Soy consciente de lo difícil que debe de ser para Josh hablar sobre el tema porque de tan solo escucharlo, ya lo encuentro todo tan complicado, doloroso y puedo ver que, a él, aunque intente ocultarlo, el recuerdo de la situación le duele.

Pero ¿cómo no va a dolerte que te rompan el corazón?

Nadie se salva de que alguna vez le rompan el corazón.

Pongo mi mano sobre la suya con la intención de darle un poco de consuelo, el gesto lo toma desprevenido y oprime una mueca cuando aprieta los labios con fuerza, nuestras miradas se encuentran e intento sonreírle.

─Eres un buen hombre, ¿lo sabes? ─Siento la necesidad de preguntarle, porque sí, aun entre esa capa dura y difícil de romper que siempre lleva puesto no me queda duda de que es un buen hombre.

─Y tu una mujer maravillosa ─dice con una sonrisa diminuta en la boca─. Aunque eso ya deberías de saberlo.

─En serio lamento lo que sucedió entre Lucy y tú ─insisto en el tema, no es que quiera hacerlo recordar los malos momentos, pero sí que me deja pensando un poco y no puedo evitar sentir un poco de lastima por él y por lo que Lucy hizo, en especial cuando soy consciente de que Muriel se empeña en hacerle la vida imposible en el pueblo.

─Lucy es parte de mi pasado y se quedará allí ─dice y niega─. No tienes por qué disculparte por algo en lo que no eres culpable.

─Lo sé, es solo que... ─aprieto los labios sin saber si decirle lo que pasa por mi mente o no. Al final, me termino encogiendo de hombros y se lo digo─. Es difícil de comprender para mí. Es que, me pareces un buen hombre, la clase de hombres con los que rara vez me encuentro en la ciudad, ¿sabes?

No es como que Josh tenga una idea de como es mi vida en la ciudad pero creo que ya he dejado en claro en ocasiones anteriores que mi vida allí es bastante diferente que aquí, demasiado superficial, en realidad, desde que he comenzado a adaptarme a Faxon Hills, estoy considerando que mi vida aquí es mucho mejor que la que llevaba junto a mi familia, amigos, conocidos, en realidad con todo el que me topara en la ciudad y me he dado cuenta de que en realidad, aunque siempre he estado rodeada de cientos de personas y me han hecho sentir en muchas ocasiones que yo soy el centro de atención, sé que siempre es por una razón, un favor a cambio que yo pueda hacerles, todos buscan sus beneficios y mentiría si digo que yo nunca lo he hecho antes pero alejada de todos me doy cuenta de que a las personas que creía importarles en realidad nunca les he importado. Ni siquiera se han molestado en hablarme, buscarme.

Josh me regala una sonrisa genuina, sincera, una de esas que estoy segura que no suele regalarle a nadie y es suficiente para que mi corazón se acelere, él se inclina hacía mí y me pasa una mano entre mi cabello para darme un ligero tirón hacía él y unir sus labios con los míos.

El beso comienza siendo lento, suave, un poco tierno y cuando su lengua entra en mi boca, es cuestión de segundos para que nuestro beso pierda toda calidez y ternura.

No importa cuantas veces y como me bese este hombre siempre consigue encender mi cuerpo en una milésima de segundos pues la atracción que siento por él es demasiado grande.

Lo tomo por el cuello de su camisa, intentando probar más de él, un gruñido se escapa de su parte cuando doy un ligero tirón a su labio inferior pero no me parece la clase de gruñido que suelta a veces, ese que indica que esta enfadado, con su mano libre, Josh me coloca la mano mi cintura y me da un ligero empujoncito hacia él, para atraer mi cuerpo al suyo, me termino sentando a horcajadas sobre su regazo, nuestro beso deja de ser lento para volverse más hambriento, sus labios comienzan a dejar besos cortos por mi mandíbula y mi cuello, ladeo la cabeza para darle un mejor acceso a este, la mano que esta en mi cintura comienza a acariciarme de arriba abajo sobre la tela de mi ropa y me dejo llevar por la sensación agradable que se está produciendo en mi cuerpo, su otra mano suelta mi cabello para hacer lo mismo que la otra y pronto, tengo ambas manos acariciándome los costados de mi cuerpo, mi espalda, abdomen y Josh no tarda mucho a meter una mano dentro de mi blusa.

