Bella's Lullaby
Carter Burwell, Dan Redfeld, Elizabeth Hedman
00:04 ──⊙──────── 02:20
↻     ◃◁  II  ▷▹     ⇀

El Clan Denali se encontraba a la espera, Alice había avisado que algunos de la Guardia Vulturi llegarían en busca de Edward y ella, por ende les incumbía a todo el Clan Cullen, de manera indirecta a ellos. Al principio Tanya se puso nerviosa por la situación, además de saberse el dichoso chisme del cual toda culpa había sido de su crush el cobrizo hacia la humana.

—Entonces dices que una integrante de los Vulturi vino hace unos meses junto a ustedes, encontró en Jasper a su compañero y por consiguiente mató a la humana que tanto habían protegido. —intentó comprender Kate, totalmente incrédula por la situación tan seria.— ¿Y cómo supo esa mujer de su conexión con la humana?

—No lo sabemos, ni mucho menos sabemos como supo esquivar nuestros dones. Debe ser un arma letal de Aro.—responde Rosalie a la defensiva— Esa mujer contaminó a Jasper, echó a perder todo el esfuerzo para seguir nuestra alimentación vegetariana por el retrete. ¡Años!

—Hija, debes comprender que tu hermano debía seguir su camino con su otra mitad, tal y como tu lo estás con Emmett..—intervino Esme comprensiva.

—¿Y si coloca a Jasper en contra nuestra como Edward lo dijo antes?—pregunta a la defensiva Rosalie.

—No será así. Has notado perfectamente las intenciones que Báthory ha influido en Jasper y todas son de libre albedrío. —interviene Carlisle mientras se acerca a ella con intenciones de calmarla— Por el momento, te pido que tengas calma, el asunto ya está zanjado. Vivamos el presente que ya los puedo ver.

El líder del Clan enfocó su vista al horizonte, encontrando a tres personas acercarse rápidamente a su ubicación, a más de uno le causó impresión ver a la neofita Bella con aquella capa roja e insignia del Clan Vulturi, sus acompañantes eran Jane y Demetri; poseedores de dones tales como: Ilusión de Dolor y Sentido de Rastreo. Lo cual extrañó de que no fueran Jasper y Báthory quienes llegarán a su lado.

Edward estático como un maniquí quedó al ver los ojos rojos en la castaña que tanto había luchado para que fuera humana sin tanto lío. Sin embargo, nada lo preparó para lo que iba a descubrir.

—Carlisle, un gusto volver a verlos.—expresa feliz Bella.

—Es bueno verte con buen bienestar, Bella. Bienvenidos Jane y Demetri. —saluda el rubio con respeto.

Demetri saluda en silencio, mientras que Jane mira seria a todos, como si ya los estuvieran esperando. Terminó mirando a la vidente y una sonrisa torcida nació en su rostro, su misión estaba en ella. «Un poco de dolor para quién dañó a Madam Báthory»pensó.

Edward quiso intervenir pero fue tarde, Alice se encontraba arrodillada quejandose de dolor horrible, gritando por piedad.

—¡Jane, para por favor! No hemos hecho nada para que la dañes. —suplica Carlisle preocupado.

El Clan Denali permanecía neutral, la mirada de Eleazar y Carmen era de pena, mientras que Tania aseguró de que sus hermanas no se involucraran no era su asunto, por mas familia que se considerasen.

—¿No habéis hecho nada? Eso es insolente de vuestra parte Cullen. Esa mujer ocultó el compañero a Madam Báthory, deben estar agradecidos de que nuestro amo aún no esté al tanto de vuestras estupideces. —comenta frivola la rubia de ojos rojos. Mientras disfruta del dolor y los ojos cristalizados de la vidente Cullen— Debe aprender a no entrometerse donde no le incumben.

—¿Dónde no le incumbe? Jasper vino por decisión propia hacia nuestro Clan. —intervino ponzoñosa Rosalie.

—Además de entrometida, mentirosa.

Jane no tolera la situación, y solo deja de torturarla cuando enfoca la vista en la neofita protegida.

—No desperdicies mas tiempo, quiero regresar antes. —advierte a Bella.

Bella asiente y se acerca a Edward con intenciones de interactuar con él, observar y percibir su cercanía. Solo para distinguir si lo que su creadora decía era verdad.

«No eres más que una Tua Cantante, no eres su compañera. Compruébalo, no pierdes nada con hacerlo solo que hubiera sido mejor que lo supieras con más anestecia, querida.»

