Capítulo 9: El hundimiento
Narrador Satine:
Cinco minutos después, tuvimos que explicarles la situación, pero antes de que salieran los demás vi que el señor Andrews, se veía muy nervioso pero justo en eso, los guardias y recamaristas, nos ordenaron salir de inmediato, al igual que nos dieron un chaleco salvavidas....bueno al menos, con respecto a Jobal, después de todo lo que pasó, no puedo evitar sentirme enojada, pero a la vez apenada por mi madre; todo lo que hizo para salvar nuestra fortuna, se hecho para abajo, todo su esfuerzo se vino para abajo, a pesar de creer que con ellos hubiéramos recuperado todo lo que teníamos....pero por su ambición, pudo habernos provocado una vida de verdadero martirio y de no ser porque hubiéramos entrado a este barco, ella hubiera terminado muerta.
Fernanda: - Tenemos que salir, no hay muchos botes salvavidas aquí - dijo agitada, pero después vio a Dalia y le entregó un estuche, con el cuaderno de sus dibujos.
Dalia: - ¿Qué es esto, querida? - dijo con cara de confundida.
Fernanda: - Es mi violín y mi cuaderno de dibujos, quiero que te los lleves en un bote - dijo acariciando por última vez, a sus tesoros más valiosos - sino sobrevivo, llévaselos a mi hermano y a mis tíos, diles que los amo y que los estaré esperando siempre....tal vez mi destino, no era llegar a Nueva York - se limpió las lágrimas y ella fue a su habitación, Anakin y Obi-Wan iban a seguirla, pero nos detuvieron unos guardias y nos llevaron a todos hacia la cubierta.
Padmé: - Satine, ¿qué vamos a hacer? Estamos a la mitad del océano, no sé si alcancemos algo - me preguntó nerviosa y aunque intentaba hacerme la fuerte, sabía que la realidad estaba totalmente en su límite y se me acababan las ideas.
Satine: - No lo sé, hermana, yo....tampoco sé qué hacer, sólo podemos esperar a que podamos subir a un bote salvavidas - dije temblando, pero en eso, sentí una mano fuerte que agarraba la mía y de inmediato, capté de quién se trataba.
Obi-Wan: - Descuida, nada va a pasarnos mientras estemos juntos - dijo con una ligera sonrisa, a la cual yo respondí con afecto; pero de alguna manera, también percibí, que tenía miedo en sus ojos.
Anakin: - ¿Han visto a Fernanda?, ella no ha regresado después de lo que pasó abajo - preguntó nervioso, ahora después de todo lo que sucedió, podía entender la forma en que ellos la querían; no era un afecto amoroso, sino una relación de hermandad y compasión, hacia una persona humilde y sincera, que sufrió mucho en su vida - Obi-Wan, ¿y si se quedó atrapada en el barco? Recuerda que tenía una habitación en tercera clase.... - dijo nervioso, casi histérico - si algo le pasa, jamás me lo voy a perdonar - por la forma en que se expresa, sentí que le contagió el nerviosismo a Obi-Wan.
Obi-Wan: - Lo sé, Anakin - dijo tenso, volteando a ver a todos lados.
(Mientras con Fernanda)
Stefano: - Amore mio, ¿dove stai andando? - preguntó angustiado y muy nervioso, jamás pensó que su viaje y relación, pudieran acabar en menos de unas cuantas horas - ¿Per quale fretta? Ci sono le barche - dijo alcanzándola.
Fernanda: - Ho bisogno di trovare il signor Andrews, Stefano - le confirmó apresurada - ho bisogno di parlare con lui, da quando è successo all'iceberg, è stato molto nervoso e depresso - le dijo sin dejar de caminar y justo al pasar por las escaleras de la recepción, encontraron al señor Andrews, que estaba tratando de mantener la postura - ¿Señor Andrews? - le llamó la atención.
Señor Andrews: - ¿Señorita Fernanda, qué hace aquí? Debería estar en los botes salvavidas con él también - dijo triste, pero firme.
Fernanda: - Y usted también, señor....un capitán, debe dirigir a su barco hasta el final - dijo segura, sabiendo que eso, se lo había enseñado su tío cuando estuvo deprimida.
Señor Andrews: - Pero no soy capitán, señorita - dijo mofándose de lo imposible que resultó ser, hacer un barco que intentara llegar al otro lado del mundo - sólo soy un pobre idiota, que pensó que podía crear un milagro, más bien, que pensó que podría cambiar al mundo, dándole a la gente lo que quería; más novedades y sólo resultó que le di la razón a los jueces.
