El hombre estaba ahí cerca suyo, a pocos metros y a nada de apuñalarlo. Justo en el último momento se echó a un lado y su pie hizo de zancadilla provocando que éste cayera al suelo de bocas, soltando el cuchillo que salió disparado a pocos metros.

Tn se le quedó viendo durante unos breves instantes en el cual el corazón regresó al ritmo normal y pudo respirar.

—¡Lo tenemos!—gritaron unos guardias acercándose para poder agarrarlo ya que tenía mucha fuerza—. ¡lo lamentamos, se escapó después de golpear a uno de los nuestros por la espalda!.

—¡Andando!—uno de estos le dio un empujón.

—¡Estás muerto malnacido hijo de...!—le gritaba el fan a Tn quien miraba todo con absoluta incredulidad.

Tuvieron que transcurrir unos cuantos minutos hasta que el joven pudo recuperar del todo el aliento y la tranquilidad antes de regresar a la enfermería donde fue revisado. Estaba tan cansado que le dolía la cabeza por pensar en lo ocurrido. Solamente esperaba que no se escapase de nuevo. Y para asegurarse, le comunicaron que se lo llevarían a una comisaría.

Tn tuvo que tomarse una pastilla y dormir para recomponerse del todo. El dormir un par de horas le sentó de maravilla y se encontró mucho mejor.

—Tn—llamó una voz. 

Volteó, y allí estaba, Dua quien se sentó y le pidió perdón de nuevo. Ella no tenía la culpa pero se sentía en parte culpable. Ahora que la tenía delante y hablaba un poco con ella, la imagen que tenía de la joven artista cambió totalmente.

Dua invitó a Tn a tomar algo, un café, afuera ya que hacia buen tiempo. Él aceptó ya que ella insistió un poco.

Ambos salieron afuera del edificio y un poco apartados de la gente. Desde su posición, podían contemplar los alrededores. Estaban apoyados en la pared, y del café salía un poco de humo debido a lo caliente que estaba. Pero era distinto, no el malo y barato de la máquina expendedora del recinto. Sabía a auténtico café.

—¿Te encuentras mejor?—le preguntó ella removiendo un poco su café.

—Si...ha sido más...el susto de ver a alguien intentar apuñalarte—respondió aún nervioso y mirando su vaso de plástico. Era incapaz de poder mirarla a la cara durante más de cinco segundos.

—Ya he echado una buena bronca a los de seguridad. No solamente podrían haberte dañado a ti, sino también a cualquier otra persona. Con estas personas...se deben de tener mucho cuidado.

El chico solamente asintió, disfrutando del tiempo. 

—¿Hace mucho que trabajas en esto?—la artista dio un sorbo y le miró.

—He trabajado en algunos pequeños sitios...pero este era mi primer gran trabajo...a estos niveles me refiero. Y no ha ido demasiado bien—bebió un poco.

A partir de ese momento, el chico se fue soltando y hablando con menos nervios. Le explicó un poco más a fondo en que consistía su trabajo mientras la chica escuchaba atentamente, sin perder detalle alguno.

Ella también se dejó llevar un poco y habló de lo duro que era su trabajo. Normalmente, y debido a su fama, debía ser muy cuidadosa con lo que hablaba y con quien pasaba tiempo. Pero por algún motivo, se sentía muy cómoda hablando con ella. Quizás la fama le había cambiado tanto la vida que hablar con total tranquilidad y ser tratada de la misma manera, era que llegaba a resultar muy extraño.

—Un momento—sonó su teléfono—. sí, enseguida voy. 

—Supongo que debes irte a practicar

—Realmente no, voy a una entrevista mediante videollamada.

Los dos regresaron al interior y tras llegar a un pasillo, se separaron tomando cada uno su camino.

En la noche, el joven vio el espectáculo del concierto por la televisión ya que no debía moverse ni marcharse de la enfermería. Además, estaba muy cómodo allí y sin la necesidad de trabajar.

—Me encantan cada vez más sus canciones—pensaba viendo como sonaba su música.

Aunque era extraño ya que se escuchaba algo al estar cerca del concierto.

Y así...la noche pasó sin ninguna clase de problemas.

Tn despertó muy cómodo y a gusto, había podido dormir del tirón. Tal vez fuesen esos medicamentos. La nariz también tenía un mejor aspecto, aunque, todavía tardaría unos pocos días más en poder quitarse la tirita.

Se enteró por el médico que Dua quiso despedirse de éste ya que tras el concierto, tuvo que marcharse para poder llegar a tiempo a otros conciertos del país. Pero al enterarse de que estaba dormido, decidió dejarle descansar y se marchó, no sin antes decirle al médico que le trasladase sus mejores deseos para ponerse bien del todo.

—Una vez que me duermo temprano...—pensó triste.

Al menos pudo conocerla y hablarle un poco en persona, algo que no muchas personas tenían el privilegio de haber podido hacer.

Uno de los médicos entró y Tn pudo ver que llevaba la ropa mojada. Afuera estaba lloviendo y éste le comentó que si quería, podía regresar a su habitación ya que todas y cada una de las pruebas habían salido satisfactorias. Podría regresar al trabajo.

—Primero iré a desayunar—dijo—. y gracias por todo los cuidados.

—Para eso estamos.

Al ir al comedor, se sentó con sus compañeros quien al verlo, parecían haber visto un fantasma, así parecían decir los ojos de estos. Al sentarse y ver el ambiente, les preguntó al respecto. Estos se miraron unos a otros, queriendo saber cual le iba a decir algo.

Finalmente, fue su jefe quien sacó el teléfono y le mostró la noticia.

—¿Confirmada la nueva pareja de Dua Lipa?—leyó antes de abrir los ojos.

En las noticias podía verse las fotos de ambos en el mismo momento donde estaban tomando café. Se veía a la joven sonreír, hablarle con naturalidad e incluso en algún momento en el cual él no recordaba al estar nervioso, reír.

Y debido a las redes sociales, la noticia enseguida fue TT en Twitter y otras redes sociales de prensa rosa se aseguraron de que cada una de las fotos estaba presente en su página. Era una auténtica locura como se había extendido el chisme. Y eso que era falso.

—¿Entonces hay algo?—preguntó su jefe.

—Claro que no, solamente se preocupó por mi porque ese chiflado intentó asesinarme—respondió enseguida.

El desayuno fue así, contestando a esas preguntas. Lo peor fue tener que retirarse ya que sentía la mirada, susurros y cuchicheos de todos los presentes. Los ojos se clavaban en él como cuchillos y se retiró a su cuarto donde se sintió a salvo.

Una notificación le llegó al teléfono. Era Dua Lipa quien le siguió en su Instagram y le mandó un mensaje al chat para hablar con él.

Continuará...

Espero que les haya gustado.

Un saludo.