CAPÍTULO 29: EL AMOR VENCE TODO

N/A: Muchas gracias por leer y comentar esta historia hasta el final... He hecho algún cambio y al final éste es el último capítulo... Porque habrá epílogo XD. He pensado que lo que iba a ser el capítulo 30 tiene más sentido que sea un epílogo porque... Bueno, me lo imagino más así, no tiene más explicación. Además de que llevo 4 semanas intentando encontrar un epílogo y no lo encuentro... Espero que os guste el final, las despedidas y agradecimientos para el epílogo...


CAPÍTULO 29: EL AMOR VENCE TODO

Las miradas de ambos se cruzaron, llenas de dolor y desesperación. Los dos intentaban leer los sentimientos del otro pero ninguno era capaz de acertar. Uno pensaba que el otro ya no lo amaba y se arrepentía de ese momento de sexo entre ellos. El otro pensaba que había dañado a la persona que amaba siendo poco cuidadoso y cariñoso en ese momento de intimidad entre ellos, recordándole lo que estaba viviendo un año antes a manos de sus secuestradores.

- No te vayas... No me dejes. - Blaine suplicó. Sentía que cuando el otro saliera de la habitación todo habría acabado.

- ¿Por qué no? No hago más que dañarte. - Sebastian volvió a sentarse en la cama. Los dos estaban todavía desnudos pero eso no importaba. La tímida mano del moreno se colocó en el hombro del otro y empezó a acariciarlo.

- Sólo hay una manera de que me hagas realmente daño y esa es alejándote. Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, estuviste a mi lado en los momentos más oscuros y has sanado todas y cada una de las heridas que he sufrido. - Las lágrimas comenzaron a bajar por las mejillas del estudiante de NYADA y suspiró. - Estos meses a tu lado han sido los mejores de mi vida pero si tú no sientes lo mismo...

- Lo siento... Te amo más que a nadie... Te vi con Kurt y pensé que ya no me amabas y luego vengo a arreglar las cosas y te trato como si... - El castaño no encontraba las palabras.

- Tú y yo no hemos hecho nada que yo no quisiera. - El ojimiel impidió que el otro dijera algo más mientras se acercaba más a él y pasaba su mano en su hombro. - Lo he disfrutado, me he entregado a ti de una nueva manera y eso es algo que me hace feliz. Te confiaría mi vida, mi cuerpo y mi alma.

- Te he hecho daño... - El más alto no sería fácil de convencer. Seguía evitando la mirada del otro.

- El único daño que me has hecho, es hacerme creer que ya no me amas. - Anderson fue tajante.

- ¿Podrías perdonar a este idiota? - El ojiverde preguntó algo avergonzado.

- Sólo si tú me perdonas por lo de Kurt. - El más bajo informó con una sonrisa.

- No hay nada que tenga que perdonarte. Sam me ha contado lo que ha ocurrido. Debí escucharte antes de sacar conclusiones. - Smythe explicó.

- Aun así, debí reaccionar. Los dos nos equivocamos así que... ¿Nos perdonamos mutuamente, aprendemos a confiar el uno en el otro y nos damos una segunda oportunidad? - Blaine preguntó con una sonrisa.

- Suena como el mejor plan del universo.

Sebastian sonrió mientras se volvía para juntar sus labios. Era como volver a la vida para ambos. Ese beso sellaba una reconciliación que era más que deseada por ambos. Tenían mucho que solucionar pero el tiempo era el único que podía curar sus heridas. El castaño debía aprender a confiar más en el otro y el moreno debía ser más fuerte para enfrentar los problemas.


Sebastian golpeó la puerta de un apartamento con mucha fuerza. Estaba realmente enfadado y quería descargar toda su rabia de alguna manera. Santana fue la que le abrió la puerta y pudo detectar el odio en la mirada de la joven. Los dos estuvieron retándose en silencio como si esperaran a que el otro lo atacara para comenzar una guerra que ambos deseaban.

- ¿Qué te trae por aquí? - La latina preguntó de forma ruda.

- Vengo a hablar con Kurt. - El castaño respondió de manera seca.

- ¿Qué te hace pensar que te dejaré verlo? Después de todo lo que le has hecho a él y lo que le has hecho a Blaine no tengo ningunas ganas de ser amable contigo. - Ella lo retó.

- Me da igual lo que quieras o no. Yo lo que quiero es evitar que Blaine vuelva a derramar una sola lágrima por su culpa. Por eso estoy aquí, para pedirle que deje de dañar a Blaine. - El ojiverde no se dejaría amedrentar por la chica, por muy fuerte y decidida que ella fuera.

- La última vez que vi llorar a Blaine fue por tu culpa. - Lopez gritó y consiguió su objetivo, dañar al otro.

