El grupo de jóvenes se fueron a tomar un merecido descanso a la piscina, realizaron estiramientos para poder calentar y que no tuvieran ninguna rampa evitando así problemas. Erza llevaba lo que ella consideraba su legendario bikini amarillo, Natsu no podía quitarle los ojos de encima a la chica que se sentía un poco avergonzada por ser observada tan fijamente.

  — Erza vamos al agua— tomo de la mano a la chica y se metieron a nadar.

El resto del gremio estaba bebiendo, tomando el sol, jugando en el agua o simplemente daban un paseo debido a la enormidad del lugar.

— Venir a la piscina si es de hombres— decía Elfman con gafas de sol contemplando el lugar.

Gray trataba de esquivar a Juvia quien le seguía a todas partes para enseñarle su bikini que tenía aún puesta la etiqueta. Al verlo, la joven se puso a llorar en un rincón deseando morir por la vergüenza que sentía.

  — Juvia ha fallado a Gray-sama— lloraba haciendo que la piscina se llenase aún más de agua.

— Oye Lucy vamos a jugar— dijo el dragón slayer agarrando de la cintura y haciendo una técnica mientras la joven gritaba tratando de escapar de sus garras.

 — ¡Natsu!— se acerco la joven enfadada.

El mago dejo de reír al ver a su novia tan cerca y con aquella cara, realmente daba mucho miedo.

  — Soy yo a la que tienes que agarrar de la cintura— comento sonrojada.

Natsu tomo de la cintura a la pelirroja y luego le planto un beso sorprendiendo a la joven que solo esbozaba una sonrisa aunque estaba roja debido a que la gente pudo ver el beso.

Mientras tanto, Mirajane y Lissana descansaban, Laxus colocaba la crema en la espaldas de las albinas.

— Ara ara...que bien lo haces Laxus— susurraba ella sintiendo la mano del joven.

Gray y Juvia se decidieron lanzar por el tobogán del amor, aunque más bien fue el joven que quería disfrutar solo cuando Juvia se puso encima de Gray, este asustado por la presencia de la joven que no paraba de abrazarle fuerte no paraba de gritar. Natsu al verlos se puso a reírse de ellos mientras Gray le maldecía ante la burla.

— Parece que finalmente Gray ha aceptado el amor de Juvia— dijo asintiendo mientras lloraba de felicidad Erza.

— Creo que...no es así exactamente— dijo Lucy con la gota estilo anime en su nuca.

Wendy nadaba tranquilamente en el agua con su gata blanca seguido de Happy.

— Wendy no sabia que se te daba bien el surf— comento con sus patas en la boca aguantando la risa.

— ¿El surf?— pregunto ella extrañada.

— Si, dominas muy bien la tabla— Happy se echo a reír desde el cielo.

Wendy al pillar la burla empezó a llorar mientras se tocaba su pecho viendo que estaba plana, Charles le echo la bronca aunque el gato se fue antes de que le atacasen. La joven entonces se fijo viendo como a Erza, Juvia, Lucy, Mira y compañía sus pechos rebotaban y flotaban en el agua haciendo que se hundiera queriendo ahogarse.

— Mirad, es la primera— dijo la maga celestial señalando a la pequeña que estaba en el borde.

— Hola, he venido a ver que tal lo pasáis— comentaba con sus pies en el agua.

— Hasta los fantasmas tienen el derecho a divertirse— dijo Erza apretando el puño y llorando de emoción.

Estuvieron un rato más divirtiéndose en el agua, Natsu de vez en cuando alargaba la mano para acariciar la espalda o nalgas de la joven que disimulaba ser tocada por su novio.

También estaban los otros gremios, aunque la presencia más notoria era la de Ichiya conocido por su men y perfum, cuando se acercaba a alguna mujer de Fairy Tail esta le golpeaba mandando a este volar.

— Oye enana, ¿incluso ahora tienes que leer?— pregunto Gajeel cerca de la joven.

— Es relajante leer, deberías probar— respondió ella mientras cerraba el libro y se estiraba en la toalla.

Cana como era costumbre estaba bebiendo enfundada en un bikini negro que era el centro de atención de muchas miradas. Makarov descansaba feliz,por un día se libraría de escribir informes y cartas de disculpas por culpa de sus hijos.

  — Natsu he pensado...podemos vivir juntos— comento ella apoyada en su chico.

— Puede...yo realmente no lo había pensado pero me encantaría— dijo él con una gran sonrisa para después darle un beso en los labios y luego un abrazo.

— Gray-sama dele un beso a Juvia— dijo poniendo los labios esperando recibir un beso.

Pero el beso no llegaba, al abrir los ojos vio que Gray se había ido y decidió que debía buscarlo antes de que una rival en el amor se lo quitase. 

Horas más tarde decidieron marcharse ya del lugar, el tiempo paso volando y la joven tomaba de la mano a su novio mientras le abrazaba el brazo esbozando una sonrisa. Erza y Natsu cenaron mucho debido al hambre que tenían, ella miraba a Natsu imaginando el futuro juntos, una casa, una familia, ella acostando a los niños para después dormir junto al hombre al que amaba. 

  — Erza...vivamos juntos— comento él con su sonrisa más alegre.

— Si, tengo ganas de vivir contigo...encontraremos una adecuada para formar una gran familia— la pelirroja imaginaba todo mientras sus ojos se transformaban en estrellas.

Natsu veía feliz a la joven,  luego de la cena le dio un beso y un abrazo por la espalda, tomo su mano y la llevo al cuarto donde Erza recibió las atenciones necesarias para saciar su amor.

Continuara

En el próximo, Capítulo 10: Erza cae enferma