capitulo 14

Su corazón estuvo a punto de escaparse de su pecho, adolorido al ver esa fría lápida y flores marchitas frente a sus temblorosos ojos cafes, una fuerte lluvía quería caer de esa mirada impregnaba de muchos lamentos y arrepentimientos.

‹Lo enterraron justamente dónde el quería juntó a su amada esposa e hija. Mi abuelo solía hablar mucho de mi tía, ella era su mayor orgullo pero también su mas grande arrepentimiento por no haberla podido salvar, por no poder haber evitado que se enamorara de ese hombre que solo la ilusionó y dejó.

Él siempre me solía traer a este lugar cada vez que era el cumpleaños de ella, le traíamos flores y nos sentamos frente a su tumba por varias horas mientras me contaba historias dulces y vergüenzas de ella. Llegó un punto en que sabía más cosas de ella que de mis padres, per lo más extraño es que me sentía feliz de eso. Conocer cosas de ella me hacía sentir emocionado esperando con ansias su siguente cumpleaños para poder venir a visitarla.

Porque solo venía a este lugar y sabía de ella cuando cumplía años, era el único día en que el abuelo habla mucho de ella. Sin embargo, nunca me dijo quien era el hombre que jugó con los sentimientos de mi tía. Eso sí, cada vez que me decía algo de ella me pedía que la entendiera y no la juzgará duramente....

"—Abuelo, ¿de que murió mi tía?—Pregunte mientras veía su hermoso rostro tallado en esa lápida.

No sé si esa es la única foto que tenía de ella, pero ahí se ve muy joven como de unos 19 años. Su cabello marrón era muy rizado y sus ojos risueños de color verde hacia irradiar su piel canela, ella es muy parecida a mi abuelo.

—Sobre eso...bueno...—Baja la mirada ocultando su culpa y desgrasado asimismo por ocultar la verdad, que esa joven es nada menos que su madre. Recordando ese día en que nació Agni.

‹He querido decirle la verdad a Agni desde hace mucho tiempo, sin embargo no logró poder hacerlo porque estoy seguro que si le cuento la verdad, él se sentirá demasiado culpable aunque no tiene culpa y mucho menos debería de sentirla.

¿Hay alguna manera de decirle que esa joven es su madre? ¿Cómo se supone que se le dice a un niño que su madre murió por qué decidió darlo a luz, aun sabiendo que eso la llevaría a la muerte? No hay una manera y si lo hubiera no logró encontrarla todavía.

Desde el momento en que le dijeron que su embarazo sería altamente riesgoso, yo me opuse a que siguiera con eso y que debería interrumpirlo inmediatamente mas cuando; ese bastardo se fue con mentiras.

No obstante sin importar mis palabras o preocupación ella firmemente expresó que tendría a su bebé, dar la vida por la pequeña vida en su vientre, lo haría. Sería el acto de amor más sincero y amoroso que llegaría hacer sobre todo cuando ese pequeño es fruto de un amor verdadero.

Ella a pesar de que ese hombre se fue a solucionar unos problemas que para mí sonó como mentiría, siguió esperando por él para darle la noticia que serían padres pero eso hombre hasta el final nunca apareció y ella jamás lo culpo.

"Papá, hermano. Sí el vuelve díganle la verdad y dejen que se relacione con mi pequeño Agni, se que será difícil pero por favor. Por favor no lo juzguen y solo entenderlo que él les dirá el motivo por el que se fue... También díganle que nunca lo deje de amar..." Fue el favor que pido con lágrimas de amor y dolor en su rostro.

—Abuelo, si es difícil entonces no es necesario que me lo digas...

—Ella no quería morir y tenía la esperanza de sobrevivir para encontrarse con las dos personas que mas amaba, solo que al final no logró salir con vida de esa sala.—Agarra las manos de Agni.—Ella aun sabiendo que al entrar a esa sala de hospital cabía alta posibilidad de jamás salir con vida, siguió adelante.

—¿Estaba enferma?

