Capítulo 26
Continuamos con los besos en el interior de la casa y las cosas parecen intensificarse entre los dos a medida que avanzamos hacia mi habitación, pero al llegar a ella, parece que toda chispa se apaga cuando encendemos las luces.
Olvidé decirle que aún no tengo cama.
Un gruñido sale de él al darse cuenta de ello.
─¿Aun duermes en un colchón inflable?
Pregunta enarcando las cejas.
─Sí ─respondo con un poco de pena. Sé que no tiene nada de malo, pero considerando el momento entre los dos, probablemente sí que sea malo porque el colchón inflable de algún modo mata el momento entre los dos, además, no creo que sea tan cómodo hacerlo allí.
Josh se aclara la garganta y toma una pequeña distancia entre los dos y se ajusta un poco sus pantalones para poder ocultar un poco ─y digo solo un poco─, su erección.
─¿Por qué no me lo dijiste antes?
Exige y frunzo el ceño.
─No creí que eso era importante ─y la verdad, no creo que lo sea, al fin y al cabo, soy la única persona que vive en esta casa.
─Sí que lo es ─dice y se aleja lo suficiente como para ir a tocar el colchón inflable y aplastarlo un poco al tocarlo, da la impresión de que va a deshacerlo─. Son detestables a la hora de dormir en ellos, necesitas una cama.
─Bueno, no he visto que vendan camas por aquí, tengo que ir a la ciudad a tener una y tampoco tengo auto ─pongo una sonrisa un poco irritada. No me gusta que me echen en cara las cosas, mucho menos este tipo de cosas porque me hacen sentir un poco insegura.
Un bufido sale de él.
─Te construiré una yo mismo ─dice y tengo que parpadear un par de veces, ¿acaso he escuchado bien? ¿va a construirme una él mismo?
─¿Qué?
Josh da un pequeño asentimiento y se aleja de la cama para acercarse a mí y tomarme de las caderas, me gusta tenerlo cerca.
─Que te construiré yo una. Tenemos suficiente madera en el trabajo como para hacer una, yo me encargaré del resto.
─Vaya...
Murmuro algo aturdida de lo que acaba de decirme.
¿Va a construirme una cama?
Mi corazón se dispone a latir con mayor fuerza cuando lo pienso.
Nunca nadie me ha construido una cama, en realidad, nunca me han construido algo y aquí tengo a Josh delante de mí diciendo que va a construirme una cama.
¿Cómo no puedo evitar sentir algo por este hombre si suele decir esas cosas?
Por supuesto, algo más que una atracción. Josh es... increíble.
─Será lo primero que haremos mañana, traeré los chicos para que me ayuden a reparar otras cosas de por aquí.
─No sé qué decirte al respecto.
Y en verdad no lo sé, termino envolviendo mis brazos alrededor de su cuello para atraerlo a mí y darle un beso en la boca. Josh responde al beso de inmediato y sus manos recorren mi cuerpo mientras me atrae más a él para profundizar nuestro beso, segundos después nos separamos un poco.
─Busca un par de ropa para mañana, te llevaré a casa conmigo.
─¿Qué?
Pregunto incrédula y él responde al instante.
─Puedes quedarte en mi cama, estoy seguro de que te vendrá bien dormir en una, vamos. Te daré algo de tiempo para que busques tus cosas.
Su petición es más como una orden, ese tono autoritario que suele usar con sus empleados cuando nos dice qué es lo que tenemos que hacer y no sé si me gusta que lo use en mí fuera del trabajo, pero la idea de dormir en una cama suena tentadora, aun así, niego.
─No creo que...
─Savannah, no voy a aceptar un no por respuesta ─ni siquiera me deja terminar─. Te espero en el auto.
Vuelve a decir antes de darme un rápido beso en los labios y alejarse de mí para salir de la habitación. Me quedo contemplando mi habitación, pero, aun así, busco algo de ropa y lo necesario para pasar la noche en su casa.
***
No es como que no he estado en la casa de Josh antes y que los dos no hemos tenido sexo en su casa, los recuerdos vienen a mi en cuanto entro, es una pena que no hayamos podido llegar a más en mi casa aun cuando él había dejado en claro su deseo por mí.
