"¿Lo intentamos?"

Durante las grabaciones.

En ocasiones las personas que más quieres se alejan de ti, ya sea porque hubo alguna pelea o simplemente la relación no dio para más. En este caso sucedió algo diferente. La relación si daba para mucho y ni hablar de una pelea porque sería imposible entre estos dos. Sin embargo la distancia entre ambos se incrementó por vergüenza y por no aceptar lo que sienten por el otro.

Carolina llevaba días triste, demasiado decaída y todo el elenco lo sabía, incluido Agustín. Pero él no podía hacer mucho pues se sentía de la misma manera que ella. Y ese era el problema.  Ambos estaban muy mal, ambos pensaban que no podían solucionar esta situación cuando en realidad eran los únicos que podían hacerlo.

Lo único que necesitaban era aceptar sus sentimientos por el otro y decirlo, expresarlo.

Malditos pesimistas y orgullosos.

Michael y Lionel habían hablado con Agustín sobre eso, le habían dicho que si en verdad quería a Carolina luchara por ella. Él ya tenía bien claro lo que sentía, sabía que la quería y la quería para algo serio pero tenía miedo de arruinar las cosas, aunque la relación ya estaba bastante arruinada pues no podían ni mandarse una mirada.

Por otro lado, todas las chicas aconsejaban a Carolina, le decían que desde un principio se notó que entre ellos tarde o temprano pasaría algo más que amistad pero no lo dejaban ser pues en lugar de afrontar lo que sienten y ambos decirlo para comenzar una relación, esquivaban todo y seguían en su postura de "sólo es una bonita amistad, esto no da para más, todo se va a arruinar".

A pesar de que las chicas y chicos querían que de una vez por todas ellos estuvieran juntos decidieron no insistir pues si las cosas se debían dar lo harían tarde o temprano.

(...)

El tarde o temprano tardó en llegar exactamente tres semanas después del beso. Los chicos decidieron no insistir y dejar que entre ellos dos arreglaran todo pero eran demasiado lentos y ya no era lindo llegar a grabar y sentir la tensión cuando ellos tenían escenas juntos o simplemente estando en los camerinos. No era bueno para nadie del elenco, no era bueno para la serie y mucho menos era bueno para ellos dos, sus amigos les importaban mucho y tenían que hacer algo para arreglarlo.

Era viernes y hoy tenían descanso. Agustín pensaba dormir toda la tarde y por la noche volver a dormir, si, era un plan genial para él en estos momentos. Carolina por su parte quería visitar a su familia y por la noche leer o ver alguna película, no tenía ánimos para alguna otra cosa.

Lo que no sabían era que sus planes iban a cambiar y si todo salía bien su vida lo haría igual.

El celular de Carolina sonó.

Un timbre, dos, tres, contestó al cuarto. Era Valentina.

"Valen ¿pasó algo?"

"Si señorita"

"¿Algo malo?"

"No, al contrario amiga"

"¿Y puedo saber qué es?"

"Claro, hoy cancela todos los planes que tengas porque junto con las chicas tenemos nuevos planes"

"No tengo ánimos Valu, pero gracias igual. Diviértanse sin mi"

"No me hablas en serio Kopelioff, mejor anda a la puerta y ábreme que estoy afuera"

Carolina iba a contestar pero justo Valentina cortó la llamada, miró confundida unos segundos a su celular y después hizo lo que su amiga le había ordenado. Abrió la puerta y si, ahí se encontraba ella pero no estaba sola, otras cinco chicas estaban tras ella, con muchas bolsas llenas de maquillaje, ropa, artefactos para el cabello y demás. Entraron sin esperar a que Carolina les dijeran que pasaran.

Dejaron todo lo que tenían en sus manos en los sofás y la mesita que estaba ahí para después mirar a una Carolina muy confundida todavía sin cerrar la puerta.

— ¿Qué esperas para cerrar la puerta Carolina? — habló Chiara cuando la miró.

— Explíquenme qué es todo esto — Pidió Carolina.

Cerró la puerta y se dirigió a donde ellas estaban, aún confundida puso sus manos en la cintura como cuando una madre está por regañar a su hijo.

— Pasa que hoy todas nos vamos a poner lindas — dijo Malena.

— Para ir a una fiesta — terminó la oración Karol.

— Que dices Sevilla si vos sos una bebé — Le contestó Caro y todas rieron por su comentario.

— FIESTA — recalcó — no dije antro o alguna cosa así donde seguro no me dejan entrar.

Bufó y todas volvieron a reír.

— Chicas, en serio les agradezco esto — volvió a hablar Carolina — pero no tengo ánimos de nada.

— Justo por eso lo hacemos, para levantarte ese animo, no nos gusta verte mal — Katja se acercó a ella y la abrazó — ¿qué dices?

Carolina asintió y todas sonrieron.

— Entonces, ¡ALGUIEN PONGA MÚSICA VAMOS! — Gritó Ana haciendo que todas hicieran lo mismo.

Pasaron toda la tarde arreglándose entre ellas, decidiendo que ropa ponerse entre risas y con la música a todo volumen. Lo que pasaba era que Carolina no sería mandada exactamente a la dichosa fiesta, pero eso era algo que ella no sabía.

