Capítulo 1: El barco y la suerte
https://youtu.be/fCPC6-6n5Uo
Narrador Padmé:
Era el 10 de Abril de 1912, en Southampton, Inglaterra, mi madre, mi hermanastra Satine y nuestros....futuros esposos, Rush Clovis y Pre-Vizla, que nos dieron este viaje inaugural, como nuestro regalo de bodas. Pero ninguna de las dos, estaba feliz por lo que nos deparaba el destino, porque nuestra boda no es por amor ni por decisión de los cuatro; sino porque no nos queda de otra, mi familia, está en la bancarrota....ya que nuestros padres, antes de morir no alcanzaron a liquidar las deudas de nuestras familias, ya que alguien les robó dinero de su trabajo. Por lo que al morir, nos dejaron con la carga encima y después, llegaron ellos a pedir nuestra mano, a lo que mi madre decidió, que sería lo mejor para ambas. La madre de Satine, murió de una enfermedad muy grave, antes de que mi madre se casara con el padre de Satine, pero estoy segura de que mi madre la convenció de aceptar, este trato, por cualquier emergencia.
Rush Clovis: - Aquí estamos, linda - dijo fingiendo ser amable conmigo, después de que salió del auto después de nosotras.
Pre-Vizla: - El famoso, Titanic, el barco de los sueños, o el inhundible, como le llaman - dijo el prometido de Satine.
Padmé: - Yo no creo en los chismes, querido, pero vamos a ver si tiene la capacidad, que dice proclamar - dije cortante, Satine estaba siguiéndome.
Satine: - No veo porqué tanto alboroto, no es más grande que el barco Mauritanian - dijo igual que yo, aburrida y tratando de evitar todo este mal tiempo.
Rush Clovis: - Padmé, mi querida Satine, tal vez habrá muchas cosas que les aburran, pero nada se compara al Titanic - dijo emocionado, tratando de elevarnos el ánimo, pero nada de lo que dijera nadie, nos haría cambiar de opinión.
Pre-Vizla: - Sus hijas, son muy difíciles de convencer, Jobal - alcancé a escuchar que le hablaba a mi madre.
Jobal: - Descuiden, queridos, ellas están tan contentas que no pueden expresar su alegría - mi madre, la manipuladora, habla como si el mundo no la mereciera. Desde que se casó con el padre de Satine, se ha encargado de manipular la información y tener el control de nuestras vidas; para poder volver a ser, una familia digna de ser vista.
Satine: - Como si estuviéramos felices de arruinar nuestras vidas - me dijo en voz baja y yo, asentí ligeramente. Se le consideraba, "el barco de los sueños", pero para mí y para Satine, era más una prisión de esclavos. Y Satine y yo, éramos parte de ese grupo, sin salida y sin nadie que pudiera entendernos.
Jobal: - ¿Así es que éste es el famoso barco que dijeron? El barco inhundible - dijo creída, mientras pasaba enfrente de nosotras.
Pre-Vizla: - No puede hundirse, ni Dios mismo lo podría hundir - ja, yo creo que sus presunciones van mucho más de lo que parece, yo no dudo que si Dios decide hundir el barco, lo hará sin problemas - hable con nuestro guardaespaldas, ponemos nuestras cosas en sus manos, oficial - alcanzamos a escuchar al prometido de Satine, provocando que ella girara los ojos. De ahí, comenzamos a subir la rampa, hacia el Titanic, se le consideraba, "el barco de los sueños", pero para mí y para Satine, era más una prisión de esclavos. Y Satine y yo, éramos parte de ese grupo, sin salida y sin nadie que pudiera entendernos, por dentro gritábamos, pero nadie podía escucharnos.
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Narrador Anakin:
Como era habitual, Obi-Wan y yo, estábamos apostando por conseguir dinero, ya que nadie nos acepta, por ser de la tercera clase; detesto que la gente, tenga que estar dividida en clases, como si fuéramos insignificantes basuras de los tiempos de la nobleza. Pero, en fin, después de tantos años de vivir en las calles, no puedo quejarme, tengo a mi mejor amigo de la infancia, después de la muerte de mi madre, ya que nunca conocí a mi padre; él y yo, somos inseparables, no porque no seamos capaces de hacer cosas por nuestra cuenta....sino porque somos familia y la familia nunca se abandona. Y hoy, estábamos en el bar del puerto de Southampton, para presenciar desde lejos, la partida inaugural del legendario "Titanic", que llevaban meses anunciando, que sería el barco trasatlántico más imponente de la historia, ya que sería "inhundible"...para mí, eso no es más que pura publicidad, que la gente rica y engreída se cree todos los días. Yo, más bien vivo en la realidad de las cosas, sin esperar nada de nadie, viviendo el momento pase o no pase.
