Capítulo 25
Estuve hablando con Lorna unas cinco veces más pero Peter no me acompañó esas veces, incluso no le conté de lo que hablamos. Nosotras teníamos un plan y ese plan se debería seguir tal cual.
Dos días habían pasado después, estuve viendo en el calendario los días que faltaban. Lorna y yo acordamos la fecha en que sería todo; 23 de Julio el secuestro, 24 de Julio las torturas, golpes y muertes.
Hoy es 20 de Julio no tenemos mucho tiempo pero, tengo que prepar todo, ninguno del equipo sabe lo que va a pasar el 24, ni siquiera Peter lo sabe.
—Chicos,—llamó Pietro en la comida—quiero decirles algo.
—¿Te irás de la casa?—pregunto Harry emocionado llevándose una mala mirada por parte de mi hermano.
—No, imbécil—dijo—. Con Tony iremos a una misión el viernes por la mañana
—¿Por qué solo ustedes?
—Es una misión de suma importancia y necesito a alguién veloz para tomar lo que ellos quieren—dijo Tony
Asentimos, Tony era de esas personas que no quiere arriesgar a todo el equipo, se lleva a uno o dos, pero el trabajo más complicado lo hace el, para que ninguno tenga un accidente, es lindo de usa parte que haga eso. Aunque en dadas ocasiones, nosotros tenemos que salvarlo a él en plenas misiones.
—Oye Wanda, ¿podemos hablar a solas?—preguntó Norman, asenti, ambos nos levantamos de las sillas y nos alejamos del comedor.
Norman detuvo su paso en uno de los pasillos, hice lo mismo, su cara estaba relajada, no tenía preocupación alguna. No veía la razón por la que me necesitará.
—¿Qué sucede?—pregunté cruzando mis brazos.
—Sé lo que estás haciendo—fruncí el ceño—Sé que encontraste a tu hermana y has estado hablando con ella..
Baje mis brazos sorprendida y pálida por lo que Norman me estaba diciendo, pero ¿cómo sabe?.
—Tú... tú.... cómo....—por más que intentará las palabras se quedaban atoradas, no podía decir una oración sin tartamudear.
—Qué ¿cómo lo sé? Bueno, no fue tan difícil, el día que fuiste a "patrullar" no te diste cuenta que tu traje tiene un rastreador como los demás, noté que estabas en un bosque, fui a ver y te encontré con tu hermana, por las descripciones que nos diste aquel día supe que era Lorna, agradece que nadie más notó lo que pasaba realmente
—explicó con mucho detenimiento.
—¿Se los dirás?
—No, no soy un chismo, aunque lo parezco. Ese sera tu problema, Wanda. Pero debes de tener en cuenta que un secreto siempre sale a la luz—Dicho esto se fue, dejándome sola en ese pasillo.
Él tenía razón, podía crear esta mentira pero la mentira no me duraría por mucho. Pero debía hacerlo, debía cuidar a mi hermana y a los chicos que están involucrados en está situación. Por más que me doliera el hecho de mentirle a mi propia familia. Pero tengo que hacerlo, es la única manera de ganar contra Magneto, contra la persona que una vez llamé Padre.
[...]
Mi habitación se sentía tan solitaria, no sabía si era yo quién hacía sentir así, o era por qué em verdad se sentía de esa manera. Años pensando que mi padre estaba muerto, años echándome la culpa de algo que no hice. Años y más años extrañando cada momento con él y ahora resultaba que mi destrucción siempre lo fue él. Nadie más que mi padre era el causante de todo lo que pasaba en mi vida.
Pietro no tenía ni la menor idea de lo que pasaba, de que Magneto era nuestro padre. Y me rompía el corazón el tan sólo pensar su reacción al enterarse de la verdad. La puerta de mi cuarto se abrió, ni siquiera me tomé la molestia de ver quién había entrado.
—Venía a decir que la mayoría de los chicos salieron a patrullar ¿quieres ir?—La voz de Peter invadio mis oídos, era relajante escuchar su voz. Pero no estaba de ánimos para salir.
—No tengo ganas de salir—Confesé sin verlo, Peter sabía que mi padre era Magneto y no podía ocultarlo por más que yo lo quisiera.
Peter se fue acercando, lo sentía por sus pasos, eran lentos pero al igual era demasiado cuidadoso con ellos, cómo si tuviera miedo que yo le hiciera algo.
—¿Te encuentras bien?—Me pregunta en un susurro, niego con la cabeza.
—¿Como te vas a sentir después de enterarte que tu padre no murió y que para colmó quiere acabar con todo lo que amas?—pregunto, siento su mirada en mí, pero estoy demasiado concentrada en ver por la ventana.
Nunca me gusto llorar frente a tantas personas, fui demasiado solitaria con el mundo exterior. Vivía en una burbuja en la cuál sólo mi hermano habitaba. Al llegar a Queens las puertas se abrieron dándonos una segunda oportunidad, dejándonos en claro que podemos cambiar. Lo hicimos, cambiamos, pero siempre nos culpamos por la muerte de nuestra familia y ahora las cosas cambiaban.
Estaba entrando a un lugar que no tenía salida, un lugar en donde la única manera de salir es morir o matar. Sin querer, sin poder evitarlo, una lágrima rodó por mi mejilla al ver la foto de mi familia en mi mueble, ese día era tan perfecto. Un almuerzo al aire libre con mi madre, mi padre y mi hermano. Todo era tan perfecto, pero fui demasiado ilusa para no notar la verdad.
Papá siempre nos mintió, mintió con todo y ahora lo entendía.
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¡Hola Hola!
Inactiva por mucho tiempo, la culpa es de la escuela y las tareas que me dejan. Pero igual, aquí tienen la actualización de está historia.
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