Oh New york, New york ¡La reina está de regreso! Mis asistentes personales han llevado todas mis maletas e organizaran mi ropa de nuevo en el closet. Y yo voy camino a él pent-house de Aaron con sus maletas y a darle parte de la sorpresa que no se la pude dar en L.A y que aún queda allá, pero por ahora le daré la mitad de la sorpresa ayer. Claramente le dije a Aaron que no iría a su pent-house, pero es mentira.

—Señorita Tiffany ya llegamos. Las maletas se las subirán ahora.

—Gracias Diego.

Me bajo de él auto. Entro en él edificio y meto en él ascensor presiono él piso y la clave para él piso de Aaron. Se abren las puertas y entro en él pent-house. Está totalmente limpio y como nuevo, se nota que lo estuvieron arreglando y limpiando. Me dirijo a la habitación de Aaron y es hora de comenzar con parte de mi regalo... De cumpleaños para Aaron. Es uno de los tantos que le tendré él cumpleaños es mañana, pero desde hoy se lo celebrare.

—Señorita Tiffany ya le subí las maletas las deje en la sala de estar.

—Muchas gracias Diego.

—Con gusto le cerrare ya con seguro nadie más entrará ya él que entre será Aaron. Hasta luego.

—Gracias hasta luego.

Que comience la sorpresa. Comienzo a colocar pétalos de rosa regados por toda la habitación. Coloco algunas velas. Y esencias. Salgo de la habitación y me voy a la cocina es hora de preparar algo. Me colocó en la cocina y decido preparar esta vez unas quesadillas de pollo cordón blue. Una ensalada capricce con guacamole.

(...)

Me decido cambiar, me coloco mi ropa interior sorpresa que me había comprado en L.A esta mañana

Luego en cada pierna me coloco unas medias veladas negras hasta las rodillas y después me coloco mis tacones de puntilla Christian Loubotin negros. Dejo suelto mi cabello en ondas. Me maquilló fuerte los ojos y aplico un labial nude en mis labios y por último me coloco mi bata de satín negra. Salgo de la habitación y me dirijo a la cocina. Comienzo a servir en los platos las quesadillas. Llevo los platos a él comedor. Enciendo dos velas. Luego coloco él bol de ensalada, las copas, los cubiertos con servilletas y la botella de vino. Enciendo él reproductor de música y coloco a Frank Sinatra.

Escucho como las puertas de él ascensor se abren y espero a que Aaron entre me quito la bata y lo recibo en esta sexy, transparente y romántica ropa interior.

—Aaron enciende ya mismo las luces.- la voz de él señor Hayes. La cual solo me genera escalofríos.

Me coloco la bata y me siento en el comedor, apago la música y las velas. Y espero a que una a una las luces se vayan encendiendo.

—Diego ¿eres tu él que está aquí a esta hora en mi casa?!- dice Aaron- papa si quieres me esperas un momento en la sala de él recibidor yo por mientras le doy una vuelta a él pent-house.

—Está bien hijo.

Veo como dice eso y a la hora de llegar a él centro de él pent-house. Y a la parte de la cocina.

—Sorpresa

—Mi amor

Sale a abrazarme y a besarme.

—Whao veo que hiciste la cena, y que llegaste de sorpresa aquí. Te amo.

—Sí y te tengo otra sorpresa porque mañana es tu cumpleaños.

—Muero por saber que es. Mi amor estas tan guapa, pero en bata. Si quieres me esperas en mi habitación o te vistes y sales a saludar a mi padre.

—Amor....

—Si mejor quédate en mi habitación y cuando acabe sales. Voy a tapar la comida mi vida ya puedes irte tranquila a mi habitación.

—Está bien.

Me levanto y camino hacia la habitación de Aaron me encierro y por ahora toca esperar. Claramente quiero escuchar, me hago en la puerta y comienzo a escuchar toda la conversación...

—Aaron es hora de pedirle él divorcio a tu madre! ¡¡Me canse de esto!! ¡Es hora de divorciarme de ella y continuar con mi gran imperio sin ella!

—Papá ya sabes lo que va a pasar se vienen días de tormentas para nosotros los Hayes.

—Lo se hijo, pero personas como ella no merecen estar más en nuestra familia, ni siquiera sé cómo se lo diré a tus hermanos y a la que más le dolerá será a tu hermana.

—Papá esta familia hace mucho que está rota que tú no te des cuenta es diferente.

—Cállate!

—Es la verdad. ¡No me callare más papá!

—Hijo ya todo se habló en esa última reunión.

—Entonces que haces aquí. Pensé que aún faltaban cosas por hablar.

