Las hermanas Sanders

Días después

Cole estaba de los nervios, hacía dos días que no sabía nada de su hermano y Valentina, además Laura seguía grave. Lo peor era que su vínculo con Zac le decía que aunque él no estuviera herido lo estaba pasando mal y eso lo desesperaba. Pero tenía el apoyo de los miembros de la fraternidad que eran también sus amigos, eran sus hermanos no sanguíneos.

-Tranquilo Dj Oso, Fairy Tail se pondrá bien. Además se que Oso de Chocolate cuidará bien de Cachetitos donde quiera que estén-explicó Power Ranger

-Sí lo sé. Es que no es fácil-añadió Cole

-Cuentas con mi apoyo y el de los chicos-comentó Power Ranger

-Lo sé, sois mis hermanos postizos-medio sonrió Cole

-Tienes que...-soltó Power Ranger

Entonces uno de los monitores empezó a pitar y aparecieron varios médicos, mandaron salir a ambos chicos y estuvieron un rato con Laura. Después les informaron que la mayor de las Sanders había tenido un ataque al corazón pero que ya estaba fuera de peligro, aunque aún estaba algo delicada.

- Con Valentina y Zac -

Zac se acababa de despertar, miró a Valentina y vio que tenía mejor aspecto, aún no estaba fuera de peligro pero era una buena noticia. El mayor de los gemelos le acaricio la mejilla y ella abrió los ojos poco a poco, el ojiazul sonrió.

-¿Cómo estás?-preguntó Zac

-Más o menos. Gracias a ti todavía sigo viva-contestó Valentina

-No podía dejarte morir. No quiero perder a nadie más-explicó Zac

-Hablas por lo de tu madre-preguntó Valentina

-Sí, fue muy duro para todos-respondió Zac

-Dj Oso me comento que tú lo pasaste peor y por eso eres así-comentó Valentina

-Bueno...-

-Lo siento-

-Tranquila Cachetitos-

Valentina acarició la mejilla de Zac y se acercó a él, entonces se besaron brevemente pero saboreando los labios del otro. Poco después apareció Kerim, quien traía cara de pocos amigos, fulminó con la mirada al mayor de los gemelos.

-Maldito infeliz-bramó Kerim hecho una furia

-El infeliz eres tú-escupió Zac altanero

Kerim se acercó y trato de golpear a Zac de nuevo pero Valentina se levantó para defenderlo, al segundo cayo de rodillas. El mayor de los gemelos corrió hacia ella y Kerim se fue aún más enfadado de lo que ya estaba, la menor de las Sanders se apoyó en Zac.

-Zac yo...-

-Tranquila. No debiste hacer eso-

Zac tumbo a Valentina en el colchón y la tapó con las sábanas, a consecuencia de lo que había hecho su estado se había agravado. El mayor de los gemelos acarició la mejilla a la menor de las Sanders y le susurró un "Te quiero", después rezó para que los encontrasen pronto.

Mientras que Cole se repetía que todo estaría bien, Power Ranger lo acompañaba porque no podían estar todos con Laura. Entonces varios oficiales les comunicaron que habían encontrado a su hermano y a la menor de las Sanders, a lo que el menor de los gemelos pidió acompañarlos, aceptaron que fuera pero cumpliendo ciertas reglas, Cole no puso objeciones y le dijo a Power Ranger que se quedase con Laura, porque no quería dejarla sola.

Una vez coordinaron la operación de rescate le dieron a Cole un chaleco antibalas, el menor de los gemelos se lo puso y entraron. Kerim tenía a Zac y Valentina en una casa abandonada en una zona de difícil acceso pero gracias a un descuido del ex de la menor de las Sanders habían podido encontrarlos. Al llegar al sótano Cole se alegró de que estuvieran con vida pero también se preocupo cuando vio a Valentina tumbada en un colchón y a su hermano frente a ella agarrándole la mano.

-Hermano-

-Gracias al cielo Zac-

-Preciosa vas a ponerte bien-

-Zac...-

-Cachetitos me alegra estés bien-comentó Cole abrazándola con cuidado

-Me alegra verte hermano-añadió Zac abrazando a su gemelo

-Lau ¿cómo está?-pregunto Valentina

-Sami la golpeo y está delicada pero se pondrá bien-respondió Cole

-Esa per...-bufó Valentina molesta

-Tranquila preciosa. No pienses en eso-zanjo Zac

Zac cogió cuidadosamente en brazos a Valentina para no agravar su herida, arrestaron a Kerim y lo llevaron a los calabozos a la espera de juicio. Mientras ellos fueron al hospital para que los revisaran, sobre todo Valentina, después de un chequeo completo al mayor de los gemelos le dieron unas indicaciones y le dijeron que podía marcharse pero decidió no hacerlo porque quería quedarse con la menor de las Sanders, ya que aunque estaba bien debía quedarse unos días. Por suerte gracias a los cuidados estaba viva y ahora veía al mayor de los gemelos con otros ojos, sabía que a él le importaba.

