Los tenues rayos de luz se posaron sobre los ojos de la pelimiel lo que la hizo despertar. Miro sus alrededores y se dio cuenta que no estaba en su casa. Quiso levantarse pero no pudo, sintió algo en su cintura y estaba acostada sobre alguien. Era Ash, había dormido con Ash. Se sonrojo al darse cuenta de que no traía ropa al igual que Ash. Ash despertó al notar a su chica moverse.

Ash: ¿Que tal dormiste, preciosa?- le susurro al oído con voz ronca.

Serena: Sí. Gracias por esto, Ash.- dijo mientras se aferraba más a su pecho.

Ash: No eres la única que lo disfruto, gracias también.

Ash la acerco más a él para volver a besar sus labios una vez más y lentamente el beso se fue intensificando así como las caricias entre ambos y antes que se dieran cuenta ya estaban a punto de hacer el amor otra vez pero el timbre del departamento sonó para interrumpirlos.

Ash: Ay que fastidio.

Serena: Puede ser algo importante, Ash.

Ash: Nada más importante que esto.- dijo volviendo a acariciar las mejillas de su novia con sus labios.

Serena: Ash, mejor abre la puerta.

Ash: Ay bueno, esta bien.- dijo levantándose de la cama y se ponía su ropa mientras salía a abrir la puerta.

Ding dong

Ash: Ya voy, ya voy.- dijo apresurándose a abrir la puerta ante tal insistencia.

Y ante toda sorpresa, era Gary.

Ash: Gary.

Gary: ¿Donde está ella?- dijo molesto.

Ash: ¿De que estás hablando?- dijo confundido.

Gary: ¿Donde está Serena?

Ash: No sé de qué estás hablando.- por como se ven las cosas era mejor no decir la ubicación de su amada.

Gary: ¿Acaso creíste que te iba a dejar de rositas después de traicionarnos por una amazona?

Ash: ¡¿Que?!

Gary: Te creí más listo, Ash. Eras mi hermano, el hermano mayor de todos y nos pusiste de lado por una chica.

Ash: Detente, Gary.

Gary: ¿No te das cuenta que solo trata de separar la banda? Ellas saben que sin ti, la banda perderá fuerza y quedaremos vulnerables a ellas.

Ash: ¡HE DICHO QUE TE CALLES!

Gary: Ash. - se quedo sorprendido, él nunca se había comportado así.

Serena: Ash, ¿por qué tantos gritos?- dijo Serena saliendo del cuarto con una bata para cubrir su cuerpo.

Gary: Hablando de la reina de Roma. Ahora hasta la has alojado en tu casa.

Ash: Creí haberte dicho que cerrarás la boca.- dijo restando le atención a Gary y acercándose a Serena.

Serena: ¿Ese no es tu amigo? ¿Que está pasando, Ash?- dijo confundida por lo que veía.

Ash: Tranquila, mi amor. Vuelve al cuarto, por favor.

Gary: ¿Y ahora duermes con ella?

Ash: Ve al cuarto, cariño.- dijo dándole un beso en los labios a Serena.

Serena: Está bien.- dijo Serena al mismo tiempo que se separaba del azabache para volver a la habitación.

Gary: Nunca te creí capaz de traicionarnos por una chica, realmente me sentí traicionado cuando me enteré.

Ash: Y yo hasta ahora no puedo creer que te deje manipular mi vida por tanto tiempo.

Gary: ¡¿QUE?!

Ash: ¿A ti que mierda te importa si salgo con ella o si me acuesto con ella? Lo que yo haga con mi vida no es asunto tuyo.

Gary: Ash.

Ash: No te hice caso y ¿sabes que? Que bueno que no lo hice. Porque todo este tiempo me ha demostrado que es la mejor persona que voy a conocer en toda mi vida. No te imaginas todas las veces que me ha ayudado y sin pedir nada a cambio solo verme feliz. Esa chica me robo el corazón y nadie me alejará de ella.

Gary: Ash, como líder de la banda no te permitiré seguir con ella, tarde o temprano te apuñalará por la espalda. Estoy seguro.

Ash: No pasará eso, ella nunca haría eso. Y él único capaz de darme ordenes fue asesinado cuando yo tenía 7 años, tú ni nadie va a reemplazar eso.

Gary: Ash.

Ash: Sal de mi departamento, Gary. Antes que se me olvide que eres mi mejor amigo.

Gary: Bien, me voy. Pero ni que se te ocurra, venir llorando con nosotros otra vez cuando esa p*** te traicione.

Ash: Dice eso el que se sale con una chica que se desnuda por dinero.

Gary: ¡¿COMO DIJISTE?!

Ash: Lo que oíste, no te metas con mi novia. Largo de mi casa, Gary.

El pelimarrón se retiro molesto del lugar y la pelimiel pudo salir del cuarto de dormir.

Serena: ¿Estás bien, Ash?

Ash: Tranquila, mi amor. No nos fuimos a los golpes. ¿Escuchaste todo?

Serena: Si....... fue muy bonito lo que dijiste sobre mí- dijo regalando le una sonrisa a su novio por protegerla por encima de todo.

Ash: No te preocupes, tampoco iba a dejar que te dijera eso.

Serena: Creí que ya habías arreglado las cosas con tu banda

Ash: Fui un verdadero tonto al pensar que todo iba a quedar bien después de lo que hice.

Serena: Todo esto es mi culpa.

Ash: No, no es tu culpa.