— ¿Cómo qué? ya todo se arregló.

—Entonces ya vete de mí Pent-house mi mujer me está esperando en mi habitación.

—Solo quería estar con mi hijo del medio .Como piensas que me siento.

—¡Ahora si quieres pasar tiempo conmigo! Porque no vas con mi hermano mayor. Ah verdad él no está aquí.

—Me quedare aquí no me importa, no lo entiendes tu madre nos traiciono, ni siquiera soy capaz de dormir hoy en la misma cama que ella.

—¡Vete a un hotel! Yo necesitó estar con mi mujer ¡Ahora!

—¡Mañana tendremos que fingir, en la cena familiar! no lo olvides! ¡Es tu cumpleaños!

—¿Cuándo hablaras con mamá y le dirás que sabes de su engaño?

—No lo sé, tal vez pasado mañana cuando le entregue el documento de él divorcio.

—Así está mejor.

—¡Me voy hijo! déjale saludos a tu mujer.

Qué asco ese señor dejándome saludos y para colmo no me gusto el tono de voz a la hora de decir tu mujer.

—Lo haré, chao papá te acompañare a la salida.

Abro la puerta y salgo de nuevo a la sala y a él comedor. Decido sentarme en el comedor y comenzar a comer. Sin esperar a Aaron mi celular comienza a sonar y contesto sin mirar quien es.

— ¿Alo? ¿Bueno?

—Hola Tiffany- la voz de la mama de Aaron. Me congela por completo.

—Señora Margaret que sorpresa.

—Sí, ya sabes mañana cumple años Aaron y quiero hacerle un almuerzo sorpresa me encantaría que estuvieras aquí con nosotros ¿ya estás en New york?

—Si ya estoy en Nueva york. Hay un pequeño problema no iré a él almuerzo tengo un compromiso urgente y no poder asistir. Haré lo posible por ir, pero no creo.

—Tiffany es tu novio y pensé que ibas a estar aquí! Pero bueno cariño está bien, para la próxima será.

—si para la próxima. Hasta luego.

Le cuelgo. Mañana en ese almuerzo la confrontare y le diré todo lo que siento. No me contendré es hora de ser la nueva Tiffany Roberts D' Altrui.

Veo como Aaron vuelve a entrar totalmente agotado... Se sienta en el comedor y también destapa su plato.

—Buen provecho mi amor.

—Buen provecho igual cariño.

Comienzo a comer de la quedadilla y me quedó deliciosa, incluyo algo de ensalada en mi plato y sigo comiendo. Aaron también hace lo mismo pero sus expresiones en su cara se notan que está demasiado triste.

—Aaron... Si quieres dejo la sorpresa para después... Ya sabes estas agotado.

—Cariño no tranquila es sólo que me siento... Algo agotado y él día de mañana en mi cumpleaños no va a ser nada bueno, en el almuerzo porque en la noche tu y yo iremos a celebrar a otra parte.

—Sí, Amor... ¿cuál almuerzo?

—Ay amor mañana en la casa me harán un almuerzo y estaremos allí.

—Oh está bien. Cariño aunque no estoy segura de ir. No creo que me sienta bien.

—Si es la hora de confrontarla lo haces no hay problema.

—Está bien...- si supiera en verdad que más es lo que me aterra es su padre. Pero no le debo de contar aun. Le contare después.

—Amor... Colocare todo en él lavavajillas todo te quedo delicioso.

—Te espero en tu habitación.

Me voy a la habitación de Aaron, me quito la bata y vuelvo a quedar en esa ropa interior que compre sólo por él. Enciendo las velas y colocó la música. Me acuesto sobre la cama llena de pétalos de rosas.

— whao tiff por fin después de un día agotador...

—¡Sorpresa!

—Y todo esto y por Dios te ves hermosa en ese conjunto.

—Feliz cumpleaños mi amor...- digo levantándome de la cama. Y acercándome a él.

Él es mucho más ágil que yo y me coloca contra la pared comienza a darme pequeños besos en mis labios y ya después me comienza a dejar un camino de besos por mi cuello y parte del pecho. Y deja el camino de besos por un rato y vuelve de nuevo a mis labios. Hago él beso aún más caliente y lo muerdo, después nuestras lenguas hacen juego y sigo besándolo como si mi vida dependiera de ello. Me separo por un momento de él y le comienzo a quitar la corbata y la camisa que tiene haciéndolo quedar desnudo en la parte de arriba mostrándome sus hermosos abdominales. Lo tiro en la cama y él queda boca abajo y yo encima de él. Comienzo a darle besos por todo su cuerpo y después llegó hasta él broche de su pantalón. Me detengo.