—No precisamente, mas bien al entrar a esa sala podría encontrarse con el regalo mas hermoso que la vida le pudo haber obsequiado, ella amaba demasiado ese regaló y quería protegerlo para siempre pero lastimosamente no vivió para verlo crecer." Esa fue la última conversación que tuve con mi abuelo antes de que fuera hospitalizado, y yo enviando a la infantería.› Agni no había entendido del todo esa conversación y tampoco tenía tiempo para eso porque su abuelo en ese momento cayó inconsciente.

—Estoy aquí.—Queria sonreir pero no podía.

El grueso nudo en su garganta se quedó ahí, como una piedra sirviendo de fortaleza para que el agua del río no siguiera fluyendo, quedándose estancada en un solo lugar. Así sentía Agni al quedarse sin aire por ese nudo en su garganta. Queriendo llorar pero las lágrimas al igual que las palabras no podía salir de su boca.

—Hola, abuelo.—Las flores en sus manos se estrujan como lo está haciendo su corazón.—Regrese muy tarde, ¿verdad?—Ligeramente sus ojos se entrecierra, sonriendo pero de dolor.

Adair se mantiene en silencio porque así se lo pidió Agni, le pidió que primero lo deje hablar un momento con su abuelo antes de iniciar la conversación entre él y beta. No obstante, aunque a Adair se le ve callado el en este instante está controlando su evidente enojó.

No le agrada para nada ver esa expresión tan agonizante en el alfa, pese a que entendía la reacción de Agni a el beta le sigue molestando verlo de esa manera. Pensado; "Si quiero verlo llorar pero no tristeza y mucho menos de felicidad por alguien más, sino que un sollozo por algo más maravilloso." Eran los pensamientos medios impuros del beta.

—Me disculpo por eso.—Procede a ponerse en cuclillas.—¿Me disculpas por llegar tarde y no poder despedirme de ti, verdad?—Muerde su labio hasta volverlo morado
—¿Ahora te sientes mejor?—Preguntó acto seguido grandes gotas de agua mojan lápida.

‹Cuando mi abuelo se enteró de su enfermedad, él no estaba triste ni preocupado por morir ya que decía que eso tarde o temprano tenía que pasar, es el ciclo de la vida. Sin embargo, no quería irse porque tenía miedo dejarme solo. Eso es lo que mas lo mortificaba.

Mi abuelo sabía que mi vida era mas o menos porque lo tenía a él, y si llegaba a faltar entonces ya no tendría a nadie de mi lado ya que, llegué a un punto donde ni siquiera en mi padre podría confiar. Mi abuelo solo me tenía a mí y yo solo a mi abuelo.› Agni respiraba pero sentía que el aire no llegaba a sus pulmones.

—...Estás en un lugar mejor, ¿verdad?...¿pero que hay de mí?—Su voz se quebró.—Yo...yo me quedé atrás.

Agni no pudo mas y solo se derrumbó sobre ella, sacando todo aquello que había estado reteniendo hasta ahora. Gritando ante la vida injusta y de como lo han tratado tan mal.

—Entre mi familia él era la única persona que me cuidaba.—Acomoda las flores, retirando las anteriores ya marchistas.—Nunca entenderé porque a mis padres no les importó tanto como les mi hermano, principalmente a mi mamá...—Calla y su cuerpo tiembla al recodar que a Juliano no le gustaba que le llamará de esa manera.—Mejor dicho mi papá, es un Omega masculino. Él se desvivia por mi hermano y entiendo porque; ¿pero por qué ni siquiera me daba una sonrisa?...¡¡Siempre he sido un niño bueno!!

El joven maestro me creerá lo que diré acontinuación, ¿verdad? No sé cuánto sabe de Cameron o si confían mucho en mi hermano puesto que se conocen por mas tiempo.

—¡¿Entonces por qué siempre me miraba como si fuera un virus que iba a contaminar a mi hermano?—Sus ojos se volvieron rojos por el dolor en su corazón.—¿Por qué era así cuando mi padre no estaba presente?

Adair solo quería agacharse y abrazar a su pequeño cachorro pero no lo hizo, presentía que si los hacia terminaría por mostrarle y trasmitirle la oscuridad fría que se desborda de sus poros. Agradecido que Agni este de espaldas porque de esa manera no puede ver la sed de sangre que hay en su ser y lo que se muestra en su mirada.

