Una pequeña estrella
AMOR VINCIT OMNIA
Autora: Clumsykitty
Fandom: Marvel/The Sandman (crossover).
Pareja: MorfeoxTony
Derechos: ¿todavía existen?
Advertencias: esto es un crossover así que hay cambios para más placer porque no es una cátedra de canon sino un fanfic para soñar y suspirar porque eso es bueno para el alma. Con muchos toques de angustia y eventos algo desagradables. Una historia de encargo.
"Amor Vincit Omnia", el amor lo conquista todo.
Gracias por leerme.
**********
Una pequeña estrella.
Estrellita, ¿dónde estás?
Me pregunto quién serás.
En el cielo y en el mar,
un diamante de verdad.
Estrellita, ¿dónde estás?...
-¿Es tan solo eso?
-Sí. Lo sé, es una tontería.
Morfeo negó, acariciando la mejilla de Tony, sonriéndole apenas al verse reflejado en sus ojos, frente a esa playa donde el castaño gustaba perderse por largo tiempo.
-No lo es, sabes que nada de lo que pienses y sientas es para mí una tontería.
-Lucienne ya me explicó, tampoco quiero que hagas cosas raras, no es así.
-A mí también me gustaría que hubiera algo que fuese una mezcla de ambos.
-Cuando dices algo ¿te refieres a un ser vivo?
-Por supuesto.
-Bueno -el castaño rio, abrazándolo- Es solo un sueño tierno de mi humanidad.
-Que debe ser honrado sin burlas sino alabanzas porque en él implicas el cariño que me tienes.
-Te amo.
-Y yo, Tony.
Los dos miraron hacia el horizonte que se perdía en el cielo de estrellas infinitas que titilaron. Tony sonrió, con una mano en su reactor, arrancando un trocito de luz como ya le había enseñado el Eterno, una pequeña estrella que posó en la mano de Morfeo, este sonriéndole al agregarle un poco de polvo y luego soplar para que se fuera volando hacia las demás estrellas, de la misma forma que se pone una vela en honor a alguien perdido o por una petición en forma de oración. El castaño alcanzó la mejilla pálida del otro, besándola por ese gesto simbólico antes de tomar su mano y regresar al palacio, donde Lucienne ya los estaba esperando.
Tony esperaba volver al mundo de la vigilia pronto, su visita a Pepper de rigor, pero tuvo que ser antes pues más adelante Brandy apareció en el palacio buscándolo con algo de ansiedad, esperando a que Morfeo no estuviera pues lo que tenía que decirle era algo que probablemente su amo no aprobaría por nada del mundo.
-Es Peter, está angustiado.
-Es un adolescente, estar angustiado es lo suyo.
-Han pasado cosas, Thor ha vuelto igual que Banner, ambos dicen que se ha perdido una joya rojiza, por eso regresaron a la Tierra, creen que está aquí porque el rastro venía hacia esta dirección. Han hablado de un ser enorme de piel púrpura buscando esta joya como otras. Son seis en total.
Ambos se miraron, luego asintiendo al mismo tiempo al percatarse de que hablaban de las mismas piedras que los anteriores Alquimistas crearan tiempo atrás.
-¿Por qué Peter se angustia por el tema? ¿Qué tiene que ver él?
-Un tal Strange está reuniéndolos a todos, dice que se aproxima algo importante, algo que pone en peligro a todo el universo.
-¿Otra vez con eso?
-¿Ah?
-No, nada... ¿sabes algo? Regresaré ahora mismo, están haciéndose pelotas ellos solitos por mero gusto. En realidad no sucede nada. Vamos, Brandy.
-El amo puede molestarse.
-Yo le explicaré, sabe que no puedo desentenderme tanto de mi mundo.
Semejante crisis era una exageración desde que no existía una tercera joya en el planeta con semejantes características. Tony hizo caso omiso de los reclamos de Fury, los intentos de explicación de Steve y las paranoias de Bruce al buscarlos en la mansión, poniendo orden junto con los nuevos miembros quienes por supuesto, estaban alterados ante semejante noticias que no supieron cómo tomar, entre ellos estaba el joven Parker.
-Señor Stark, no sabe qué gusto me da que viniera, el doctor raro ese dijo que...
