-Ayano-

-¡¿Qué...?!

-Admítelo, quieres saber como se llama ella.

-... No es cierto... Yo no necesito saber quien es ella.

-No trates de engañarme... Pero, si dices que realmente no lo necesitas, no insistiré.

-...

Él comenzó a alejarse con lentitud, Budo hace esto a propósito, quiere que lo llame de regreso.

No te daré ese gusto, no después de lo que acaba de pasar.

-¡Budo!

Al escuchar su nombre, dio media vuelta y comenzó a regresar.

-Entonces si quier-

-Necesito saber algo -interrumpí.

-¿Qué es lo que quieres saber?

-¿Por qué... le diste otra oportunidad a Taeko?

Su rostro reflejaba la sorpresa que le causó mi pregunta y luego solo me sonrió.

-Resumiendo... Es por la misma razón por la cual tú estás detrás de Taro.

-¿Qué...? -susurré mientras veía como él se alejaba.

-No olvides venir a entrenar.

-Sí...

Él solo comenzó a caminar al lado de su compañera de clase y bajaron juntos las escaleras, yo solo me quedé parada en el mismo lugar.

-¿Qué quiso decir...?

El sonido de una nueva notificación me distrajo de mis pensamientos. ¿Ahora que quiere?

-¿Estás segura de que no quieres saber su nombre?

-Ni siquiera sé si es una verdadera rival, se supone que ese es tu trabajo.

-Es cierto, es mi trabajo, pero aun no sé si ella es una rival.

-¿Entonces por qué me haces perder el tiempo?

-Pensé que me pedirías algo más, pero creo que me equivoqué.

-¿Qué  insinúas?

-Solo hazle caso a Masuta y ve a entrenar.

Guardé mi teléfono y caminé con dirección a las escaleras, bajé hasta el segundo piso y caminé hacia mi club. Ojalá hubiera sido así de fácil.

Al llegar recibí una mirada de molestia proveniente de esa irritante pelinegra acompañada de un silencio incómodo en el lugar, ignoré su presencia y solo pasé de largo para cambiarme de ropa.

Entré al vestidor y comencé a cambiar mi uniforme, estaba a punto de salir pero ellos retomaron su conversación.

-¿Así que por eso tardabas el año pasado? Todo tiene sentido ahora.

-Vaya... No entiendo como negué los rumores tanto tiempo, era más que obvio que un chico como tú tendría una novia.

-Una muy linda por cierto.

-Si... Taeko es muy linda.

-¿Cómo no enamorarse de un chico tan lindo y educado como lo es Budo? Tuve mucha suerte.

¿Esto es enserio? No creo poder seguir escuchando. Salí lentamente del vestidor, ellos no me tomaron mucha importancia, tanto los chicos como las chicas estaban concentrados en Budo y Taeko.

Me alejé un poco y salí del club para dejar de escuchar esas absurdas e irrelevantes palabras. Sí, estaban juntos, yeih, que carajos me importa.

-Es muy estresante, ¿verdad?

Raibaru se detuvo a mi lado y solo me miró.

-Sé que es estresante escuchar como todos están curiosos de saber sobre la vida de alguien más. No le des importancia, solo ignóralo porque en una semana esto será noticia antigua. Ellos encontrarán algo más de que hablar.

-No creo que una semana sea suficiente para que dejen de hablar de eso.

-No te ofendas pero todos dejaron de hablar de tu victoria luego de que pasaron algunos días.

-...

Hasta yo lo había olvidado...

-Taeko... No es una chica tan linda como todos piensan, estoy segura de que tú más que nadie lo sabe.

-¿Cómo sabes que ella no es como aparenta?

-Digamos que no nos dimos una buena primera impresión... Para su clase y personas ajenas, ella, es solo una chica linda que no merecía sufrir todo lo que sufrió.

-¿Y qué es para ti?

-Una chica no muy diferente a Ronshaku.

-Tienes razón... Tú... ¿Sabías que eran pareja?

-No... Me enteré hace poco y la noticia me dejó desconcertada, cómo una chica como Taeko terminó gustándole a un chico como lo es Budo.

-Lo mismo me pregunto yo...

-Hubiera preferido que el estuviera con... -guardó silencio repentinamente.

-¿Qué?

-Olvídalo, no importa. Hablamos luego Yan-chan.

-Si, nos vemos en clase.

Ella se alejó corriendo hacia las escaleras y se perdió entre la pequeña multitud de personas que se encontraban por ahí.

Regresé la mirada hacia el club, al parecer ya habían dejado de lado a Taeko y estaban listos para entrenar.

