Seis




Tuvimos una reprenda cada uno de nosotros, pero fue más hacía mí. ¿Es que acaso yo tenía la culpa de todo lo que había pasado? En parte si, pero yo no comencé esto.

Empuje la puerta de la sala con evidente fuerza, sentía mi sangre calentarse a medida que pasaban los segundos. Era impresionante que me hayan dicho que tuve la culpa por seducir a Park, llegaron a decirme que fue una mala idea incorporar una mujer al grupo. Pero les recordé que en ese tiempo fui la primera en llegar pensando que sería solista hasta que ellos tomaron la decisión de ser parte del grupo. Estuve de acuerdo, por supuesto, era una buena idea y además parecían estar presionándome. Ahora se arrepentían.

— Debes calmarte — Mencionó Taehyung, era la última persona que podría decirme aquello. Me di la vuelta para encararlo, sin importar que estábamos en el pasillo de la empresa donde «probablemente» podría armarse un caos. De nuevo.

— ¿Como podría hacerlo? ¡Las personas que tanto he querido desde hace más de siete años me traicionaron! — Le grité, él solo chasqueó la lengua y colocó los ojos en blanco. De verdad que en estos momentos deseaba estampar mi puño en su rostro.

— ¡Negin! — El manager me gritó desde el otro extremo del pasillo. Le dedique una última mirada a Taehyung y me fui de ese lugar. Pasando entre los demás chicos, Seokjin trato de detenerme pero me zafé de su agarre con brusquedad.

Salí del edificio minutos después, entré al auto y conducí hasta mi departamento. En donde no los vería, a ninguno de ellos. Apague mi teléfono móvil debido a las infinitas llamadas de los demás, me dirigí al pequeño bar y tomé la botella entre mi mano izquierda. Bebí de ella como si está de tratara de agua, lamentablemente en el departamento había ropa de Jimin. Me adentre a la habitación, específicamente al closet. Solía compartirme su ropa aunque me quedara un poco grande pero me gustaba usarla.

Me tiré en la cama pensando que probablemente esto acabaría pronto, por el bien del grupo, nuestro manager dijo que deberíamos distanciarnos un poco pero disimular ante las cámaras. También "amenazo" a los del staff para que nada saliera de nuestro entorno. Park no dijo nada, ni siquiera protestó en cuanto la culpa cayó en mí. Solo miraba sus manos como si fuera lo más importante e interesante. Por otro lado, empezaba a tener un sentimiento diferente hacía Taehyung. Ya no sentía ese cariño de antes.

La botella se acabó por lo que la dejé caer a mi lado, estaba un poco ebria, tenía demasiado aguante para el vodka y cualquier otro tipo de alcohol. El timbre del departamento sonó por todo este, solté un quejido y me levanté con torpeza para abrir la puerta. Dios mío, primero debía fijarme de quien se trataba pero ya era muy tarde. Jimin estaba frente a mí, volví a cerrar la puerta pero la detuvo y entró. Lo ignoro por completo y seguí mi caminar hacía donde me encontraba anteriormente.

— Negin, debes regresar a la empresa. Algo ha pasado — Declaró, lo que pasara ya no me importaba del todo. Volví a tirarme a la cama pero ahora boca abajo y cerré mis ojos. Trataba de hacer que el ambiente fuera tranquila y como si solo estuviera yo — Hey, vamos.

— Vete, me da igual lo que haya pasado.

— Negin, el video de la fiesta a donde acudiste, fue expuesto — Movía mis piernas para tratar de levantarme pero patalee. Como si me importara que ese video esté en redes sociales.

— Sabes que me da igual, no tiene absolutamente nada de malo que haya ido a una fiesta con amigos.

— Pero sales bebiendo como loca, no es un buen ejemplo. Arruinas la imagen del grupo.

— ¿Y? Nadie es un santo, por favor, deja de ser tan hipócrita — Solté una risa sarcástica, oh de verdad me encontraba ebria. Ya lo sentía por mis venas.

— Y por eso mismo debemos influenciar a las personas para que sean buenas, siempre has dado una mala imagen con tus argumentos. Diciendo que puedes vestirte como se te de la gana, por ello muchos hombres te faltan al respeto. Luego con esto de beber como loca, ¿que pensarán de nosotros? Nos pueden quitar muchos títulos por tu culpa, Negin.

Me reincorpore para quedar sentada, lo miré con seriedad y furia. No puedo creer todo lo que me ha dicho.

— Lo seguiré haciendo, tengo derecho a divertirme. No voy a dejarme influenciar por demás personas que no deben intervenir en mi vida. Es mejor que te vayas y no vuelvas a hablarme.

— Te duele tus verdades. Todo el tiempo hay personas que suelen quejarse por tu actitud.

— ¿Que actitud? ¿Defender mis derechos como mujer? No me creo la gran cosa, lo sabes. Tengo los pies sobre la tierra y seguirá siendo así, no entiendo cuál es tu problema — Lo señale, Jimin ladeó su cabeza y soltó un suspiro.

— Ya, dejémoslo aquí. No hay problema, solo compórtate un poco más — Sonrió y se dio la vuelta para salir de mi habitación. Al instante me eché a llorar como una niña pequeña.

Creo que después de todo, tendría que tomar una decisión. No quería más problemas, me afectaba mi salud mental. Salirme de Bangtan sería lo que me trajera tranquilidad, adiós discusiones y adiós Jimin.

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