Recuentos de una venganza: Los hermanos Hyuga
Definitivamente, todo se había acabado para ellos, Akatsuki los tenía, y no habría casi nada que hacer contra eso, con aquella escena de desamparado dolor e incontenible tristeza grabado en su retina, se sumergió en el latente abismo de la desesperanza.
El peli castaño mayor abrazó a su hija asegurándole que todo estaría bien, aunque resultara ser una de las tantas mentiras crueles, miró hacía las personas que los estaban observando pudo distinguir lo que se le llamaría como, un rostro conocido, ese hombre de tez morena y ojos verdes, aquel que poseía esas extrañas costuras que se movían como si tuviesen vida propia.
Hiashi: ¿Kakuzu?
Se atrevió a preguntar, el nombrado conectó su mirada con la de el sin siquiera cambiar su expresión.
- Por fin nos hemos reunido todos.
Habló alguien que emergia de entre los escombros, una vez que dejó ver su rostro este tenía unos ojos anillados de un tono violenta irregular, su cabello anaranjado enmarañado y carente de vida, la expresión facial neutral en su totalidad.
- A veces las jerarquías sociales obligan al mundo a ser injustos con algunos y caprichosos con otros, Konoha Corporation es un claro ejemplo de ello.
Pero todo eso se termina hoy, el país es lo que es por las decisiones que ustedes toman, el poder corrompe, el poder es demasiado para que lo manejen unos niños como ustedes, y los seres sobrenaturales no nacimos para servir a nadie, es por eso, que merecen morir como las ratas egocéntricas que son, mientras nosotros llevaremos a este país a un nuevo amanecer.
El peli plata apretó los puños y dio un paso al frente.
Kakashi: Tu debes ser el líder de Akatsuki...
Concluyó.
- Así es, mí nombre es Pain.
Se inclinó muy levemente para luego proceder a mirar a cierto enmascarado que se acercaba desde la lejanía.
- ¡Bien hecho, Pain, muy bien hecho! ¡Eres un muy buen chico!
Habló el recién llegado palaudiendo efucibamente.
- Gracias, ahora yo me encargo...
Éste miró a Kakashi, el cual ni se inmutó.
- Hola, Hatake Kakashi, ¿cómo está tu querida Shizune?
Rió a lo que el peli plata tensó la mandíbula y apretó los puños.
Kakashi: ¿Acaso eres tú el causante de toda ésta masacre?
Preguntó furioso.
- Pues, no, amigos míos ésto que ocurrió es su propia culpa, éste es el resultado de todas sus manipulaciones, todas sus redadas político-militar, éste es el resultado de su sed de poder.
Yo solo fui la persona encargada de potenciar ésta latente bomba de tiempo que terminó por explotarles en la cara.
Rió leve
- Ah, se me olvidaba, yo conozco mucho a cerca de ustedes, mucho más que ustedes mismos, sobre todo de ustedes, familia Hyuga.
Los tres oji perlas se agruparon protegiéndose unos a otros.
Hiashi: No sé de qué me hablas, yo jamás te había visto en mi vida.
Soltó firmemente protegiendo a su hija la cual respiraba de forma irregular.
- Yo sé la verdad, eso es algo que le has ocultado a tus hijos y lo sabes.
El peli castaño mayor abrió los ojos como platos.
- Ya sabes de qué hablo, de tus queridos hijitos...
Al terminar de hablar el peli plata arremetió en su contra con un Chidori en su mano derecha pero fue inmediatamente sometido por el enemigo al igual que Naruto, Sai y Kiba.
Shion: ¡KIBA-KUN!
Chilló a lo que los desagradables hilos de Kakuzu rodearon su cuello al igual que Ino, Gaara y Temari, los cuales pataleaban para zafarse, sin éxito.
Neji: ¡YA BASTA!
Bramó furioso apuntando con su arma a lo que el enmascarado apareció frente a él casi por arte de magia, le hizo una señal a Deidara que sonriendo enseñó a la joven de ojos perla que habían tenido capturada desde hace ya mucho tiempo.
Al notar el increíble parecido el Hyuga se quedó sin palabras al igual que Hinata y Hiashi.
Neji: ¿Quien es ella?
Soltó atónito.