De nuevo gruñe y deja de besarme.

─No tienes sostén ─dice al acariciarme, por unos segundos detiene sus manos y voltea a verme─. Dime, ¿has estado todo el día así en el trabajo?

Asiento mordiéndome el labio.

─No he tenido ganas de usar uno.

─Dios, quieres matarme, ¿no es así? ─dice en un tono que me hace sonreír pero la sonrisa desaparece cuando me da un ligero tirón a mi pezón, ambos se me ponen erectos y un suspiro se me escapa cuando Josh mete su otra mano dentro de mi blusa y tira de mi otro pezón, la sensación es agradable─. Con las faldas pegadas que usas y saber que no siempre te gusta llevar brasier al trabajo será mi perdición.

─¿Ah sí? ─Me inclino un poquito hacia él, enarcando la ceja, Josh echa su cabeza hacia atrás, en modo de rendición.

─Si algún día quieres hacerme perder en algo, ya sabrás que saber que andas merodeándote así en la constructora me volverá loco.

Comienza a masajearme ambos pechos con las manos y cierro los ojos, dejándome llevar por la calidez de sus manos en ellos.

─Mmm... ─murmuro.

Por suerte, Josh no me hace esperar mucho, me levanta la blusa lo suficiente como para dejar mis senos al descubierto, retira sus manos para contemplarlos, la forma en que los mira, mira mi cuerpo me hace sentir deseada, como si realmente fuera lo que tanto estuviera esperando.

De nuevo, los aprisiona con sus manos e inclina su boca para llevarse uno de ellos a la boca, su lengua, tibia sobre mi piel eriza mis vellos y cierro los ojos mientras lame con delicadeza y succiona mi pezón, le da un tirón suave con los dientes que me hace gemir y se retira lentamente para pasar a mi otro seno y repetir el proceso.

Comienzo a moverme sobre él en cuanto siento su erección en sus pantalones, Josh gruñe. Sus manos me acarician el abdomen y se detienen allí por un momento, estoy considerando que ha sido una mala idea no ponerme alguna falda que le diera un acceso más rápido a mí, sin embargo, Josh mantiene sus manos allí y me observa con detenimiento como me muevo sobre él, poco a poco la fricción va aumentando entre los dos y siento su erección crecer más.

No espera más tiempo, me desabotona el pantalón y mete su mano dentro de este, acariciando la tela de mis calzones.

─Estás húmeda ─se apresura a decirme.

─Lo sé ─susurro en voz baja para él, Josh no retira su mano, continua observándome meterme una y otra vez sobre él, hasta que pronto comienza a acariciarme, se las ingenia para meter su mano dentro de mi ropa interior y comenzar a hacer círculos pequeños sobre mi clítoris, un gemido se me escapa y cierro los ojos, sus movimientos son lentos pero placenteros, Josh se inclina al frente y me besa el cuello, los hombros con delicadeza, aun no me ha sacado la blusa que llevo puesta y no se molesta en hacerlo.

Aunque siento la necesidad de desnudarme para él, me agrada la idea de que se encargue de mi a su tiempo, sabe que está provocándome.

─Josh ─gimo su nombre cuando el placer comienza a crecer en mí y su mano deja de hacer círculos para introducirse más adentro, me acaricia de arriba abajo una y otra vez mientras muevo mis caderas y mi humedad crece, me inclino hacia él para besarlo y acepta mis labios con gusto.

─Te ves tan hermosa moviéndote ─murmura con una voz ronca que me anima a continuar con mis movimientos, de nuevo, su pulgar juega con mi clítoris, mis movimientos se vuelven más rápidos.

─Josh... ─vuelvo a murmurar su nombre mientras me muevo, comienzo a girar mis caderas en círculos que aumentan poco a poco mi placer, me muerdo el labio inferior cuando un gemido se me escapa.

─Continúa moviéndote así, quiero ver como te mueves preciosa ─comienza a decirme, cierro mis ojos y hago lo que me dice, Josh decide introducir un dedo en mi y gimo de placer, mis movimientos cada vez se vuelven más rápidos y mantengo el ritmo─. No retirare mi mano de ti ─continúa diciendo mientras mete otro dedo dentro y comienza a meterlo y sacarlo una y otra vez jugando conmigo, aumentando mi placer─. Quiero que continues así hasta que te corras en mi mano.