Si bien, Amparo Báthory podía ser una loca sádica pero tenía buen corazón cuando se podía socializar con calma. Ya que había escuchado que su carácter era peor de lo que se podía ver antes de conocer a Jasper.

—Edward, somos iguales, ahora podré protegerte y podríamos vivir una aventura de mochileros, ¿Te parece?—pregunta Bella, sin rodeos, una maña que se le estaba pegando de su creadora Báthory.

—Bella... Yo... Perdóname por no haber hecho bien las cosas antes, si yo no hubiera estado en tu vida no hubieras acabado así...—contesta Edward totalmente horrorizado y culpable.

Por un solo un instante, Bella quería creer que escuchó mal.

—¿Qué? Pero si ahora ya no soy una humana débil a la que proteger, ahora ya podemos ser felices juntos, Edward.—intenta sobreponer la sensación de tristeza que empezaba a invadir su cuerpo con desilución.

—Bella yo no quería esto para ti. Estas muerta, te arrebataron la inocencia y más que eso el alma. ¡somos unos monstruo, yo lo soy más!—niega totalmente inconforme a la idea.

—No me arrebataron nada, yo quería ser uno de ustedes. Yo quería ser así para estar contigo, ¿Porque parece que ahora ya no parezco ser de tu interés?—pregunta empezando a sentir dolor y vergüenza al haber confiado en que Edward la recibiría con los brazos abiertos tras convertirse.

Edward indignado y asqueado por como la veía, dio un paso atrás. Demostrando su inseguridad y realidad.

—No era necesario que fueras igual a nosotros, ya no eres la Bella que conocí, ahora tienes los ojos de ellos... Te alimentas de humanos... Eres del bando enemigo Bella. —contesta incómodo, rehuyendo su mirada.

Bella tras ver aquello, se tuerce en molestia su boca. Su cuerpo era consumido con tristeza y molestia, había sido tan ingenua.

—Entiendo. No soy tu compañera. Ni tu eres el mío. —contesta mientras mira a Esme y Rosalie— Perdonenme por haber sido una molestia para su familia, ya no volveré a molestarlos.

Esme regaló una sonrisa de comprensión, intentando no sentir vergüenza de como su hijo se estaba comportando a quien había considerado su yerna, meses atrás.

—No fue tu culpa, Bella. —contestó Esme— Espero vivas mejor con ellos.

—Sigues siendo un problema para mi familia, nada es color de rosas en este mundo y ahora ya lo irás entendiendo. —comenta Rosalie para luego irse dentro de la cabaña. Ya no era interesante seguir observando aquello.

Carlisle estaba incomodo, avergonzado como había actuado Edward. Habían podido concluir que Isabella Swan había sido solo una Tua Cantante para su hijo, y no como Edward quería moldear para su eternidad. La verdad muchas veces no era agradable de tragar ni enfrentar.

—Lamento mucho que las cosas entre ustedes no resultarán, igualmente, si un día de estos quieres cambiar de alimentación puede venir...—comenta Carlisle comprensivo.

Bella niega la cabeza, y por última vez observa a Edward.

—La próxima vez que venga, no será por excusa patética. Ya veo todo claro, siempre fui su juguete, solo un banco de sangre que trajo interés a su hijo mayor. Gracias por todo. —dice Bella, mira a Alice y se acerca a ella— Fuiste una buena amiga, pero mi creadora no será piadosa contigo, esconder un compañero por motivos egoístas como los tuyos no tienen perdón.

Alice con terror mira a los Vulturi y a su supuesta mejor amiga, dolida busca entender con qué motivo lo dice. Nadie más que Edward podía saber de sus intenciones, nadie mas...

—Ella posee muchos dones... Ella lo sabe todo, Alice. Y me duele decirte esto, pero no tienes salvación. —contesta Bella ante la duda de Alice.

—No hay que ser videntes para saber que pronto nos volveremos a ver, Clan Cullen.—interviene Jane con una sonrisa cínica— Es hora de regresar, neofita.

Bella asiente, se coloca la capucha y suspira sin ser necesario. Intenta sonreír pero no le sale.

—Adiós.

Así sin más, Jane, Demetri y Bella se retiran, dejando a un Clan advertido, Alice con temor y vergüenza, mientras que Edward solo se retira inmediatamente para no dar la cara a la situación tan humillante que ofreció.