─¿Dónde dormirás tú? ─Le pregunto mientras nos dirigimos a la cocina, donde Josh se sirve un vaso de agua y toma otro para servirme.
─Tengo una habitación extra.
─Oh.
Respondo, no me sorprende que la tenga, su casa es algo grande y parece estar lo bastante ordenada y amueblada, aunque le hace falta ese toque femenino entre sus decoraciones. Demasiado rustico y tosco.
No hablamos mucho, en realidad, Josh me lleva a la habitación de invitados y me dispongo a instalarme en ella, la verdad, tengo que confesar que en cuanto me siento sobre la cama un gemido se me escapa, es demasiado placentera que no veo la hora de quedarme dormida en ella.
Ha pasado bastante tiempo desde que dormí en una buena cama, definitivamente y por suerte, no tardo mucho en quedarme dormida en cuanto tengo oportunidad de relajarme.
***
A la mañana siguiente, aunque me despierto temprano, prefiero quedarme acostada en la cama un tiempo más de lo normal porque mi cuerpo está tan relajado que podría quedarme allí acostada por el resto del día si no supiera que tengo que ir a trabajar y no he dormido en mi casa.
Al recordar esto último, me levanto dispuesta a salir de la habitación en busca de un poco de agua y en cuanto abro la puerta el olor a tocino me invade, lo que asumo que Josh debe estar preparando el desayuno.
Bajo las escaleras con los pies descalzos sin importarme qué tan helado está el suelo, me adentro en la cocina y le regalo una sonrisa a Josh cuando este me mira.
─Buenos días.
Soy la primera en saludarlo. Josh está con la espátula en mano, sin playera, unos pantalones de grises de tela cómoda y tengo que decir que me roba la respiración verlo de ese modo.
La escena es bastante sexy.
Todo él es sexy.
─Buenos días.
Responde de vuelta y se concentra de nuevo en freír el tocino.
─¿Necesitas ayuda? ─Le pregunto lo que hace ganarme una mirada en su dirección den nuevo, no dice nada. Solo se limita a sacar el tocino del sartén y apagarlo después para prestarme toda la atención que le es posible.
Y cuando digo toda la atención, se que realmente llamo toda su atención porque su mirada recorre todo mi cuerpo y se detienen por un tiempo prolongado en mis piernas desnudas.
Llevo puesta una playera simple que me llega a cubrir un poquito los muslos, me sonrojo porque no pensé sobre como voy vestido antes de salir de la habitación. Debí cambiarme.
─Estoy bien, gracias. ─Es su respuesta─. Hay un poco de café si gustas, ya casi está el desayuno.
Menciona y asiento con la cabeza antes de tomar una taza y servirme un poco de café, lo que me hace pensar que a Josh no le gusta el café, seguro lo ha preparado por mí porque no suele tomar café.
Cuando me acercó de nuevo a la barra y recargo mi espalda en esta, oculto mi sonrisa al tomar un trago del café, que por cierto está tibio y agradezco que lo esté porque evito quemarme la lengua.
Josh se voltea a verme, dejando de cocinar, me sostiene la mirada por unos segundos que se sienten eternos y después habla.
─¿Cómo dormiste?
─Dormí bien, bastante bien.
Confieso, hacía tanto que no dormía en una cama que ya lo extrañaba. Me alegro de haber aceptado venir a dormir a la casa de Josh.
Él asiente ligeramente y se acerca un poco a mí, bajo la taza de café de mis labios no sin antes tomarle otro pequeño trago y me lamo los labios cuando veo a los suyos. Su mirada es tan intensa que siento que se me corta la respiración.
─¿Sueles dormir así en casa?
Pregunta con las cejas elevadas y aprieto los labios en mi intento de ocultar mi sonrisa, así que ha estado pensando eso, ¿eh?
─La mayoría del tiempo, sí.
Respondo con sinceridad, no tiene caso mentirle.
─¿Y tú? ¿Sueles merodearte así sin camisa por tu casa?
