𝖭𝖺𝗋𝗋𝖺 𝖩𝗂𝗁𝗒𝗈

Me llamó Park Jihyo.

Desde que era pequeña he tenido el sueño de ser psicóloga.
O como yo lo llamaba de pequeña "persona que escucha los problemas de otros".

Y por suerte ahora con mis 27 años he logrado trabajar como psicóloga.

He tenido varios pacientes, muchos venían con un nudo en la garganta, al punto del llanto, enojados, felices, tristes, llorando, maldiciendo y enamorados.
Pero nunca he tenido un paciente que sobrepase los temas de conversación para un psicólogo, nunca fue así.

Todos parecían ser normales con uno que otro problema fácil de resolver el incluso con algún conflicto (peleas) que han tenido y vienen a pensar si fue bien lo que hicieron o dijieron.

Pero, hoy ha llegado una chica que se llama Minatozaki Sana.
Esta, sufre de un trastorno mental que la hace ver alucinaciones y ella misma me ha dicho que dos oficiales de un laboratorio que sepa Dios donde queda, la mandaron aquí.

Yo decía quizás solo quizás, esta bien mentalmente y no me va a contar como 28 asesinatos, demonios que vio o algo así..

Pero yo estaba completamente equivocada.

Me contó sobre unos "cuatro reflejos" y sobre como estos la manipulaban de una manera que ni siquiera parecían ser reflejos o una alucinación.

Pero yo como psicóloga intente buscar alguna respuesta a eso.

Y claro, ¡esta muy claro que fue lo que le ocurrió!

Fue una simple alucinación, eso fue lo que exactamente le dije. Pero seguía, seguía y seguía insistiendo que esos reflejos salieron de los espejos y cristales donde ella misma se vio y que ella nunca uso la ropa que llevaron esos reflejos, tampoco tiene el físico de estas y no tiene la misma altura.

Prácticamente me fue difícil tener que razonar con ella, no me quería poner en sus zapatos pues me iba a sentir como una loca.

Hasta que decidí intentar hablar con alguno de los dos oficiales que hablaron con ella, le he pedido si sabe dónde están ellos y me dijo que trabajan en el laboratorio kinetsu no se que.

Intente ir ahi, y lo logre.

Descubrí que uno esta demasiado viejo y parece que no es profesional pero lo es, luego otro que recién inicio y al lado de mi ese es un nene de 4 años..
Pero en fin, que logre hablar con ellos y como el otro que es un viejo y vago (miren es vv de viejo y vago) me hizo leer unos papeles donde estaba la información de Sana.

Simplemente lo leí y ya, le di las gracias y le pedí perdón por molestar y el pareció ser buena onda, de hecho lo es.

Él parece ser un viejo vago que no hace nada y que sólo se queja con la panza arriba, pero no es así.
Durante el tiempo en el que yo estuve leyendo esos papeles, el cada que podía me podía sacar las dudas pero casi siempre se la pasaba haciendo algo, no he visto que se queje (al menos de algo que no tenga lógica no, pero sólo se queja de que le aumentan las horas siendo un viejo que ni se mantiene a él mismo) y tampoco tiene cuerpo de viejo, panza no tiene (osea no es gordo) y parece hacer ejercicio.

Pero igual tiene 36 años él, mientras que el otro tiene unos 23 años, hasta es más joven que Sana.

Cuando supe más sobre Sana, supe como tratarla.

Pero lo que no sabía es que iba a ser demasiado difícil.

Un día me invitó a su casa, acepte para ver donde ella vive y si su trastorno lo tiene por el ambiente.
Me sirvió un té muy simple, pero me hecho un montón de azúcar que ahí mismo me pudo agarrar diabetes, y lo peor fue todo cuando me dijo que no toma té pero le gusta servir té.
¿Qué tiene de malo? Pues que ella hecha un monton de azúcar, sin haber probado el té con toda la azúcar del mundo y té obliga a tomartelo.

También me dijieron que sus alucinaciones son muy capaces de hacerte dudar, hasta a mi misma me ha hecho dudar de sus palabras.
No es muy fácil creer en alguien con ese problema mental.

Pero lo he intentado y, accidentalmente me he metido en sus zapatos.