Fernanda: - Tal vez, pero nosotros nunca pudimos haber sabido, lo que iba a pasar - él intentó responderle, pero ella lo interrumpió - sé, que el barco viró lo suficiente, como para no chocar con el iceberg, pero nunca pudimos haber previsto, que la montaña hubiera sido más amplia por abajo del mar, entonces, ¿qué hacemos nosotros?
Señor Andrews: - ¿Qué? - preguntó con un toque de esperanza.
Fernanda: - Nuestro trabajo, señor Andrews, usted no será el capitán de esta nave, pero debe luchar hasta el final, por salvar a la mayor cantidad de personas que pueda....ése, es su trabajo ahora, señor - dijo sin duda en su voz.
Señor Andrews: - La prensa me va a comer vivo, la gente de aquí también....seré la burla de la gente que jamás creyó en este proyecto - dijo nervioso - me querrán muerto después de esto.
Fernanda: - No será el único, a los mejores genios de la historia, los han mofado, golpeado e incluso asesinado, pero sabe que los volvió importantes....no fue su error, no fue su ingenio - se le quedó viendo a los ojos con firmeza - sino porque nunca se dieron por vencidos y eso, será lo que lo mantendrá en un puesto honorable, tal vez no será el capitán, pero conoce el barco mejor que nadie...porque usted lo construyó, ahora, tal vez la gente lo verá con ojos de decepción, por darles la ilusión de que es un barco inundible, pero el barco, aún está en pie y todavía podemos hacer algo para salvar a las 1200 personas abordo....usted manda, señor, ¿qué debemos hacer? - después del discurso de Fernanda, la cara de Andrews cambió radicalmente y sintió la disposición que le faltaba, para hacer algo.
Señor Andrews: - Síganme - ella sonrió y llamó a varios de los guardias y a la mayoría del personal del barco - escúchenme, este barco a pesar de estar hundiéndose, no se ha destruido; tenemos un rango de entre 2 o tres horas para sacar a todos de aquí - dijo poniéndose en la escalera.
Oficial: - Pero, señor, no hay suficientes botes, para meter a todos los pasajeros del barco - dijo alterado uno de los oficiales.
Señor Andrews: - Lo sé, ése es un error mío y de Ismay, al creer que no eran necesarios; pero si hay suficientes camas y muebles para mantenerlos a flote, mientras llega la ayuda - la idea sonó extraña, pero no tenían muchas opciones - vayan a todos los pisos del barco, excepto a los almacenes inferiores, esos ya están cerrados o inundados....si el agua llega a alcanzarlos, abandonen los pisos inmediatamente, pero no cierren las puertas, si alguien está ahí ayúdenlo a salir, no importa la clase que sea.
Teniente: - ¿Qué hacemos con los de tercera clase? El protocolo ordena, que los pasajeros de abajo, deben mantenerse abajo y asegurados hasta que pasen los de primera clase - al decir eso, Fernanda y el señor Andrews, se vieron con sorpresa.
Fernanda: - ¿Qué clase de regla es esa? ¿Qué no están viendo que el barco se está hundiendo? - preguntó molesta, harta de todas las absurdas reglas de orden social - Su obligación es salvar a todos los que estamos aquí abordo, no a los que a la gente de seguridad social les convenga, esa condenada regla, sólo aplica en simulacros, no en emergencias de esta magnitud.
Señor Andrews: - Tiene razón, el barco podrá ser grande pero el agua es más pesada y con el peso del mismo, hará que se hunda más rápido....no dejen que las tontas reglas, les impida tener moral, teniente, estamos en un tiempo desesperado.....no es tiempo de seguir reglas absurdas.
(2 horas después, con Satine y Padmé)
El barco ya estaba hundido, cerca de la primera cuarta parte, el personal del barco, actuaba como loco; aventaban camas, muebles, mientras terminaban de armar los botes salvavidas; pero a pesar de ser bastantes y por los dos lados, éramos más de 1000 personas en un sólo barco, incluyendo a la tripulación. No todos podrían salvarse, a pesar de haber tenido estos botes, al ver que ya estaba bastante abajo, comenzaron a bajar los botes; pero veía que mi madre estaba muy incómoda, porque no quería entrar a un bote con mezclas de personas.