-¡Ah! ¿Dónde está ese mago de fiestas? Me debe una disculpa.
-¿Qué?
-Anthony Stark.
El castaño se dijo que había pasado tanto tiempo que los Vengadores ahora permitían la entrada a cualquiera, una cosa era Constantine con su poder yendo y viniendo por todo el mundo como le pareciera, pero que el Hechicero Supremo apareciera con la intención de ponerle una mano encima fue algo que ya no le gustó. Afortunadamente no había aparecido solo, los gatos de Brandy hicieron lo suyo, formando una barrera que rechazó el poder de Strange al intentar sellar el reactor de Tony, quien se percató de la intención tallándose el rostro.
-¡¿Qué carajos?! Es por esto que me largué en primer lugar. Solo aparezco y me atacan.
-Tu poder...
-No voy a destruir la maldita Tierra con mi reactor. ¡Es imposible!
-Sabes bien que no.
-No hablaré con un intruso -bufó el millonario, girándose a los demás- Escuchen, hemos pasado por las suficientes mierdas para ahora estar discutiendo esto. Si creen que soy un peligro y por eso llamaron a este mago, entonces me iré para siempre con Morfeo, no tengo problema alguno.
-Señor Stark...
-Lo siento, Peter, pero no soporto más de estos ataques.
-Nadie está atacándote -replicó Fury, saliendo de un cuarto.
-Genial, ahora todo mundo se aparece por todos lados y lo primero que hacen ES ATACARME.
-¿Por qué hay tantos gatos?
-"Jefe, tenemos un problema."
-La cereza del pastel, dime, FRIDAY.
-"Wakanda ha sufrido un golpe de Estado."
-Albricias, al menos es algo que no me involucra.
-Stark...
-Bueno, todos ustedes, ya que estamos reunidos de una forma algo aparatosa, vamos a ayudar al rey pantera porque una vez nos tendió mano, a unos mejor que a mí, pero ya no hablaremos de eso ¿okay? De verdad que ya estoy cansando de todo esto, quiero hacer por una vez en mi vida algo realmente bueno que no cause tantas ambigüedades, así que... ayudemos a Wakanda.
Un tal Killmonger había cuasi secuestrado el trono de Wakanda para sí mismo, T'Challa como su madre y hermana estaban desaparecidos. No les tomó mucho el encontrarlos con la tribu de M'Baku para la recuperación de su derecho, luego de enterarse de ciertas cuestiones familiares de la familia real que sacaron una sonrisa en Tony pues nunca imaginó que ellos tan sobrios y educados terminaran con los mismos pleitos que todas las demás familias, comunes y corrientes. Lo que más agradeció fue que eso sirvió para limar asperezas, de tal suerte que cuando Shuri se le acercó para hablarle sobre el tratamiento que estaba llevando a cabo en la mente del sargento Barnes, eso ni siquiera le perturbó, como si nunca hubieran estado a punto de matarse o de acabar con el pobre hombre para ser precisos.
A Tony le pareció tan irónico y gracioso que fuese Bucky quien tuviera más pantalones que los demás para hablar las cosas claras sin rodeos. En buena medida, por eso lo perdonó, era franco a más no poder, como si no temiera lo que fuera a sucederle por abrir la boca, cosa que tenía sentido desde que el sargento no guardaba un instinto de supervivencia pues necesitaba en carácter urgente que alguien le diera terapia con semejantes experiencias. Shuri estaba teniendo problemas con las palabras de activación por una excelente razón, HYDRA había hecho papilla su cabeza. Ayudó a la joven con el tratamiento, dándole ideas para el nuevo brazo porque el anterior era un instrumento de tortura.
Se sintió muy bien, demasiado quizá, ayudando a James Barnes. El castaño adjudicó su estancia en el reino de los sueños para tomarse tan maduramente la situación, esa convivencia con el inestable súper soldado de ojitos de mapache asustado. Al final, era otra víctima. Una que en verdad jamás pidió unirse a HYDRA, ni siquiera ir a Europa a pelear una guerra que no entendía para ser olvidado por la misma gente que lo obligó a enlistarse. Cosas así le fastidiaban a Tony, empujándolo a sentir empatía por quien estaba siendo apaleado por la vida, justo como a él le pasó antes de que Morfeo volviera.