Por supuesto que no iba a quedarme con las ganas de preguntarle, es una vista espectacular.
─Vivo solo así que no tengo un problema por andar así por mi casa.
─Tampoco yo.
Digo y vuelvo a tomar otro trago de café sin apartar la mirada de la de Josh, justo cuando vuelvo a bajar la taza Josh decide acercarse a mí, me quita la taza de las manos colocándola a un lado, después una de sus manos se coloca en mi espalda baja, atrayéndome a él mientras que otra mano se enreda entre mi cabello y tira de mí para unir su boca con la mía.
El sabor a café de mi boca se mezcla con el suyo y un pequeño gruñido de desaprobación se le escapa, cosa que me hace reír.
─Detestas el café.
Le echo en cara y él gruñe de nuevo antes de darme otro beso.
─Lo sé, por eso pienso borrar ese sabor de tu boca.
Una sonrisa se forma en mí cuando suelta aquello y volvemos a besarnos, le acaricio el abdomen y detengo mis manos en su pecho, cerca de su corazón y puedo sentir que este late con fuerza al igual que el mío, juego con su cabello cuando envuelvo mis manos sobre su cuello, Josh le da un apretón mi trasero y me levanta para colocarme sobre la barra de la cocina, me separa las piernas y se coloca entre medio de ellas, no me importa que el granito de esta se sienta frio entre mi piel desnuda, pues la blusa se me ha levantado, dejándole ver mis bragas negras.
La piel se me eriza cuando sus manos recorren mis muslos, los acaricia con suavidad encendiendo cada vez mi cuerpo, me apego más a él deseando tocarlo, sentir su cuerpo muy cerca del mío, le acaricio el abdomen de nuevo con una mano libre mientras él continua besándome y rompe nuestro beso para comenzar a besar mi cuello, ladeo la cabeza dejándome llevar por sus labios sobre mi piel.
Josh muerde una parte sensible de mi cuello que me hace soltar un gemido.
─Josh...
No responde, continua besándome la parte en donde acaba de morderme y cierro los ojos, la respiración se me acelera un poco cuando siento que una de sus manos deja de acariciarme uno de los muslos y sube por mi abdomen, hasta llegar a uno de mis senos, tengo los pezones erectos y Josh le da un pequeño tirón, haciéndome gemir de nuevo, lo masajea un poco y yo solo quiero sentir su boca sobre este, sin embargo no lo hace, solo continua masajeándolo un poco hasta que vuelve a dar otro tirón de mi pezón y me vuelve a hacer gemir.
Esta duro, puedo notarlo y sentirlo cuando envuelvo mis piernas sobre sus caderas y comienzo a frotarme sobre él, deseando que no hubiera ninguna ropa de por medio, un gruñido se escapa de él al sentir la fricción entre los dos y me permito deslizar mi mano dentro de sus pantalones, lo acaricio por encima de la tela de su bóxer y no me resisto más a meter la mano dentro de ellos y sentirlo entre mis manos, tibio, grueso, duro.
Comienzo por acariciarlo de arriba abajo, de nuevo, su mano acaricia mi pecho, pero termina sacándola a la vez que un gruñido sale de él cuando mis movimientos se vuelven más rápidos. Su rostro se oculta en mi cuello.
─Savannah...
Su voz es ronca, demasiado ronca.
─Me detendré solo si tu me lo pides ─murmuro y un gruñido que parece más como un gemido sale de él, me besa la boca, pero es un beso demasiado fugaz para nuestro gusto.
─Lo mismo haré yo ─murmura alzándome un poco la blusa que llevo puesta, acaricia la tela de mi ropa interior─. Estás húmeda.
Menciona acariciándome, sobre la tela, pero no le toma mucho tiempo hacerla a un lado y dejarme al descubierto, su mano comienza a acariciarme también lentamente, sus movimientos van de arriba abajo y decide meterme uno de sus dedos, gimo en cuanto lo siento, Josh mete otro dedo en mi y comienza a sacarlo y meterlo una y otra vez mientras que con su pulgar acaricia mi clítoris, aumentando mi placer.