Oficial: - Atención, en los siguientes botes, sólo podremos meter a mujeres y niños, ya que están muy ligeras las tablas del mismo - al oír eso, no pude escuchar nada más, porque sabía que era nuestro próximo turno y no quería separarme de mi amado.
Satine: - NO....No, yo no quiero, Obi-Wan - dije sintiendo lágrimas.
Padmé: - Ani, no no quiero ir, quiero quedarme contigo - dijo muy nerviosa.
Obi-Wan: - Satine, tienes que hacerlo, debes salvarte y vivir una vida nueva - dijo viéndome a los ojos.
Satine: - Pero, no quiero dejarte morir, mi amor....acabo de encontrar mi felicidad, no quiero vivir en un mundo donde no estés - dije llorando.
Obi-Wan: - Tu felicidad, no depende de mí....tú, creas tu propia felicidad - me tomó de la cara con seguridad y me vio a los ojos, tratando de calmarme.
Anakin: - Fue hermoso lo que vivimos en estos días, Padmé - le dijo acariciando su mejilla - pero ahora tú debes irte, mejora este mundo Padmé; tú y tu hermana, serán de las pocas personas que los ayudarán a cambiar, sé fuerte Padmé....yo estaré contigo, siempre - al escuchar sus palabras, no pude evitar sentir como mi corazón corría como nunca; a lo que volteé a ver a Obi-Wan y lo besé con ferocidad, porque posiblemente era la última vez que lo volvería a ver. Cuando nos separamos, no pude evitar que me salieran lágrimas y me sorprendió ver que Obi-Wan, también estaba muy triste.
Obi-Wan: - Te amo, Satine - dijo tomándome de la cara y comenzó a acercarme con hacia el bote, Anakin y Padmé, todavía no dejaban de besarse; pero en eso, vi algo que nunca pensé que llegaría ahora.
Rush: - Vaya que encantador - dijo espantando a Anakin y Padmé, Rush Clovis y Pre-Vizla, se encontraban aquí libres de nuevo en cubierta, junto con su guardaespaldas.
Anakin: - No se atrevan a tocarlas - dijo furia, poniéndose en frente de Padmé y Obi-Wan, no se alejó de mi lado.
Obi-Wan: - Si te atreves a tocar un sólo cabello de Satine, Pre-Vizla, te aseguro que te romperé el hocico, sin importarme que estamos en momento crítico - le aseguró en tono amenazante.
Pre-Vizla: - Por órdenes, de los dueños del barco, permitieron que hasta los de su clase, estuvieran aquí para salvarse, una verdadera pérdida de tiempo....los únicos que deberían salvarse, son los de verdadera clase - vi que ambos estaban a punto de explotar.
Obi-Wan: - Déjalos Anakin, no valen la pena - dijo tratando de contenerse - además, ellos mismos se están buscando su propio castigo - en eso, se escucha que el oficial, sigue instruyendo que debemos subir más mujeres y niños al bote.
Pre-Vizla: - Oh Satine, debes estarte congelando - dijo cínicamente, poniéndome su abrigo, que de no ser porque el aire estaba a todo lo que da, se lo hubiera tirado al mar - será mejor que se vayan las dos, el barco no tardará mucho en hundirse.
Satine: - Sé que tengo que hacer, gracias - le dije con sarcasmo y volví a voltear a Obi-Wan con tristeza, le acaricié el rostro y volví a besarlo por última vez - adiós, mi amor - y me subí al bote, poniéndome encima el chaleco salvavidas.
Anakin: - Ya es tiempo, Padmé - alcancé a escuchar lo que decían y Padmé, estaba frenética que volvió a besarlo con fuerza y la llevaron al bote, para luego empezar a descender.
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Narrador XX:
Al ir bajando los botes, Satine y Padmé, veían desamparadas al amor de sus vidas, alejarse con cada centímetro de distancia; mientras se iluminaban sus rostros, con las bengalas que lanzaban al cielo, mientras tanto, Anakin y Obi-Wan, tenían que soportar el escuchar los insultos de sus rivales.
Rush: - La vida es un misterio, ¿no es así, Skywalker? - le comentó, como si jamás hubiera pasado nada, pero Anakin lo ignoró, mientras veía partir al amor de su vida....lo bueno, siempre tiene terminar y a veces, termina más pronto de lo que lo tienes.
Pre-Vizla: - Un día, pareciera que lo tenemos todo, pero quién diría que al final se perdería, con el simple hecho de haber subido a un barco - dijo observando el mismo bote - pero, pues al final, uno no se puede quedar con lo no se que tiene desde el principio - al captar el sentido, en el que lo implica, Obi-Wan, volteó a verlo con molestia.