El beta tiene una expresión mucho mas espesa y espeluznante que la un alfa enfurecido, y si fuera un alfa muy posiblemente ya hubiera doblegado muchas personas a su alrededor. Aunque, muy seguramente podría hacerlo sin necesidad soltar feromonas solo bastaba con dejar expuesta la presión que puede ejercer.

—Cameron es mi hermano menor por unos minutos y también mi mellizo.—Fue lo que le hicieron creer sus padres a ellos dos para que concordara la edad entre ambos.—Sorprendido.—Su corazón se volvió mas nervioso esperando la respuesta de Adair.

—Un poco.—¿En verdad son mellizos?—Por como te escondidas de él, llegué a creer que tal vez era algún conocido o pariente lejano.

Me cuesta creer que sean mellizos y solo me basta escuchar sobre el trato de sus padres para darme cuenta de lo que está pasando, esa familia esconde algún secreto.

—Como era de esperarse mi joven maestro es muy perspicaz.—Es una persona muy inteligente.—Me escondía de él porque estoy seguro que creé que estoy muerto al igual que mi familia debe de pensar igual.

—¡¿Qué?!—Eso si torció un poco el rostro de Adair.

—Así como lo escucho para mí familia yo estoy muerto.

Agni sin expresión en su rostro le empezó a contar a su joven maestro, como fue que llegó al estado en que lo encontró por primer vez y Adair entre mas escuchaba las palabras del alfa; más torcida se volvía su expresión y aquéllas manos en puñadas empezaron a sangrar ya que, las uñas se encarnan en las palmas de sus manos.

—¿Me estás diciendo que fueron esos bastardos..digo tus padres los que te enviaron a ese lugar luego de recibir esa cantidad de dinero?—Espera de todo menos que lo hayan realizado por dinero, e incluso llegué a pensar que Agni ingreso a la infantería porque estaba huyendo de algo, no porque haya sido obligado a marcharse.

Adair ya estába mandado un extenso mensaje a su personal de investigación, dándole detalle por detalle de las personas y lugar que tenía que investigar. Ya no había nada que le impida buscar mas cosas por su cuenta porque Agni, ya le confesó la mayor parte de lo que ha sido su vida.

—Sí, así fue... Aunque mi padre no estaba cuando todo eso sucedió pero mi papá, él me hizo saber que mi padre había firmado y autorizado todo.

—¿Que hay de tu abuelo?—Su rostro no tenía ninguna emoción pero no se podía decir lo mismo de esa mirada sanguinaria.—¿El sabía la verdad? ¿Por qué no dijo nada?

El beta tenía unas amplias ganas de estrellar sus puños en la cara de cada una de las personas, que han dañado y maltratado verbalmente a su cachorro.

—No podía.—Su mirada se entristece.—Mi abuelo perdido el habla tras tener un derramé cerebral en este mismo lugar.

Su corazón aun se ahoga al recodar como su abuelo se desvaneció en sus brazos, luchando con todas sus fuerzas querer decir unas últimas palabras pero no lo logró.

—Desde entonces el quedó postrado en una camilla, es por eso mismo que también me fuí a la infantería sin hacer tanto escándalo. Esperando poder lograr grandes azaña... El suficiente dinero para pagar un excelente doctor que me diera la esperanza de salvar a mi abuelo pero...el llegar a ese lugar solo fue vivir un infierno donde quisieras o no tendrías que sangrar y hacer sangrar para poder sobrevivir.

—¿Despues de a penas sobrevivir y desertar dándote por muerto corriste al hospital?—Es por eso que estaba debajo de la lluvia con aquella expresión agonizante.

—Sí, lo primero que hice fue ir donde mi abuelo. Sin embargo, me lleve la asfixiante noticia de que había muerto desde hace meses...¡Nadie me avisó!—Grito con rencor.—¡¿Por qué nadie me envió una carta?!—Estrella sus puños en el suelo.—¡¿Por qué nadie respondió mis cartas?! ¡¡No había día en que no escribiera una carta y esperará ansiosamente por su respuestas!!

