Porque aquél que no a conocido al amor de su vida no a vivido todavía.

Katsuki Bakugou podía sentir una mirada sobre él, observo a todos los que se encontraban en la cafetería hasta que llegó con quién le miraba.

Arqueó la ceja sosteniendo le la mirada, era una especie de desafío entre miradas rojas.
Eijiro por su parte sentía curiosidad de aquél chico, como si lo conociera de tiempo atrás.

—Hola Kirishima— le saludó Midoriya con una sonrisa en los labios.

El pelirrojo quitó la vista del rubio para posarla en el peliverde que se acercaba con Shoto detrás de él.

—Ah Hola Midoriya, es bueno volver a tener los de nuevo por acá— respondió con una sonrisa dejando en la mesa la olla de comida.

—Si, ya han pasado varios meses— contestó el chico.

—Nos hubieran llamado, les tendríamos un recibimiento mejor— sonriéndole levemente.

—Que va hombre, con el hecho del que vengamos a molestar los en su negocio es más que suficiente—contesta Izuku.

El hecho del que vayan es una especie de publicidad gratis porque gracias a ello, varios clientes que concurrían el lugar eran fans que iban por el motivo de que sus ídolos iban regularmente cuando se encontraban en su tierra natal.

Conversa un poco más con el chico de pecas y cabello verde, y el chico de la cicatriz para volver nuevamente a la cocina por algo que había olvidado. Cuando regreso, no pudo evitar quedarse inmóvil al ver la escena que se había montado.

Cada uno de los integrantes que poseían su soulmate charlaban gratamente, no pudo evitar sentirse extraño o como un intruso.

Un sentimiento que no se podía describir por completo.

—Se que hablo por todos al decir que es un honor volver a tener a Nameless en nuestra  humilde cafetería— brinda Sero.

Los demás lo acompañan con sonrisas, agradecimientos y palabras.
Por supuesto las presentaciones no se hacen esperar, conocen a Katsuki Bakugou el nuevo integrante de la banda, a Kemy Utsushimi la novia de este y por último Seiji Shishikura el mánager de Katsuki.

Nuevamente el sentimiento de sentirse fuera de lugar es lo que siente, después de todo está rodeado de amor pero al mismo tiempo se encuentra solo.
No debería de sentirse mal ¿No es así?.

Después de todo, se debía a su condición.

Eijiro a la edad de ocho años nunca logró escuchar la voz de su alma gemela y tampoco apareció su Soulmark. Al inicio creyó que probablemente su otra mitad aún no nacía pero está idea se descartó cuando cumplió quince años por lo que pasó a ser parte de ese famoso 10% de desafortunados llamados; Without Soul.

Aquellos que no habían sido bendecidos de nacer con un soulmate, malditos por no tener a alguien especial ni compartir algo único y mágico. Algunos decían que era algo bueno debido a que elegían a quien amar aunque solo fueran personas de su mismo círculo
Por su parte Eijiro nunca perdió la esperanza de encontrar a su Soulmate, pero los años pasaban como si de días se tratarán.

Aún era joven, pero ya debía de perder la fé. El tiempo era un enemigo demasiado cruel que no daba tregua, pronto su belleza y juventud se irían con el pasar de los años.

Sus padres no se decepcionaron, de hecho lo apoyaron como nunca. Pero no pudo evitar seguir sintiéndose mal puesto que una familia con un Without Soul era mal visto, incluso muchos preferirían que sus hijos o familiares en general se murieran para no pasar por tal vergüenza. La familia Kirishima había pasado por algo así unas cuantas generaciones atrás.

Eijiro conocía la historia de su ancestro Yuichiro, es una historia que a marcado demasiado a su familia de tal manera que por eso lo han intentado protejer  para que no sufra. Pero ¿Cómo puedes protejer a alguien de algo que va más allá del conocimiento humano?.

Incluso la teoría de que su alma gemela pudo haber roto su lazo de unión antes de que esté se pudiera formar, tomaba relevancia en conversaciones ajenas.

Lo mejor era que Eijiro formará una familia y mantuviera las tradiciones para futuras generaciones.

Pero ¿Que es lo que verdaderamente quiere Eijiro?.

—¿Y ya saben que será?— la voz de Izuku hace que Eijiro sea devuelto a la realidad.

—Aún no, todo será sopresa aunque yo creo que será un niño— contestó Denki que acariciaba su abultado vientre.

Kyoka estaba a su lado de igual manera sentada acariciando el vientre de su esposo.

—No puedo esperar para saber a quién se va a parecer— comentó Mina con una sonrisa.

—Suele darme patadas, por lo que es seguro que se parecerá a mí en lo inquieto— Denki se mostraba orgulloso.

—Se lo que sea, será el sobrino favorito por mucho tiempo— añade Sero.

Izuku dejando el tema de lo que será el bebé de sus amigos acaba de ser iluminado por lo que se a dado cuenta que no se da cuenta de las palabras que salen de su boca.

—Es increíble que estemos todos aquí juntos de nuevo! Y es aún más raro que ¡hay cuatro Without Soul en la misma habitación!— dice sin darse cuenta del pequeño o grande error que acaba de cometer.