Obi-Wan: - ¿De verdad, no podías desaprovechar ni un sólo momento para insultarnos, verdad? - Vizla, sólo lo vio con una sonrisa de descaro.
Pre-Vizla: - No veo el porqué de la molestia, Kenobi....ustedes, jamás la tuvieron y jamás las tendrán, así es el destino, los de primera, con los de su clase y los de tercera igual....así es el orden de la vida - dijo con ironía.
Anakin: - Lo dicen los hombres, que jamás aceptaron la derrota y el desprecio de las mujeres que tenían por prometidas - se burló sin dejar de ver a ver a Padmé, mientras tanto, ellas no dejaban de pensar en lo que estaba pasando; familias, matrimonios y parejas, separadas por la tragedia...por diferencias de clases y por reglas tontas, que provocarían la pérdida de los hombres que aman, pero lo que nadie sabía, era que este viaje, les cambió la vida y que ya no eran las chicas ingenuas de antes.
Satine: - Ya no más - dijo en susurros, pero con decisión.
Padmé: - ¿Qué?
Satine: - Que ya no quiero depender de reglas, Padmé, ya estoy harta de tener que seguir indicaciones todo el tiempo....estas mujeres y niños, están sufriendo por estar separados de sus esposos, padres, hijos o incluso parejas; yo ya no quiero sufrir, hermana y no pienso separarme del hombre que amo - ante su fiel decisión, se paró y brincó, hacia el barandal del pasillo exterior del barco.
Obi-Wan: - ¡SATINE! - gritó al verla saltar y apenas sostenerse del mismo. Y Padmé, al ver y entender lo que dijo su hermanastra, se llenó de valor e hizo lo mismo que ella....pero apenas lo logró, porque el bote, ya estaba un poco más abajo.
Anakin: - ¡PADMÉ! - al subir las chicas, con la ayuda de Stefano y Fernanda, empezaron a correr hacia la recepción.
Fernanda: - ¡CHICAS, A DÓNDE VAN! - pero ninguna le hizo caso, porque estaban más concentradas en llegar a su felicidad, que sus piernas se movieron más rápido de lo que podían, que no les importaba empujar a las personas; al pasar a casi todo el mundo, Satine, llegó primero a la recepción, donde Obi-Wan la recibió con los brazos abiertos y se besaron con furia y Anakin, llegó terminando de bajar y recibió de inmediato a Padmé, con los brazos abiertos y ambos también se besaron con pasión; cuando Stefano y Fernanda llegaron, se quedaron impactados de ver lo que tenían en frente.
Anakin: - ¿Por qué lo hiciste, Padmé? - le preguntó entre besos, tanto en los labios como en la cara - ¿Es lo más peligroso que has hecho? - mientras él decía eso, Padmé lloraba por el hecho de no querer perderlo y se dejó querer - ¿Por qué lo hiciste, Padmé? - le preguntó viéndola a los ojos.
Satine: - Ustedes saltan, nosotras saltamos, ¿cierto? - le dio la misma respuesta, que ellos les dieron a ellas cuando se conocieron en la popa del Titanic; causando que Obi-Wan, sonriera con alegría y la besó de nuevo.
Obi-Wan: - Cierto - respondió con seguridad y la abrazó, ninguna de las dos parejas se imaginó, que los dos asesinos, los estaban observando, celosos y molestos de no haber podido conseguir lo que querían; cuando Grievous, los jaló del hombro para que se fueran, Pre-Vizla tomó el arma de Grievous y Clovis, cogió la suya y se dirigeron al barandal para dispararles a Satine y a Padmé, pero no contaban con que Fer los había visto.
Fernanda: - ¡CUIDADO! - gritó al ver a Vizla con el arma, empujó a las parejas, pero no pudo evitar que la bala rozara su costado izquierdo, cayendo al suelo con los demás.
Stefano: - AMORE MIO - gritó checando que estuviera bien, pero al llegar, vio que la rozadura fue bastante extensa, pero no para desangrarse rápidamente.
Obi-Wan: - ¡Fer! - gritó al ver su herida.
Fernanda: - Estoy...bien - y después, se escuchó otro disparo, que dio con el adorno del final del barandal - ¡CORRAN! - gritó y empezaron a correr las tres parejas, hasta llegar al restaurante, como había agua por ahí, no podían moverse tan rápido...pero les daba tiempo para escapar de los dos maníacos; cuando intentó disparar una última vez Clovis, se le atoró la pistola y no pudo seguirlos, a Vizla se le habían acabado las balas.