‹Si su papá lo quería muy lejos entonces estoy seguro que él mismo se encargó de interceptar esas cartas. ¿Por qué odia tanto a mi cachorro? Bueno, no importa del porque. Ese malnacido pagará con creces el ver hecho de un infierno la vida de mi cachorro. Solo esperaba viejo desgraciado te haré llorar lágrimas pero de sangre.›

El cerebro de Adair está trabajando arduamente en crear el doloroso final de cada una de las personas que dañaron a su cachorro.

—Solo quería desaparecer cuando me entere de la muerte de mi abuelo, quedarme así con respecto a estar muerto dada por los altos mandos de la infantería, lo que sería una excusa para no volver con mi familia.—Muerde su labio inferior.—¡¿Por qué mi abuelo me dejó atrás?!—Sus manos arañan la tierra.—¡Yo también quería ir contigo cuando supe de tu muerte!—Confesó desgarradoramente.

Adair se tensó al escuchar tal confesión, perdiendo el color al darse cuenta que si el no hubiera encontrado a Agni, en su estado podría haber cometido alguna locura acausa del dolor y arrepentimiento al no haber podido despedirse de su amado abuelo.

—No sabes cuánto lo siento y de cuanto dolió el no haber podido estar ahí el día en que te fuiste...

—A tu abuelo no le gustaría verte así de triste.—A mí tampoco me gusta verte así.

No podré estár satisfecho con solo verlos llorar sangre a esas personas, tienen que sufrir mucho más por lo menos los largos casi trece años en lo que ha estado viendo Agni, en pura frialdad.

—También estoy seguro que él entendió del porque no pudiste estar a su lado el dia de su partida.

Seguramente también se lamento y se sintió verdaderamente culpable al no poder ir por su nieto, es probable que haya sufriendo por ser un inútil porque lo era. Sin embargo, no se lo diré a Agni porque eso solo le haría sentir mas triste.

—¿Lo creé...?—Agni se quedó sin habla al sentir unos brazos moviendose tras su espalda para luego enrolladose en su cintura.

Esa acción lo llevó a girar un poco su rostro hacia un lado, levantado su mirada hacía arriba solo para encontrarse con esos ojos amarillos que en cuestión de segundos se volvieron dorados brillantes.

‹En este lugar por tantos árboles a penas y pueden entrar los rayos del sol por las exuberantes copas de los árboles, pero cuando mi mirada conectó con la suya, esa poca luz deslumbro no solo su rostro también sus ojos amarillos se tornaron dorado brillante, fue así como se creó una nueva maravilla e incomparable en este mundo a la cual llamaré; Adair.› Agni se sintió agradecido y especial de ser el primero en conocer esta nueva maravilla del mundo.

—No lo creo estoy muy seguro de ello.—Podia ver mi inexpresivo rostro en esos llorosos ojos, siendo paralizado por el radiante brillo que sacudía mi corazón.—Tu abuelo también a de ver suplicado cada día para que fueras feliz.

‹Sus ojos temblaron al hacer contado visual conmigo, no se que estará viendo en mi como para quedarse absorto, ¿quizás está viendo algo en mí de lo cuál no puedo darme cuenta o solo está apreciando ese color en mis ojos como yo lo hago con ese color cafe de su mirada?

En este instante la poca luz creada por los rayos del sol cayó suavemente sobre su rostro, creando una obra de arte donde el protagonista es Agni pero principalmente sus hipnoticos ojos, que al ser tocados por la luz del sol ese cafe se terminó convirtiendo en un ámbar tan radiante que por un segundo creí que; si hubieran flores al rededor ya hubiesen florecido porque estoy convencido que su hermosa mirada podría lograr algo como eso y mas.›

Ambos estaban pensando y viendo cosas similares al momento en que sus miradas conectaron, inclinando lentamente sus rostros hacia adelante hasta que quedaron tan cerca que sus labios están a poco de rozarse.

Sin darse cuenta sus ojos ya se habían cerrado y la distancia se había roto por completo, sintiendo la suave textura de sus inexpertos labios que no tardaron en mezclarse torpemente pero dulcemente, agitando y endulzando sus nerviosos corazones.

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