—Adelante soy todo tuyo...

—Con gusto- diciendo eso procedo a quitarle él pantalón y después de eso sus boxers color gris de Calvin Klein.

Al verlo logro ver su cuerpo desnudo. Me quito de encima de él y esta vez la que queda abajo de él soy yo. Siguen los besos las caricias cada vez más rápidas y ardientes. Me va quitando cada prenda delicada de esta ropa interior. Al dejarme desnuda se levanta un momento y busca en él cajón algo logro ver y es un sobrecito plateado pequeño. Respira y me mira fijamente en sus ojos no sólo veo amor, veo deseo y sorpresa.

— Tiffany ¿estas seguras de esto?

—Si! más que segura tan solo hazlo. Ya no tengo miedo.

—Está bien, ya sabes cómo es esto así que es hora de comenzar a jugar por un rato...

Me acerco y le doy un beso y así volvemos a caer en la cama, donde solo se escuchan nuestras respiraciones entre cortadas.

(...)

—Cariño ya es hora de despertar, vamos a llegar tarde a él almuerzo.

Al abrir mis ojos logro verlo y allí esta él con una gran sonrisa. Lo quedo mirando fijamente podría perderme por un tiempo en sus ojos tan verdes con un toque gris.

—¿Que me miras? - dice con tono de broma

—Tus ojos me encantan.

—Y a mí tus labios, y haría una lista demasiado larga pero bueno...

—Feliz cumpleaños... Mi amor... Más tarde te daré mi regalo.

—Más regalos con él de ayer me sorprendiste demasiado.

—Lo sé y eso que falta él de L.A pero bueno eso era una pequeña parte.

—¿Te gusto lo de anoche?

—Me encanto.

—Coqueta.

—Idiota.

—Y así me amas.

—Lo sé. Bueno cariño me iré a arreglar, aunque sabes cuánto no me gustaría ir...

—Si lo sé, yo tampoco quiero ir...

—Pero es tu cumpleaños y tu familia quiere celebrártelo.

—Lo sé. ¿Entonces nos vemos en la sala?

—Si mi amor. Aunque espera un momento que me voy a colocar si no tengo nada de ropa aquí ni siquiera interior. Solo lo de ayer.

—Si quieres voy un momento a tu casa y te traigo algo.

—Por favor, me harías la más feliz y escoge algo bonito.

—¿Con quién crees que hablas?

—Disculpa.

(...)

Después de unas horas de esperar a Aaron al fin está aquí. Con ropa interior nueva y un vestido de encaje rojo. Me lo coloco y lo combino con unas sandalias de tacón color beige. Mi cabello lo dejo en ondas y mi maquillaje suave, pero él labial si lo dejo rojo.

Una última mirada en él espejo. Y tomó un bolso tipo sobre y unas gafas de sol. Salgo de él armario de Aaron esta vez a la sala. Donde dijo que me esperaría.

—Te ves hermosa.

—Tú lo elegiste.

—¿No llevas puesto Sostén?

—Él vestido no necesita, pero llevo copas cariño. Y por cierto no vayamos rápido que me duele para caminar.

Y suelta una risotada increíblemente ronca y llena de diversión. Pero yo claramente lo volteo a mirar mal, nos subimos en él ascensor y este comienza a bajar. Llegamos a él parqueadero subterráneo que hay allí esta él carro de Aaron un Audi TT Coupe color negro. Nos subimos en él, lo enciende y comienza a conducir, salimos de él parqueadero y comenzamos con él gran tráfico de new york.

—Amor pensé que no manejarías hoy.

—No voy a tomar licor en ese almuerzo o hasta tú no tomaras así que cualquiera puede manejar de regreso.

—Bueno en eso tienes razón. Y es más fácil por si quiero salir de allí.

—Te noto nerviosa ¿Paso algo? - dice mirando a la carretera porque estamos ya saliendo de la cuidad y acercándonos a los Hamptons.

—Cariño ya sabes quién va a estar allí. No se cómo vaya a reaccionar no te quiero arruinar tu día.

—Amor nada arruinara este día. Y si algo lo arruina luego se arreglará porque estoy contigo.

—Awww pero que romántico has amanecido hoy.

—Porque habrá sido. Aunque te recomiendo algo no vayas a caminar, lo extraño que se va a notar, la increíble... que te di anoche.

—Siempre me ha encantado tu increíble boca tan educada y prudente.

