[10 semanas/3 meses]

20 de abril: cumpleaños de Katsuki

— Katsuki... — el pelirrojo trataba de despertar a su pareja lo más delicado, para que no exploté claro. El rubio soltó solo un quejido por las leves sacudidas — Katsuki... es tu cumpleaños...

— ¿Y...? — Habló con voz ronca.

— Y es el día en el que me puedes pedir cualquier cosa con la excusa de que es tu cumpleaños~

El rubio se levantó rápidamente. Es el mejor puto día del año. Le dio un beso en los labios a Eijiro y se levantó rápidamente a ducharse.

— Blasty~, ¿Puedo ducharme contigo?

— Jaja, no...

Eijiro le dio un puchero a su novio. El rubio, cayendo en la belleza de su pareja, chasqueó la lengua y le dio una señal con la cabeza hacia el baño. El pelirrojo, con una mirada de cachorrito feliz, corrió hacia la ducha.

Al ya estar desnudos completamente el pelirrojo se quedó viendo la panza de Katsuki.

— ¿Qué me ves? No es como si fuera la prime-

— Tu pancita. Tienes una pequeña pancita. —El rubio miró la mano de Eijiro posarse en su levemente abultado vientre — ¿Por qué no me dijiste que ya tenías una pancita?

— Pensé que ya te habías dado cuenta... Entra ya, hace un frío de mierda.

—... — El pelirrojo se quedó observando el cuerpo del rubio — También te crecieron los pe-

¡Boom!

Una pequeña explosión de "advertencia" se escuchó en el departamento. Bien, algo que Eijiro sabía es que ahora ya no se va a duchar junto al rubio.

— Ah... ¡Te amo~! — Exclamó luego de ser exiliado del baño.

El rubio, después de ser consentido todo el día por su pareja, se encontraba de un muy buen humor. Ropa nueva, comida exquisita, regalos bellísimos, caricias, abrazos y besos; no se merecía a su pareja.

Caminaban por las calles de Musutafu. La calle estaba decorada por las hermosas flores de cerezo, romantizando el ambiente. Caminaban de la mano a un lugar que solo conocía Eijiro.

— Ei... — El rubio susurró mientras seguían caminando. El pelirrojo le apretó la mano suavemente, haciéndole entender que lo estaba escuchando — Tengo hambre...

— Pronto vamos a llegar, cielo...

Katsuki olisqueó el ambiente.

— Quiero churros.

El rubio luego de minutos, cuando se empezó a oscurecer, se dio cuenta de su destino final.

— ¿Un parque de diversiones? — Katsuki preguntó un tanto irritado — ¿Qué mierda voy a hacer embarazado en un parque de diversiones?

— Si... El squad planeó esto hace días y no les pude decir que no. No saben aún sobre tu estado, ¿no? — Eijiro observó el puchero de su pareja. Le agradecía bastante al embarazo al ver las emociones de Katsuki a flor de piel, ¡Bendito sea! — Aww, pero anímate, cariño. Podrás comer churros~

Su rostro se iluminó y, como un niño pequeño, arrastró al pelirrojo adentro del parque.

— ¡Katsuki! — Denki exclamó al ver de lejos a la pareja. Tomó de la mano a su pareja, Shinso, y corrieron hacia ellos.

Sero y Mina caminaron detrás de ellos.

— Claro~, el rico siempre humillando al pobre — La heroína, conocida por su soltería, comentó — ¡Oigan, compartan!

Katsuki ignoró el abrazo por parte del rubio y corrió hacia el puesto de churros.

— ¡Churros~!

Sero, Mina, Shinso y Denki se quedaron viendo como el ojirubí corría como un niño pequeño a ese puesto de churros.

— Ah, tenía ganas de churros. — Eijiro también se quedó viendo a su pareja con ojos de enamorado — Antes de subirnos a algo, ¿Qué tal si nos sentamos unos minutos en esa mesa de picnic? Hay, ah... una noticia.

— ¿¡QUÉ?!

— Sip, Eijiro me preñó.

Los chicos se miraron sorprendidos por la noticia inesperada, Katsuki solo comía su cuarto churro mientras Eijiro veía enamorado a su pareja engullendo su cuarto churro.

—... ¿En serio? — Un leve tono de emoción se escuchó por parte de Mina. — ¡Voy a ser tía! ¿Denki, por qué no te ves feliz? ¡Eijiro y Katsuki tendrán un bebé!

—... ¿¡Por qué no me dijeron antes de pagar las entradas que Katsuki no se podía subir a ningún juego?! Yo tuve que pagar todo — El rubio se quejó, reposando en el hombro de su pareja.

Katsuki sí podía subirse a dos o tres juegos, pero comió muchos churros y bastante algodón de azúcar, además de refresco, que la probabilidad de vomitar era... bastante alta.

—... ¡Quiero ir a las tacitas, esas cosas que giran! — Demandó el ojirubí a su novio. — ¡Oh, o al carrusel! Acompáñame al puto carrusel, cielo.

Y Eijiro fue arrastrado por su novio al tiovivo. Era bastante bonito, estaba lleno de luces y su música era bastante cirquera.

El bakusquad no se subió a la atracción, se quedaron viendo al rubio divertirse. Su vida será bastante diferente con un chamaco.

— Voy a comprar un pastel para cantar cumpleaños feliz — Avisó el pelinegro antes de alejarse de ahí.

Sí, el día fue bastante tranquilo. Tal vez uno de los cumpleaños más inolvidables de Katsuki.

— Cumpleaños feli-

— ¡BLUAGHH!

Katsuki. Vomitó. En. El. Pastel.

Bueno, a pesar de eso la pasaron genial. Mina les rogó que la invitarán a la ecografía como la tía luchona que es, Shinso y Denki hablaban sobre tener otro hijo, digo... gato, y Sero solo se saboreaba el pastel sino hubiera... vomitado por Katsuki.

Ellos eran su grupo, su clan, su equipo, su squad, sus amigos. Los tíos del chamaco...

— Ei... — Katsuki ligeramente sollozó — Piensa, ellos serán sus tíos, este chamaco se va a criar con ellos... ¿¡Qué tipo de persona estamos creando junto a esta banda de estúpidos!?

Ay, el Bakusquad...

Bueno... se hizo lo que se pudo.

¿Qué quieren para el próximo capítulo?

Si hay algún error, duda o idea no duden en escribirla

¡Y eso!

Adieu!