El inicio del día no podía ser peor para Ash: le fue difícil concebir el sueño la noche de ayer, su banda probablemente planea matarlo por traidor. Pero lo si sintio que faltaba eran los "molestosos" mensajes de Serena en su telefono.

Sin que se diera cuenta, esos mensajes lo hacían estar de mejor humor.

Pensamiento de Ash: Como extraño los mensajes de Serena....... y su comida...... su sonrisa.... ¡Dios! Basta ya. Esto es lo mejor para ella. Ahora, debo pensar en como solucionar todo....... Esperen... Misty.... esa maldita sabe de mi relación con Serena. Probablemente quiera hacerle más daño. No lo permitiré, le toleré muchas cosas, pero con ella no se meterá. Tengo que matarla de una ves. Tal ves mis soplones sepan donde está. Una ves que la mate, tengo que huir de la ciudad como sea.

El azabache toma un pequeño desayuno y se pone una chaqueta con capucha normal en ves de la que tiene el logo de su banda. Se dirige a su garaje para sacar su moto (tiene dos). Ash conduce a un barrio pobre donde viven los extranjeros que fracasaron en la vida. Nuestro azabache baja de su moto y da unos golpecitos a una casa.

¿?: ¡¿Quien es?!

Ash: Steve, soy yo Ash.

Al poco rato, un chico con apariencia robusta, ojos verdes y cabello rojo salio de la casa.

¿?: Es Stephan no Steve.

Ash: Oh lo siento.

Stephan: Bah, no importa. ¿Como estás Ash?- dijo para luego saludar a Ash con un amigable apretón de manos.

Ash: He estado mejor.

Stephan: ¿Que pasa?

Ash: Misty, eso pasa. Tengo que deshacerme de esa perra de una ves.

Stephan: ¿Por que?

Ash: Larga historia,  ¿sabes algo sobre ella?

Stephan: Pues, no. Pero tengo un socio que podría saber algo de ella. Tengo su número justo en mi celular.

Ash: Excelente, gracias, Estefano.

Stephan: Ay no puede ser.

Stephan le dio el número de su contacto a Ash y este le dio un poco de dinero como compensación. El azabache marco el número, mientras Stephan volvió a entrar a su casa. El encuentro fue acordado en el mismo parque en donde Ash y Serena tuvieron su primera salida. Ash espero un poco hasta que apareció un hombre vestido de manera elegante, delgado y con lentes. Ash se le acerco.

Ash: Eh..... ¿Kenshin Hiroshima?

¿?: Si, ¿Ash Ketchum?

Ash: Si, debes ser el amigo de Stephan.

Kenshin: Claro, siéntate y dime que puedo hacer por ti.- dijo indicándole a Ash que tome asiento.  

Ash: Pues, estoy buscando a Misty, una conocida tuya tengo entendido.

Kenshin: ¿Esa miserable? Disculpa, pero no tengo tiempo para ayudarte  a buscar compañía en la cama.

Ash: No quiero eso, tengo que matarla.

Kenshin: ¿Matarla? Y ¿puedo saber por que?

Ash: Amigo, no es asunto tuyo. ¿Puedo contar contigo?

Kenshin: Claro, más bien es mejor para cualquiera que ella muera. Solo que nadie tiene las agallas para hacerlo.

Ash: Bien, necesito acabar con ella lo antes posible.

Kenshin: Ahora mismo le diré a mis soplones que peinen cada manzana de este lugar. Tendré la información para mañana.

Ash: Perfecto.

Kenshin: También me encargare de cubrir tu escape.

Ash: ¿En serio?

Kenshin: No me conviene que te atrapen.

Ash: Bueno, gracias- le dio un apretón de manos y monto su moto para regresar a casa.

El azabache hizo una parada.

Ash: Serena....- susurro viendo el lugar donde invito a comer a Serena el día que la conoció. 

Pero sus pensamientos fueron interrumpidos pues Ash noto una presencia, una presencia femenina. Dios, no podía ser. La chica volteo y en efecto era Serena, quien  noto al azabache y este bajo de su moto y corrió a su encuentro.

Serena: Ash.- dijo mirándolo a los ojos con un tierno brillo en sus ojos. 

Ash: Serena... ¿Que haces aquí?

Serena: Este es tu lugar favorito para comer. Quería hablar contigo, quería verte

Ash: Serena vete por favor. 

Serena: No, Ash. No voy a permitir que mi hermana me diga que hacer. Si quiero salir contigo pues ella lo entenderá.

Ash: Serena, no... no puedes estar conmigo.

Serena: ¿Por que no?

Ash: Serena, tu hermana tiene razón. Misty pudo haberte matado si hubiera querido, si estás conmigo podrías acabar muerta. ¿No entiendes? - dijo una tanto enojado.

Serena: No me importa. 

Ash: Mira las tonterías que dices.- dijo para luego tratar de alejarse caminando.

Serena: Oye.... ¡Oye!- dijo tratando de alcanzarlo y se mete en el camino.- No son tonterías, quiero estar contigo.