-Ayano -su enérgica voz me llamó- ¿Peleamos?

Estaba a punto de responder pero ella se interpuso nuevamente, tomó con posesividad el brazo de Budo y me miró con intensidad.

-Esta bien -respondí sonriendo.

-¡Genial!

Él se apartó de la chica y comenzó a prepararse para pelear. Yo me acerqué lentamente y cuando estuve al lado de Taeko vi mi oportunidad.

-No creas que tienes algún poder sobre mi -susurré con discreción.

Escuché un pequeño gruñido proveniente de su parte, estaba por alejarme pera ella me detuvo.

-Ta vez tengas razón, pero, recuerda que yo soy más importante y eso me vuelve más poderosa que tú sobre él.

En verdad no lo puedo creer.

-Budo -él me miró con una sonrisa- No me siento bien y Taeko se ofreció para acompañarme a la enfermería, lo lamento, pelearemos en otro momento.

Obtuve distintas reacciones luego de mis palabras, Taeko estaba confundida y sorprendida, pero Budo solo me miró con preocupación.

-Si es algo grave, ¿no preferirías que yo te acompañe?

-Está bien, tú sigue entrenando. Taeko me acompañará -tomé la mano de la nombrada y comencé a alejarme- Adiós.

Arrastré a Taeko hasta la cafetería que se encontraba al lado de mi clase. Ella se resistía pero al parecer no tiene mucha fuerza.

Se soltó de mi agarre y me miró molesta.

-¡¿Por qué rayos hiciste eso?! ¡Ni en un millón de años te ayudaría!

-Eso me quedó más que claro, pero aun así preferiste seguirme la corriente para no quedar mal.

-... ¿Qué mierda quieres?

-¿Con esa boca besas a tú madre? Vaya, no tenía idea de que además de CELOSA también eres una malcriada, oh espera ¡Ya lo sabía!

-Guarda respeto a tus mayores Aishi.

-No aceptaré ordenes de alguien que piensa que una persona es un objeto.

-¿A qué te refieres?

-"Soy más poderosa sobre él" -dije intentando imitar su irritante voz- Supongo que ya te refresqué la memoria.

-...

-No puedo creer que él es solo un objeto para ti. Juro que iba a respetar su relación porque Budo es una persona importante para mi, pero no puedo permitir que una... -guardé silencio y solo sonreí- como tú esté con él.

Ella pareció entender mi mensaje y solo me miró con molestia, comenzó a acercarse lentamente amenazando con hacerme algo y luego se detuvo.

-No vale la pena rebajarme al mismo nivel que una niña celosa que solo quiere a mi novio a su lado.

-Que yo tenga entendido ustedes aun no son pareja.

-...

-Vaya que te ilusionas rápido. No tengo idea de como lograste que te diera otra oportunidad, tampoco deseo saberlo porque me importa una mierda lo que sea de tú estúpida y deplorable existencia. Te recomiendo alejarte de mi, tengo entendido que sabes como derroté a esa chica durante las competencias.

-No te creas invencible.

-Sé que no lo soy, pero comparada a mi, tú solo eres una hoja de papel que constantemente desea que alguien la rompa y yo no dudaré en hacerte ese favor. Fuera de aquí maldita.

-Veo que yo no soy la única que maneja ese vocabulario.

-Si, todos lo usamos y sé que soné hipócrita criticándote por ello, pero como te dije, me importas una...

A lo lejos vi a una chica del consejo estudiantil así que decidí alejarme para ahorrarme problemas con esta chica.

-Regresa aquí maldita per-

-¡¿Qué clase de vocabulario es ese?!

-¿Qué...?

-Señorita Yamada, a la oficina de la consejera.

-Pero ella...

-No importa, a la oficina de la consejera.

Taeko comenzó a caminar con molestia hacia las escaleras y, cuando la chica del consejo se alejó, la detuve tomando su brazo con algo de brusquedad.

-No somos tan diferentes, ahora que lo pienso, pera la diferencia entre tú y yo es que yo si sé ver a mi alrededor, suerte con la consejera y ni se te ocurra mencionarme porque tengo un haz bajo la manga por si abres la boca.

-¿A si? -apartó su brazo- ¿Y cual es?

-Yo tengo tres testigos a mi favor.

-¿Qué?

-Digamos que la chica del consejo no fue la única en observar como me insultabas.

Con desesperación, Taeko, comenzó a ver a su alrededor buscando a más personas que hayan observado lo sucedido.

Sonreí al notar que se encontró con la mirada molesta de Budo y la seriedad de Raibaru.