Nos comenzamos a acercar y ya se comienza a notar que ya estamos en los Hamptons sus casas, él mar, las tiendas y la calidad de autos que se ven aquí. Pasamos de largo por él mini pueblo artesanal y ya vamos llegando a las grandes mansiones. Aaron gira por una de las pequeñas calles y allí me doy cuenta que acabamos de llegar a la gran casa blanca con jardines y flores perfectas a su casa. Nos abren las rejas de esta y él parquea él auto. Nos bajamos de él auto. Y después nos tomamos de la mano y comenzamos a caminar hacia la entrada.

—Amor recuerda sonreír y fingir. Cualquier cosa me avisas.

—Si mi amor.

Nos abren la puerta y allí esta él señor Hayes con un traje impecable, su cabello totalmente peinado y lleva en sus manos un libro de relajación. Desde cuando me coloco rígida y Aaron nota eso ya que me abraza más a él.

—Hola bienvenidos pasen. Felizzz Cumpleaños Hijo. ¡Más tarde te daré tu regalo! - Dice estrechándole la mano y dándole un pequeño y corto abrazo.

—Gracias papá bueno nosotros vamos siguiendo.

—Están atrás en la terraza en el comedor de allá, ya que tu madre quería que fuera a él aire libre.

Seguimos caminando por la gran casa. Hasta llegar a la terraza jardín y allí hay globos azules con helio amarrados a las sillas. Allí se encuentran los abuelos de Aaron, su hermana menor que es la copia casi idéntica de Harry digo casi por el tono de cabello, su madre y él mejor amigo de él de toda la infancia no recuerdo como se llamaba. Ah ya Jeremy.

—Feliz cumpleaños, ¡¡¡¡sorpresa!!!! -Gritan todos a él unísono.

Nos acercamos más y empezamos a saludar uno a uno.

(...)

Después de él gran almuerzo que prepararon nos encontramos todos cantándole él cumpleaños a Aaron. Él soplo las velas y ha llegado el momento de las fotos. Me hago a su lado y nos toman la foto. Minutos después ya nos encontramos comiendo de la torta de chocolate.

—Cariño que tal si vamos con Jeremy a mi antigua habitación.

—Bueno vamos.

—No tiffany ira conmigo- dice Phoebe la hermana de Aaron.

—Está bien iré contigo Phoebe. Vamos.

Entramos todos a la casa ellos se van por las escaleras y nosotros nos sentamos en él gran sofá en L.

— Tiffany he notado a papá y a Aaron extraños no sé qué sucede.

—Hay nene lo que se viene para ti será algo fuerte pero tranquila todo estará bien. Debes de ser fuerte.

—Está bien ¿Y tú y Aaron ya son novios?

—Si oficiales.

— Wiiiii por fin - me abraza y comienza a llorar.

—¿A qué se debe la celebración? - dice la voz de la mamá de Aaron.

—Mamá Aaron y Tiffany son otra vez ¡novios oficiales!

—Omg esto hay que celebrarlo iré a traer copas de champagne.

—Yo la acompaño! ¡A traer las copas!

—Vamos pues...

Y ha llegado la hora me levanto de él sofá. Y comienzo a caminar hacia la cocina. Entramos las dos y ella saca de la reserva una Champagne botella Moet. Saca las copas y las comienza a servir una a una...

—Tiffany! ¡Qué bueno que hayas vuelto con mi hijo!

—Ya basta señora Margaret, conmigo no finja no se haga la que no fue. Ya me di cuenta de lo que le hizo a mi familia hace seis años y lo que está haciendo ahora.

—¿De qué hablas?

—No se haga.

—Seré tu próxima mamá, pero por favor no les cuentes a nadie. - comienza a llorar y mi mano no demora en impactarle.

—Escúcheme bien usted no será mi próxima mama ni nada, y para colmo que no diga nada, ¡Margaret ya la mayoría sabe la clase de mujer que es usted y que usted tiene los días contados aquí en este gran imperio! ¡Así que no sea desgraciada con sus hijos! Cree que en L.¡A estando yo allá Peter, Aaron no nos daríamos cuenta de la cochinada que fue hacer allá con mi padre! Y agradezca que su hijo se quedó callado porque se lo pedí. Ahora finjamos cortesía al salir de aquí con las copas. Margaret, Margarita- digo en español.

No dice nada me mira con asombro y temor y toma la copa de champagne de ella y de Phoebe y yo tomo la mía. Salimos de la cocina y Salimos como si nada hubiera pasado, como si toda mi ira no la tuviera comprimida para quererle pegar otra buena cachetada y decirle más de lo que le dije.

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Oyeme pero que intenso el capitulo, holaaa mis pequeños diamantes espero que les haya gustado no se olviden de regalarme por favor una hermosa estrellita si les gusto.

Os quiero y nos vemos en el próximo capitulo...