Capítulo 6

Siento unas sabanas suave con un olor diferente al de siempre, abro mis ojos y la habitación es diferente, no es la mía, me siento en la cama muy rápido, creo que me estoy poniendo loca, donde estoy santo Dios. Abro la puerta de la habitación y observo en el pasillo una foto del padre de Marcelo, no puedo creer amanecí aquí, que rayos pasó, me sostengo la cabeza que me duele y mas aun al ver donde amanecí.

-Buenos días señorita, le he traído un desayuno especial, ¿Cómo se siente hoy, esta mejor?

-¿Mejor?, ¿Yo tenía algo ayer?,¿me puede decir que me pasó?.

-Realmente no sé muy bien, pero el señor Marcelo dijo que subía en cuanto usted se sienta mejor para hablar, espérelo.

-Claro que no, tengo que ir a casa, gracias por el desayuno, me abajo para poner mis zapatillas - Por favor dígale que cuando me sienta mejor, necesito que me hable, pero antes de terminar de hablar y ya Marcelo esta en la habitación.

-Lo sabia, te irías de voladas y no me ibas a esperar, por eso subí antes. -Margot por favor déjanos solos y deja el desayuno acá y gracias.

- Sí señor contesta la joven de servicios.

-Lo siento, es que no me siento bien y necesito estar cuerda para hablar de que me pasó. le digo en tono cortante.

-Bueno y cual es la prisa, come algo y unas píldoras para el dolor de cabeza que se que tienes.

-¿Cómo sabes tu eso?, realmente mejor dime que pasó.

-Tu amigo Tom puso otra bebida mas fuerte con alguna sustancia aun mas eficaz para emborracharte muy rápido. Realmente no me creía que con una copa de vino te ibas a emborrachar y era cierto, el camarero me dijo la bebida que había pedido Tom y vio hacharle algo mas, supongo que algún  tipo de droga o algo así.

-Ese desgraciado, me va a conocer hoy si es que aun no lo sabe. Intento irme y dejar la conversación pero me detengo antes.-¿pasó algo entre nosotros que amanecí en este cuarto?

-No, claro que no, pero tu si querías y...

-¿Qué?, le digo sorprendida, mientras el se muere de la risa.

-No pasó nada, solo te ayudé. 

-Pues bien, gracias, es todo, un gusto saludarle, pero ya tengo que irme. Por primera vez cierra su boca y salgo de allí aprisa, con un dolor fuerte de cabeza, pero nada quitara que ponga en su lugar a Tom.

Me dirijo a la hacienda de su tío. -Buenos días, ¿se encuentra el señor Tom?

-Acaba de ir a las tierras de arroz con algunos empleados.

-Gracias, iré allá.

Voy a toda velocidad cuestión de encontrarlo antes de que entre a ver el arroz y así fue, justo a donde lo quería ver.

-Oye Tom le grito y me bajo de la camioneta sin las zapatillas, totalmente descalza, el se voltea a verme.

-¡oh querida!, esta como sorprendido o alegre, pero se le irá en un instante.

Me acerco y le pateo sus testículos y cae de rodillas -A mi tu me respetas, ¿entiendes? y le doy una bofetada. - Jamás en tu vida creas que seré tuya, poco hombre.  sus sirvientes rápidamente intentan ayudarlo y como agarrarme.

-Atrévanse uno a tocarme nada mas, y me van a conocer mas. obviamente parecía poseída y nadie se acercó a mi.

-Espero te sirva para no acercarte a mi jamás. El aun esta rojo y sin aliento. Entonces decido irme.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top