(...)

— AGUSTÍN SE TIENE QUE LEVANTAR AHORA MISMO DE ESA CAMA — Jorge gritó entrando a la habitación de Agustín.

Él estaba dormido en su cama como lo había planeado, lo que no se esperaba era que cinco chicos estarían en su habitación intentando despertarlo.

— VAMOS AMIGO DESPIERTA AGUS DESPIERTA MIRA QUE YA AMANECIÓ — cantaba Michael como si Agustín estuviera cumpliendo años.

Al ver que no se despertaba Lionel salió de la habitación y fue directo a la cocina mientras los chicos intentaban de mil formas despertar a Agustín.

Llegó minutos después con una jarra de agua y no lo dudó ni un segundo, tiró cada gota en la cara de Agustín haciendo que este reaccionara inmediatamente soltando un sin fin de groserías.

— SON UNA MANGA DE CHUPA VERGAS COMO SE ATREVEN — gritó tratando de sacarse el agua lo cual era imposible, estaba empapado.

Los chicos no paraban de reír y los cuatro chocaron sus manos con Lionel, "esa fue buena amigo" le decían.

Los chicos le explicaron a Agustín que estaban ahí porque dentro de poco habría una fiesta y él tenía que ir, después de insistirle él accedió pues los chicos le habían dicho que tenía que despejarse un poco y tenían razón.

Contestó que "si" malhumorado maldiciendo y preguntándose por qué le había dado una copia de sus llaves a Ferro para después meterse en el baño y darse una ducha pues no quería enfermarse.

(...)

La noche llegó y tanto las chicas como los chicos estaban listos, así que pusieron en marcha su plan.

Lionel se alejó un poco de los chicos para poder marcarle a Valentina.

"Valen ¿ya está todo listo?"

"Lo está, ustedes encárguense de llevar a Agustín al lugar acordado y nosotras llevaremos a Caro, suerte"

"Suerte"

La llamada terminó y Valentina fue enseguida con las chicas.

— ¿Listas? — preguntó en cuanto se acercó.

Todas asistieron y salieron del departamento para ir directo a los autos, cuatro en el auto de Malena y tres en el de Valentina.

Katja y Valentina se encargarían de llevar a Carolina a el lugar indicado y las demás irían a la fiesta de la que tanto habían hablado.

Por otro lado Agustín subió a su coche y Lionel le daba indicaciones de cómo llegar a la fiesta. Sólo iban ellos dos pues Lionel así lo quizo, quería hablar con él una vez más.

— Aquí es — anunció Lionel.

Agustín bajó en seguida y miró confundido a su amigo quien recién cerraba la puerta del auto. Estaban enfrente de lo que parecía ser una cancha de fútbol de una escuela y no se veían rastros de alguna fiesta.

— Amigo dime que me has dicho la dirección correcta por favor — habló Agustín.

— Si, te la he dado. Esta correcta.

— Pero... — Agustín no terminó de hablar pues Lionel lo interrumpió

— Es la dirección correcta del lugar indicado al que debiste venir, amigo sé que nos pediste que no nos metiéramos en la relación entre Caro y vos pero no nos gusta verlos mal, esto les afecta demasiado y nosotros también no sentimos mal al verlos así. Sé que tal vez esto no cambie nada pero yo sé lo que vos sientes por ella y sé que tienes miedo a confesarlo y que su amistad se arruine pero date cuenta que justo en este momento ya lo está y justo en este momento puedes cambiar las cosas o al menos puedes intentarlo.

Agustín se quedó sin habla, todo lo que su amigo había era verdad. Él estaba cansado de evitar a Carolina y sólo hablarle cuando se debía, quería estar con ella y nada perdía con intentarlo.

— Gracias amigo, a ti y a los chicos, en serio mil gracias — Agustín habló luego de unos cuantos minutos.

Lionel sonrió y le explicó todo el plan que tenían junto con las chicas, asombrado pero sobre todo agradecido por tener unos amigos tan buenos como ellos se dirigió hacia la cancha de fútbol.

Carolina por otro lado estaba vuelta loca, acababan de llegar a su "destino" como lo llamaban Valentina y Katja. El sitio en el que estaban era lejos una fiesta y estaba segura de que se habían perdido.

— Chicas en serio no creo que la fiesta sea por aquí — habló Carolina mientras las tres caminaban hacia la parte trasera de una escuela.

Cualquier persona perdida estaría asustada, por esa razón Carolina lo estaba, pues pensaba que las tres no sabían dónde estaban. Se equivocaba.

Katja y Valentina sabían exactamente donde se encontraban y que hacían, estaban por llegar a la cancha de fútbol y por suerte la puerta estaba abierta, eso indicaba que Lionel junto con Agustín habían llegado antes y como el auto de Agustín estaba cerca de ahí estaban seguras de que había decidido quedarse.

— Chicas — dijo Carolina — ¿Ese no es el auto de Agustín?

— No como crees Kopelioff — le contestó Katja haciéndose la desentendida.