Rush: - Espero que tengan una vida juntos - dijo enloquecido del dolor, pero al final recordó que se le había olvidado algo, que comenzó a reírse.
Pre-Vizla: - ¿Qué es tan gracioso? Estamos acabados, Clovis - le reclamó enojado.
Rush: - Los diamantes - dijo terminando de reír, comenzando a sentir rabia otra vez - LOS DEJÉ EN EL ABRIGO DE PADMÉ - dijo exasperado y se dirigió a la escalera, mientras Clovis se encaminó, con un Grievous que se estaba hartando de sus jefes.
Pre-Vizla: - Ve por ellos y.... - hizo una pausa, mientras le entregó su arma - acaba con todos - dijo desesperado, pero con más crueldad y se empezó a alejar por el mismo camino; mientras Grievous, caminaba por el agua helada, cargó de nuevo su arma y se dirigió al restaurante, que empezaba a inundarse....después de unos minutos de buscar, encontró a las tres chicas arrinconadas y escondidas detrás de una mesa.
Grievous: - Vaya, tal parece que esto será más fácil de lo que parece - cargó su arma y estaba apunto de disparar, cuando Stefano salió corriendo y tiró su arma, peleando a muerte contra el ex-oficial; después le siguió Obi-Wan, con golpes duros en todo el cuerpo y Anakin, terminó dando el golpe final, dejando débil e incapaz de seguir peleando a Grievous.
Anakin: - Tenemos que salir de aquí - dijo apresurado, llevando a Padmé de la mano, Fernanda y Stefano iban al frente, seguidos por las otras dos parejas - esperen, ¿escucharon? - preguntó al detenerse en las escaleras que llevan a tercera clase.
Stefano: - Sí - dijo ligeramente, lo que estaba sucediendo era, que el agua ya había llegado a la mitad del restaurante y les daba muy poco tiempo para salir.
Fernanda: - Hay que salir de aquí - dijo con dolor, a pesar de haberse puesto un pedazo de mantel como venda, el ardor seguía y no dejaba de sangrar, pero luego, escucharon la voz de un niño llorando desesperadamente; al verlo, Anakin se acercó y le preguntó que qué le pasaba, pero el niño, estaba muy asustado como para responder y el agua estaba subiendo rápido, entonces Stefano se le acercó más tranquilo y le empezó a hablar con tranquilidad.
Stefano: - Dice che suo padre non ha restituito da un'ora fa - dijo tranquilo volteando a verlos.
Fernanda: - No lo voy a dejar aquí, no en estas condiciones....no es justo para él - dijo segura, pero Anakin, cargó al niño mientras Stefano ayudaba a su novia - vamos - pero al llegar a la puerta principal, vieron que estaba lleno de agua y que si la abrían, se ahogarían de todos modos.
Obi-Wan: - Hay que buscar otra salida - gritó entre todo el ruido del agua entrante; intentaron regresar, pero el agua ya estaba cayendo por las escaleras, buscaron por los pasillos, pero se encontraron con un hombre que corría desesperado; quién les gritó por llevarse a su hijo.
Stefano: - Signore, vorremmo noi per portare da qui, per cercare di trovarlo - le dijo tratando de calmar al padre apurado.
Fernanda: - Dovremmo uscire di, non c'è nessun tempo, quella porta è pronta a rompere - afirmó con valor, sin importar que hay mucho peligro.
Rex: - Daccordo - asintió el hombre, pero justo en eso, la puerta comenzó a romperse para dejar salir el agua.
Anakin: - ¡CORRAN! - gritó y todos se metieron por el pasillo más cercano - ¡CORRAN! - corrieron lo más rápido que pudieron, pero el agua los alcanzó y los arrastró hasta la siguiente reja, las cuatro parejas, salieron y vieron otras escaleras.
Padmé: - Ani, mira - le señaló la luz del mismo.
Fernanda: - Hay que llegar allá, tengan cuidado con los cables y con la electricidad que cae - gritó advirtiendo el peligro, pero al lograr subir, se encontraron que la puerta estaba cerrada y con llave - AY, NO - dijo molesta, pero de repente llegó un recamarista y le pidieron - AYUDA POR FAVOR.
Oficial: - No puedo, no me permiten - pero Obi-Wan lo interrumpió.