Anakin: - Y por cuarta ocasión, gano otra vez, mis amigos - dije mostrando mi juego limpio, mostrando un juego de diamantes y dos reyes, después Obi-Wan, me estaba ayudando a recoger el dinero de las apuestas...al menos con esto, nos alcanza para dos semanas completas.
Steven: - Alto, quiero la revancha, viejo - me dijo reclamándome por perder, pero yo no dejaba de observar el montón de dinero que estábamos guardando.
Anakin: - Oye, ni te molestes, ya no tienes ni con que apelar mi atención - dije confiado.
Steven: - Dos boletos de tercera clase, para entrar al Titanic, ¿no te llama la atención? - cuando lo mencionó y los mostró, me dio un ligero escalofríos tentativo, la única oportunidad de salir de este mundo clasista y de ser libres; pero vi que Obi-Wan, también estaba dudando.
Obi-Wan: - No te arriesgues, Anakin, es mucho lo que está pidiendo - intentó apelar a mi sentido de razón, pero cuando se me mete una idea a la cabeza, no hay nada que me haga cambiar de opinión; sobre todo, algo me decía que sería una aventura extraordinaria.
Anakin: - Discúlpenme un momento, mi amigo y yo, tenemos que hablar por un momento - dije poniéndome de pie y caminando un poco lejos de ellos - tranquilo, abuelo, tengo mis reservas y además, tengo el presentimiento de que vamos a ganar esta partida.
Obi-Wan: - Pero si te arriesgas y pierdes, nos vas a dejar sin nada y vamos a pasar hambre, hasta la próxima semana que vuelvas a jugar, porque Fernanda no va a estar en varios días, hasta que regrese de su viaje a América - sabía perfectamente lo que estaba en juego, pero sé cómo jugármelas bien con estos sin vergüenzas.
Anakin: - Descuida Obi-Wan, la suerte está de nuestro lado - dando un suspiro de darse por vencido, regresamos a la mesa, a jugar nuestra última vuelta - muy bien, ¿en qué nos quedamos?
Steven: - Los boletos del Titanic, contra todo, el ganador se queda con todo - dijo seguro de sí mismo, pero no veía su misma suerte. Pasaron diez minutos, en lo que discutíamos, hasta que finalmente en un último robo de cartas, logré obtener una flor imperial.
Anakin: - Muy bien, llegó el momento de la verdad, caballeros - en eso, llegó Fernanda.
Fernanda: - Hola chicos, ¿qué hacen? - dijo sonriendo, llegaba en su traje normal de gente de tercera clase, aunque los dos sabemos, que ella es de primera clase, pero a ella, jamás le han gustado seguir las reglas de sociedad, a lo que se la pasa divirtiéndose con nosotros.
Obi-Wan: - Fernanda - la saludamos con alegría y yo, más porque ahora no viajaría sola, para que no se aburra - pensé que ya estabas adentro del Titanic o ya cambiaste de opinión y decidiste quedarte con nosotros....después de que Anakin, nos haga perder todo lo que tenemos - dijo bromeando, lo que no se imaginan, es mi jugada secreta.
Fernanda: - Mis cosas, ya están en mi cuarto de primera clase - los dos contrincantes, se nos quedaron viendo confundidos - pero vine a despedirme, porque los estuve buscando como loca desde la mañana, hasta que cuando llegué aquí, fue que los vi por acá....y sin que nadie me viera, me colé para salir y buscarlos, además compré otro boleto de tercera clase, por si quitan la rampa para primera clase - yo reí emocionado y volví al juego - ¿ustedes que apostaron ahora? - Obi-Wan, le explicó brevemente y ella, se sorprendió cuando vio mi juego.
Anakin: - Ok, señores, en este momento, la vida de alguno de nosotros va a cambiar....¿Obi-Wan? - puso su juego boca abajo - ¿Nada? - negó con la cabeza - ¿Paul? - él tampoco - ¿Steven? - él sí, apostó un juego de pares - Oh, dos pares, nada mal.... - suspiré hondo, tratando de contener mi alegría - lo siento, Obi-Wan - su rostro se puso tenso y Fernanda, sonrió conmigo.
Obi-Wan: - Lo lamentas, ¿qué lamentas...el hecho de que nos dejaste.... - no pudo terminar, porque lo interrumpió Fernanda.