Neji: ¿Porque tiene mis mismos ojos? ¿Porque su cabello es idéntico al mío? ¿Porque sus facciones son tan familiares?
Comenzó a retroceder conectando la mirada con su aún desconcertado padre.
Hinata: ¿Papá quién es ella?
Preguntó a lo que el mayor simplemente se quedó pasmado.
- Bueno, aquí es donde comienza la historia, hace muchos años atrás, existió un grupo de personas arrogantes que formaban parte de lo que se conocía como los nueve soportes, que eran los protegidos de Konoha Corporation, las nueve personas que se encargaban de custodiar y mediar lo ocurrido en el país.
Ya sea en el ámbito social, judicial, policial, etc.
Entre ellos estaban dos hermanos gemelos, Hiashi y Hizashi Hyuga, ambos presentaban el pilar judicial, unidos como uno solo, años después de que Shizune Kato y Tsunade Senju implementara la iniciativa "agentes" éstos tomaron la decisión de formar familia, Hiashi desposó a una bella y humilde joven de los barrios bajos concibiendo a una pequeña niña de ojos perla y cabello negro azulado.
Muy por el contrario, Hizashi se enamoró de su agente, la más peculiar y fuerte de su generación, la mujer que poseía los fieros ojos que todo lo podían ver, de su unión nació un varón al que llamaron Neji, dos años más tarde nacería quien sería su hermana menor, Hanabi.
Concluyó.
Hinata: Pero, eso, eso quiere decir que Neji y yo-
- Si, joven Hinata, el no es tu hermano, es tu primo, pero tranquila, esa es solo la guinda del pastel.
Sonrió siniestramente.
- Cuando nació la querida Hanabi, Hiashi asesinó a su hermano y a su familia.
El silencio reinó en el ambiente Neji no daba crédito a lo que estaba escuchando.
¿La niña frente a él de verdad era su hermana?
¿Acaso era verdad lo que el había dicho?
Rápidamente giró en busca de una respuesta, pero al conectar miradas con el hombre que siempre creyó conocer, éste no dió ninguna negativa.
Neji: Dime que no es cierto...
Masculló temblando de rabia.
Hiashi: Neji...
Hinata: ¿Padre, es eso cierto?
La chica comenzó a temblar como gelatina, sus ojos estaban abiertos de par en par.
Neji: Te lo voy a preguntar una vez, y quiero que me digas la verdad.
Apretó firmemente el arma en su mano y le apuntó al Hyuga mayor, la peli azul dejó escapar un grito ahogado.
Neji: ¿Es verdad, si o no?
Hiashi, agachó la mirada, esos ojos que siempre mostraron determinación y seguridad ahora rehuían los del joven y furioso adolescente.
Neji: ¡RESPÓNDEME!
Bramó furioso.
Hinata: Hermano por favor...
Pidió cruzándose entre ambos, a lo que el rubio Uzumaki sintió una punzada en su pecho al ver que la chica corría peligro.
Neji: ¡NO ME LLAMES HERMANO! ¡TU Y YO NO SOMOS NADA! ¡QUÍTATE!
Gritó quitándole el seguro dispuesto a disparar, a lo que el agente de la Hyuga sintió como la adrenalina recorría cada fibra de su ser, sus ojos zafiro cambiaron a unos atemorizantes orbes rojizos, sus uñas crecieron hasta convertirse en unas peligrosas garras, un gruñido emergió desde lo más profundo de su garganta, un movimiento y se zafó para ir a atacar sin piedad a la persona que le haría daño a su ama, lo desmembraría vivo, algo dentro de su mente se quebró, solo quería matar a cualquiera que se atreviera a siquiera tocarla.
El sonido del disparo se perdió en el aire, la Hyuga cerró los ojos con fuerza, pensando que sería su fin, más al abrirlos estaba siendo abrazada por su agente que parecía una bestia furiosa, éste mismo había detenido la bala sosteniendo el cañón del arma con su mano, iba a propinarle un zarpazo al Hyuga pero su muñeca fue sostenida por la peli castaña de ojos chocolate, agente de Neji, ésta misma lo miró furiosa.
Tenten: ¿Que demonios crees que estás haciendo, Naruto?
