Prólogo
—Lo siento Santiago, pero creo que lo nuestro no va a funcionar.
—No entiendo Marcos, hace dos meses estaba todo bien, aceptaste ser mí novio, creí que nos queríamos. —dijo a punto de llorar.
—Ese es el problema, yo no te quiero Santiago, en realidad nunca lo hice—. Creo que me iré al infierno por mentiroso.
Santiago se quedó unos minutos en silencio, perdido, aproveche el momento para irme; me doy vuelta pero enseguida me agarra del brazo.
—Mírame Marcos, mírame a los ojos y dime que en verdad no sientes nada por mí. ¡Dímelo! —susurro cerca de mí rostro, podía sentir su respiración entrecortada.
Mire fijamente sus ojos, analizando cada una de sus facciones. Con mí último toque de dignidad, tan sólo dije:
—No te quiero y no siento nada por vos, Santiago—. Mi semblante cambio, de estar lloroso a serio— .Suéltame, déjame ir.
Su mano, se fue deslizando lentamente hasta caer al costado de su cadera. Me aproxime a la puerta y dándole el echándole una última mirada, salí de aquel lugar con lágrimas deslizándose por mí mejilla.
En ese momento, sentí mí mundo caerse a pedazos.
¿Qué acabó de hacer?.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top