Epílogo

Dos años después

Nila estaba caminando por las calles de Nueva York extasiada mientras veía a la persona en la pantalla de su celular frente a ella.

—Te juro que era algo que no me esperaba.

—Pfff —bufó Nila— ¿Eres la mejor y no te lo esperabas? —cuestionó— Me decepcionas —le dijo negando.

—Llevo apenas dos años y ya tengo un protagónico, creo que si fueras tú también estarías igual de sorprendida que yo —le dijo Joss a través— Además no es como si hubiera concursado por el papel, me lo ofrecieron.

—Y eso es lo mejor, porque demuestra que eres la mejor y ellos solo pensaron en ti para el papel.

Lo que en su opinión era maravilloso.

Nila nunca había dudado del talento de su amiga y cuando firmó contrato con una de las empresas de ballet más famosas de España estuvo muy feliz por ella, y aún más cuando obtuvo buenos papeles a pesar de su poca experiencia.

—Protagonizaré el lago de los cisnes ¡El lago de los cisnes! —exclamó Joss emocionada— Y no solo eso sino que también haré una gira.

Eso si era nuevo para ella.

—¿En serio?

—Sep —afirmó— ¿No te lo había dicho? —le preguntó y Nila negó— Bueno, haré una gira y adivina qué.

—¿Qué?

—¡Será una gira internacional! Estaré viajando por toda Europa y...

—Y... —presionó Nila esperanzada.

—Y... También haré la presentación en  Nueva York, Estados Unidos —le dijo.

—¡Aaaaaah! —gritó Nila sin importarle mucho si hacía un papel o no en medio de la calle— ¿Enserio? ¿No me mientes?

—No, no te miento —le respondió Joss con una sonrisa de oreja a oreja.

—Tienes que informarme de todo, fecha que vienes, la de tu presentación, dónde te quedaras, con quienes vienes ¿Vienes con Sara, verdad? —preguntó a lo que su amiga asintió.

—Sí, voy con ella sabes que es difícil que estemos lejos la una de la otra.

—Luna de miel —se burló, de buena manera, feliz por su amiga.

Joss y Sara después de casi un año de su viaje habían empezado a salir de manera oficial luego de todo un drama que implicó a la familia de su mejor amiga y gracias al cual Elián y Joss volvieron a hablarse.

No hay mal que por bien no venga y por suerte para ellos todo había terminado bien.

—Me tienes envidia, porque mi novia es así de dulce —le dijo alzando su brazo hasta el cielo.

—Lo que digas y te haga dormir por las noches —le respondió rodando los ojos—, por cierto, hablando de la susodicha ¿Dónde está? —le preguntó, porque como dijo su amiga era difícil que estén la una sin la otra.

—Bueno, yo acabo de llegar del trabajo y ella estaba por salir de la uni.

—Así que estas preparando la cena.

—Como buena novia.

—Tan linda, pero yo que sepa no sabes cocinar —comentó como quien no quiere ganándose una mala mirada— A menos que tú te vayas a ofrecer como la comida —agregó y el efecto en su amiga fue inmediato.

—Idiota —le dijo sonrojándose por lo que Nila se rio.

—¿Acaso estoy equivocada?

—Sí, lo estás —le respondió— Pedí la cena por delivery.

—¿Y el postre?

—Eres una pésima influencia —se quejó Joss.

—Aún así me amas.

—Alguna brujería me habrás hecho —le dijo su amiga riéndose.

—Idiota.

—Somos mejores amigas.

—Pobre mundo que nos debe aguantar —agregó Nila.

Su amistad había pasado por tanto y aún así seguían juntas.

Su prueba más grande llegó cuando Nila viajo a Estados Unidos para estudiar en Julliard. Habían amistades que no lograban superar la barrera del tiempo y las distancia, por lo que, ella se sentía feliz de que la suya si hubiera podido superar esa dificultad.

—¿Y tú? ¿Qué tal todo por allá? —le preguntó Joss— No me llamas desde hace tiempo.

