- Como te fue en la reunión con Krei, tuviste algún inconveniente - pregunto una voz en el otro lado del teléfono.

- No paso nada tío, solo... - dudo en continuar - no tuve la reunión con Krei el no pudo asistir.

- Entonces con quien la tuviste - volvió a preguntar.

- La tuve con Hiro - espero que su tío dieran un gran grito, cuál no tardo en llegar.

- Porque la tuviste con él, te reconoció, te hizo preguntas - hablaba mientras ella escuchaba de manera calmada y paciente.

- Tío, tío, la tuve porque Krei tuvo un accidente, un poco pero pude confundirlo y no me hizo preguntas que no sea del contrato- respondió tranquila.

- Creo que tienes que regresar a Corea y yo voy a acabar de firmar ese contrato, no quiero que te reconozca - confeso.

- Tío si hiciéramos eso, levantariamos muchas dudas y no quiero eso, todo va estar bien, me voy a quedar hasta presentar el nuevo producto, te dejo tengo que ir hacer unas cosas, cuidate y beso - se despidió y colgó.

Se bajo del auto y se dirigió al cementerio general de San Fransokyo, llegando una tumba con una lápida con un nombre muy conocido por ella.

"Este es el último lugar de descanso de Leyko Tomago mejor conocida como "GoGo", una persona muy querida por su amigos y familiares, ahora estará en santa paz".

Se arrodilló y agarro un puñado de tierra y presto toda su atención a su mano llena de tierra.

- Quién diria que volveria estar aqui, frente a esta tumba a donde descansa mi otra yo - trago grueso y continuó hablando - ha cambiado muchas cosas desde que no estoy, mis amigos o mejor dichos mis antiguos amigos ya cumplieron su sueños y estoy muy feliz por ellos - sintio una lágrima recorrer por su mejillas - pero yo tambien cumpli los mios ¿cierto? - pregunto a ese puñado de tierra - o lo cumplió Alizeé? - dejo caer el puñado de tierra, se levanto y se sacudió su piernas liberandose de el polvo - talvez muy pronto nos volveremos a ver GoGo o Alizeé - se limpió las lágrimas y se alejo un poco de aquel lugar - quiero estar con mis amigos aunque con otra personalidad y en especial con Hiro - se acabó alejando de la tumba.
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- Como te encuentras, Alistair -  pregunto Hiro.

- Bien, sólo es una torcetura de tobillo, aunque tu ya conoce a Cass, no dejara que me levante hasta que no este totalmente recuperado - intentaba sentarse en su camilla.

- Lo sé, hay veces que mi tía puede llegar exagerar un poco y un poco es bastante - contesto con una sonrisa.

- Y como te fue con Alizeé - pregunto.

- Muy bien, hablamos y quedamos que mañana viene a firmar el contrato. -

- Excelente, con esta colaboración ganaré mucho dinero - aseguró muy feliz.

- Alistair, como conociste a Alizeé? - pregunto

- Fue en la última reunión de empresarios tecnológico, ella dejó la posibilidades de formar una colaboración y me pareció increible y decidí aliarme con ella, la investigue y supe que a los 20 años ya era alguien muy importante en Corea y al año siguiente ya era conocida mundialmente - relató.

- Entonces es alguien de éxito, pero antes de los 20 pudo obtener información - pregunto curioso.

- No, curiosamente no pero según amigos de la industria ella era hija de una adinerada familia y estudió en unos de las mejores escuelas tecnológica - aseguró.

Cuanto Hiro iba a seguir preguntando, entro a la habitación Cass con un café en la mano.

- Hola Hiro, desde cuanto estas aquí - pregunto mientra tomaba asiento en una silla cerca de la camilla.

- Desde hace un rato y donde estaba tú. -

- Fui a la casa a darme un baño y más tarde le da de alta a Krei - informó Cass.

- Que bueno, que ya salga de aquí. -

- Puede salir del hospital, pero no puede hacer ninguna locura tiene que descansar - aclaro Cass.

- Eso ya lo veremos - susurro Krei y Cass lo vió molesta - Digo, obvio que me quedare a descansar en la cama - respondió rápidamente haciendo reír al menor de los Hamada.