Dos días después Valentina salió del hospital y lo primero que hizo fue ir a ver a su hermana, enterarse que estaba delicada había sido muy fuerte. Odiaba a Sami, pensar que antes habían sido amigas era de risa y todo porque no soportaba que se relacionase con Zac. Mientras que la menor de las Sanders estaba en la habitación de su hermana, verla inconsciente era doloroso, el mayor de los gemelos entro y le puso la mano en el hombro para que viera que tenía su apoyo, Laura era su amiga, además de la hermana de la chica que le gustaba. Valentina se giró y lo abrazo, Zac la contuvo, él sabía lo que ella sufría por su hermana porque tenía a su hermano y estaría igual en su lugar.

-Zac podemos hablar-

-Tranquila. Mejor cuando Fairy Tail esté bien-

-Gracias por todo pero podemos hacerlo ahora-

-Si claro. Cuando quieras-

-Aquí no podemos hacer nada, te parece si vamos a tomar algo-comentó Valentina

Zac asintió y ambos fueron a una cafetería cercana, pidieron dos cafés, nada más traerlos Valentina empezó a jugar con el suyo. Se notaba nerviosa y un poco preocupada pero era normal estando su hermana mal, el mayor de los gemelos solo tomaba pequeños sorbos a su café.

-Puedo esperar si no estás preparada-explicó Zac

-No tranquilo. Quiero hacerlo solo pensaba-aclaró Valentina

-Bien, te escucho-

-Antes de nada gracias. Si no fuera por ti ahora estaría muerta-

-Era lo que debía, no me lo hubiera perdonado si te dejase morir-explicó Zac sonriendo-Además para algo estudio medicina-

-Ahí es donde quería llegar. Cuando te conocí y me tiraste el café pensé que eras un cerdo, arrogante y falto de sentimientos, ahora veo que me equivoqué contigo. Solo tenías miedo de sufrir-expuso Valentina

-Sí y ahora veo que también me equivoqué. No debí tratarte así, no lo merecías-contesto Zac

-Olvidemos el pasado. Nunca olvidaré como te comportaste cuando estuvimos secuestrados, tampoco lo que dijiste. ¿Seguirás siendo ese chico?-preguntó Valentina

-Por supuesto. Me gustas mucho y quiero dejar de ser el chico frío de antes-respondió Zac

-Tú también me gustas, más ahora que se cómo eres de verdad. Quiero estar contigo-concluyo Valentina

-Entonces aceptarías salir conmigo en una cita-preguntó Zac sonriendo

-Sí, totalmente si-respondió Valentina devolviéndole la sonrisa

Después Zac la beso, extrañaba sus labios, eran dulces y sabrosos, un exquisito manjar al que ya eran adictos, muy adictos. Se separaron por la falta de aire y vaya que así era, porque la mayor de las Sanders había visto a Zac muy atractivo desde que lo conoció, aún a pesar de su actitud de antes le sacaba el aire y le provocaba ataques que en secreto se calmaba porque era asmática, luego el mayor de los gemelos, aunque aún no habían salido ni una sola vez le pidió ser su novia y Valentina acepto, le gustaba desde el momento en que lo vio en la Universidad, aunque hasta ahora no se había dado cuenta.

Tuvieron su primera cita el fin de semana, Zac la llevó a la playa para un picnic nocturno, con un paseo a la luz de las estrellas, después de cenar jugaron con el agua como si fueran niños pequeños. Entrada la madrugada regresaron a la casa sin hacer ruido porque no querían preguntas, al menos no esa noche, ya les contarían como les había ido.

-Lo he pasado genial-susurró Valentina

-Me alegra oírlo. Yo también lo he pasado genial-susurró también Zac y se despidió con un beso en la mejilla

Casi habían pasado cuatro meses y Laura todavía no despertaba, Cole empezaba a perder la esperanza de que se recuperase pero tenía el apoyo de todos. Zac abrazaba a Valentina por la espalda, desde después del rescate habían empezado a salir juntos y les iba más que bien, solo alguna pequeña pelea que siempre solucionaban, no podían estar mucho tiempo peleados, a lo que el menor de los gemelos le alegraba porque su hermano estaba más feliz que nunca. Los tres hablaban animadamente en la habitación hasta que a Valentina le sonó el teléfono, salió fuera para hablar y regresó poco después.