Fernanda: - Lamentamos, que tendrás que dejar esta basura de tierra, Obi-Wan, PORQUE LOS DOS SE VIENEN CONMIGO A AMÉRICA - gritó llena de alegría y Obi-Wan, no lo podía creer.
Anakin: - TENGO UNA FLOR IMPERIAL, NOS VAMOS A CASA MI AMIGO - los dos gritaron conmigo, empezando a guardar el dinero, pero Paul, me agarró de la camisa insultándome, pero Fernanda, le dio un buen puñetazo en la cara, tirándolo al suelo.
Fernanda: - ¿QUIÉN DIJO QUE LAS MUJERES NO SABEMOS PELEAR? - luego, vio el reloj y se espantó - Chicos, hay movernos ya, el Titanic, zarpa en diez minutos - parpadeando, recogimos todo y nos fuimos a toda velocidad - NO LO PUEDO CREER, FINALMENTE ALGO DE DIVERSIÓN EN ESTE BARCO, jajaja - dijo corriendo, a Obi-Wan le costaba trabajo correr a nuestro paso.
Anakin: - Adiós al mundo de las calles, viajaremos como de la realeza, Obi-Wan - dije emocionado - somos extraordinariamente afortunados....¡APRESÚRATE, abuelo! - grité sin sentido.
Obi-Wan: - ¡Anakin, estás loco de remate! - dijo riendo también.
Anakin: - Lo sé, pero ya tengo los boletos - llegamos justo, cuando empezaban a jalar la rampa al puerto.
Fernanda: - ¡ALTO, ALTO, SOMOS PASAJEROS! - gritó al correr a toda prisa, a lo que llegamos a tiempo los tres.
Oficial: - ¿Pasaron, por el registro de limpieza? - ella, giró los ojos por la idiosincrasia del asunto.
Fernanda: - Por supuesto que sí, todos estamos limpios y no tenemos piojos, además, los tres venimos de América - fue una mentira piadosa, para engañar a las autoridades, pero ¿a quién le importa?
Oficial: - De acuerdo, sus boletos por favor - se los dimos con gusto y saltamos al barco.
Fernanda: - ¡Qué fortuna, es que estén aquí! - dijo corriendo todavía.
Anakin: - Somos los hombres más afortunados del mundo, ¿¡lo sabías!? - reímos al llegar a los pasillos, al parar vi los boletos - Fer, vamos a buscar nuestro camarote.
Fernanda: - Ah, pues justo está al lado del mío - dijo recuperando el aliento.
Obi-Wan: - ¿Para qué compraste dos boletos, para el Titanic? - yo también estaba confundido.
Fernanda: - Porque el de primera clase, fue un regalo de mi hermano y de mi tío, quiénes, ya les había dicho que, me obligaron a tomar el viaje, para "cambiar mis actitudes" de primera clase - los tres reímos, al ir a nuestro cuarto más tranquilos - pero como eso no iba a pasar, entonces, decidí comprar mi boleto de tercera clase....ay, es que la vida de primera clase, es más aburrida que un día de estar sin hacer nada, no hay diversión de verdad....todos ponen su cara de amabilidad y buena gente - nos dijo haciendo sus gestos de fingir ser alguien de clase.
Anakin: - Sí, nos has platicado muchas veces, jeje, aquí es, hola, ¿qué tal? Soy Anakin....Anakin Skywalker y él, Obi-Wan Kenobi - sin darme cuenta, él se subió a la cama de arriba y los otros dos hombres, dijeron algo en italiano, que no alcancé a entender.
Fernanda: - Steven, scommettere i biglietti insieme al suo amico e perso la scommessa, signori - dijo dejándonos impresionados a todos, jamás pensé que hablara italiano.
Stefano: - Parlando italiano, perdere? - no sé qué se estaban diciendo, pero me pareció divertido.
Fernanda: - Naturalmente, parlo inglese, francese, spagnolo, italiano e tedesco - dijo sonriendo y nos volteó a ver con una cara de confusión - ¿qué, es que acaso una no puede aprender idiomas, para comunicarse con los demás? - ambos, nos quedamos con la boca abierta.
Stefano: - Un piacere, signorina, mi chiamo Stefano e il mio amico, ecco Dionisio - los dos, le besaron la mano.
Fernanda: - Il piacere è mio, Stefano, mi chiamo Fernanda Sánchez e i miei amici, sono stati già presentati a voi - le contestó tranquila como siempre - muchachos, él es Stefano - señaló al hombre delgado y fuerte, de la estatura de Obi-Wan - y él, es Dionicio - señaló al otro, que estaba sentado en la cama. Todos pasamos un buen rato, hasta que fue hora de comer y para dormir hasta el día siguiente; después de desayunar, Fernanda nos llevó a su suite, en primera clase.