El rubio abrió los ojos como platos.
Naruto: Tenten....
Al solo pronunciar su nombre su aspecto bestial comenzó a desaparecer, sus garras y dientes afilados volvieron a la normalidad, aflojó el agarre de su custodiada la cual aún temblaba de miedo.
Tenten: ¿Acaso permitirás que Kurama tome el control de ti una vez más?
Y de pronto volteó a ver a su custodiado.
Tenten: ¿Y usted, porque le apuntaba a Hinata-sama?
El peli castaño tensó la mandíbula.
Neji: Ella se interpuso.
Fue su contestación.
Naruto: El quería dispararle a Hinata-sama...
Se justificó el rubio.
- ¿Neji Hyuga, vas a seguir permitiendo que la persona que asesinó a tu madre y a tu padre siga respirando?¿Vas a perdonar a la escoria que te ha mentido todos éstos años?
Los pensamientos y los sentimientos negativos lo invadieron como olas furiosas, algunas conjeturas tenían más sentido que otras, pero un solo sentimiento lo dominó por completo, era la ira.
Neji: Tenten...
La agente centró su atención en su custodiado.
Neji: Te ordeno, que asesines a Hiashi Hyuga.
La chica abrió los ojos como platos, el ambiente se volvió frío y distante, conocía al Hyuga hace no más de días, pero en ese corto periodo de tiempo no había visto esa expresión en su rostro.
Hinata: No, por favor, Neji, no lo hagas...
Sollozó tragándose las lágrimas.
Neji: ¿Me obedecerás?
Preguntó a lo que la peli castaña tensó la mandíbula, miró a lo lejos los cuerpos inertes de Sakura, Matsuri y, su amigo Shikamaru, no podía, lamentablemente no podía ni debía negarse, todo están saliendo como debía salir, tragó en seco y respiró con tranquilidad.
Tenten: Si, Neji-sama...
Fue su contestación a lo que hizo una reverencia volteando a ver al rubio que no daba crédito a lo que había oído.
Hinata: Tenten, no, por favor, no lo hagas, es mí padre, por favor.
Lloraba sin control mientras era sostenida y contenida por el rubio.
Naruto: Tenten, no quieres hacer ésto, por favor, no lo hagas, te lo ruego...
La peli castaña tenía esa mirada que había dejado en el olvido, esa mirada que el rubio conocía muy bien, la mirada de la asesina que fue en un pasado no muy lejano.
Tenten: Lo siento, pero es lo que soy, es lo que hemos decidido ser...
La Hyuga tragó en seco.
Hinata: Pues, yo no permitiré que maten a mí padre, es la única familia que me queda, no tengo nada más.
Se secó las lágrimas y dió un pasó al frente sosteniendo una mirada tan fría como la de su primo.
Hinata: Naruto, mata a Tenten, y no permitas que me haga daño, a mí o a mí padre.
El rubio se quedó en blanco, por un segundo todo su mundo dió vueltas.
Naruto: ¿Que?
Soltó con incredulidad.
Hinata: ¿Que, acaso estás sordo?
Preguntó con frialdad.
Hinata: Mata a Tenten, es una orden.
La peli castaña sacó una kunai y arremetió en contra del Hyuga mayor a lo que el rubio se interpuso por acto reflejo.
Naruto: Por favor, Hinata-sama, no me haga hacer ésto...
Pidió con su voz quebrada.
Hinata: Naruto, tus órdenes fueron dadas...
Fue su contestación.
Neji: Las tuyas también Tenten...
Imitó lo dicho viendo a ambos agentes atacando y bloqueando ataques, la peli castaña denotaba determinación en su mirada, mientras que en la del rubio había miedo y desconcierto.
Naruto: Tenten, por favor, para.
Rogó.
Tenten: Lo siento, pero no lo haré, uno de nosotros deberá morir, por nuestro honor, y el de la persona a la que elegimos servir, hoy y siempre.
Continuará....
_______________________________________
Hola
Aquí otro capítulo, se viene súper feo.
Pobre Naruto
Pobre Tenten
Ambos pelearán.
¿Quien ganará?
Hasta próximo capítulo
Lo quiere y aprecia
Linaly Rose
❣️
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top