Ash: Sigues con tus tonterías, solo me conoces 2 semanas, ¿como demonios eres capaz de desobedecer a tu hermana por mí?

Serena: Me gustas.

Ash: .......- la miro muy sorprendido.

Serena: ¿Ya estás feliz? Lo dije. Me gustas.

Ash: Hmp. Tonterías. Eso dijo ella.

Serena: ¿Eh? ¿Ella?

Ash: Yo no necesito el amor de una chica, no lo quiero y no me hace falta. Ahora, por favor Serena, vete y olvídate de mí.- dijo con la cabeza baja.

Serena no podía creer lo que oía, Ash había rechazado sus sentimientos de esa forma. Se quedo de piedra  ante sus palabras. Y con lágrimas contenidas, Ash se alejo caminando. Serena se quedo un momento pensando. La respuesta de Ash no podía haber sido más clara, pero el corazón de la pelimiel le decía que esas palabras no venían del corazón del azabache. No podían, no eran.

La pelimiel siguió a Ash mientras dejaba su moto en su apartamento y entraba a lo que parecía ser un bar con mujeres strippers. Ash entró y pidió un trago y lo tragó en seco para proseguir a pedir otro. Su condición era un desastre, le dolió decirle eso a Serena pero no podría cargar con que ella muera por estar cerca de él.

¿?: Hola Ash. Cuanto tiempo- se oyó una voz acercándose a Ash. 

La voz le pertenecía a una de las tantas bailarinas del bar, como todas estaba con ropa que más bien parecían hilos. Se llama Silvia, es una bailarina y prostituta con quien Ash se acostado varias veces. 

Ash: Ah hola, Silvia- dijo mientras tomaba su segundo trago sin interés por la chica.

Silvia: ¿Y que te trae por aquí? ¿Te aburriste de esa Amazona con la que salías?- dijo con una cara sensual más falsa que la sonrisa de tu novia. 

Ash iba responderle que no hablará así sobre Serena, pero notó la presencia de la pelimiel al entrar.

Ash: Si, ya me cansé de ella. Ahora busco diversión y creo que este es el lugar indicado para hacerlo.

Silvia: Perfecto. ¿Bailas?- dijo extendiéndole la mano para ir a la pista de baile. 

Ash: Bueno, ya que lo ruegas- dijo como todo un patán.

Serena no era una chica tonta y se dio cuenta que Ash solo actuaba así para alejarla de él. Pero ella no iba a permitírselo. Con paso firme, Serena se camino hacia donde estaban. La pelimiel oía palabras de cortejo vacías. Serena era inmune a ellas, solo las palabras dulces de Ash eran capaces de enamorarla.

El baile entre Ash y Silvia estaba bien aburrido. La chica se esforzaba haciendo movimientos sensuales que hacían a los otros que estaban bailando querer ser Ash. Pero el azabache ni le importaba, solo Serena era capaz de tenerlo babeando con su lindura y su belleza natural.

Serena: Disculpa, amiga. Pero Ash me prometió esta canción.- dijo con notable rabia.

Ash: Serena....- pensó Ash.  

Silvia: Hm claro, ya me aburrí de este tonto. Mejor me voy a buscar a alguien mejor.- dijo alejándose.

Ash: ¿Que quieres Serena?- dijo enojado.

Serena: ¡Tal ves que dejes de hacer tonterías!

Ash: ¿Que?

Serena: No pienso alejarme de ti y tú tampoco quieres alejarte de mí. 

Ash: Solo me conoces dos semanas, te olvidarás de mí rápidamente.

Serena: No puedo ¿está bien?- dijo cerrando los ojos con un gran rubor en sus mejillas

Ash: ¿Que?

Serena: Ash, desde que te conocí no puedo dejar de pensar en ti. Estas salidas contigo fueron lo mejor que he vivido en mi vida. 

Ash: Serena, yo también siento lo mismo. Pero lo nuestro solo traerá problemas para ti o quiza peor.- dijo optando por sincerarse ante la insistencia de la pelimiel.

Serena: No tengo miedo, Ash. Si la única forma de estar contigo es vivir así pues así viviré. 

Ash: Pero, tu hermana. 

Serena: Que diga lo que quiera y que haga lo que quiera. Nuestros corazones se llaman mutuamente, lo sé. Y nadie va a separarlos, soy solo tuya y tú eres todo mío.

Ash: Serena, eso es.... ese es muy lindo.

Serena rodeo el cuello de Ash con sus brazos y el azabache tomó su cintura. En esta posición, sus bocas se fueron juntando hasta desenvolver en un hermoso beso dando inicio al romance de los dos. Sería un amor difícil de mantener, un amor que surgió de la nada y de forma desconocida. Pero que vale la pena totalmente, ese es el amor entre el Lobo Ash y la Amazona Serena.

Bueno, aquí mi regreso con esta historia y por fin subiré más seguido ya que estoy de vacaciones. Ya sabes, deja to voto si te gusto, comenta y sigueme si quieres. Hasta otra, chao.