Sarada.

Me quede muda por unos segundos, el hombre que me salvo del incendio estaba frente a mi.. pensé que jamás lo volvería a ver pero  me equivoque.

-Gracias.. - mencionó chou, quitándole el monedero de la mano.

-Que casualidad encontrarnos por aquí.. - mencionó el.

-eh si, tengo algo de prisa.. en esta vida estoy muy agradecida por haberme salvado, jamás olvidaré eso así que si necesita algún favor estoy a la orden. - mencione

-Con que me digas tu nombre, es suficiente.. - mencionó, yo me conhibi un poco, para que querria saberlo.

-Soy  Sarada, puedo saber como te llamas.. - mencione con pena.

-Claro que si, mi nombre es  Boruto... - mencionó dándome la mano.

-Entonces Boruto, nos vemos en otra ocasión tengo que llegar a mi casa pronto.. - mencione.

-Que le vaya bien, señorita Sarada.. Espero muy pronto encontrarmela nuevamente. - mencionó, yo hice una pequeña reverencia y me aleje.

-Sarada, que eran esas miraditas que se tiraban.. No me digas que te gusta. - mencionó chou, yo le di un codazo.

-Esta loca, apenas y lo conozco.. Solo tengo mucho agradecimiento por haberme salvado de la muerte. - mencione

-Si como digas, no vas a negar que esta guapo. - mencionó ella.

-No te lo voy a negar , a lo mejor no me vuelvo a encontrar. - mencione, ojala y eso no suceda.. en que demonios estoy pensando.

Al llegar a la mansion, namida vino a mi corriendo.

-Señorita Sarada, le tengo noticias. - mencionó

-Que sucede... - mencione

-La concubina, esta muy grave.. - mencionó, no puede ser mi madre

-En donde se encuentra.. Necesito verla - mencione, ella no se movio.

-Nadie puede entrar a su habitación son órdenes de la señora. - mencionó

-No me importan, solo llévame yo asumiré todas las consecuencias. - mencione, ella dudo pero al final accedió.

No podia creer, en el lugar donde tenian a mi pobre madre.. Lleno de suciedad y al entrar a su habitación no pude evitar derramar lágrimas estaba postrada en una mullida cama y de su boca salía sangre.. No era la misma mujer que en mis recuerdos pasados tenía, todos estos años estuve pensando en ella y por eso me mantenía con vida.. Ella entreabrio sus ojos y lágrimas salieron de sus ojos verdes.

-Hija.. mi pequeña.. - mencionó con una voz débil, Corrí a su cama.

-Madre soy yo, por fin estoy de regreso.. que te hicieron.. - mencione tomando un pañuelo y limpiando la sangre que salía de su boca, jamás imagine que nuestro reencuentro seria así.

-Hija.. te extrañe.. M-mucho.. - mencionó tocando mi cara.

-Madre, no hables.. Namida ve por un medico dile a mi padre lo que esta pasando. - mencione, ella salió

-No llores.. n-no me gusta, V-verte así.-mencionó, yo tome su mano.

-Porque mi padre permite algo así, esa Maldita me las pagará.. - mencione con colera.

-Te Q-quiero, mi niña.. E-es bueno verte.. N-nunca olvides que te amo. - mencionó cerrando sus ojos.

-¡Madre no!.. Despierta, madre no me hagas esto, a penas nos volvimos a encontrar.. No me dejes sola.. - mencione llorando, tratando de despertarla.. Pero era inútil.

-¡Madre por favor despierta !.. Tenemos tantas cosas que hacer juntas, Madre.. - mencione,me sentia hecha pedazos en eso entro el médico yo me aparte para que la revisara.

-Doctor como esta.. - mencionó una voz a mi espalda, era el, mi padre.

-Lo siento señor ministro, ella acaba de fallecer.. - mencionó,no es posible.. Ella me dejó ahora si estoy realmente sola.. Una mano se posó en mi hombro, al ver de quien se trataba la quite de un solo.

-Tu tienes la culpa, tu la mataste padre.. Mira en que condiciones la tenías.. Te odio. - mencione con ira y dolor.

-Cuidado como me hablas, ella murió del corazón.. Además yo no le di el castigo - menciono.

-Señorita Sarada, tranquila.. La señora sakura tenía una enfermedad del corazón.. Eso condujo a su muerte.-mencionó el médico.

-Mi padre permitió que me separaran de ella, y ni siquiera le dio una vida a digna  a pesar de tenér tanto dinero. - mencione, pero al ver a esa Maldita mujer  entrar por la puerta me
abalance sobre ella.

-! Que haces aquí, largate Maldita.. Tu la mataste, te juro que esto no se va a quedar así.. - mencione con ira..

-Sueltame, ahora mismo o haré que te castiguen. - mencionó, yo la jale del pelo y le solté una cachetada.

-Basta Sarada, guardias llevenla a su habitación y la encierran. - mencionó mi padre.

-No me alejes de mi madre, no lo hagas papa..-pero el no me escucho.

Me encerraron en mi habitación, no se cuantas horas llore sin cesar.. No quiero vivir, me siento tan sola.madre quiero que lleves contigo.no quiero sufrir, no soporto  este dolor.

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Boruto.

Me encontraba en el palacio, mi padre me había convocado.. Al llegar me encontré con el primer príncipe, kawaki.

-Hermano, es bueno volver a verte. - mencionó, el se encargaba de las asuntos militares de la nación, eran pocas veces que nos encontrabamos.

-Lo mismo opino, primer hermano. - mencione, en eso apareció nuestro padre.

-saludos su majestad.. - mencionamos al unísono, nos arrodillamos.

-Que bueno que pudieron estar aqui, ya pueden levantarse. - mencionó

-Gracias su majestad. - mencione

-Los convoque aquí, ya que bueno ambos ya estan en una edad adulta y necesitan casarse.. - mencionó, esta platica otra vez.

-Padre, es bueno que te preocupes por nosotros en mi caso yo a penas y Tengo tiempo para mi, por lo del cuartel.. No sería justo que mi futura esposa esté tanto tiempo sola. - mencionó kawaki.

-Bien, tienes razón hijo.. Pero tu boruto no tienes excusa, aprovecha la reunión de este domingo en la mansion del primer ministro para que conozcas a su hija.. - no puede ser, ya conocía a lady sumire y no me agradaba en lo absoluto.

-Si padre, tomare en cuenta  tu consejo.. - mencione, no quiero casarme ahorita.

-Ya ansío tenér nietos pronto. - mencionó riendo.

-me retiro su majestad, tengo asuntos que atender. - mencione haciendo una reverencia.

Mejor salí del palacio, tal vez sera mejor ir a pescar.. Durante el recorrido me acorde de la señorita sarada, no se porque de repente se me vino a la cabeza.. Espero verla pronto..cuando me faltaba poco para llegar al río, mire que una mujer se tiraba a las aguas..la corriente se miraba torrencial, Corrí lo más rápido posible.. Es peligroso que tal si se ahoga.

Me metí al agua, pero no encontraba a la mujer por ningún lado hasta que mire una mano al fondo del río, nade más profundo y tome su mano para jarlarla a la orilla.. La tomé en brazos y la coloque sobre el césped, su rostro se me hacía conocido.. Al mirarla de cerca me lleve una sorpresa.

-Sarada.. - mencione, sin poderlo creer, porque se intento suicidar tirándose al río. Puse mis manos en su pecho tratando de que expulsara el agua.. Su pulso estaba algo débil.

Continuará..