Obi-Wan: - Por el amor de Dios, hombre....somos pasajeros, no esclavos ni prisioneros, por favor ayúdenos, todos nos vamos a hundir de todos modos - le rogó con ansiedad, pero el agua comenzaba a subir las escaleras, el recamarista quería irse, pero la conciencia lo conmovió y regresó a abrir - gracias, ahora, por favor apúrese - durante varios segundos, el hombre intentó con varias llaves, pero se le cayeron.
Oficial: - Las llaves se cayeron, lo siento mucho - se disculpó con lástima, pero antes de irse, Fernanda lo tomó de la muñeca impidiendo su huída.
Fernanda: - ESPERE, por favor, yo recupero las llaves, ya las vi... - dijo con miedo, pero seguridad - pero por favor, no se vaya, usted es nuestra única salvación - le rogó con lágrimas, lo cual permitió que el oficial se quedara, después ella se sumergió, pero a pesar de verlas, no había mucha luz...que tuvo que usar el tacto para hallarlas.
Satine: - Fer, ¡FER! - la llamó desesperada.
Oficial: - ¿Dónde está? Seguramente el agua ya se las llevó - pero antes de que perdieran la fe, una mano salió del agua con las llaves, entonces el hombre las tomó y abrió rápidamente la puerta y apenas y lograron escapar nadando, porque el agua ya había llenado el pasillo - gracias, ahora suban que no quedan muchos botes de seguro.
(Afuera en el mar)
Los botes remaban a un paso relativo, a pesar de ser pocos, lograron meter a una buena parte de los pasajeros, en los 20 botes que había ahí; donde en un de ellos, se encontraban Jobal y Dalia, deteniéndose a ver el espectáculo del hundimiento del Titanic.
Dalia: - Esto no es algo se vea todos los días - dijo impresionada.
Jobal: - Lo arruiné todo, Dalia - dijo melancólica, viendo por primera vez, el gran error que cometió, al comprometer a su hija e hijastra con dos asesinos - yo, no sólo arruine la vida de mis hijas, sino la mía....creí, que podríamos recuperar nuestra vida, pero me equivoqué - dijo con lágrimas en las mejillas.
Dalia: - Oh querida, no digas eso, ¿cómo ibas a saber que esos hombres eran unos asesinos sin límites? Y que te querían matar también - eso, puso más melancólica a Jobal - oh, lo siento querida, no fue mi intención.
Jobal: - Eso es lo peor de todo, Fernanda tenía razón, yo estaba por mandar a mis hijas a un destino cruel y sin libertad....y lo peor del caso, es que posiblemente, nunca las volveré a ver para disculparme.
(De regreso al barco)
Media hora más pasó y el barco, comenzaba a hundirse cada vez más rápido, el agua del Atlántico había entrado a la recepción y a las habitaciones más importantes, causando que el barco comenzara a levantarse; Anakin, Obi-Wan, llevaban a Padmé y a Satine de la mano, mientras, Stefano cargaba a Fernanda, para evitar que se le abriera más la herida.
Anakin: - TENEMOS QUE ALCANZAR LA REJA, SÓLO ASÍ PODREMOS MANTENERNOS FIRMES EN EL BARCO - gritó ante todo el ruido, con mucho trabajo y esfuerzo por no resbalarse, las tres parejas lograron subirse al barandal, justo antes de que el barco quedara mucho más inclinado.
Satine: - Igual que cuando empezamos - le tomó la mano fuerte y él, la abrazó lo más fuerte que pudo, para evitar que se cayera, después de considerar lo que dijo.
Obi-Wan: - Sí, pero no estábamos en las condiciones de ahora - dijo tratando de animar la situación, justo en ese momento, se fue la luz de todo el barco, dejando que la oscuridad los llenara por completo.
Padmé: - ¡ANNE! - gritó al ver a su sirvienta colgando del barandal - ¡SUJÉTATE! - dijo tratando de alcanzarla, pero justo antes de que ella llegara, se soltó y Fernanda, la cachó con toda la fuerza que podía.
Fernanda: - Lo bueno de haber hecho, mucho ballet y gimnasia - dijo con trabajos y Anakin y Stefano, la ayudaron a subirla - ya estás.
Padmé: - Gracias, Fer, gracias por salvar a nuestra amiga - le agradeció entre lágrimas, pero antes de que pudieran contestar, el barco se rompió y la popa, cayó desde las alturas para pegarle al océano, haciendo caer a muchos y golpeando a otros.