En el lugar el silencio se hace presente, todos los voltean a mirar con curiosidad y extrañez.

Eijiro no puede evitar sorprenderse y mira a su alrededor, preguntándose quiénes son los otros tres.
Sumándole que se siente un poco incómodo, si no es que mucho por lo que a dicho el peliverde.

Katsuki y Kemy se miran entre sí, sorprendidos de que Izuku haya mencionado su condición.

—¿Qué quieres decir, Midoriya?—pregunta Sero.

La curiosidad es más grande de lo que se podría medir con una regla.

Izuku se da cuenta de su error y trata de corregirlo.

—Nada, nada, olviden que dije eso. Es solo una coincidencia.

Pero ya es demasiado tarde, el tema ha sido sacado a la luz y Eijiro se siente atraído por la idea de que hay otros que comparten su condición.
En Japón no suele haber muchas personas que comparten su “condición”, por lo que al haber más personas como él era algo increíble.

Dio una mirada rápida hacia los ¿Amigos? De Izuku, por obviedad tenían que ser ellos.

Katsuki está que se lo lleva el de abajo, ¿Porque el jodido nerd tenía que andar hablando de sus cosas privadas? Y más aún ¿Como que cuatro Without soul?.
Kemy es una de ellos y Seiji también lo es, lo que dejaba a la duda de ¿Quién es el otro?.

Shouto va hacia Izuku que al parecer está a punto de tener un ataque de ansiedad por lo que a dicho.

Eijiro reacciona, sabe que Izuku no lo hizo con mala intención y no quiere hacerlo sentir mal.

—Esta bien Midoriya, no te preocupes. Igual creo que es bastante obvio de mi situación — anima al chico sonriendo.

Tres pares de ojos particularmente le miran con atención.
Un silencio se hace presente por unos segundos para después romperse por un pequeño grito de emoción por parte de la chica de cabello castaño claro.

—Y Shinji me llamaba loca por la conexión que sentí al venir hace rato— dice para caminar hacia Eijiro y tomarlo de las manos—. Eijiro se bienvenido al club Lifeless.

—¿Cuando elegimos ese nombre?— pregunta Seiji.

—Detalles menos— ríe un poco —. Jamás había visto a un chico tan bello como tú.

El gruñido de Katsuki hace que Eijiro se ponga rojo y quiera alejarse de la chica, lo que menos quiere es que lo golpeen.

—Dije bello, no casi esculpido por los dioses — tranquiliza Kemy a un celoso Bakugou.

—Vaya diferencia— se burla Seiji.

Los demás sueltan risas.

Al menos el momento incómodo pareciera que a terminado.

Las charlas se vuelven a formar mientras que Eijiro es arrastrado a una conversación con los que forman el club de Lifeless, si es que en primer lugar existió.

—Mi diagnóstico fue a los nueve años— dice Kemy como si nada.

Eijiro no puede imaginar el dolor que probablemente la chica tuvo que pasar a una edad temprana donde le habían dicho que no tenía un alma gemela.

—La mía fue a los quince — murmura bajo jugando con sus dedos.

Kemy le mira y sonríe. Le parece un poco graciosa la situación en la que se encuentran.

—Honestamente no sé si eso sea bueno o malo— dice con calma.

Eijiro suelta una pequeña risa.

—Eso me preguntó a veces, pero ya aprendí a lidiar con ello.

—El mío fue a los once — dice Seiji mirando su celular.

Bakugou ni siquiera comenta nada, está más centrado en su bebida y en el sabor de esta.
Pero Eijiro supone que aquel joven probablemente tuvo su diagnóstico igual a temprana edad.

—¿Recuerdan como fue que les dijeron que eran Without soul?— pregunta Eijiro jugando con su bebida —. ¿El como se sintieron?.

Kemy bebe un poco de su café mientras juega con el popote mientras piensa en su respuesta.

—Es como recibir un golpe, duele muchísimo que en ese momento no hay cura que pueda disminuir el dolor— suelta Seiji aún con la vista en su celular.

—Te sientes confundido, triste y solo— a completa Bakugou mirándolo.

—¿Solo?— repite Eijiro.

Kemy deja su bebida para terminar.

—Porque todos tus amigos hablan de haber encontrado a su alma gemela o que lo harán en poco tiempo mientras que tú no lo harás. Que eres el único que no es especial—Kemy no puede evitar mirar al otro grupo que se encuentra al otro extremo de la cafetería hablando de los conciertos y el embarazo de Denki—. Y no puedes evitar sentirte defectuoso.

Siempre había recibido consuelo pero jamás palabras de alguien que pasaba por lo mismo, se sentía de una manera bien pese a lo doloroso que era la situación.

—¿Como lo hacen?— pregunta Kirishima mirando específicamente a Kemy—. ¿Como no se sienten defectuosos?.

Kemy sonríe nuevamente.

—Nos tenemos los unos a los otros, la felicidad no depende de una persona o una condición, si no se nosotros nosotros mismos y las personas con las que nos relacionamos — explica Kemy.

Nota del autor: Si una mierda de capítulo pero mínimo actualicé después de un tremendo bloqueo.
Probablemente cambie el nombre de los sin alma.
Próximo fic a actualizar QUERIDO HERMANASTRO.