Obi-Wan: - ¿Viste cómo todos se nos quedaban viendo? Parecemos, los muertos vivos del barco - los tres reímos con simpatía.
Fernanda: - Ay, déjalos, Obi-Wan, su mente es tan....pero tan sofisticada, que no les permite ver más allá de sus narices o de sus intereses - al llegar a su puerta, giró la llave y entramos, al ver todo lo que tenía, ambos nos quedamos con los ojos y la boca muy abiertas, hasta que sentimos que alguien nos cerró la boca - cierren la boca, caballeros que se les pueden meter las moscas - tragué inconscientemente - ¿qué les parece? - preguntó aburrida.
Anakin: - Pues para mí, que éste es tu segundo palacio, jamás en mi vida, había visto algo tan más lujoso, después de tu casa, claro está - Obi-Wan, seguía sin decir nada, parecía que había entrado en shock.
Fernanda: - Sí, pero tú sabes que no me gusta vivir de lujos....prefiero vivir mi vida al momento, sin tener que estar preocupándome de perderlo todo, bueno....no quiero decir que no hay que ser administrados, pero no concuerdo con las "ideologías de los lujos" de los de primera clase - dijo viendo sus partituras de violín.
Obi-Wan: - ¿Y cómo vas en tu estudio? - dijo saliendo de su trance.
Fernanda: - ¡Bien!....Vaya, hasta que alguien más me pregunta....aquí, pareciera que soy invisible para los demás, a menos de que te les cruces en el camino o que hagan espacio, dentro de sus miles de ocupaciones en su mente "osea nada", para que te saluden cordialmente - dijo sarcástica y ambos reímos, mientras ella, actuaba ser de la gente hipócrita de la primera clase - por esa razón, prefiero estar con ustedes - nos abrazó con ternura y diversión - regresando a la pregunta, estoy estudiando para presentar mi examen en una de las orquestas y universidades de Estados Unidos, de esa forma, podré sacar mi vida adelante, sin tener que depender de mis tíos.
https://youtu.be/FFUoHlWVhrA
Anakin: - Oigan, vamos a la proa, quiero ver el mar - dije entusiasmado.
Fernanda: - Sí, señor, nada más, déjame cambiarme, tengo que ir a comer con algunos de los dignatarios y con los creadores del barco - dijo girando sus ojos, pero era una forma diferente, porque no se veía tanta molestia en esta ocasión.
Obi-Wan: - Además de los creadores, ¿habrá otras personas ahí? - dijo mientras escogía su vestido.
Fernanda: - Es una familia de ricos, quebrados, que la mamá de las muchachas, está buscando casarlas con los tipos más nefastos de la galaxia, no sé quiénes son....pero me encontré a la mamá de ambas y me invitó a comer con ellas - cuando dice nefasto, es porque a ella, también le tocó ser elegida como la futura esposa, de un desgraciado que sólo buscaba su dinero y presumirla por ser bonita....pero cuando descubrió sus verdaderas intenciones, no dudó en sacarlo a patadas, a pesar de las quejas de sus tíos.
Obi-Wan: - De acuerdo, vamos antes de que tengas que ir de vuelta a la marcha fúnebre - dijo divertido y en sarcasmo.
Fernanda: - Ja...ja...ja, ¡qué gracioso, Kenobi! Ya quisieras estar en mi lugar - al llegar a la punta de la proa, volteamos a ver el mar, que se veía que ya había llegado a su punto máximo de velocidad - estamos a todo lo que da de la máquina - dijo seria, además de estudiar música, idiomas y muchas cosas, ha estudiado conmigo ingeniería en marina, a escondidas de su familia, pero sí la saca.
Anakin: - Si nos mantenemos así, podríamos llegar en menos del tiempo esperado a América - dije sonriendo, viendo a los delfines saltar.
Fernanda: - Sí, pero si se queda así y estamos cerca de un iceberg, no daría tiempo de frenar ni de dar la vuelta....en algún momento, me atreveré a hablar con el capitán, no me importa lo que me digan - los dos levantamos los hombros, pero después, disfrutamos de la vista.
Anakin: - ¡¡WHOAOHH!! ¡SOY EL REY DEL MUNDO! - los tres gritamos, para que nos escucharan hasta el Polo Norte, pero luego, Fernanda se tuvo que ir, ya iba tarde, como de costumbre.
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