-Debo irme-anunció Valentina

-¿Qué?-

-Temas familiares, Fairy Tail también debía venir pero les dije que está resfriada y aceptaron que vaya sola-explicó Valentina

-¿Cuándo? ¿Cuánto estarás fuera?-preguntó Zac

-No lo sé, lo que haga falta. Me voy esta noche-respondió Valentina

-Me gustaría ir contigo pero sé que no es posible. Te voy a extrañar-añadió Zac

-Bueno en realidad quiero que me acompañes-expuso Valentina

-De acuerdo preciosa-sonrió Zac

-Cuida bien de mi hermana Dj Oso y mantenme informada-

-Por supuesto, volved pronto. Hermano cuídala bien-

-Eso está echo cabeza hueca-

Cole golpeo a Zac en el hombro y se despidieron para ir a hacer las maletas, también avisaron a los chicos para que no se preocupasen, después cogieron el primero vuelo rumbo a Caracas en Venezuela que era donde vivían sus padres, donde ellas habían nacido y a donde sus padres se habían mudado de jóvenes cuando ellas fueron a la universidad. Para no causarles molestia se quedarían en un hotel cerca de la casa, pagaron una sola habitación para estar más cómodos. Valentina presento a Zac a sus padres y les contó que estaban saliendo, al principio no les gusto pero cuando conocieron al mayor de los gemelos les pareció bien, ellos solo querían lo mejor para sus dos hijas.

Como todo se había arreglado pronto se quedarían unos días más a conocer la cuidad, ya que ninguno había estado allí, al menos Valentina hacía mucho que no iba. Primero visitarían la capital y después irían a ver otros lugares.

Esa primera noche sería de relax, porque luego tenían muchas cosas que ver, Zac observaba dormir a Valentina, para él era su ángel y se veía hermosa así. La menor de las Sanders abrió los ojos y lo beso, el mayor de los gemelos la pego a su cuerpo para sentir el contacto de esa hermosa diosa que tenía entre sus brazos, sus lenguas juguetearon hasta quedarse sin aire. Valentina acarició la mejilla de Zac y este a su vez fue él quien atacó su labios, parecían encajar perfectamente.

Zac despojo a Valentina de sus ropa y fue bajando por su plano abdomen hasta su intimidad, desde que la había conocido esperaba poder poseerla pero ella no era como las demás mujeres con las que había estado, a las que tomaba sin importarle nada. Ahora era diferente, quería ser tierno, no quería comportarse como un salvaje y lastimarla. Olió su dulce aroma y le quito las bragas, se veía deliciosa, introdujo uno de sus dedos en su vagina y la menor de las Sanders soltó un gemido de placer, a lo que el mayor de los gemelos reacciono metiendo dos dedos más, los movía como si se tratase de un instrumento que debía sonar al ritmo de la música, Valentina se arqueo para así sentirlo más, no habían empezado y ya estaba llegando al orgasmo. Zac subió nuevamente a sus labios y se fundieron en un profundo beso, lleno de pasión, la menor de la Sanders le quito al mayor de los gemelos su camiseta, observo su trabajado cuerpo por unos segundos y lo recorrió con sus dedos, Zac gimiendo de placer.

Zac se puso encima de Valentina pero sin dejar caer todo su peso y atacó con ferocidad sus dulces labios, se desnudaron sensualmente el uno al otro elevando la pasión del momento, era un deleite para ambos ir poco a poco, como si se tratase de un juego que debían ganar. Los dos se deseaban y se gustaban en la misma medida. El mayor de los gemelos fue dejando pequeños besos hasta terminar en sus pechos, primero los manoseo y luego los chupo, lentamente, uno por uno mientras que la menor de las Sanders jugaba con el pelo de él, gimiendo como si fuera una tortura, un deliciosa tortura, después volvieron a besarse, sus lenguas se tocaban, fundiéndose con la otra, probando una vez más los dulces labios de ambos.

Valentina bajo hasta la evidente erección de Zac, era una barra de acero, palpitante y dura, succiono su miembro viril con delicadeza por unos minutos mientras él gemía, estaba disfrutando como nunca antes lo había hecho. Sus respiraciones eran agitadas y aceleradas.

-Dios nena, sigue así-gimió Zac a punto de llegar al orgasmo-Un poco más preciosa-

En cuanto Zac llego al orgasmo se relajó pero luego la beso con ganas, sus labios era su droga y su sabor su perdición, con su mano recorrió las curvas de Valentina para acabar en su húmeda vagina. Ahora era su turno de darle placer, lamió su intimidad saboreando cada rincón de ese delicioso manjar, la menor de las Sanders enredo sus dedos en el pelo del mayor de los gemelos, mientras gemía de puro placer, él sabía lo que hacía.

