Ya estaba cansado de esto vivir siempre las mismas torturas por parte de ellos, nosotros no merecíamos esto, únicamente porque consideran que tienen algo de poder, pueden hacer lo que quieran con los que consideran débiles, eso me molesta.

El sonido de unos pasos se dirigían hacia la habitación en donde me encontraba y pude ver como abrían la puerta de dejaban a una niña de aproximadamente mi edad en la celda, sus cabellos eran blancos y sus ojos estaban cerrados, supongo se desmayó por las torturas, después de eso ellos se retiraron y yo me acerque a ella y la moví un poco, a lo que ella apenas abrió sus ojos que eran de un azul como el cielo que hace mucho no veía.

Aquella joven me observo y después se sentó sobre sus rodillas, para observar me y después simplemente sonrió, con una sonrisa brillante que jamás imagine que alguien en esta situación pudiera tener, lo primero que pensé de ella fue que era una idiota por sonreír, sin embargo lo que no note en aquel momento es que me sonrió con los ojos cerrados.

Después de aquello comenzamos a compartir habitación, por llamar a la celda de una forma más linda, día tras día nos torturaban y luego nos daban de comer.

Ella era siempre igual no importaba cuanto sufriera sonreía de una forma que te convencía que todo estaba bien, con el tiempo sus sonrisas comenzaron a hacer que me sonrojara, fue entonces que supe que era el cariño por otra persona.

Un día me acerque a ella y comenzamos a hablar, me entere que su nombre es Ada Oswalt, que su madre la vendió a estos hombres y que su padre la abandono antes de nacer.

Yo pensaba que ser huérfano y que tus padres te dejaran en un orfanato siendo un bebe era cruel, pero era mejor que vivir y recordar el odio de tus padres hacia ti.

Le pregunte porque sonreía y ella solo me contesto

"Porque no hacerlo?"

Aquello hizo que riera por primera, me avergoncé en seguida porque todos decían que mi risa era rara yo solo la vi que me observaba y decía

"Me gusta tu risa"

Desde entonces siempre río con mi típico Kufufufu~ ya que me recuerda a ella.

Recuerdo que ella fue tomada por uno de los hombres durante una noche y no volvió más, después de tres días ya no podía con la intriga de lo que le había pasado, y mi mente solo me daba una respuesta

"ella ya no resistió más"

No podía creer aquello así que durante una de las sesiones simplemente y sin miedo deje fluir mi poder, acabe con las personas que durante años me torturaron y fui por ella, la busque pero no la encontré, me encontré con el jefe se esa familia y el solo me dijo algo.

"Alguien vino por ella"

Después de eso libere a los otros niños y dos de ellos me siguieron, intente buscarla por mis medios pero me era imposible localizarla, así que decidí buscarla mientras destruía lo que tanto sufrimiento nos causo.

Me acerqué a una familia ellos creyeron que yo era un joven desamparado y me acogieron cuidando me como si fuese un hijo, me dio mucha rabia eso, ¿acaso no todas las mafias eran iguales?

Esa respuesta fue contestada por mi

"claro que son iguales, al final me usaran para hacer sufrir a otros, como me hicieron sufrir a mi"

Así que los use e hice que uno de sus propios miembros acabara con los demás, anduve por años de mafia en mafia y gracias a ello obtuve una pista de ella que provenía de Japón.

Después de aquello me dirigí a Japón no solo para buscarla si no también para ir por el décimo Vongola.

Las cosas como sabrán no terminaron como me hubiese gustado y termine en vindice.

Sin embargo, utilizaría al décimo y a sus contactos para hallarla  por ello luche en la batalla por los anillos, y esto tuvo sus recompensas en el futuro.

Gracias a esos recuerdos supe donde se encontraba la única persona la cual e amado en mi vida.

En el futuro cuando me enfrente a Byakuran en su oficina, el me lo dijo, aun lo recuerdo

-Mukuro no podrás escapar de aquí, este lugar esta hecho para que puedan entrar pero no salir-

-Kufufufu~ eso lo veremos Byakuran-

-Muk-chan- fue lo único que tuvo que decir para que mi expresión cambiara a una asombrada y de hay a una de odio

-No te permito que me llames así-

-pero si así te llama mi pequeña hermana ¿cierto?- dijo con su típica sonrisa

-Kufufufu~ es imposible alguien como ella hermana de alguien como tú, eso no me lo creó-

-Su nombre Ada Oswalt, ella es mi media hermana hija de mi padre- dijo con una sonrisa en su rostro que en ese momento quería partirle con un puño.

Lo mire con seriedad

-Asi que por fin la encontré-

-Lastima que no podrás verla pues morirás Muk-chan -

-Ahora con más motivo viviré Byakuran-

Logre sobrevivir a aquella batalla y ayude a Tsunayoshi en aquella pelea pues esa era la única forma que me aseguraba el volverla a ver.

Supongo que mi yo de ese futuro se encontró con ella mientras yo aquí en el presente seguía en Vindice, sabiendo que ella estaba en Rusia viviendo con su padre biológico.

Sin embargo, lo que sucedió con Shimon fue un giro favorecedor ya que me permitieron ser libre.

Por fin era libre para ir por ella.