—No ha pasado ni dos horas desde la última vez que te escribí —le recordó— y ni dos días desde la última vez que te llamé.

—Pará mí se sintió una eternidad.

—Dramática.

—A veces, pero tú me ganas —le dijo su amiga— Entonces, cuéntame ¿Qué tal las clases?

Nila sonrió y empezó a hablar sobre cada cosa nueva que aprendía y como de difícil le resultaba, el apoyo que recibía no sólo por parte de sus maestros sino también de sus compañeros, porque muy a parte de la competencia que había en la universidad se apoyaban entre todos y cada uno ellos.

Todo en su vida había marchado bien durante los dos años que había estado en Estados Unidos, o bueno casi todo, y eso lo recordó cuando una nueva persona se unió a la video llamada que tenía con su amiga.

—¡Nila!

—¡Sara!

—¡Joselyn! —exclamó su amiga su propio nombre mirando de ella a su novia— Hola, amor, estoy feliz por tu protagónico, ten tu besito —dijo mirando a la chica que rodo los ojos antes de bajar su rostro para dejar un beso en su amiga que se volteó a la cámara evitando el contacto.

—Así no —se quejó Joss haciendo un puchero.

—Que niña que eres —le reclamó Nila.

—Y hay veces que es peor —secundó Sara abrazando a su novia por la espalda—, pero así la amo —dijo dejando un sonoro beso en su cachete—, y ella me ama.

—Que puedo hacer, me hiciste brujería —le respondió su amiga.

—A ti todos te hacen brujería para que los quieras —señaló Nila.

—Es que todo el mundo me quiere tener a sus pies.

—Como tu cuñada —comentó Sara a lo que Joss hizo una mueca— Ni pongas esa cara, sé que la quieres.

—Que nos llevemos mejor no significa que la quiera —corrigió Joss a su pareja.

—Owww, ya se lleva bien con su cuñadita —se burló Nila.

Ella sabía eso. Había estado al tanto de cada progreso que había hecho en su relación con María Crystel y Elián, por lo que, al menos ahora toleraba a su cuñada al punto de hacerse bromas y darse una que otra muestra de afecto.

—Idiota.

—A veces —confirmó con una sonrisa— Bueno, ya llegó tu amada así que las dejo para que puedan disfrutar de su cena.

—¿Cocinaste? —le preguntó Sara alarmada mirando a Joss que negó señalando a un lugar fuera de la vista de la cámara.

—Pedí delivery.

—Y dijo que de postre podrías comertela a ella —caturreo haciendo que la chica se sonroje.

Ay, ese par no cambiaba.

—¡Nila! —le gritó Joss con los ojos entrecerrados en su dirección.

—Cierto, cierto —dijo— Tú te la comerás a ella de postre como recompensa por tu protagónico —agregó y sonrió satisfecha cuando ambas chicas se quedaron con la boca abierta.

—¿Sabes qué? —le preguntó Joss y antes de que pudiera contestarle agregó— A veces eres te odio, adiós —la despidió su amiga cortando su llamada.

Nila no pudo hacer nada más que reírse mientras miraba el fondo de su celular. Una foto de Darío y ella en su última visita a España adornaba su pantalla, ambos tenían gorros navideños sonreían a la cámara mostrando dos peluches significativos para ellos.

Uno de campanita y otro de Peter Pan.

Nila no podía dejar de sentir un poco de nostalgia cada que el nombre del hada se repetía en su mente recordándole a la única persona que la había llamado así en toda su vida y que lamentablemente no había vuelto a ver casi el mismo tiempo que llevaba fuera de España.

Bloqueando su móvil siguió caminando y se dirigió hacia su habitual cafetería encontrándose con uno de sus amigos, y trabajador de medio tiempo, atendiendo allí.

—Mira lo que trajo el gato —le dijo Samuel— ¿No es muy temprano para tomar tu café? —le preguntó el chico y ella negó.

—Nunca es muy temprano ni muy tarde para una tasa de café —le respondió Nila— Además estaba de paso y quise venir a verte.

—Sé que me amas...

—Que no se agrande tu ego, ya eres un engreído.