Obi-Wan: - He....he...vivido experiencias horribles - dijo muy asustado, agarrando muy fuerte a Satine y al barandal - y ésta es una de ellas - terminó tratando de mantenerse calmado.
Anakin: - Vaya caída - su cuerpo estaba temblando y estaba muy impactado, después de haber caído como cien metros de altura y justo en eso, la popa vuelve a elevarse para finalmente hundirse - aquí vamos de nuevo - entonces, el barco terminó en un ángulo de 90°, con respecto al agua y comenzó a hundirse.
Fernanda: - DE ACUERDO, ESTO ES LO QUE VAMOS A HACER, VAN A TOMAR TODO EL AIRE QUE PUEDAN A SUS PULMONES - gritó mientras se acercaban al agua helada - Y EN CUANTO EL BARCO TOQUE EL AGUA, SE SUELTAN DEL BARANDAL Y NADAN LO MÁS FUERTE QUE PUEDAN, ¿¡LISTOS!? - faltaban solo cinco segundos - ¡UNA, DOS, TRES! ¡¡RESPIREN!! - en ese preciso momento, tocaron el agua y se soltaron, pero Anakin, Obi-Wan y Fernanda, siguieron hundiéndose con el barco ligeramente; mientras Stefano, sacaba a las tres mujeres del agua.
Satine: - ¡OBI! ¡OBI-WAN! - gritó tratando de ver, si ya había salido alguno de los tres.
Padmé: - ¡¡ANAKIN!! ¡ANI! - pero justo un hombre intentó ahogarla, al hundirla a pesar de tener chaleco salvavidas - ¡¡AYUDA!!
Satine: - ¡¡PADMÉ!! - y de milagro, Anakin apareció de la nada y llegó en su rescate.
Anakin: - SUÉLTALA IDIOTA - y golpeó al tipo en la cara - ¿estás bien? - le preguntó abrazándola y ella lloró desesperada, pensando que lo había perdido; mientras estaba distraída, Satine, sintió una mano en su hombro y se espantó al voltearse.
Obi-Wan: - Satine, soy yo - le dijo cuando intentó resistirse - tranquila, tuve que ayudar a salir a Fer.
Satine: - ¿Obi? ¡OBI-WAN, mi amor! - y Stefano, abrazó a Fernanda, dándole varios besos en la frente, mientras Satine le daba de besos a su novio.
Stefano: - ¿Stai bene? - le preguntó muy concernado, Fernanda, sólo pudo asentir con mucho frío - Dobbiamo passare a qualcosa, noi ci immergiamo destini rimangono qui - dijo frenético, intentando buscar algún mueble que les sirviera, la gran mayoría ya estaban usados.
Fernanda: - Peor que eso, terminaremos congelados aquí sino nos subimos a algo - dijo muriéndose de frío, además del hecho de que estaba perdiendo sangre, desde hace una hora; encontraron dos armarios grandes y gruesos, se subieron a ellos Anakin con Padmé y Obi-Wan y Satine, al final subió Stefano en medio de ambas parejas, pero Fernanda no podía subir por el dolor - ¡ARGG, es inútil, voy a terminar mis días aquí! - dijo perdiendo las esperanzas, pero Anakin y Obi-Wan no lo iban a permitir, no si podían impedirlo.
Anakin: - NO, Fernanda Sánchez, no salgas con eso otra vez - le exigió con temor de perder a su mejor amiga - TÚ NO TE PUEDES RENDIR AHORA, los botes van a volver y podrás llegar a Nueva York.
Fernanda: - ¿¡Cómo lo sabes, Anakin!? - dijo en un tono, en el que ella jamás les había hablado - Yo escuché al capitán hablar con uno de los sargentos, el barco más cercano tardaría más de 5 horas en llegar, los botes serían los únicos en llegar a tiempo, ya no me queda mucho.
Stefano: - NO, Fernanda, non si può dare una risposta, ora che i due sono insieme - le dijo entre lágrimas, tomándole su mano derecha.
Fernanda: - Stefano, me estoy desangrando más rápido de lo que parece, el agua helada no me está ayudando a parar la herida....no sé cuanto tiempo vamos a quedarnos aquí esperando, pero no creo durar tanto tiempo estática, en el hielo del océano y si al día siguiente salen los tiburones, voy a ser la primera en ser su comida - Anakin y Obi-Wan, estaban furiosos, no podían dejar que ella se diera por vencida.
