Han pasado unas cuantas semanas desde que el Tomioka llego a tener en su casa a las dos Yokais quienes como tal aun estaban escondidas en sus formas dd animales tratando de aparentar como tal.

Aunque cuando el Tomioka salía de misiones las mismas se quedaban cómodas en aquella finca disfrutando de la tranquilidad, ayudaba el hecho que aquel pilar del agua siempre tenga vendajes y medicinas para curarse ellas mismas de las heridas que tenían en general.

Hasta disfrutaban la comida que Giyu dejaba en general en unos platos, ya que el no tenía algo para darles como si fueran mascotas por lo cual el les daba comida de personas normales.

Y si no estaban satisfechas simplemente cuando Giyu salía como tal ellas se preparaban la comida, claro esto causo problemas ya que el Tomioka se preguntaba porque la comida llegaba a desaparecer de la nada como tal.

Pero simplemente compraba mas...

Porque este tenía una enorme cantidad de dinero que simplemente no usaba y no tenia problemas económicos como tal.

Ahora mismo podemos ver como es que ambas mujeres estaban solas en la casa disfrutando del ambiente en esos momentos.

Yasaka estaba sentada en lo que lleva a ser el patio de aquella finca disfrutando de la tranquilidad, unos cuantos pájaros llegaban a cantar por el alrededor junto que había una especie de rio pequeño en el cual los peces llegaban a saltar salpicando un poco de agua.

Yasaka: Mmm este lugar es mas pequeño de mi hogar anterior, pero se siente tan tranquilo - dijo ella sonriendo disfrutando de los rayos del sol darle en su piel un poco.

De la nada llego Kuroka en esos momentos quien estaba sonriendo feliz pues había encontrado lo que lleva a ser una dispensa de salmón dentro de la finca, era mucho, por lo cual esta misma agarro unos pocos y los puso a cocinar.

Kuroka: Oye Yasaka encontré una gran cantidad de salmón, quieres comer un poco? - pregunto sonriendo mirando a la mujer mayor quien estaba sonriendo un poco por aquello en esos momentos mientras que se levantaba.

Yasaka: Si - dijo esta sonriendo mientras que se levantaba en esos momentos siguiendo a Kuroka, aunque de la nada esta misma se sintió un poco incomoda, y eso era por la ropa que llevaba puesta actualmente.

Desde que llegaron solo usaban la misma ropa con la que contaban en general, cuando Giyu salía las lavaban, pero el problema era que no tenían mas opciones que usar ropa del Tomioka, y bueno este solo tenía unos uniformes que a ellas no les cerraba en el pecho por... obvias razones como tal...

Y es que les llegaba a pasar bastante frio por no poder cerrar bien aquellos uniformes.

Así que estaban planeando llegar a quitarle algo de dinero al Tomioka para ir a comprar ropa nueva como tal, para así ambas estar mas cómodas, encontraron un lugar en donde Giyu nunca revisa y allí mismo iban a guardar la ropa para ellas estar tranquilas.

Kuroka: Oye por cuanto tiempo mas vamos a quedarnos aquí? - pregunto la nekomata mirando a la kitsune quien en esos momentos estaba sería ante aquella pregunta, había muchos problemas y era que estaban en un lugar donde no sabían donde iban a quedarse o si quiera donde podrían trabajar como tal sin que traten de aprovecharse de ellas.

Yasaka: No estoy segura Kuroka, debemos de investigar, ya llegamos a curarnos en si y solo estamos esperando a ver que podemos hacer - dijo ella bastante seria mientras que miraba a Kuroka quien asintió a sus palabras.

Ambas simplemente comenzaban a comer con tranquilidad, de ser por ellas mismas se llegarían a quedar en aquella finca por siempre, era tranquila, bastante cómodo y a la vez tenían de todo para vivir.

Pero sentían que se estaban aprovechando bastante del Tomioka quien les daba prácticamente todo en si, a la vez que les cuidaba bastante, si bien ellas fingiendo en sus formas animales, el Tomioka mostro ser alguien bastante amable y al mismo tiempo deprimente, ya que las mismas miraron un pequeño altar en donde había la foto de una mujer o mejor dicho la foto de su hermana.

Y otro en donde estaba la foto de un chico de pelo melocoton junto a que tenia una cicatriz en las mejillas.

Y pues este mismo solo llegaba a pedir como mas de 50 veces perdón en aquellos altares, lloraba hasta puntos donde se quedaba dormido por tanto llorar.

Ellas para ayudar lo llevaban a su cuarto para que descansará bien en general, pero les dolía un poco verlo de ese modo.

Aunque sus pensamientos dejaron sus cabezas cuando se escucho una puerta abrirse y allí ellas se quedaron  en shock al ver a Giyu quien prácticamente quieto con su rostro inexpresivo, las miraba con una mirada fría en esos momentos, su mano paso a la enpuñadura de su arma mientras unas cuantas palabras empzaban a salir de sus labios.

Giyu: ... Demonios - dijo este fríamente mirando a ambas mujeres quienes tenían sus colas y orejas afuera, causando que el mismo cazador las este confundiendo con demonios, ellas estaban preocupadas, si bien este era un humano y podrían ganarle fácilmente, no querían dañar a aquel que les había dado un techo en el cual vivir.

Kuroka: es-espera no es lo que crees - dijo esta levantándose mientras que Giyu solo estaba en posición de pelea.

Giyu: Respiración del agua - esas palabras que salieron de los labios del Tomioka causaron que ambas mujeres estén en guardia, pero de la nada.....

Vieron como es que el Tomioka se detuvo...

No desenfundo la espada pero aun agarraba el mango...

Giyu: ... No son demonios ... - esas palabras salieron, ellas confundidas ibas a preguntar que estaba pasando pero por una ventana notaron que rayos del sol les estaban dando, eso les confundía, pero recordaron que en un libro que Giyu tenía había apuntes de debilidades de los demonios y una de esas era el sol mismo.

Aunque eso no iba a explicar exactamente que eran ellas...

Continuara.