-Strange ¿quieres sellar mis poderes?
-Vas a poner en peligro la Tierra, Anthony.
-Digamos que por un momento te creo y los gatitos de Ulthar te permiten acercarte a mí para que me selles como si fuera comida de bebé. Si dices que hay otros seres que se han percatado de mi existencia y tú has tenido el tino de neutralizarme ¿qué va a pasar cuando ellos vengan? Y no me digas que eres más que suficiente para detenerlos porque no te creo ni tantito.
-Una vez que sellemos tu poder, ellos ya no te buscarán.
-Suena a enorme mentira.
-Estoy diciendo la verdad.
El castaño chasqueó su lengua. -Escucha, Peter bien dijo que nos parecemos hasta en la forma de pensar, si fuera tú, haría lo posible por convencerte no por una auténtica necesidad de proteger al planeta sino porque eres mi competencia. ¿No es eso lo que en verdad te inquieta? Se te figura que saldré por las calles de Nueva York a usar mi reactor como si fuera la varita mágica del hada madrina.
-Así no, pero con los objetos que creas estás cambiando el curso de las cosas.
-Cambiar el curso de las cosas es como despertar un soldado de la Segunda Guerra Mundial para que viva en el mundo moderno o traer a dos semidioses aquí para una pelea por un trasto raro que tiene cosas todavía más inexplicables que desembocan en una Alexa con esteroides. Eso es cambiar el curso de la historia.
Strange tomó aire, caminando hacia el millonario para hablarle de frente, con toda la calma que reunió en su interior.
-Visión tiene una gema en su frente, yo poseo el Ojo de Agamotto, ha desaparecido una gema más que no dudo pronto se manifestará aquí... donde se halla un Alquimista. Ellas responden a esa clase de poder, como un imán del cual no pueden zafarse. Las estás llamando y aquellos que las han usado o las conocen vienen detrás. Atraes el peligro, si no me explicado lo suficiente.
-Tan fácil es que no toque esas cosas.
-No, Anthony, así no funciona, no estás...
-Escucha, yo vuelvo con Morfeo, si estoy allá dudo que alguien pueda rastrearme ¿cierto? Se acaban tus angustias, yo sigo con mi vida y estaremos bien. Preferiría que le echaras un vistazo a Wanda, no se tú, pero esa chica no se me hace muy... sana de la cabeza.
-¿Culpa de quién sería?
-¡Ah! -Tony levantó sus brazos al cielo, poniendo manos en cintura- Resulta que ahora es MI culpa que ella me lastimara con su poder mutante.
-Morfeo la lastimó.
-Ella se metió con la Ensoñación, aunque yo no existiera, Strange, él de todas formas la hubiera atacado.
-Pero hubo más daño porque estabas involucrado.
-Tiempo, tiempo. Escucha, esto siempre termina conmigo siendo el malo. No más de esa mierda recurrente, regreso con él y fin del asunto.
-La Tierra...
-Para eso están los Vengadores, creo que ya son muchos como para no lograr algo sin mí.
Tony solo sacudió su cabeza, permitiendo que los lindos gatitos mágicos de Brandy aparecieran para abrirle camino hacia la Ensoñación, dejando la mansión, al doctor Strange y esos líos de los que estaba entendiendo cada vez menos. Una vez que llegó al palacio, Lucienne tomó su mano enseguida, jalándolo de inmediato hacia una sala vacía, donde solamente las columnas con arcos de piedra antigua estaban presentes, todo lo demás eran superficies reflejando el cielo nocturno siempre estrellado. Al final de la sala, estaba Morfeo mirando algo.
-¿Qué pasa?
-Un milagro -susurró Lucienne como si no quisiera romper el encanto- Ve con él.
Primero, no entendió qué era lo que estaba viendo, porque no lo pudo distinguir entre los reflejos de techo y suelo, después notó que era una suerte de ilusión, como un espejismo del desierto que se movía apenas en ese espacio tiempo infinito. Un punto de energía azulada envuelta en arena que danzaba como un capullo protector. Tony parpadeó confundido, él no había dejado nada de eso, siempre era muy cuidadoso con las instrucciones de Morfeo sobre el uso de material onírico. Sus ojos fueron al rostro del Eterno cuya expresión le fue imposible de leer.