Cierro los ojos dejándome llevar y echo la cabeza hacia atrás cuando vuelvo a sentir sus labios sobre mi cuello, nuestros movimientos se vuelven más intensos, más rápidos y pronto los dos estamos cerca.
─Voy a correrme ─le informo con la respiración entrecortada, mis palabras apenas se sienten.
─También estoy cerca.
Y juntos llegamos a nuestro limite, oculto mi rostro en su cuello, sus dedos salen de mí y a la vez que mi mano abandona su cuerpo, antes de que pueda besarlo, Josh se lleva los dedos a la boca para limpiarlos, probando mi sabor y seguido de eso se inclina para besarme, es un beso lento, que aun sirve para provocarme. No hay forma en que yo no pueda desear más de él. Lo necesito dentro, pienso.
De pronto los dos escuchamos ruido en la puerta principal cuando alguien la toca y grita.
─¡Jefe! ¡¿Estás allí?! ─La voz de Dean en el exterior, haciéndonos a los dos compartir una mirada aterradora.
Josh maldice por lo bajo y yo solo pienso en que quiero echar a correr y ocultarme, lo último que quiero es que Dean o cualquier otra persona me encuentre aquí, en un estado bastante vulnerable.
─¿Jefe, puedo pasar? ¿estás ahí? ─Dean insiste desde el otro lado de la puerta─. ¿Josh?
─He dejado solo la mosquitera cerrada.
Me cuenta y me siento tonta por no darme cuenta de que tenía la puerta abierta, si solo tiene la mosquitera cerrada, quiere decir que cualquiera puede ver al interior de la casa, pero la cocina está lejos y no hay una vista hacia ella.
─¿Qué..?
─Shh... ─dice robándome un beso─. No digas nada, yo lo arreglaré, quédate aquí.
Dice y asiento frenéticamente, me quedo allí como lo pide y lo observo apartarse para ir a la entrada donde Dean está esperándolo, afortunadamente, puedo escuchar su conversación.
─¿Qué estás haciendo aquí?
─Estaba preocupado ─escucho a Dean responder a la pregunta de Josh─. Son casi las nueve de la mañana, jamás llegas tarde al trabajo, ¿Por qué no estás vestido?
Al parecer Josh no se ha molestado en abrirle, Dean sigue conversando desde afuera.
─Estaba desayunando.
─¿A esta hora?
¿En verdad tiene que cuestionarlo todo? Quiero decir, entiendo que no sea algo normal en Josh, siempre es muy puntual en su trabajo, pero Dean definitivamente vino en un mal momento.
Creo que escucho murmurar a Josh algo que hace que Dean se vaya, aunque no consigo escuchar qué pero minutos después, él aparece de nuevo en la cocina.
─¿Está todo bien?
─Sí, ya se ha ido ─responde acercándose a mí─. Al parecer, llegaremos tarde al trabajo.
Me dice y yo me muerdo el labio.
─¿Tendremos problemas por eso?
Él ríe a secas.
─Te recuerdo que soy el jefe.
Elevo las cejas.
─Pero siempre llegas primero, además, nadie tiene llaves además de ti.
─Dean las tiene ─me recuerda─. Le he dicho que se encargue del trabajo en lo que yo llego. Nos arreglaremos y después desayunaremos antes de irnos.
Me dice y se acerca a mí para darme un último beso en los labios, es suave y tierno, después me ayuda a bajarme de la barra y hacer lo que ha dicho, por supuesto, me deja tomarme una ducha primero en el único baño de su casa y después de que estoy lista, él toma una para luego tomar el desayuno juntos.
***
Esta capítulo ha estado diferente... Y luego Josh dice que no quiere nada serio con Savannah jajaja
¿Cómo han estado? Espero que hayan disfrutado del capítulo! Me había demorado pero es que las escenas de este tipo me cuesta escribirlas que no estaba segura de si escribir un capítulo como este o no, al final creo que estoy bien con como resulto el capítulo y espero que a ustedes les haya gustado ❤️
Pregunta: ¿Quién encontró tierno que Josh le quiera construir una cama? yo lo encontré un poquito romantico ❤️
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top