Serena: Si no me hubiera dejado secuestrar por Misty, nada habría pasado.

Ash: No digas eso. Ella lo pagará caro, los demás ya aprenderán a aceptar nuestra relación. Seguiremos juntos quieran o no.

Serena: Gracias, Ash.

Ash: Mejor olvidémonos de ese creído y desayunemos algo.

Serena: Hablando de eso, no veo que tengas nada para comer.

Ash: Ah eso pues.

Serena: ¿Como demonios puedes tener tanto musculo comiendo pura comida chatarra?

Ash: Pues los tengo y si que los viste muy de cerca a noche.- dijo burlón.

Serena: ¡ASH!- dijo sonrojándose y dándole golpecitos a Ash por su burla.

Ash: Jeje lo siento, tú empezaste.

Serena: Ni hablar. En este momento salimos al mercado a comprar comida saludable.

Ash: ¡¿QUE?! Eso no es.....

Serena: Sin excusas, Ash. Vamos o no habrá **** para ti, Ash Ketchum.

Ash: Pero, nena.

Serena: Ya me oíste, vamos.

Resignado, el azabache tuvo que aceptar las demandas de Serena e ir con ella al mercado a comprar su comida saludable. Pero ahora nos centramos en Gary quien se retiro confundido del departamento de quien pese a todo todavía consideraba su amigo. Estaba confundido ¿acaso Ash no veía que lo estaba protegiendo? Nada de esto era propio de Ash. Necesitaba orientación y tenía a la persona perfecta para hacerlo.

El pelimarrón condujo su moto a un striptease, pero no cualquiera sino en el que su novia Miette trabajaba. El chico entro saludando a algunos conocidos pero centró su atención en su chica que bebía algo de agua después de hacer su trabajo.

Gary: Hola, preciosa.

Miette: Ah! Otra vez...... Oh lo siento, hola cariño.

Gary: Que lindo saludo, cariño.

Miette: Perdóname, últimamente me siento acosada por un tipejo.

Gary: ¿Quien es?

Miette: Déjalo, mi amor.

Gary: Bueno, lo que tú digas. ¿Tienes un momento?

Miette: Para ti, toda mi vida. Vamos, que ya me aburrí de bailarle a vírgenes sin vida.

Gary: Tranquila, nena. Ya llegó tu verdadero hombre.- dijo picaron tomando la cintura de su chica mientras iban a un lugar más privado.

Gary se sentó en un sofa y empezó a hablar con su chica mientras ella le hacía un baile erótico sin ropa tal como Dios la trajo al mundo.

Gary: Pues ahí estamos ahora. Ash nunca se ha comportado así con una chica desde Misty. Quiero protegerlo pero él solo me aleja.

Miette: Bueno, tampoco vas a controlar su vida de esa manera tan descarada.

Gary: Pero......

Miette: Si el quiere estar con esa chica pues tienes que entenderlo o callarte. Él es tu amigo no tu hijo.- lo interrumpió.

Gary: No es mi amigo, es mi mejor amigo. No quiero verlo llorar por una chica otra vez ni que algo malo le pase. Ash es el líder sin trono de la banda. Sin él, nos iremos abajo tanto en moral como en.....

Miette: Si es verdad lo que piensas, lo mejor es que sigas unido a Ash como siempre han estado. Si las Amazonas planean algo es mejor que tengas a Ash de tu lado.

Gary: Es cierto, si nos va a caer una guerra encima, la afrontaremos juntos como siempre la hemos hecho.

Miette: Eso.

Gary: Eres de lo mejor mi amor.

Miette: ¿Que puedo decir? Realmente no puedes hacer nada sin mí.- dijo dándole esa cautivadora sonrisa a su novio.

Gary: Je oh Dios, ¿soy yo o cada día estás más hermosa y sexy?- dijo acariciando los atributos de su novia.

Miette: Gary- iba a decir algo más pero Gary la jaló, obligandola a sentarse en sus piernas.

Gary: Cásate conmigo.- dijo mirándola a los ojos con decisión.

Miette: Gary.

Gary: Estoy harto que tengas que desnudarte para otros para poder vivir. He ahorrado y tengo dinero suficiente para que vivamos juntos en mi casa.

Miette: Mi amor.

Gary: Por favor, nena.

Miette: Yo también tengo algo que decirte.

La chica tomó la fuerte mano de su novio para sorpresivamente, ponerla sobre su vientre.

Miette: Siente.- le susurró al oído.

Gary hizo caso a su novia. El pelimarrón puso mucha atención en el vientre de su novia, al principio no sintió nada pero al rato sintió: latidos, uno tras otro.

Gary: Miette.

Miette: Es tuyo.

Gary: ¿En serio?- dijo sonriendo.

Miette: Claro que si. Todos los demás hombre pueden ver pero no tocar. Ningún hombre me ha tocado más que tú.

Gary: Entonces..... ¿Seré padre?

Miette: Es nuestro, Gary. Nuestro bebé.

Gary: Mi amor, ahora ya nunca te dejaré ir.

Ahora sin duda, Gary necesitaba a Ash y toda su banda más que nunca. Tanto Ash como Gary se necesitaban aunque no lo dijeran. Ambos tenían cosas importantes que proteger y todos los demás miembros de la banda también. La banda tenía que estar más fuerte que nunca ahora.

Bueno, aquí un nuevo capitulo de esta historia. Gracias por leer, deja tu voto si te gusto, sígueme si quieres y nos vemos en otra. Chao.