-¿Morfeo?
-¿Sabes qué es?
-Ni idea.
-Acércate más.
Ese punto de energía no era mayor a una pelota de esponja, pulsando como lo hacen las estrellas, emitiendo luz cálida que apenas si rozó con la yema de sus dedos, rodeando esa esferita extraña.
-De verdad, estoy en ascuas, no sé qué es.
-Tu deseo.
-¿Mi deseo...? Espera -Tony abrió sus ojos de par en par, mirando de vuelta aquel punto- ¿Esto es...?
-Yo tampoco lo noté al principio, pero hubo una vibración en toda la Ensoñación, similar a un Vórtice, solo que esta fortaleció todo. Buscamos por todas partes, fue Lucienne quien lo notó en nuestra playa.
-Wo, wo, wo, más despacio, vaquero.
-Lo he traído aquí para que termine de materializarse.
-¡Morfeo!
-¿Qué sucede, amor mío?
-¿Estás diciéndome que esta bolita es... nuestro hijo?
-Así es.
Tony rio bajito, muy nervioso, luego un poco más, seguido de una carcajada corta con sus manos tallándose el rostro, viendo a Morfeo con angustia.
-¿Cómo?
-Tienes un corazón de dragón, yo soy un Eterno, nuestro amor lo hizo posible.
-Si fuera un cuento... qué cosas digo, aquí se hacen. Olvídalo, mala comparación.
Una mano del Eterno se entrelazó con la del castaño más que inquieto, sin dejar de mirar aquel punto azulado envuelto en arena ondulándose.
-Yo entiendo que esto es poco convencional, más es así.
-Un... hijo...
-Así es, Tony.
-¿Siempre será una bolita?
-No, crecerá.
-¿En tiempos de Eternos?
-Lo ignoro por completo -Morfeo sonrió para su aturdimiento- Es un gran misterio que habremos de conocer en el futuro.
-¿Por qué el histérico soy yo y no tú?
-Soy feliz, es mitad tú y mitad yo.
-Cuando dije que no deseaba cosas raras me refería a este tipo de cosas, no lo especifiqué.
-Respira, cariño.
-Me siento como en la película Cocoon.
-Dejémoslo dormir, tienes mucho qué contarme.
Con un beso de Morfeo en su frente, el castaño miró hacia ese tierno punto de luz al que todavía le costaba demasiado creer que fuese su "hijo" entendía en buena medida que tales cosas eran naturales entre los Eternos pues ellos no tenían esos límites para visualizar vida de una forma diferente a la que Tony hubiera aprendido toda su vida. Se le hizo demasiado raro y extraño. Afortunadamente, el tema de las gemas se volvió importante de tal forma que pudo distraerse con ello, una vez que le explicó a Morfeo lo que estaba pasando con todas esas creaciones de sus ancestros Alquimistas.
-Es extraño.
-Yo se lo dije a Stephen.
-No -le corrigió el otro- Es imposible para ti llamar de alguna manera a las gemas, no está en tu poder el hacerlo, ni siquiera con tu corazón.
-Pues dicen que lo hago.
-Es algo o alguien más -Morfeo frunció su ceño, mirando a Lucienne quien había escuchado todo- Sin duda su intención es reunirlas todas, pero además te desea a ti.
-Oh... eso cambia todo y le da sentido, también.
-Debería hablarlo con sus hermanos, mi señor.
-Comenzaré por ahí -asintió el Eterno, sujetando la mano del castaño- Es una conjunción inusual que puede perturbar el equilibrio de las cosas.
-Pero yo no lo estoy provocando ¿verdad?
-No, amor mío. Eres inocente.
-Al fin escucho a alguien decir que yo no provoqué algo malo.
-¿Quién te ha estado diciendo eso?
Tony se mordió la lengua por imprudente, sonriendo al negar con una mano bailoteando en el aire como quitándole importancia.
-El estrés nos afecta a todos, entonces, ¿irás a buscar a todos tus hermanos?
-No a todos, sino a aquellos que puedan ofrecernos una explicación sensata.
-De acuerdo.
-Pero no ahora, ahora quiero estar contigo.
