Sarada

Antes de subir al carruaje, chou vino en veloz carrera.. Que bueno que puedo despedirme aunque sea.

-Sarada.. Te vas. - mencionó, me de  pesar separarme de ella, es una gran amiga.

-Si, mi padre quiere que vuelva a su mansion. - mencione

-Señorita Sarada ya es hora de partir..-mencionó la dama de la mansion.

-Ya me tengo que ir.. Cuidate. - mencione abrazándola

-Llévame contigo, no tengo nadie aquí puedo ser tu doncella si quieres. - era una buena idea, así no me sentiré sola.

-Dama judih.. Permititame que ella vaya conmigo a la mansion Uchiha por favor. - mencione, hasta la llame por su nombre para que dijera que si.

-Usted no tiene que pedirme permiso lady Sarada,si usted la quiere llevar como su doncella solo hágalo. - mencionó con una sonrisa

-Gracias de todas maneras. - mencione emocionada.

Durante el recorrido le dije toda la verdad a la dama judih, de como mi supuesta tía me trataba.

-Siento tanto que tuvieras que pasar por esto, las cartas que esa mujer le enviaba al señor eran puras mentiras.. Pero no te preocupes ella será castigada.

-Pero mi padre no fue capaz, de visitarme no entiendo como es que ahora quiere que regrese a la mansion. - mencione

-El señor está ocupado, con sus  asuntos y casi no tiene tiempo.. Pero siempre estaba pendiente de enviar dinero y de las cartas. - mencionó, se que lo defendía pero dejarme en el campo sola con una mujer despreciable no habla muy bien de él.. Un padre jamas haría algo así.

-Tomaremos un descanso aquí en esta posada.. - mencionó ella.

-Esta bien, me dijo que me dara otra doncella. - mencione

-Si, ven aquí niña.. Es ella  su nombre es  namida y de ahora en adelante se encargará de atenderte. - mencionó

-Es un gusto para mí atenderla, señorita Sarada. - mencionó, se miraba buena gente.

-Está bien, vamonos namida, chou. - mencione

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Palacio Real.

-Majestad, el primer ministro desea una audiencia con usted. - mencionó el eunuco.

-Hazlo pasar. - mencionó el Rey uzumaki.

-Saludos su majestad. - mencionó el ministro haciendo su respectivo saludo.

-Para que deseabas verme mi buen amigo. - mencionó con una sonrisa.

-El domingo es mi cumpleaños y traigo estas invitaciones.. Se que tu no puedes moverte de la corte asi que espero los príncipes nos puedan acompañar.

-No te preocupes, haré que el primer y el segundo príncipe vayan a tu cumpleaños y te lleven un presente de mi parte. - mencionó

-Si abundancia es infinita majestad, ahora sí me retiro.

-Que te bien  vaya, Sasuke.. - el rey miró como si amigo se iba y miles de recuerdos surcaron su mente.
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Ya en la noche el primer ministro llegó a su mansion y se metió a su estudio, tenía trabajo que hacer.

-Padre puedo pasar. - mencionó una delicada voz al otro lado de la puerta

-Pasa hija que necesitas.. - lady sumire hizo su aparición.

-Te traje un té, se que has de estar muy cansado. - mencionó ella.

-Gracias eres tan atenta, no sera que necesitas que te haga un favor. - mencionó conocía a su hija

-Llevaste las invitaciones al Rey.. - exclamó

-Si, el primer y segundo príncipe vendrán a mi cumpleaños. -

-Que bueno padre, tendré que comprar un nuevo vestido. - mencionó ella.

-También le compras uno a tu hermana, recuerda que ella de ahora en adelante estará viviendo en la mansion.

-Pero padre, ella es ignorante se  crió en el campo no sabría comportarse ante los altos funcionarios que estarán presentes..-mencionó

-Entonces ayudala a comportarse.. es tu hermana y debe estar presente. -

-Si padre, me retiro. - mencionó saliendo.

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Sarada.

Nos acostamos temprano, pero de pronto sentí un olor desagradable, me levante y empecé a toser.. Me asuste al ver las grandes llamas que estaban a mi alrededor.. Acaso iba a morir quedada. Intenté por todos los medios salir de mi cuarto pero no podía.

-Señorita Sarada, aguante yo la salvare. - mencionó chou desde afuera.

-No lo hagas chou, no quiero que mueras.. - mencione, sentía que faltaba el aire

Este es mi fin, ni siquiera pude ver a mi madre por última vez.. Porque la vida es tan injusta conmigo.

-Ven conmigo. - mencionó una voz que no conocía, me tomo de la mano y salto por una ventana.. ni me dio tiempo de procesar, caímos al césped yo caí encima de él.. Me quite, miraba borroso ya que el humo afecto mis ojos.

-Lo siento, gracias por salvarme. - mencione, el se quito su capa ya que estaba algo quemada.

-Por lo menos llegué a tiempo. - mencionó, ya mas tranquila me fije en el, era atractivo y tenía unos ojos azules precisos.. El me miró y sonrió.

-Gracias por  arriesgar tu vida sin siquiera conocerme.. - mencione

-Las damas que estaban afuera me pidieron que te salvará  eran muy escandalosas y por eso lo hice me da gusto ver que estas bien. - mencionó, se miraba buena persona.

-Su.. Digo señor es hora de irnos. - mencionó un hombre a su lado.

-Vamonos iwabe..que tenga un buen viaje señorita  - mencionó el..ojala tenga la oportunidad de volver a verlo

No se quien es el, pero le debo mi vida..chou y namida llegaron y me hicieron miles de preguntas.. Ya al amanecer llegamos a la capital y no tardamos nada en llegar a la gran mansion.

-Hemos llegado, señorita sarada le ayudó a bajar. - mencionó judih, al bajar del carruaje me sorprendió ver cuán grande era la gran mansion ya casi ni la recordaba.

-Wao, que casota.. - mencionó chou asombrada.

-Bienvenida lady Sarada.. - mencionaron las doncellas haciendo una reverencia, no vi por ningún lado a mi papá.

-Mi padre donde esta porque no ha venido a recibirme. - mencione, ellas rieron.

-Porque el señor vendría, tu llegada no es la gran cosa. - mencionó una de ella.. Debí suponer que esta mansion se convirtiria  en un infierno.

-Quires que te castigue por hablarle así a la señorita Sarada, también es la hija del ministro así que más respeto.-mencionó la dama judih.

-Lo siento señorita Sarada, no fue intención faltarle el respeto. - mencionó ella.

-Vamos señorita, necesita cambiarse para estar presente en el Gran salón. - mencionó, tal vez mi madre esta ahi.

Continuará...