Las balas caían como lluvia sobre el pequeño refugio de los jóvenes de bandas opuestas. Serena tenía la cara escondida contra el pecho de Ash mientras, que el azabache la consolaba y pensaba en como escapar. Había dejado su moto con los de su banda y la camioneta se encontraba en manos de Misty.

Misty: ¡Me las vas a pagar por matar a Tracey, perro! ¡Él era mucho mejor que tú en la cama! ¡Voy a mandarlos a ti y a tu novia directo al infierno!

Ash casi ni escucho lo que decía ya que solo se concentro en Serena, la muy pobre sujetaba su chaqueta como si su vida dependiera de ello. Estaba asustada de eso no hay duda, Ash no encontraba que demonios hacer. Pero ¿Por que estaba ahí en primer lugar? ¿Por que traicionó a toda su banda, sus hermanos, sus mejores amigos; por una chica? Ash nunca se imagino que sería capaz de hacer lo que hizo. Pero eso ya no importaba ahora, lo que importaba es que tenía que sacar a Serena de ahí 

Ash: Serena, escuchame. Por favor.

Serena elevó su cara para mirarlo a los ojos, la pobre lloró tanto durante la tortura que le hicieron pasar las secuaces de Misty. A Ash se le rompió el corazón verla así: adolorida, asustada y llorando. Ahora él notó lo mucho que prefería mil veces verla sonreir, su sonrisa era algo hermoso.  Pobrecita, tenía que decirle lo que harían.

Ash: Serena, tienes que salir de aquí. 

Serena: ¿Que?

Ash: Trataré de distraerlas con las 5 balas que me quedan. Ganaré tiempo suficiente para que puedas salir de aquí.

Serena: Pero ......¿Y tú?

Ash: Yo voy a estar bien.

Serena: No... no me pidas eso, Ash. Tú te arriesgaste viniendo aquí a salvarme. ¡No pienso abandonarte!- dijo soltando unas lágrimas en una mezcla de preocupación y el dolor de sus heridas de tortura

Ash: Escúchame, nena. Yo encontraré la manera de escapar después. Pero necesito que tú estés a salvo, voy a estar bien.

Serena: Solo dices eso para que no me preocupe por ti.

Ash: No te debería importar, solo sal de aquí.

Serena: ¡Pues me importas, ¿ok?!

Ash: ¡Solo obedece y sal de aquí!

Serena: ¡No! ¡No te voy a abandonar, saldremos de aquí juntos!

Pero la discusión fue interrumpida por la entrada de una de las secuaces de Misty que entró al refugio y se disponía a atacar. Pero el azabache lo notó y disparo su arma logrando impactar directo en la cabeza de la chica secuaz acabando con su vida.

Serena: ¡Dios mío! ¡La mataste!

Ash: Era ella o nosotros ¿que querías que hiciera?

Serena: Pero....

Ash: Si ella entró, eso quiere decir que nos tienen rodeados y ahora solo tengo 4 balas. 

Serena: ¿Que haremos?

Ash: Si hubieras obedecido cuando te lo dije...

Serena: Es que yo.....

Pero de repente, Misty entró a su refugio con arma en mano y con una maliciosa sonrisa en su rostro. 

Misty: Je hola, Ashy.

Ash: Misty

Misty: Mataste a mi novio, lo justo es que ahora yo tome a tu noviecita.

Ash: Tracey era un cretino que nadie extrañará. Ni siquiera tú lo harás, él era solo un juguete para ti. Tal como yo lo fui para ti.

Misty: ¡CALLATE! ¡AHORA TU PEQUEÑA P**** MORIRÁ! 

Misty ahora le apuntaba a Serena y se disponía a apagar la vida de la pelimiel.

Ash: ¡NO!

La pelimiel cerró los ojos esperando su fin totalmente aterrada pero el disparo se hizo oír pero ella seguía viva. ¿Cómo? No había manera de que ella sobreviviera a una bala. Abrió los ojos y obtuvo se respuesta. Ash se encontraba en el suelo con la mano en el abdomen. ¡Había tomado la bala que era para ella! Sin más, se arrodilló a la altura de Ash para auxiliarlo desesperadamente.

Serena: ¡Ash, no!. ¿Por que lo hiciste?

Ash: Yo....... yo no lo sé.

Misty: ¿Que tal si te le unes, princesita?

¿?: ¡¿Que tal si mejor dejas de apuntarle a mi hermanita?!

