Jungkook abrió los ojos como plato y se atragantó con el té, comenzando a toser con fuerza sin parar y quedándose sin aire mientras sus ojos se aguaban.

Jimin, por otro lado, me miró sorprendido y sonrojado, sus mejillas se habían puesto terriblemente rojas y calientes ante mí pregunta. Sabía que se había quedado en shock, por lo que no me alarme en pensar que estaba dudando.

Jungkook seguía tosiendo frente mío pero el podía irse bien derechito a la mierda, Jimin acaparaba mi mente ahora y que un mesero estuviese golpeando suavemente la espalda de Jungkook para que se calmara y no se siguiera ahogando era lo de menos.

De pronto, Jimin me sonrió. Una sonrisa preciosa, de oreja a oreja, con las mejillas aún rojas y abultadas y aquella naricita de botón que quería besar, sus ojitos se achinaron más de lo normal. Era precioso, realmente precioso.

—Si.

Muy bien, estoy reconsiderando aquello de que ni Jimin me hacía sentir realmente bien.

Se sentía real y jodidamente bien.

No pude evitar sonreir de oreja a oreja, mostrando mis encías y mis dientes blancos. Una sonrisa que pocas veces sacaba a relucir y que, por primera vez, Jimin veía en su máximo esplendor.

Escuché a la lejanía que Jungkook comenzaba a toser el agua que le habían ofrecido. Pero yo solo comencé a acariciar la abultada mejilla de Jimin y me acercaba a besarle de la forma mas cariñosa, seductora y dulce que podía, siendo correspondido y embriagandome de su olor a café, chocolate, y un poco de canela.

joanne | 180209

¡Hola!
Se que me demore en actualizar, pero me estuve mudando y de hecho ahora estoy de vacaciones, je.
Pero ya he vuelto, dispuesta a —aún no lo se bien— terminar esta novela.

También les quiero mostrar a mi pequeña bebita preciosa que tengo como hija❤️

Lel, la foto se dio vuelta.