anakin: - Buenos días, ángel - le dije cariñosamente.
Padmé: - Buenos días, Ani - me saludó con una sonrisa en los labios - ¿cómo dormiste? - suspiré aliviado, por fin en años pude dormir bien.
Anakin: - Gracias a Dios, pude dormir en paz...sin pesadillas ni angustias - le di un beso al verla contenta con mi tranquilidad - debo admitir que este tiempo de descanso, me servirá de mucho para relajarme, sobre todo que puedo estar tranquilamente contigo.
Padmé: - Ay Anakin, me encantas - yo reí apenado - ¿sabes qué eres lo más bello que me ha pasado en la existencia?
Anakin: - ¿Y que tú eres lo más hermoso e importante que me pudo haber regalado la vida? - ella se recargó en mi pecho, pero en eso recordé que escuché a Dooku amenazar a Padmé de intercambiar a Grievous por mí, que suspiré triste.
Padmé: - ¿Qué pasa Ani?
Anakin: - No te lo había podido decir antes, pero...lamento que hayas tenido que liberar a Grievous por mi culpa - ella negó con la cabeza y me besó tranquila.
Padmé: - Ani, no fue tu culpa, la verdad es que no valía la pena tener a Grievous encerrado, si tú estabas en manos de ellos - me acarició la mejilla - además, tarde o temprano lo atraparás, estoy segura; sobre todo, no iba a dejar que mi esposo se quedara en manos de un desalmado como Dooku - la besé de nuevo para demostrarle mi agradecimiento.
Anakin: - Lo ves, te digo que tú siempre serás mi ángel de la guarda - ambos reímos y luego, nos cambiamos para desayunar y disfrutar del día.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top