Con sorpresa en los ojos de los presentes giraron la mirada encontrándose con la salvación de Ash y Serena y la peor pesadilla de Misty: May, la hermosa y poderosa lider de las Amazonas frente a ellos apuntandole a Misty acompañada de sus hermanas amazonas.

Misty se quedó totalmente sorprendida, tanto que empezó a hablar notablemente nerviosa.

Misty: Eh eh, May. ¿Que haces aquí? Solo le enseñaba a Serena como usar un arma.

May: ¡¿Crees que soy tonta, Misty?!  Giselle, ve a ayudar a Serena.

Giselle: Si.

La miembro de confianza de las Amazonas, Giselle corrió a verificar el estado de Serena.

Giselle: ¿Que te hicieron? ¿Estás bien?

Serena: Yo estaré bien. Pero Ash....

May: Esa mujer osó con secuestrar a nuestra querida Serena. ¡Abran fuego, mis hermanas!

Las temidas y fuertes amazonas dispararon sus rifles abatiendo completamente a las secuaces de Misty pero ella salio ilesa logrando usar a una de sus "amigas" como escudo. Misty y lo que quedaba de sus secuaces sabían muy bien que una pelea contra Las Amazonas sería una total masacre para ellas así que solo emplearon una apresurada retirada.

¿?: Están escapando, ¿las seguimos, May?

May: No, Lyra. Ya nos encargaremos de ella después, lo que importa ahora es Serena.

Las amazonas voltearon hacia Serena quien tenía los ojos llorosos ante el cuerpo aparentemente muerto de Ash. La rubia lloraba desconsolada por su perdida.

Serena: Ash.

Pero de pronto, el cuerpo de Ash empezó a moverse para luego sentarse en el suelo ante la sorprendida mirada de Serena. 

Serena: ¿Ash?

Ash: Au, demonios. Dolió más de lo que creí .

Serena: ¿Que? ¿Pero como?

Ash se abrió la chaqueta para darle a conocer a la pelimiel el motivo de su supervivencia.

Ash: Chaleco antibalas. Nunca salgo de casa sin él.

Serena: ¡Que alivio!- dijo para abalanzarse sobre Ash y abrazarlo con alegría.

Ambos pareciera que no querían separarse. El calor que se proporcionaban el uno al otro era más que un deleite. Un deleite que les hizo olvidarse de la presencia de May y compañía. Las aliadas de Serena notaron el logo de la banda rival en la chaqueta de Ash y le apuntaron a matar pero May les indico con la mano que no lo hicieran.

Lyra: Pero, May.......

May: No representa una amenaza, por lo menos no ahora.

Nuestra pareja se separó al sentir las miradas de los presentes sobre ellos y separaron su abrazo pero tomados de la mano se acercaron al grupo. May miro con una cara de seriedad las manos de los jovenes que seguían unidas pero antes de que alguien pudiera pronunciar palabra alguna, sirenas de la policia se hicieron oír.

May: La policia.

Ash: Je no sorprende. Siempre llegan tarde.

Giselle: Tenemos que salir de aquí, May. 

May: Me parece que así es.-dijo para luego señalar a Ash- Tú ,¿sabes usar un arma?

Ash: Si.-dijo al mismo tiempo que asentía con la cabeza.

May: ¡Giselle!

A la orden de May, Giselle le lanzó una pistola a Ash y él la atrapó con facilidad. 

May: 15 disparos. ¡¿ESTA BIEN O NECESITAS MÁS?!

Ash: Claro que no, incluso sobrará.

May: Bien. ¿Y que dices de manejar una moto?

Ash: Por supuesto.

May: Entonces hazte útil y lleva a mi hermana. ¡CON QUE A ELLA LE PASE ALGO, TE LLENARÉ DE PLOMO ¿ME OISTE?!

Ash: Si.

May: Lyra, dale tu moto, yo te llevaré.

Lyra: A la orden.

El grupo de chicas y Ash arrancaron sus motos siendo perseguidos por la policia. Tuvieron que hacer curvas muy peligrosas y difíciles para perderlos pero lo lograron.

May: Creo que eso fueron todos.

Ash: Yo creí que ustedes eran las más poderosas de Chicago. No creí que huirían de esa manera tan cobarde.