Tony despertaría con la curiosidad de saber qué estaba pasando con aquella bolita de energía, llevándose una gran sorpresa porque ya no tenía el tamaño de una pelota de esponja, era más como de baloncesto. De un día para otro, por decirlo de una manera. Lucienne observó la esfera, analizándola antes de dar su veredicto al boquiabierto castaño.
-Es natural, está alimentado de ambas energías.
-Espera... ¿crecerá más?
-¿Cómo lo llaman ustedes? Oh, sí, nacerá.
-¡¿Nacer?! ¡Estoy viendo un embarazo!
Lucienne rio. -Es un momento de creación.
-Por todas los sueños, ¿y cómo será?
-No podría decirlo, es la primera vez que sucede.
-Joder. Es decir, lo siento, Lucienne, es que esto... todavía lo estoy procesando.
-Has creado un corazón de dragón, puedes darle vida a cosas que nadie más ha imaginado, pero no puedes aceptar que parte de tu alma y de Morfeo hayan sido capaces de formar un nuevo ser.
-Okay, tiempo de los tecnicismos. Este bebé... ¿será como yo de carne y hueso o...?
-Supongo que al ser un híbrido, tendrá de ambos. Debemos de esperar, no había pasado antes, no hay registro de esto.
-Carambas.
-Felicidades.
-Um, gracias, supongo.
-¿Desayuno? Dudo que le suceda algo mientras comes.
Morfeo volvió cuando aquella esfera fue más grande, Tony estaba más que ansioso por saber qué cosa iba a pasar porque le dio la sensación de que esa bola comenzaba a fragmentarse igual que el huevo de un ave a punto de eclosionar. No era igual pero sí muy similar. Los dos esperaron tomados de la mano al momento en que un nuevo pulso provino de la esfera, comenzando a mostrar esas fracturas, pequeños rayitos de luz azul brotando de esas líneas quebradas que fueron ensanchándose hasta que la luz fue tan fuerte que el castaño no pudo mirar más. Cuando abrió los ojos, la más hermosa sorpresa le esperaba, Morfeo sujetaba entre sus brazos un hermoso bebé, rosadito, muy humano, pero cuyos ojos eran como un firmamento propio cada uno.
-Tony, nuestro hijo.
Sintió que las piernas se le vencían, queriendo llorar al acercarse para sujetarlo, notando su peso muy real para que fuese una ilusión. El bebé gorgoteó, mirando los ojos del castaño, esos firmamentos cambiando entonces a unos ojos similares a los suyos, sonriéndole con la más hermosa y perfecta expresión que Tony pudo haber presenciado en su vida, dejando escapar lágrimas de emoción, besando en acto reflejo esa frentecita tibia con cariño, un par de brazos envolviendo a ambos.
-Somos padres -murmuró Tony con voz quebrada- Somos padres.
-Es probable que esta sea tu más grande obra maestra como Alquimista -comentó el Eterno, acariciando la mejilla del bebé, este sujetando uno de sus dedos con fuerza- Y mi mejor sueño.
-Morfeo, es... perfecto.
-Y nuestro.
Lucienne, siempre servicial, se aproximó con una linda manta con qué envolverlo. Como nunca, Tony quiso crear todo lo que su bebé necesitara, sin poder despegarse de él un solo instante, temiendo que fuera a desaparecer. Tal como se lo advirtió Lucienne, ese tierno recién nacido, no crecería de la misma forma que un bebé humano, igual que su padre, ganaría tamaño y peso para tener su forma final, solo que no sabían cuánto tiempo le tomaría eso. Con los cabellos cual noche como Morfeo, la sonrisa del castaño igual que sus ojos y los gestos del Eterno, sin duda era una mezcla justa y precisa de cada uno.
-Necesita un nombre -Tony parpadeó, dándose cuenta de que ni siquiera lo había pensado.
-Debe ser uno que lo merezca.
-Y bonito... mmm... Pepinillo no.
Morfeo sonrió. -Sé que en tu mente ya existe la palabra, solo pronúnciala, mi amor.
-Bueno, ¿por qué no Dara?
-Dara.
-Es un buen nombre, corto, pero contundente.
-Dara será.
-Claro, si no te gusta o a la mejor cuando crezca...
-Disfrutemos el momento.
