Una joven no mas de 20 años con un hermoso vestido azul y una cara llena de amor, caminaba a mucha prisa por las calles empedradas de Jakku Island a cada paso, se le aceleraba mas su corazón y crecía su ansiedad.

—Mas despacio señorita. —le decía su criada.

—No puedo Rose tengo que verlo.

—Lo se señorita, pero piense en mi corazón, de tanto correr me va a dar un ataque, —La joven doncella hizo caso omiso a las quejas de su criada y amiga, cuando por fin llegaron a las puertas de la Iglesia entraron y se dirigieron a una de las capilla al lado norte del edificio Santo.

—Espera aquí Rose. —le dijo suavemente.

—Pero señorita, —Rose repuso.

—Porfavor Rose necesito hablar con el en privado, — Ahora ella parecía suplicar.

—Esta bién, pero no haga nada imprudente se lo ruego. —era la primera advertencia.

—Asi será,— Con una sonrisa maliciosa.

—La última vez que me dijo eso, la sorprendí besándose cual pecadores detras del retrato de una Santo. —Y el recuerdo era más un regaño.

—Pero esta vez Dios será nuestro testigo.... - Mientras entraba y se quitaba el tocado de la cabeza.... — y solo el podrá perdonarme.

Dentro de la capilla comenzo a ver a ambos lados y de repente de entre las sombras se le apareció un hombre,  alto de piel bronceada,  ojos café claro y pelo color café oscuro.

—Mi amada Rey.—sin más la tomó en sus brazos y la beso un beso apasionado y ella le correspondió aún mas exitada que el.

— Aquí no Poe - Dijo ella entre jadeos.

—¿Porque no? - Dijo algo confundido.

—Es una Iglesia es inapropiado.—queriendo sonar fuerte pero deseosa de seguir amandose.

—No si Dios es nuestro testigo.— Acariciando su bello y terso rostro apreciando esa belleza que fue capaz de mover cada fibra de su ser,  que fue la que hizo que desafiara su estátus.
—¿Ya has hablado con tu madre sobre lo nuestro?.

—Si..... —Ni siquiera pudo terminar la oración.

— Y cuando podré presentarme en tu casa,— Dijo aliviado.

— No exactamente,— Mordiendose el labio inferior.

—¿Como es 'no exactamente'?.—Esta vez era una curiosidad exigente de ser sasiada.

Titubeando y nerviosa Rey comenzo.
— Tu sabes como es mi madre, es una mujer muy dura y estricta. A la más mínima preocupación, siempre es muy explosiva,  justamente para poder venir, tuve que decir que vendría a la capilla a ayudar a las monjas, con las tartas de la quermes mensual y Rose esta afuera esperandome.

Poe se veía frustrado con una mezcla de enojo e indignación, su amor su amor era tan puro y honesto y está clandestinidad era por su condición de humilde militar sin fortuna o propiedades tan bastas como la de los hacendados aristocratas.

—¿Entoces aún no sabe de mi?. —Finalmente pregunto.

— Eh tratado, —con temor en sus palabras, —de verdad que eh tratado amor mío, pero no encuentro el momento adecuado,  además anoche trate de hablar sobre un pretendiente y ella salto mis palabras para decirme que le dira a mi tío que me consiga un marido en el norte de la capital...

— Jamás,—le  interrumpió casí gritando.— nunca permitiré que nadie mas que yo tome tus labios y mucho menos tu sagrado cuerpo.

— Lo se, —acariciando su cabello. —yo tampoco jamás soportaria alguien que no seas tu.

Y de nuevo sus labios estaban sobre los suyos dándose ese amor ese amor incondicional de dos amantes.

—Pero tengo que hablar con tu madre,— dijo decidido.