- Déjalo pasar. - Kurt intervino. Realmente no le gustaba salvar a Smythe en su "guerra" con Santana. La latina puso los ojos en blanco antes de dejarlo entrar. El recién llegado se sentó en el sofá como si esa fuera su casa y miró a Hummel con una ceja alzada, esperando a que lo acompañara. La chica volvió a su "habitación" aunque los dos sabían que podría escuchar todo desde el otro lado de la cortina.

- Quiero que te alejes de Blaine. - Esa fue la única frase que dijo, no quería entrar en más detalles.

- ¿Problemas en el paraíso? - El ojiazul preguntó divertido.

- No, realmente no hay problemas porque toda la mierda que has echado sobre nosotros sólo ha servido para hacernos más fuertes. Él y yo nos amamos de verdad. No es algo idealizado como lo que tenías tú con él. Es algo real y más maduro. A veces nos equivocamos pero todo ha servido para que seamos más fuertes. Juntos somos invencibles, lo hemos entendido gracias a ti. - Sebastian estaba calmado, no tenía intención de enfadarse o luchar, sabía que él ya había "ganado".

- Eso no fue lo que parecía ayer cuando encontramos a Blaine llorando en su cama. - Hummel comentó divertido.

- Fue tu culpa y no voy a darte más detalles. No puedo borrarte del pasado de Blaine y desgraciadamente tenéis amigos en común pero... Ni Blaine ni yo queremos pasar contigo más tiempo del necesario. - Sebastian informó.

- Eso es lo que tú quieres y Blaine hará cualquier cosa para complacerte. - Kurt dijo pero no enfadó al otro como pretendía.

- Me da igual lo que pienses. Yo sé lo que tengo con él, él lo sabe también. Los demás no nos importan. No negaré que nos encanta que Sam esté de nuestro lado pero me daría igual que todos sus amigos estuvieran en nuestra contra. - El ojiverde seguía calmado.

- Si es así, ¿qué más te da lo que yo haga? Tu relación no corre peligro. - Hummel estaba buscando la debilidad en la relación de los dos jóvenes para

- Yo ya te he dicho todo lo que tenía que decir.

Smythe salió del apartamento rápidamente, sin añadir ni una palabra a lo dicho. Sabía que Kurt no iba a ser fácil de convencer pero tenía que intentarlo.


Rachel se acercó corriendo a Blaine en cuanto lo vio entrar a NYADA. Desde que se había enterado de la verdad de todo lo que había pasado, se sentía mal porque ella tenía parte de culpa. Se había dejado manipular por Kurt para convencer a Anderson para que parara la guerra entre ellos y se arrepentía de eso.

- ¡Blaine! - La chica agarró su mano suavemente. - Quiero hablar contigo.

- Si es sobre Kurt... - El moreno intentó hablar pero la castaña lo interrumpió.

- Lo siento, de verdad. Yo no sabía lo que planeaba y jamás habría aceptado eso. Sé que eres feliz con Sebastian y yo estoy haciendo un gran esfuerzo por no ver al chantajista que quiso apartarme de la competencia o que casi te deja ciego. Y lo estoy haciendo porque eres mi amigo y veo el bien que te hace estar con él. Soy consciente de todo lo que te ha ayudado y si es suficiente para que tú lo perdones, también lo tiene que ser para mí. No intentaba sabotear tu relación, jamás lo haría, al igual que sé que tú tampoco lo harías. Sólo intentaba calmar la situación por el bien de todos. Kurt me dijo que se arrepentía del ultimátum que te había dado y que quería que todo volviera a lo de antes. Fui una estúpida, pensé que ya no tendríamos que elegir entre él o tú... Lo siento.

La joven parecía realmente arrepentida y el ojimiel la abrazó. Cuando se volvieron a separar, Anderson sonrió.

- No te preocupes. Entiendo que es difícil para todos... Sé que va a ser inevitable que Kurt y yo nos encontremos pero intentaré que no sea muy duro para todos. Sebastian está de acuerdo conmigo en que si nos encontramos, vamos a intentar ser cordiales con él y evitaremos enfrentamientos. Lo más probable es que no hablemos con él más de lo necesario pero tampoco haremos de cada encuentro una guerra. Pero no nos pidáis más, él ya no puedo ser mi amigo.

- Lo entiendo. Gracias por tu comprensión, no querría perderte como amigo y sé que Santana tampoco, aunque ella no lo diga. - Berry explicó.

- Lo sé.

Blaine ofreció su brazo y Rachel lo agarró para caminar con su amigo por los pasillos de NYADA. Vio a Kurt que la miraba algo enfadado pero, por primera vez, a ella no le importaba. Entendía que el castaño estaba dolido pero ella no podía perder un amigo por su culpa...

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top