—Pero uno guapo.

—No te ayudaré a aumentar esa autoestima de por sí alta que ya tienes —le dijo Nila riéndose— Ahora mi café —ordenó.

—Como mande la señorita —le respondió su amigo haciendo una reverencia.

Samuel era un chico bastante entretenido que había conocido por casualidad en su primer año. No era estudiante de Julliard, pero si de un una universidad cercana. Estudiaba medicina con una beca que cubría todos sus gastos, ya que, como ella era de otro país, Perú, por lo que trabajaba para obtener un ingreso extra.

Ambos se habían conocido en esa cafetería cuando ella fue a postular por el mismo puesto de atención al cliente para el café y desde allí se hicieron muy buenos amigos, casi inseparables.

—¿Y me dirás a que se debe tu buen humor?

—¿Qué te hace creer que estoy de buen humor? —le pregunto Nila de vuelta a su amigo.

—Tienes ese brillo especial en tus ojos que sólo he visto cuando me hablas de tu familia o cantas.

—¿Así de obvia soy?

—Supongo que para los que te conocen —le respondió Samuel— ¿Entonces? ¿Qué es?

—Joss consiguió su primer protagónico para la obra del Lago de los cisnes —le dijo con una sonrisa de oreja a oreja mientras él ponía su café delante de ella.

—¿Enserio?

—Sep —confirmó— Estoy muy, muy feliz por ella, es como... Es su sueño y sus sueños son como mis sueños —le comentó—. Además hará una gira internacional ¡Internacional! —exclamó emocionada.

—Vaya eso si es grande.

—Lo es ¿Y sabes qué es lo mejor?

—Qué vendrá aquí —supuso su amigo y Nila asintió.

—¡Sí! —afirmó— Por fin la veré de nuevo.

—Y yo por fin podre conocerla en persona —le dijo Samuel— Me haz hablado tanto de ella que creo que me haz vuelto su fan.

—Idiota —se burló Nila— Pero sí, es que... —sin pensarlo se puso de pie— Joss es única, talentosa, hermosa, humilde... Es... Mi amiga es la mejor —dijo dando un giro en su sitio mientras escuchaba la risa de su amigo; sin embargo, eso no fue lo único que oyó.

—No pensaba que en Julliard le enseñarán a sus alumnos a hacer el ridículo —dijo una voz a sus espaldas parando su risa de golpe.

Él...

—Aunque no estudió, ni trabajó allí así que no podría saber si aquello es cierto.

Girandose ante el segundo comentario con el corazón acelerado Nila miró a la persona en cuestión sin poder creer que estuviera allí frente a ella.

—¿Nila? ¿Lo conoces? —le preguntó Samuel a su espalda y ella asintió aún sin poder decir nada mientras miraba al hombre delante suyo.

—Tal parece que siempre tendemos a encontrarnos contigo haciendo un número —comentó el recién llegado dándole una de esas sonrisas coquetas y burlonas que en un principio había odiado.

—Salvador...

—Hola, campanita —la saludó utilizando el viejo mote que le había puesto y por el que nadie, ni siquiera Darío, la llamó en años— Es bueno volver verte —agregó acercándose a ella y tomando una de sus manos antes de llevársela a los labios.

***

Y fiiiiiiin

Ahora si matenme con gusto xd

Llegamos al final para bien o para mal es este xd Aunque... Estoy pensando, aún no es seguro que saque una segunda parte, no es seguro, pero muy probable. Todo depende del tiempo que llegue a tener xd.

Muchas gracias a todos los que llegaron hasta acá, y acompañaron a Nila en su historia llena de risas, drama, amor, amistad y una que otra lección de vida.

Me siento feliz de haber culminado este libro pese a todo y casi, casi en la fecha planeada xd

Espero que les haya gustado, no olviden dejar sus votos, comentarios y compartir <3 Se los agradecería mucho :3

Este ha sido el reporte final de su humilde servidora y hasta que nos volvamos a leer en los extras (no prometo fechas xd)

Los quiero!!!!

Au revoir!!!

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