May: No es huir, es mantener a mis hermanas a salvo. Tal ves ustedes Lobos están acostumbrados a lanzarse a peleas imposibles. Así no hacemos las Amazonas. Si una Amazona perdiera la vida por mi decisión no me lo perdonaría jamás. 

Ash: Lo veas por donde lo veas es ser un cobarde.

May: Mejor no digas más, ya hablaré contigo luego.

Después de manejar un poco más, el grupo llegó al barrio donde estaban las casas de las temidas y hermosas chicas.

May: ¡Gracias por su ayuda, hermanas! ¡Nunca olvidaré este gran favor que me han hecho al ayudarme a salvar a Serena!

Todas: ¡Si, nuestra gran líder May!

May: Descansen, mis niñas. Yo tengo asuntos que atender.- dijo mirando a Ash y Serena.

Las Amazonas se retiraron a sus respectivos hogares tras el exitoso rescate. En cuanto a May, ella volteó la mirada y se la clavó en Ash.

May: ¿Puedo hablar contigo?

Ash: Claro.

May: Sere, a la casa.

Serena: Pero, May, él no hizo nada.

May: Eso lo sé, Serena. ¿Por que crees que no le he volado la cabeza?

Ash: Hazle caso, Serena.

La preocupada pelimiel entró a su hogar de paso que se preparaba para el sermón que le esperaba después dejando solos a Ash y May.

May: Bien. Ahora ¿me puedes explicar que hacía un Lobo con mi hermana y tan cerca como para abrazarla?

Ash: Le he agarrado un poco de cariño a Serena, hemos estado saliendo desde hace 2 semanas.

May: Así que tú eres el chico de quien Serena no para de hablar hasta que pregunto el nombre. Bien, ante la ausencia de Misty, ¿me puedes explicar que hacía Misty secuestrando a mi hermana?

Ash: Misty es una enemiga mía, usó a Serena para obligarme a hacer lo que ella quería.

May: ¿Tienes idea de que peligro corría mi hermana?

Ash: Dudo mucho que puedas decir que tú si cuidas a Serena. Después de todo, incluirla en una banda no es para nada una idea segura.

May: Yo la incluí en mi banda para que la gente le tuviera miedo. 

Ash: ¿Quien podría tenerle miedo? Es tan hermosa.

May: Es eso a lo que me refiero.

Ash: ¿Disculpa?

May: Escucha, fuera de todo: no puedo permitir que sigas cerca de Serena.

Eso dejo sin aliento a Ash, después de traicionar a sus hermanos por la seguridad de Serena, no iba a dejar que a May se le ocurriera a su antojo separarlo de ella.

Ash: Pero.....

May: Ya sé lo que vas a decir. No eres un mal tipo, sino no hubieras tomado esa bala por mi hermana. Pero también veo que eres alguien con enemigos peligrosos. Sé que es duro, pero no te permitiré estar más con Serena, por favor es por su seguridad.

La cólera seguía ardiendo en Ash, pero esta disminuyó al darse cuenta que la castaño tenía toda la razón. La psicópata de Misty pudo matar a Serena si ella hubiera querido. Le dolía eso, pero alejarse de Serena era lo mejor para ella.

May: Lo siento, sé que ella es maravillosa pero por eso mismo debo velar por su seguridad. Ella es toda la familia de sangre que me queda.

La decisión era díficil. Quiza nunca se lo expresó directamente pero la maldita de Misty tenía razón, él se enamoró de Serena con la primera mirada. No solo era una hermosa chica, sino era toda una tormenta de emociones felices y llenas de cariño. Pero alguien como él no podía ofrecerle seguridad a una chica. Con el dolor de su corazón, tenía que dejarla en paz.

Ash: Ya entendí, tienes razón. Lo mejor para Serena es estar lejos de mí.- dijo notablemente decaído.

May: Lo siento, es por su bien.

Y totalmente falto de emoción alguna, Ash se retiro a paso ligero. En tan solo un día, perdió a su banda, casi muere y peor, fue separado de su Serena de la peor manera.

Ash: Bueno, al final. Esta es la vida que elegí, o mejor dicho, la que me vi forzado a elegir. Pero ella tiene derecho a elegir una mejor al lado de alguien que no la ponga en estas cosas.

Bueno, hasta aquí el capitulo. Si que me ausente, disculpen. Pero bueno, no interesa. Se siente bien volver a escribir para ustedes. Deja tu voto si te gustó, sigueme si quieres y deja un comentario si gustas. Hasta la próxima.