Obi-Wan: - María Fernanda Sánchez Merino - le llamó con exigencia - ÓYEME BIEN, TÚ NO TE VAS VENCER AHORA, sé que has pasado por demasiado en estas últimas horas, pero pasaste por algo peor hace años y eso no impidió que salieras adelante, en ese momento, nos tuviste a nosotros y hoy, nos tienes todavía vivos y respirando....así es que, no vas dejar que la muerte de tus padres sea en vano - al decir eso, despertó cierto interés en la mirada de Fernanda.
Anakin: - Tienes a tu hermano, que te espera en casa, que necesita de tu ayuda para ser un mejor hombre...él también sufrió por la pérdida de sus padres, no puedes dejar que sufra otra pérdida más, todo el trabajo que hiciste no lo puedes desperdiciar ahora - tanto Obi-Wan como él, tenían sujetadas sus manos con fuerza, para evitar que se cayera al mar - él te necesita, Stefano te necesita....nosotros te necesitamos - las lágrimas comenzaron a salirle sin querer y Fernanda, se sorprendió de verlos así de melancólicos - eres nuestra mejor amiga, no quiero ver ni un sólo día, sin recibir tus bromas o escuchar un sólo sonido de tu voz, sobre todo, quiero que seas testigo del gran amor que nos tenemos Padmé y yo, ante todos....tú nos metiste en este lío, bueno en parte fui yo, pero tú nos ayudaste.
Obi-Wan: - No mueras ahora, amiga - dijo llorando también y ella, no pudo evitar llorar también - eres nuestra familia, desde el momento en que nos conocimos - por favor - Satine, le puso una mano en su hombro y no pudo evitar llorar de dolor.
Fernanda: - Entonces, será mejor que me ponga moverme en el agua - dijo con seguridad, causando que los hombres sonrieran - Stefano, diles a los que están en el agua, que n..no dejen de moverse, porque si no....el agua misma, les provocará hipotermia - dijo con la voz temblorosa, moviéndose con trabajo, para mantenerse en calor; pero Stefano no alcanzó a entender el último término - es decir, que morirán congelados por la temperatura del agua si se quedan flotando sin hacer ningún movimiento.
Anakin: - Tendrán que turnarse, el cansancio en algún momento los vencerá, a ti también - dijo viendo a su alrededor y Stefano, comenzó a traducir la petición de su novia.
Obi-Wan: - Sólo podemos esperar, a que a alguien se le ocurra regresar - dijo también temblando de frío - por lo pronto, lo único seguro que tengo en mente, es que voy a tener un gran resfriado, si es que logramos salir con vida - dijo en tono burlón y Satine, le dio una ligera sonrisa y se acurrucó en su hombro - te amo - le susurró antes de caer dormido por unos momentos, pasó cerca de otra hora y los botes no regresaban, la gente se seguía moviendo, pero lamentablemente algunos caían congelados en el mar, mientras otros se turnaban el lugar y descansaban; Fernanda, estaba ya muy cansada y quería cerrar los ojos, la sangre no dejaba de salir en ligeras cantidades, pero servía para marearla.
Anakin: - No va a aguantar mucho, ya tiene mucho sueño - entonces, vio una de las camas con dos hombres ahí - ¿oigan? - les llamó la atención - ¿Podría subirse ella a la cama? Ya está muy cansada y se está desangrando, si se duerme podría quedarse así para siempre - los dos hombres se vieron y asintieron con toda la fuerza que pudieron, después se acercaron y Stefano, ayudó a subirla a la cama y Obi-Wan le pasó una manta que había ahí. Luego, pasaron otros quince minutos y ya casi todos estaban dormidos, hasta que Padmé vio con su vista periférica una luz.
Padmé: - Ani, mira - le dijo tratando de despertarlo, el cual con cansancio despertó.
Anakin: - ¿Qué? - y en eso, vio la luz y se talló los ojos para ver si no era un sueño - ¡Obi-Wan, mira! - despertó a su amigo, junto con Stefano.
X: - ¿Alguien me escucha? - y por mucho que pareciera, no era un sueño, lo que causó una gran alegría en los cinco.
Satine: - Llegaron - dijo extática y abrazó a Obi-Wan.
Anakin: - POR AQUÍ, AQUÍ ESTAMOS - cuando los demás vieron lo que pasaba, también comenzaron a gritar y llorar de emoción - estamos salvados, Padmé, te amo.
Padmé: - Yo también te amo, Ani, ahora sólo hay que rezar porque podamos salvar a Fer.
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