Después de los preliminares ambos estaban más que listos para el remate final, los dos deseaban fundirse como uno solo. Zac se colocó el preservativo y se puso encima de Valentina, con cuidado la penetro, quedándose quieto un rato para que ella se acostumbrase a él y no lastimarla, cuando recibió respuesta afirmativa para continuar empezó a embestirla.

-Eres una delicia muñeca-gruñó Zac entre embestidas-Me vuelves loco-

-Ohhhh si Zac, ohhhh-gimió Valentina con la respiración agitada

Poco a poco aumentó la velocidad y Valentina se arqueo para sentir como Zac la penetraba, sus respiraciones eran aceleradas, ambos viajaron al paraíso. Se movían al compás, al mismo ritmo, los dos encajaban a la perfección. Las embestidas y los gemidos de placer continuaron hasta que juntos llegaron al orgasmo.

Zac salió de ella, se quitó el preservativo, le hizo un nudo y luego lo tiro a la basura, después regreso junto a Valentina que dormía plácidamente con el pelo alborotado. El mayor de los gemelos la contemplo mientras sonreía, ahora estaba completo, entonces la abrazo y ambos se quedaron dormidos.

Al día siguiente ambos se levantaron con una sonrisa en la cara, después de una ducha bajaron a desayunar cogidos de la mano, parecían recién enamorados, aunque llevaban casi cuatro meses juntos. Ojearon el plano que tenían de la ciudad y se pusieron en marcha, cámara en mano. Primero fueron a ver el Cerro del Ávila, el Parque del Este, la Casa Natal del Libertador, el Panteón Nacional, el Museo de las Ciencias Naturales, la Ciudad Universitaria donde está la UCV siglas de Universidad Central de Venezuela.

Después fueron a ver la Colonia Tovar en Aragua que fue fundada el 8 de abril de 1843 por un grupo de inmigrantes alemanes, el Salto del Ángel en el Parque Nacional de Canaima, es una gran cascada, la más alta del mundo y fue la inspiración para la película de animación Up, a las Cataratas Paraíso que hacen referencia a Salto Ángel, luego fueron a Los Roques que es un archipiélago venezolano situado en el mar Caribe, a unos 160 kilómetros al norte de la capital, Caracas. Esta zona protegida está compuesta por más de 300 islas y cayos alrededor de una laguna de 400 kilómetros cuadrados.

Como Valentina amaba su tierra y hacía tiempo que no la visitaba Zac decidió quedarse unos días en los Roques para disfrutar de la belleza del lugar. Además era perfecto para disfrutar con su chica porque la amaba y quería una vida a su lado. Estuvieron unos días paseando por sus playas, haciendo buceo, viendo la fauna marina, también el mayor de los gemelos enseño a pesar a la menor de las Sanders pero también nadando juntos, sin olvidar degustar su deliciosa gastronomía y visitando centros nocturnos.

(Salto Ángel arriba y abajo Los Roques)

Después fueron a Isla Tortuga, Isla Orchila cuya arena era rosa y también Isla Blanquilla de arena blanca como en los Roques y agua cristalina. También visitaron otras zonas, ya que Venezuela tenía muchas cosas hermosas para ver y visitar, había mucha belleza y tenía un clima muy variado, incluso habían asistido al trasnocho cultural en Caracas y se trata de una sala teatro, sala de cine, galería de arte y centro cultural localizado en las instalaciones del Centro Comercial Paseo Las Mercedes, concretamente en el nivel trasnocho. Fue inaugurado el 4 de octubre de 2001. Allí se presentan multitud de eventos incluyendo numerosas obras de teatro y proyecciones de películas, incluye además librerías, exposiciones y locales comerciales varios donde en una de las noches habían organizado un evento para cualquiera que quisiera hiciera sus pinitos en el mundo del espectáculo con el fin de pasar un rato divertido, consistía en interpretaciones cortas espontaneas, chistes y otros, en la que Zac había hecho un monólogo usando a su musa, a su amada Valentina sobre lo hermoso del amor verdadero.

A lo que Valentina no había podido evitar llorar de felicidad, tenía a un novio maravilloso al que amaba y quien la amaba a ella, incluso había grabado la interpretación y había pensado que de no haber elegido como ella medicina habría sido un gran actor.

Nada más llegar al hotel de nuevo Zac se tiró en la cama, estaba realmente agotado, a Valentina lo sonó el teléfono, la menor de las Sanders lo cogió mientras observaba al mayor de los gemelos dormido, así se veía todo un oso de peluche. Se trataba de Cole, resulta que por fin su hermana se había despertado, lo que era una gran noticia y cuando se lo susurró a Zac al oído para no despertarlo sonrío. Luego se acostó abrazando a su amado, era un alivio porque su hermana se recuperaría y los dos se metieron en la cama abrazados, habían pasado un día hermoso, por eso estaban cansados pero felices.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top