CAPITULO CORTITO.LES AGRADEZCO MUCHO POR LEER!

Jhon observaba el voluptuoso cuerpo desnudo de la joven morena que se encontraba en la cama mirándolo con impaciencia.

Llevaban unos cuantos minutos jugueteando pero su "amigo"no respondía.

Nunca,en sus 28 años de vida Jhon sufrió tal humillación. Normalmente su respuesta a una bella mujer era casi instantánea. Y ahora...nada.Nada se erguía...ni reaccionaba.

-Es una pena-dijo la morena suspirando-Eres lo mas lindo que he tenido para atender en mucho tiempo.

-Supongo que otra vez sera¿Stacy?-le dijo Jhon mientras se cambiaba.

-Sara-respondió ella un poco ofendida,le había repetido su nombre unas cuantas veces.

-Si...lo siento-dijo Jhon y salio de la habitación,donde había dejado bastante de su dignidad.

-¿Todo bien Señor Darcy?-le dijo Miss Redford, la dueña de aquel lugar de mala reputación,sorprendida,aquel joven rico podía pasarse horas ahí,a veces incluso debía enviarle a otra de sus chicas.

Jhon encogió los hombros levemente.

-Un día duro Marge...bueno no tanto.

La mujer lo.miro sin entender su picara referencia y minutos después Jhon ya estaba fuera de ese lugar.

Era de tarde,el joven heredero conversaba animadamente con su contador.

-Quizás es la tensión de estos días,el casamiento,la herencia...todo se junto y debió afectarme-le decía Jhon al hombre maduro de barba.

-Espero que eso sea Jhon,tienes menos de dos años para tener a tu heredero-le recordó el riendo,por ver tan incomodo al normalmente seguro joven.

-No me lo recuerdes Robert,no necesito mas ansiedad-le respondió el.

-¿Y Britanny como esta?-le pregunto Robert.

-Perfecta...como creada para mi-le respondió Jhon con cierto orgullo.

-¿Y como tomo el tema de tu boda?-le pregunto el contador.

-No le agrado...pero bueno era de esperarse-le respondió el.

-Y la pequeña Señora Darcy?-volvió a preguntar Robert.

Jhon se tomo un momento en responder,pensado en Rosie.

-Humm es muy dulce e inocente...y muy bonita...parece una muñeca.-termino Jhon sonriendo.

Robert lo miro sorprendido por su respuesta,no era la forma común en la que Jhon Darcy hablaba de una mujer.

La noche llego y Jhon leía acostado en su cama.

Sus pensamientos se centraron en su respuesta a Robert esa tarde.

Si,lo reconocía su Rosie era tal cual la había descripto.

Dulce, inocente,bonita...una muñequita... con la cual tenia ganas de jugar.Pero claro,no queria complicar las cosas,ni crearle falsas expectativas.Por esa razón se había mantenido bastante alejado de ella.Por eso solo la había tomado una vez,aunque hubiera deseado hacerle mucho mas y muchas mas veces.

Ademas estaba Britanny,su completamente deseable diosa.Con un cuerpo tan perfecto,que podía enloquecer a cualquier hombre.Por supuesto decir que era suya era solo una forma de decirlo.Aquella fiera no le pertenecía a nadie.

Rosie...Britanny.Eran como el día y la noche.No podrían ser mas distintas.

Por alguna extraña razón su pensamiento volvió a su esposa.

Exactamente, a la tarde antes de que el se fuera.A Rosie en la bañera,su cabello mojado goteando por sus hombros,sus  tímidos intentos de cubrirse ante el.El inocente rubor de sus mejillas.Sus suaves labios entreabiertos.Sus senos redondos,sus delicados pezones rozados...

Una placentera punzada alerto a Jhon y vio que algo se había despertado y se levantaba con altivez.

Jhon levanto la sabana y movió la cabeza.

-¿Ahora,en serio?-le increpo a su erecta hombría.

Estuvo pensando en Britanny,tuvo en frente desnuda a...¿Stacy?¿Sara? o como fuera que se llamaba. 

Y era Rosaline quien le provocaba eso.¿Y eso que rayos significaba?.