Las dos siguieron caminando dejando a Carolina atrás quien estaba harta de que actuarán de una manera rara y no saber dónde estaba.

— ¡Alto ahí! — gritó.

Las chicas pararon en seco y voltearon a verla. Nunca habían visto a Carolina así, su cara estaba roja de furia así que comenzaron a dar pasos pequeños para atrás alejándose de ella.

— ¡Dije alto ahí chicas! — volvió a gritar — me van a decir que traen entre manos ¡Ahora!

— Bien, bien pero no nos hagas daño — Katja habló primero asustada por la actitud de su amiga.

Valentina suspiró y comenzó a hablar y explicarle todo a su amiga.

— En medio de la cancha de fútbol está una mesa adornada para una cena romántica, para dos personas. Lionel trajo a Agustín aquí sin que él sospechara algo y nosotras a ti. Queremos que solucionen esto ahora porque no podemos estar un segundo más viéndolos así de tristes amiga.

— Sabemos que nos vas a odiar a todas después de esto pero por favor inténtalo — terminó Katja.

Carolina tardó minutos en asimilar todo lo que le habían dicho. Se acercó tranquilamente y justo cuando Katja pensó que las iba a golpear abrió sus brazos y las abrazó como nunca antes.

— Son las mejores, ustedes y las demás chicas, en serio mil gracias — Dijo cuando se separó.

— ¿Eso significa que hablaras con Agustín? — preguntaron las dos al mismo tiempo demostrando felicidad.

— Si — contestó y ellas gritaron — pero sólo hablaremos para arreglar las cosas, seguiremos como amigos si él quiere.

— Si, si lo que vos digas, ahora ve — Valentina la empujó para que siguiera caminando.

Hizo lo que sus amigas le dijeron hasta llegar al centro de la cancha donde se encontraba Agustín y Lionel, este último la saludó y se despidió de ella para irse y dejarlos solos.

Agustín al verla se sintió nervioso, se veía hermosa pensó. Llevaba puesto un vestido negro corto con un poco de vuelvo y unos tacones del mismo color, su cabello suelto y un poco de maquillaje, preciosa.

Ambos tomaron asiento sin decir una palabra y volvieron a lo de siempre; las miradas.

— Caro...

— Agus...

Los dos hablaron al mismo tiempo y rieron por eso después. Carolina le dio una señal a Agustín para que él empezará a hablar.

— Enana, ¿sabes que yo te quiero verdad? — Carolina asintió — entonces sabes que yo no haría algo para que esto que ambos tenemos se arruine — volvió a asentir — estas tres semanas que hemos estado separados, que sólo nos hablamos en las escenas que tenemos que grabar y que ni siquiera una mirada nos damos me he sentido muy mal, ese beso que nos dimos no sólo fue actuación y vos los sabes, y sabes que si hubiera sido sólo eso ahorita no estaríamos platicando aquí por obra de nuestros amigos. Así que te tengo que decir lo que siento porque me estoy asfixiando por no sacar todo lo que tengo dentro. Sé que tal vez arruine por completo nuestra amistad pero más vale intentar.

Carolina lo miraba fijamente sin apartar la vista, estaba muriéndose de los nervios. No sabía qué hacer o decir así que espero a que siguiera hablando.

— Te quiero — Agustín tomó aire — y te quiero bien, no sólo como una amiga, no sólo como una compañera de trabajo, te quiero para algo más, quiero que seas mi novia y quiero que tengamos una relación bonita y duradera porque sé que podemos tenerla, pero todo está en ti. A lo largo de estos meses de talleres y de grabación te conocí mucho más y desde ese primer abrazo que nos dimos supe que vos harías que mi vida cambiara drásticamente pero para bien. Como ya lo dije todo está en ti, así que ¿lo intentamos?

Una que otra lagrima cayó por el rostro de Carolina, escuchar a Agustín decir todo lo que dijo, esas cosas tan lindas que mencionó la habían dejado sin habla, así que tan sólo se levantó de su silla y fue hacia él para abrazarlo fuerte, lo había extrañado tanto.

Al separarse se miraron unos segundos hasta que ella decidió hablar.

— No sabes lo que vos significas para mí y todo esto que has dicho me ha dejado sin palabras así que no sé qué decir, en verdad te agradezco por tanto y te quiero demasiado.

— ¿Entonces? — Agustín preguntó mientras limpiaba las pocas lágrimas del rostro de Carolina.

— Entonces lo intentamos.

La felicidad en la cara de Agustín era algo que Carolina no iba a olvidar nunca, él era tan hermoso y ahora era su novio, estaban juntos.

Habían decidido por fin aceptar lo que les pasaba con el otro, sacar sus sentimientos y arriesgarse aunque eso implicará acabar con una amistad, pero ahora que lo habían hecho y todo había salido perfecto estaban más que seguros que ese "lo intentaremos" duraría muchísimo tiempo.

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¡Nuevo capítulo! Son más de 2000 palabras las que he escrito y es el capítulo más largo hasta ahora pero así tenía que ser pues es un paso muy grande en esta historia.

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¡Nos vemos en el capítulo siguiente! :)