Ella temerosa — Poe tengo tanto miedo, miedo de que mi madre te niegue mi mano y me lleve lejos de aquí, lejos de tí - Casi al borde de las lágrimas,  pero el se aproximó para levantar su rostro mirandose fijamente.
—Tengo que hacerlo Rey,  no podemos seguir con esto,  escondiendonos, escondiendo este amor si Dios nos da la bendiciómas nada más nos puede  separar - Ahora con un tono mas esperanzador prosiguió, — además eh hablado con mi arrendor y mis tierras en el Oeste son fértiles,  podría empezar el año que viene comenzando unos plantíos y estoy seguro que nos irá bien y te quiero conmigo Rey - La miro fijamente la miro lleno de esperanza y amor,  miro esos ojos esa piel que añoraba fuera solo de el ante mundo y ante Dios.
— Eres tan hermosa Rey,  eres mi rayo de sol,  mi esperanza mi amor eterno - Rozando sus mejillas.
—También eres mi amor mi amor eterno - Correspondiendo a esa caricia
—Hablare con ella este jueves sin falta y todo Jakku Island sabrá nuestro amor y estoy seguro que tu madre no me rechazará - Sus labios estaban a punto de volver a complacerse cuando derrepente se abrió la puerta de golpe que ambos saltaron en sus lugares.
— Señorita,  la madre superiora la busca ya la esperan en la cocina - Era Rose la criada
—Esta bien Rose ya voy - Girando de nuevo a su amado, —Nos vemos el jueves entonces.
—Así será mi amor.
—Señorita - insistió Rose desde la puerta.
—Ya voy ya voy, adiós mi amor.
—Adiós mi amor.

Mientras se acomodaba su tocado y salía lo mas relajada posible, su amado, su amor vendría por ella,  la reclamaría como suya al fin.
—Vamos Rose las monjas esperan - Rey caminaba frenté de Rose y esta cerro la puerta sin antes mirar la Cruz de Jesús.
—Oh mi señor protege a mi ama, porque se avecina una tormenta.

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En Pensilvania en la mansión Skywalker-Organa familia lider en el campo de la agricultura y textiles del Norte de Estados Unidos, que empezó desde el joven emprendedor Anakin Skywalker en una choza no muy lejos de aquí donde su perseverancia y tenacidad lo llevarían a crear el Imperio que hoy es, se casó con la Joven aristócrata Padmé Amidala que confío en el desde el principio, de ese amor nacieron los gemelos Leia Amidala Organa y Luke Skywalker. La vida paso las flores florecieron y Luke y Leia formaron su propia familia.
Ahora Leia era la señora de la casa, y se encontraba en la sala con un libro no leyendo si no pensando.

—Señora Organa, ¿desea que sirva la comida ahora?.
—¿Donde está Benjamin? - Dejando el libro en la mesita
—Para ser sincero señora no se donde se encuentra,  pero si usted gusta ahora mando por el.
—No, no Ackbar así está bien, sirve solo un plato porfavor.
—Asi será señora - Cuando Ackbar se fue Leia solo pensaba en su familia

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No muy lejos entre los pastizales se avecinaba un remolino eran los cascos de unos caballos a toda velocidad,  una carrera,  en la delantera hiba un joven de pelo negro y piel blanca como la luna con una sonrisa de campeón cuando finalmente llegó a la meta que era el final de sembradio, paro al caballo de golpe, llegando tras de el un joven pelirrojo con una cara no muy alegre.

—En último lugar Armitage - Le decía mientras bajaba del caballo de un solo salto un joven que imponía presencia acomodandose el pelo.

—Los últimos siempre serán los primeros Ren, ya lo dijo Jesús. Bajando del caballo también, 'Ren' Un apodo para Ben Solo el hijo de Leia y Han Solo,  desde chico nunca congenio bien con otros niños sin mas el potro negro azabache que le regalaría su padre de nombre 'kylo Ren' sería su amistad pero el tiempo siempre une a los corazones solitarios y sin mas también se hizo amigo de Armitage Hux un niño huérfano de madre y con un padre tan estricto que congeniaron bien, al final ambos necesitaban un hermano y así Armitage solia llamar a Ben 'Ren' por su inseparable caballo negro.

—Si claro pero aquí en la tierra el primero es el ganador - Con una sonrisa mostrando una dentadura blanca y desigual pero perfecta
—Un día te vencere Ren - Dijo con aplomo.
—Claro Armitage - Ese tono burlón en sus palabras.

Montado de nuevo a sus caballos,
—Armitage vamos a comer, ya es tarde y la comida ya debe estar lista.
—Esta bien me parece bien que si me utilizas de lancera al menos te dignes a alimentarme - Y así se abrieron pasó hasta llegar a los establos.
—Lockgod porfavor lleva los caballos atrás.
—¿También el caballo de Joven Hux? - Pregunto el ya anciano hombre
— Claro no escucho 'caballos', que mozo tan tonto - Proclamo Hux
— Basta Hux - Respondió Ben
—Lo siento jóven - Habló el anciano
—Tendré que disculparme con el criado, lo siento Lockgod - Dijo esto último con desdén
— No tiene porque disculparse joven Hux, mi error - Sonando a una disculpa.
— Gracias Lockgod, tienes que ser tan cabrón como siempre Armitage - Pregunto
—Gajes del oficio Ren.