Budo caminó hacia ambas y, como era de esperarse, Taeko intentó acercarse tambien, pero él solo se detuvo frente a mi.

-¿Estás bien?

-Sí, gracias por preocuparte, solo me duele el estómago.

Convenientemente mi estómago hizo sonar un gruñido que indicaba que sucedía algo.

-Te dije que comieras.

-Lo hice pero creo que algo me hizo mal. Y... 

-Budo.

-Taeko, hazle caso a Kuroko y ve con la consejera.

-Tú no te metas niña gotic-

-Taeko, ve a la oficina de la consejera -Budo elevó la voz y la miró con molestia.

Ella se sorprendió y solo bajó las escaleras.

-Te acompaño a enfermería.

-Estaré bien... No merezco que me acompañes... Yo inicié eso.

-Tal vez, pero ella no tenía porque decirte esas cosas y tú solo estabas preocupada por mi. Más tarde hablaré con ella.

-N debí entrometerme...

-Tal vez, pero igualmente agradezco que lo hayas hecho.

Él solo me abrazó con delicadeza y susurró "Gracias por estar para mi" en mi oído.

-Ahora vamos a enfermería, no quiero que te sientas mal.

(...)

Mis clases estaban relativamente tranquilas hasta que ella apareció.

-Señorita Aishi, su compañera de la clase 3-2 desea hablar con usted.

Lo que me faltaba. Todos mis compañeros me observaron con curiosidad, esto es muy incómodo.

Me levanté de mi lugar y caminé hacia la puerta más cercana, la cerré al salir y me paré delante de Taeko.

-¿Qué sucede?

-Yo... -suspiró de forma pesada- lo... lamento. Ahora adiós.

Ella se alejó luego de aquellas palabras y subió las escaleras corriendo. Ojalá se tropiece, sería gracioso.

Le resté importancia y volví a mi lugar, nuevamente sentí las miradas de todos mis compañeros hasta que la maestra retomó la clase al notar la acción de sus alumnos.

Aun así se escuchaban murmullos sobre "lo que había sucedido" y sobre las "relación" entre Taeko y Budo, vaya que es un día muy lindo.

-Al parecer la vida de sus compañeros es mucho más importante que mi clase, entonces quiero que cada uno de ustedes me responda una pregunta. Su puntuación definirá gran parte de sus participaciones y exámenes verbales. Comienzo con...

El sonido del timbre interrumpió las palabras de nuestra maestra, ella solo soltó un suspiro.

-Cuando regresen darán esa prueba, vayan a su descanso.

Nuevamente se escucharon murmullos y poco a poco comenzaron a salir de la clase.

Al salir sentí las miradas de algunos estudiantes, ¿se habrán enterado de lo que sucedió?

-Esto no puede estar pasando...

-¿Qué no puede estar pasando?

Lo que me faltaba.

-Hola Midori... No es nada, es algo sin importancia.

-¿Segura...? Te ves... molesta e incómoda.

-Estoy bien. me tengo que ir...

-Pero...

-Adiós Midori.

Subí las escaleras y no me detuve hasta llegar hasta la azotea.

Respirar es lo que necesito.

-No puede ser... Tal y como en las fotografías.

Iba a alejarme pero el sonido de mi teléfono detuvo mi acción. Una llamada de Info-chan.

-Lamento la demora, pero tengo noticias importantes.

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Lo sé, me desaparecí por casi dos semanas sin dar explicación alguna. La tendrán pero no ahora porque es muy tarde y su autora necesita dormir para cumplir el horario escolar.

Ya tenemos un nuevo día de actualización luego de analizar mi horario y ver todo eso de cuanta tarea me dejan.

Las actualizaciones serán los días Martes y los días que tenga tiempo, como hoy por ejemplo.

Tambien voy a retomar las otras historias.

Lamento este pequeño hiatus sin previo aviso, aun no me acostumbro a mis nuevas responsabilidades, pero nada que una pequeña siesta no repare.

Gracias por leer y esperarme.

Gracias por todo.

Nos leemos luego :3

-¡¿Qué es eso de que estas con Taeko Yamada?! Acaso olvidaste que...

-No, no lo olvidé, sería imposible olvidarlo.

-Si él se entera...

-Lo sé, lo sé... No te preocupes, dudo que avance a algo más, sobre todo con lo que pasó.

-¡Aleluya! Está recapacitando.

-Supongo que si... No te preocupes, todo está bajo control.

-Más te vale... ¿No creerás que ella es...?

-Tal vez...

-Si ese fuera el caso, entonces buena suerte.

-Gracias.