Los habitantes del reino vinieron a conocerlo, todos ellos ya habían sentido esa nueva presencia, que era singular porque tenía esa misma energía de los sueños, pero al mismo tiempo no lo era. Tony podía decir lo mismo de su parte humana, bien podía pasar por un infante, solo que si se prestaba atención a su piel de pronto se notaría lo etérea que se notaba. Esa mirada fija que parecía leer las almas, o sus deditos llenándose de energía azulada moviéndose cual arena entre sus yemas regordetas. De la mano de Morfeo, lo llevaron donde los dragones, de sus primeras impresiones que guardaba como un recuerdo hermoso, la razón por la que creara su reactor más tarde y que a su hijo le encantaba mirar hasta quedarse dormido.
Entonces todo se cimbró.
Tony sujetó al bebé, mirando a Morfeo con angustia porque este pareció de nuevo preocupado de esa forma en que un Eterno casi no puede estarlo. Matthew llegó volando para informarles que algo estaba sacudiéndolo todo, incluyendo los reinos de los Eternos. El epicentro parecía estar en el mundo de la vigilia. Un silencio cayó de pronto, solamente los gorgoteos de Dara se escucharon, Tony siendo el primero en hablar con una firmeza que lo impresionó incluso a él mismo.
-Debo ir a ver.
-No.
-Esto me compete.
-Iré contigo entonces.
-Alguien tiene que cuidar del bebé.
-Puede ir con ustedes -sugirió Lucienne- Y sería mejor, porque si algo pasa, estarían lejos de él.
Eso tuvo mucho sentido, así que volvieron con el bebé ya no siendo tan bebé, era más como uno de esos tiernos niños que comenzaban a caminar. De verdad estaba creciendo. Cuando Tony llegó con los Vengadores, la mansión estaba patas arriba. El motivo: un monstruo había traspasado fronteras, y por nada estuvieron a punto de perder cuando de pronto apareció una nave que lo fulminó, ellos creyeron que eran amigos hasta que fueron atacados por sus tripulantes.
-Esto es una locura -Banner era de los más nerviosos- Nos están acusando de esconder al Híbrido, así lo han llamado. Un tal Consejo Intergaláctico lo quiere. Esos tipos barrieron con la mansión al inspeccionarla.
-¿De dónde provenía el monstruo? -quiso saber Tony.
-El Doctor Strange dijo que de la Dimensión Oscura -informó Visión- La conmoción que hemos sentido fue por la explosión de energía usada para aparecer aquí... traía consigo una gema.
-Otra...
-No quiero interrumpir su charla, pero ¿quién dejó olvidado un bebé?
Dara estaba intentando averiguar la consistencia de un cono de papel que Tony le quitó enseguida, levantándolo en brazos para presentarlo.
-Es mi hijo. Dara Stark.
Todos los Vengadores se miraron, Sam Wilson fue quien se rio por todos, negando aprisa.
-¿Un hijo?
-Sí, es mío. ¿Quieren una prueba de ADN?
-¿Quién es su madre? -preguntó Barton.
-No nació así, digamos que es un bebé... probeta.
-Tony...
-Lo digo en serio, Steve.
-Pues sí se parece -opinó Bucky, el mejor con el ánimo para no hacer más preguntas- Felicidades.
-Gracias.
Otra onda de choque se sintió, con mayor fuerza pues aquella realidad era más frágil que la Ensoñación. Tony miró a Morfeo, quien hizo un gesto para ir en busca de la fuente. Thor miró fijamente al pequeño, luego dirigiéndose al castaño.
-Tu hijo posee poderes, puedo sentirlos.
-¿Ah? Sí, bueno, es probable.
-Poderes divinos.
-Bueno, no creo que...
-"Jefe, bienvenido, pero me temo que hay un mensaje para todos ustedes."
FRIDAY mostró pantallas holográficas con un mensaje encriptado en una lengua que nadie conoció, pero que la inteligencia artificial pudo traducir.
-"VENGADORES, ESTA ES LA ÚLTIMA ADVERTENCIA, ENTREGUEN AL HÍBRIDO O LA TIERRA SERÁ DESTRUIDA JUNTO CON ÉL. ATENTAMENTE: LOS GUARDIANES DE LA GALAXIA."
-¡¿Quién coño son los Guardianes de la Galaxia?!
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