Hago lo que me dice, continúo moviéndome a mi ritmo, hasta conseguir aumentar el placer, Josh me observa con deseo y me va alabando con cada movimiento, y que me diga cosas como que lo hago bien, que le gusta como me siento, solo consigue aumentar mi placer.

─Estoy cerca ─le digo en un gemido, aumento el ritmo y Josh también lo hace con sus dedos, no tardo mucho en correrme, cuando lo hago, un gemido alto sale de mí y me inclino hacia él, escondiendo mi rostro en su cuello mientras intento controlar mi respiración, la mano de Josh sale dentro de mi ropa y me separo de él un poco para mirarlo aun con mi respiración entre cortada.

Observo la mano de Josh cuando la acerca, esta húmeda por culpa de mis fluidos y este se lleva los dedos a la boca para lamerlos un poco, el gesto es de algún modo seductor, parece disfrutar del sabor, no rompe el contacto visual cuando me pone la mano en los labios haciendo que los separe e introduce su mano en mi boca, pidiéndome que los chupe. Lo hago, y un gruñido sale de él cuando saca sus dedos de mi boca lentamente.

─¿Te he dicho que eres la mujer más arrebatadoramente sexy que he conocido en mi vida?

Me pregunta y no puedo evitar sonreírle e inclinarme para besarle, Josh acepta mi boca, esta vez, enredo mis manos sobre su cuello, deseando profundizar el beso.

─deberíamos de continuar esto en mi habitación ─sugiero y un gruñido se escapa de él.

─No es una mala idea ─dice y una sonrisa se esboza en mis labios, le acaricio el pecho con ambas manos, profundizando nuestro beso, pero este se ve interrumpido cuando su celular suena.

─No contestes.

Digo entre el beso.

─No pienso hacerlo.

Me asegura y deja que la llamada se vaya a buzón, pero de nuevo, una segunda llamada entra y después una tercera que termina matando cualquier emoción a nuestro alrededor. Con algo de frustración, Josh se saca el celular del bolsillo de sus pantalones.

─Es Dean ─me dice al leer el nombre del contacto.

─¿A está hora? ─Enarco una ceja y Josh frunce el ceño. Estoy segura de que Dean no suele llamarle tan tarde al menos que sea importante.

La llamada se corta y después entra otra llamada que está vez si responde.

Con una mueca, me bajo de su regazo para darle espacio al responder la llamada, solo alcanzo a escuchar la voz angustiada de Dean como para saber que algo ha pasado, Josh se levanta de inmediato del sofá y me quedo allí observando como se aparta de mí.

No escucho lo que Dean le dice, pero tiene a Josh asintiendo y soltando un par de maldiciones, lo que me confirma que algo no está bien. Cuando cuelga la llamada se dirige hacia mí.

─Lo siento, pero tengo que irme, es sobre la constructora.

─¿Qué sucede? ─Pregunto y él niega de inmediato.

─Te lo contaré más tarde, pero debo irme ahora ─pone una mueca en los labios y se acerca a mí─. Continuaremos esto después, preciosa.

Aunque Josh no parece conforme con la idea de irse y a mi tampoco me agrada que se vaya, no digo nada solo me quedo allí en el sofá, hasta que se marcha y me quedo sola en la comodidad de mi hogar. Me recuesto un rato en el sofá intentando aclarar mis pensamientos, los cuales giran en torno a Josh y lo mucho que me gusta, una sonrisa se dibuja en mis labios por lo sorprendente que puede ser y después de un tiempo, decido irme a dormir. Definitivamente me aseguraré de que terminemos lo que comenzamos, me digo a mi misma.

*****

¡El capítulo 35 ya está aquí! ¡Hola!

No queria quedarme sin traerles un nuevo capítulo de Amor en construcción, había estado ocupada y no tenía mucho tiempo de escribir porque también había estado enferma pero aquí ando de nuevo con las actualizaciones. Además, ya terminé de escribir Dulce Corona y espero poder terminar de escribir Amor en construccion pronto, aunque aun le falta a esta historia un par de cosas más!

Como sea, espero que hayan disfrutado de este capítulo, ¿Qué creen que pasó con Josh? ¿Qué habrá sido esto tan importante que Dean le diria al telefono?

Muchas gracias por leer<3