Llegando al comedor, ya los esperaba Ackbar —jóven desea que le sirva.
—Si porfavor Ackbar también a Armitage.
—Claro señor - dijo el sirviente.
—Por cierto ¿donde está mi madre?. - preguntó Ben.
—Su madre Joven se encuentra en su habitación, me pidió que cuando terminara fuera a verla,  ahora mandaré por la comida, con su permiso - Y así el mayordomo con más años de servicio a la familia se retiró.
—Valla,  valla es hora de las nalgadas para Benjamin Solo - Decía Hux con una risa.
—Deja de decir tonterías - Riendo a la par.
—Mi madre a estado algo extraña últimamente -Esto lo dijo con pesar.
—¿Extraña? - ahora con interés.
—Si,  desde la muerte de mi padre - con cierto dolor.
—Tu padre no fue el mejor - Ben lo miro serio.
—Mira quien habla de padres modelos.
—Tu sabes que no quise decirlo en ese sentido Ben - parecía apenado
Aparecio la servidumbre y sirvieron la comida,  el joven Hux cortaba su carne y sin levantar la vista pregunto —Y cuando piensas casarte - Lo único que se escucho fueron los cubiertos sonar contra la mesa,  —eh dicho algo malo - Sonando juguetón.
—Mejor comamos - Su voz era dura
—Provecho.

Leia estaba en su habitación pensando como hablar con su hijo,  su único hijo,  el único que Dios le había permitido tener, la puerta sono.
—Puedo pasar.
—Adelante hijo - contesto Leia.
Al entrar se aproximó a ella, la abrazo y le dio un beso en su mano y mejilla, Ben podría ser un hijo testarudo y hasta rebelde pero amaba a su madre sobre toda las cosas.
—Que a pasado madre - mirandola curioso.
—Toma asiento - le ordenó amablemente.
Caminaron hasta la sala aun lado del balcón
—Hijo,  Ben,  se que este no es tu tema favorito pero.....
— Quieres que me casé... -  Interrumpió,  ella solo hizo una mueca,  —con alguna dama de alcurnia seguramente una de las hijas de tus amigas de Naboo o Alderan de caderas anchas para la cria —todo esto dicho con burla e ironía
—Ben porfavor solo quiero verte feliz.
—Ya lo soy - Repuso
—No lo creo - Refutó ella
—¿No lo crees?, que crees que necesito ¿amor? Tal vez pero quien me lo dará, después de lo que paso yo ya no se si pueda amar otra vez - La tristeza sonaba a cada última letra.. —No despues de.... - Se detuvo como si quisiera ahogar esa palabra ese nombre.
—Kira - Finalmente dijo Leia
— No quiero hablar de ella - De nuevo sonaba enojado
—Ben fue hace más de 5 años.
_Si pero no ah pasado ningún día en el que no piense en ella, además no hay ninguna mujer que me quité este dolor o sea igual a ella...
— Lo se - Tomando sus manos con las suyas, "pero estoy seguro que ella jamás hubiera querido verte así, tan afligido, tan adolorido del corazón.
—Que sabes tu lo que ella quería. Apartando sus manos.
—Tienes razón no se nada - Dijo con orgullo pero luego volvió esa calida voz, —lo único que se es que el dolor no es la mejor compañia.
—Bien eso es todo - Levantadose.
—No - Esta vez ella sonaba dura, —quiero que vallas a Jakku island por unos negocios pendientes con el arrendador de esa provincia, tu tío Chewie esta ocupado ahora con la contabilidad en Endor y no podrá hacerlo y bueno ya es hora que pongas en práctica tus dotes de patrón,  los papeles  los tiene Ackbar.
—Claro madre, de inmediato lo haré, con tu permiso - Despidiendose de ella con un beso en la frente
—Adiós hijo - Cuando el cerro la puerta ella miro la Cruz de Jesús,  —porfavor señor te pido que liberes el corazón de mi hijo de esa aflicción y has que a su corazón vuelva el amor.

Que tal me quedo el primer capítulo espero que sea de su agrado y bueno pues voten ⭐ se aprecian bastante y un comentario no me caeria mal,  que les pareció? Que creen que pase cuando los padres de Rey sepan de Poe? Que encontrara Ben en Jakku Island? En cuanto a actualizaciones pues dejémoslo en Martes pero pueda que los sorprenda antes. Xoxo